Sólo se limitó a recontra re cagarse de risa de mí. E insiste en que lo vuelva a ver, para seguir en la misma tesitura, claro. Yo sólo vivo para hacerlo feliz.
Creo que nunca fui a una cita con alguien que no había ya estado. Me imagino la situación y aunque sea con Brad Pitt me lo imagino como algo malísimo, incómodo, no me gusta. Menos a ciegas, si no sabés con qué te vas a encontrar, tenés un 5% como mucho de chances de no nefastearla. Hay otras maneras mucho más prácticas, la cita la veo más bien como un obstáculo a que salga algo piola. Si me gusta alguien, no lo invitaría a una cita hasta ver bien qué onda.
Ahora me dio por uno que creo que hablé dos palabras en mi vida, apenas sé cómo se llama, no tiene ni hay forma de que tenga la más mínima idea. Me dio el teléfono pero no me sirve para nada, me lo dio no sé para qué pero nada que ver. A veces tengo ocurrencias ilógicas. Encima cuando se me pone así algo en la cabeza y me encapricho no me lo saco. Malísimo, nada por hacer, cero márgen de maniobra.
[i]"El fracaso mas estruendoso fue el de la seccion Amistades Mixtas. Nada cuesta razonar que los caballeros que solicitaban amigas escondian casi siempre otras intenciones. No se espante el lector pensando que nos internaremos en un tema tan manoseado como el de la amistad entre la mujer y el hombre. Vale la pena; eso si, recordar lo que dijo Manuel Mandeb a una amiga suya, tal vez alquilada en la proveeduria.
-Vea. Yo puedo ser su amigo si usted quiere. No tratare de seducirla ni me pondre romantico ni le hare propuestas indecorosas. Pero sepa que yo necesito que exista un amor potencial. Me resulta indispensable que exista una posibilidad en un millon de que algo surja entre nosotros. Le aclaro que es probable que si se da esa circunstancia yo salga corriendo. Pero es unicamente en virtud de esa remotisima chance que yo estoy aqui oyendo su conversacion como un imbecil."[/i]
Igual hay que tener timming y sangre fría. Si salís con una mina y durante el transcurso de la velada notás que no va a pasar nada y te ningunean friamente como le pasó a Gasty, con tu mejor cara de poker le decís a la yegua “pedí la cuenta que voy al baño y cuando vuelvo pago”. Y te borrás. Si es necesario que la hija de puta termine de bachera para pagar. Esa vez en Quilmes tendría que haber hecho eso.
Me acuerdo nomas que se llamaba Rocio, desconozco que fue de su vida despues de ese encuentro, porque con nuestra amiga en comun no hablo mas y ella la conocia de otro lado