A ver, creo de tres cuartos de cancha en adelante tenemos un poder ofensivo inigualable (o casi) Di María, Messi, Higuaín, Aguero, Pastore. Son nombres que meten respeto y que bien rumbeados acaban con cualquier defensa. Y, bien que mal, hay algunos nombres que son buenas segundas guitarras: Zárate, López, Tévez (es un buen delantero) y algún otro que se me escapa.
Ahora bien, creo que mitad de campo hacia atrás tenemos carencias notables: carecemos de cantidad y calidad de volantes por afuera. No tenemos un reemplazo confiable de Mascherano como volante central. En defensa, podemos decir que no existen laterales de nivel y los centrales también escasean. Finalmente, tampoco tenemos un arquero en gran nivel.
En definitiva, tenemos un plantel desbalanceado. Pero creo que nuestros problemas recién comienzan y que la génesis de nuestros males radican en el torneo local, de nivel cada vez más pobre, que exige que jugadores cada vez más jóvenes y menos preparados salten a primera, dentro de un nivel de competencia mediocre.
A esto se suma el pésimo nivel de las selecciones juveniles que no se comparan en rendimiento o en logros con las de antaño. Y tampoco se vislumbran grandes promesas que vayan a nutrir a la mayor en el mediano/corto plazo.
Como postre, se elige a gente muy poco confiable para dirigir a los juveniles y a la mayor. El que no tiene condiciones, llega por nombre, por estar por ahí (?), por presión mediática o por lobby. Para colmo, desde hace unos años se ha creado ese monstruo indefinible e inexplicable llamado “selección local”, con el único propósito de aumentar las arcas de la AFA, hacer las delicias de los representantes y aumentar el negocio de los “lobbyperiodistas” que representan el 90% de los comunicadores deportivos de los grandes medios.
En fin, me preocupa el presente pero el futuro me aterra.