Casi como en un cuento: no se jugó porque faltó el referí - 02.05.1998 - lanacion.com *
Segun la nota: Octavos de Final, 15 MIL PERSONAS jajaja
Casi como en un cuento: no se jugó porque faltó el referí
Los jueces nunca supieron que debían dirigir; River-América, el jueves próximo por la Copa Libertadores
Como en otras tantas noches de la Copa Libertadores, el Monumental estaba vestido para la ocasión. Las banderas desplegadas, las gargantas rojas de tanto ensayo, los vendedores ambulantes que ya habían juntado los primeros pesitos, los policías prestos para intervenir ante cualquier problema, los jugadores concentrados en el vestuario, los acomodadores, los dirigentes, los alcanzapelotas, los periodistas, los, los, los. Todos, menos ellos: los árbitros.
Mientras las 15.000 personas, que habían dejado una recaudación de 248.000 pesos, esperaban la aparición del árbitro Marcio Rezende y sus asistentes Francisco Maurao Dacildo y José Ribar Melonio para empezar el cotejo entre River y América, por los desquites de los octavos de final de la Libertadores, ellos disfrutaban de un día de descanso en Belo Horizonte, Fortaleza y Río de Janeiro, respectivamente.
Increíblemente y en un hecho sin precedentes ningún empleado de la Confederación Brasileña de Fútbol -generalmente se encarga el ex árbitro Armando Márquez- les informó que el 23 del mes último la Confederación Sudamericana de Fútbol los había designado para dirigir el match desquite River-América.
Sin recibir ninguna información, el cuarto árbitro designado, el argentino Oscar Olagüe, estuvo el miércoles por la tarde y el jueves por la mañana en Ezeiza, para darles la bienvenida a sus colegas, pero el arribo de los brasileños nunca se produjo. Ante esta situación, Olagüe recorrió los cinco hoteles donde suelen hospedarse los jueces, pero en ninguno de ellos estaban alojados.