Venezuela después de Chávez

“Convivir” con eso :mrgreen:

Con esta gentuza no se puede “convivir”. Ellos no quieren convivir, quieren que te sometas a su interés individual, cagándose en el colectivo. Les va bien y no quieren expandir la producción, quieren producir lo mismo y subir los precios. Mirá que graciosos son.

Acá sí que convivimos con eso la verdad. Gobiernos sumisos y genuflexos con el capital privado. Pidieron la convertibilidad, la tuvieron. Pidieron devaluación, la obtuvieron. Basta. Por fin tuvimos gobiernos con pelotas para pararles el carro como el argentino, el boliviano, el ecuatoriano y en este caso, el venezolano.

Identifican a Diosdado Cabello como jefe del Cartel de los Soles | El Nuevo Herald El Nuevo Herald

Te desvirtuás solo, porque apelás a cambiar el eje del debate. Yo sigo expresando opiniones con respecto al punto inicial, y en ningún momento trasladé la conversación al ámbito filosófico. Sigo dentro del práctico, y sosteniendo que el principal mal se sustenta en la concentración. Si querés combatirla, vas a sufrir las consecuencias como es de esperar. Además no tenemos la necesidad de catalogar mal un concepto, sólo porque desde otras latitudes pretendan imponerlo. La URSS no cortó con el comercio internacional, sino que lo modificó en beneficio propio. Las empresas estatales contaban con autonomía, independencia financiera y técnica, proveedores a elección y fondos o cuentas propias. Las operaciones entre ellas se digitaban sin la intervención de un ente político, que sólo se dedicaba a un control general. Los bancos funcionaban como cualquier entidad nacional, las cuales persisten hoy en casi todo el mundo. La paradoja: todas las empresas tenían gran rentabilidad, y la URSS creció a un 5/6% promedio por año desde 1960 hasta su disolución. En el mismo lapso, Estados Unidos creció a un 3%. Un país de campesinos se transformó en potencia, mientras una potencia dilapidó su gran Estado de Bienestar al eliminar la participación activa del Estado.
No sostengo el comunismo, ni el socialismo aplicado por muchos países, pero es absurdo ignorar los problemas centrales de una economía para hacer hincapié en conscuencias generadas por ellos mismos. Me considero tan reformista como Roosevelt, y entiendo que la gripe no se cura con más gripe. Hace falta un antibiótico para eliminar el mal, y tratamiento secundario que colabore con él.

Quiero imaginarme que esto que decís lo decís por el sólo hecho de defender tu teoría, porque la verdad es que no tiene ningún sustento estadístico. Estás suponiendo entonces que los únicos países en donde mejoraron las condiciones de vida son Argentina y Venezuela. No resiste un gráfico lo que decís.

Este copy/paste refleja el planteo previo: las grandes cadenas, productoras y distribuidoras, son las primeras en esconder la mercadería para generar desabastecimiento y crecimiento en los precios. El número de empresas expropiadas es insignificante, porque muchas son marcas de una misma corporación. En ciertos casos se expresan monopolios, y una correcta intervención del Estado ante ellos. De no ser monopolios, cae el argumento de que no hay posibilidades para producir más (o es todo culpa del gobierno expropiador).
Es gracioso como despotrican contra la petrolera venezolana, por haber nacionalizado los recursos y cortar con el negocio de 4 o 5 delincuentes locales. También me genera gracia la actitud del pueblo venezolano, que no derroca a sus “dictadores” ante semejante desastre económico. ¿No será que ahora viven mejor, más allá de todo? Quizá prefieren su economía actual, buena o mala, antes que la situación de pobreza y marginación extrema en otros tiempos. Por ahí ni siquiera les gusta su gobierno, o no concuerdan con él, pero conocen muy bien a los que figuraban antes.

¿El gini no indicaba eso?

Esos dos países lideraraban la tabla.

El crecimiento por sí solo no explica nada, y afirmar lo contrario no resiste un gráfico o sustento estadístico. Argentina creció bien durante los 90’s, para unos pocos. La mayoría no asistió a la fiesta, como ocurre hoy en día con los países “abiertos” (de gambas) a capitales foráneos. Ojo, yo te recibo los capitales foráneos con gusto… si el beneficio económico es mutuo y ayudan a mejorar las condiciones de vida generales. Argentina no puede ser Perú, Colombia o Chile. Tiene un destino mucho más auspicioso si es conducida por un Estado presente, activo y orientado al bienestar de su gente.

Mostrame los gráficos por favor.

---------- Mensaje unificado a las 21:17 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 21:17 ----------

America Latina mejoró en los últimos años en todos los índices en general, no sólo en crecimiento.

Igual ahora Sergio Angel va a poner los datos para que podamos analizarlos porque, por lo que veo, no tuviste acceso a ninguno.

¿Qué países avanzaron más, entre todos los de América Latina, no sólo en crecimiento (incluyéndolo)? Quisiera desasnarme.

Acá el que aseguró que la razón por la cual Argentina y Venezuela son los únicos países con inflación por un tema relacionado con el poder adquisitivo de la población fuiste vos, no yo. Así que si lo asegurás tenés que tener fuentes que lo demuestren sino tengo que suponer que, como se te cayó el argumento de que la concentración es la principal responsable de la inflación, recurriste al de la puja distributiva.

Por cierto, fijate que esto último es lo que sucedió, de repente cambiaste el foco de atención, dejó de ser la concentración y pasó a ser la distribución del ingreso. ¿en qué quedamos?

Noticias > América Latina
[b]Venezuela es la nación menos desigual de América Latina[/b]

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Publicado 28 marzo 2014

El vicepresidente venezolano para el Área Social, Héctor Rodríguez, destacó que su país es el menos desigual de América Latina, de acuerdo con su posición en el índice de GINI, método utilizado para medir la desigualdad en la distribución de los ingresos, y gracias al proyecto de nación que ideó el líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez.

“Con un índice de GINI de 0,390, el cual oscila entre 0 para el país con mayor igualdad y 1 para el de más desigualdad, Venezuela es un país cada vez menos desigual”, precisó Rodríguez, durante su alocución en el Seminario Suramericano sobre Inclusión Social que se realizó este jueves en Caracas.

En la cita participaron representantes de la Unión de Naciones Suramericana (Unasur), a quienes Rodríguez recordó que antes de la llegada del Comandante Hugo Chávez al poder, en el año 1998, el índice GINI se ubicaba en 0,486.

En ese sentido, el también ministro de Educación afirmó que el indicador que ubica a Venezuela más cerca de la igualdad social es “consecuencia directa de la redistribución de la riqueza y del poder al pueblo”, uno de los principios fundamentales del Gobierno Bolivariano.

“Chávez creó un sistema de redistribución de riqueza, de redistribución del poder para el pueblo, impulsando que sea el mismo pueblo quien se apropie del poder para trasformar su realidad, la de su comunidad, e incidir en la transformación de la vida de la Patria”, explicó el funcionario.

Además, destacó el éxito de las políticas sociales implementadas por la Revolución, dirigidas a masificar la educación y los planes alimentarios, principalmente, hacia los sectores populares, así como una inversión social de 623 mil 580 millones de dólares en los últimos 15 años.

De igual manera, resaltó que Venezuela cuenta con un Índice de Desarrollo Humano (IDH) mediano-alto de 0,748. Éste es un indicador elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que se mide de forma creciente de 0 a 1.

Añadió que en América Latina el IDH se ubica en 0,741 y respecto al orden mundial es de 0,694. Además, precisó que el índice de satisfacción con calidad de vida es de 6,5 en Venezuela, mientras que el promedio mundial es de apenas 5,3 en una escala del 1 al 10 que realiza la Organización de Naciones Unidas.

Qué manera de perder el tiempo…

Bueno, ¿del resto, qué sucedió en estos años? ¿están los gráficos, los cuadros? Viejo, vamos, ponganle onda, miren que después van a tener que explicar la relación que existe entre la mejora en la distribución del ingreso y la inflación de más del 25 % y ahí se va a complicar. Encima relacionando todo con el nivel de concentración y explicando por qué el crecimiento del gasto público y la constante expansión monetaria no fue importante en el fenómeno.

Estamos de acuerdo en lo que decís amigo, son unos hijos de puta. Sin embargo, mi opinión es que en este mundo de hoy no sirven los extremismos, para ninguno de los dos lados. Cuando te enfrentás a muerte con estos empresarios especuladores -que estamos de acuerdo en que son lacras para el mundo-, lo que termina pasando es esto: sufre el pueblo para darle una “lección” al gobierno que se enfrentó a ellos. Es la realidad, lamentablemente el mundo hoy, no es el que todos soñamos. Los cambios tienen que hacerse, pero con cierto gradualismo. Si no, el resultado lamentablemente es el que se ve en los fotos.

Cuando hay concentración se limita la distribución del ingreso. ¿Cómo se puede debatir si no razonamos lo básico y elemental? Si no tenés datos y hablaste por boca de un tercero no hay problema, pero no ubiques en mi discurso tus propias palabras. En un comienzo afirmás que no cuento con “sustento estadístico” ni “gráficos” y ahora no querés brindármelos. Quizá tengo los números equivocados. ¿Por qué no? Quiero conocer tu verdad, más allá del GINI y su notable importancia, para contrastarlos (siempre con fuente). Pasate en limpio, y después seguimos conversando.

Obvio que siempre chamuyar con vos es perder el tiempo. El ganso que le dió de comer a los bosteros con la ignorancia sobre las copas Aldao. Te felicito champion, tuviste tus cinco minutos de fama en el foro de ellos.

Ahora volviendo al tema. Yo hice la simple relación entre mejorar la distribución del ingreso (teniendo la mayor del continente) y que esto signifique una mejora en la calidad de vida. No hablé ni de concentración, ni de nada. Eso hablalo con Delem que fué el que lo planteó.

Queres la tabla ?

Aca tenes la tabla:

https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/rankorder/2172rank.html

No sé qué tendrá que ver lo de la discusión de la Aldao. Sos patético.

---------- Mensaje unificado a las 16:24 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 16:13 ----------

El que dijo que Argentina y Venezuela eran los únicos países con altos niveles de inflación porque mejoró la distribución del ingreso sos vos no yo entonces vos te tenés que encargar de demostrar por qué es así.

Pero dejemos de lado eso, te voy a responder de la misma manera que me respondés vos, sin citar fuente alguna así es más equitativo.

Antes que nada, voy a suponer que, como ya dije, para vos la concentración no es la razón por la cual en Argentina y en Venezuela se vive un proceso de inflación de más de dos dígitos ya que suponés que en el resto de Sudamérica se cuentan con las mismas condiciones de concentración empresarial. Entonces, lo que produjo en estos dos países la elevada inflación (20 puntos de promedio desde hace 8 años aproximadamente) fue la mejora en la distribución.

Es una de las razones por las cuales se puede llegar a un proceso inflacionario, es inevitable que se incrementen los precios si se recuperan los salarios, pero eso se puede atenuar mediante políticas anticíclicas, que en estos países no se aplicaron, sino todo lo contrario, se incrementó el gasto y se mantuvieron las tasas en bajos niveles en momentos en los que el país crecía. Encima de todo en estos países se empezó a financiar el déficit fiscal con emisión. Fueron estas razones las que llevaron a que se disparara la inflación, no el crecimiento de los salarios.

Además te digo otra cosa, ninguna experiencia de desarrollo en la historia estuvo acompañado por los niveles de inflación de Argentina y Venezuela, ninguna.

Mi expresión fue mucho más allá de eso, y su objetivo era reflejar la incoherencia de afirmar que emitiendo se genera inflación. Se genera cuando hay emisión, y el sector privado apela a especular antes que producir en todo caso (y siguiendo la tónica reduccionista). Ninguna PyME de Argentina genera inflación ante la emisión monetaria, y celebra la capacidad de consumo porque de ella depende su expansión. Mientras más gente adquiera poder de compra y más suban los salarios, mayores serán las ventas. Aparece la competencia real, o las tan ansiadas oportunidades de desarrollo, lo que puedo sostener desde la práctica como miembro de una pequeña empresa de servicios (que también produce determinados elementos). Nunca tuvimos problemas a la hora de subir salarios durante la última década, porque cada aumento fue consecuente con el crecimiento propio. Tampoco tenemos el poder para establecer costos, por ende somos ajenos a la especulación inflacionaria. Son sectores concentrados y muy fuertes los que establecen qué sube y cuánto, acordando entre ellos y aprovechando el discurso berreta de economistas canallas en medios masivos. Los mismos que ven al salario como un gasto, y no una inversión para las empresas. Si esta pequeña explicación no es suficiente, pasemos a las flechitas:

EMISION → PRODUCCIÓN → CONSUMO → CRECIMIENTO = BENEFICIO GENERAL = ECONOMÍA SOSTENIBLE
EMISION → ESPECULACIÓN → ESTANCAMIENTO → RETROCESO = BENEFICIO PARTICULAR = ECONOMÍA INSOSTENIBLE

A los especuladores no les interesa una economía sostenible, y tampoco piensan en los beneficios de un crecimiento general. No son amigos del medio ambiente ni la utilización responsable de los recursos. Lo principal es facturar, moverse por el mundo ante escenarios favorables y escapar de los negativos que ellos producen generalmente. El ciclo de exprimir el trabajo ajeno se repite una y otra vez, hasta que se produce una explosión. El tercer mundo, por su inestabilidad y frenos internos de socios foráneos, es víctima habitual de estos procesos. La novedad es que ahora mismo el primer mundo, con todo su poder, está viviendo una situación similar (si no es igual).
Hablar de medidas “anticíclicas” es un verso de manual. ¿Qué son las medidas anticíclicas para vos? ¿Cuáles tomarías para abandonar el proceso inflacionario? Si uno pretende crecer, y beneficiar a toda la población con ese crecimiento, lo único que sirve es un cambiar de esquema. En Argentina hubo muchos cambios, algunos profundos y otros no tanto, pero no llegamos ni a mitad de camino. Así y todo, la presión que se ejerce sobre el poder político es exasperante. No por el poder político en sí mismo, sino por lo que sufre la ciudadanía ante sus consecuencias. En especial aquellos ciudadanos orientados a producir, los cuales viven en carne propia la lucha desigual de pelear con corporaciones, multinacionales o grandes empresas locales que fugan capitales o evaden impuestos (vendría a ser lo mismo).
Un Melconian cualquiera diría que “se empezó a financiar el déficit fiscal con emisión” y eso genera inflación. Su solución pasa por desfinanciar al Estado, sus políticas sociales y la inversión en infraestructura. ¿Cómo? Bajando impuestos, porque de otro modo es “imposible” crear las condiciones para invertir. Un genio, que jamás levantó una pala y recibe ingresos por “servicios prestados” de diversas empresas. Yo le diría que la economía capitalista necesita dinero para avanzar, o mantenerse, y que la emisión es producto de un proceso inflacionario en vez de decir lo contrario. Si los precios aumentan, también debe hacerlo la emisión para compensarlo, y el drama sigue siendo una productividad que no se altera. ¿Cómo controla la productividad el Estado? Expropiando todas las empresas, quizá. Tampoco pretendemos ese panorama. ¿No? La inflación causa emisión, que no metan más el perro.
El principal generador de inflación, vuelta atrás, es la concentración y especulación. El Estado debe apelar a la desconcentración, y en ese sentido podemos debatir aciertos o errores, pero nunca dejar de lado la responsabilidad empresarial. La oferta de y la demanda de dinero siempre están al mismo nivel, o en equilibrio.
Otro punto por destacar es que, una vez que el dinero está puesto en circulación, los bancos privados pueden acrecentar esa cantidad de moneda a partir de la demanda de créditos provenientes del sector privado. Esto lo hacen “creando” dinero (por medio de depósitos bancarios), a la vez que obtienen un beneficio por la tasa de interés que cobran. Siguiendo la lógica de los Melconianes, no se entiende por qué no critican con la misma ferocidad a los bancos, que también serían culpables de expandir la emisión. Algo que me gustaría saber: ¿Cómo explican el aumento inflacionario que marcan las mediciones privadas, en momentos de baja emisión monetaria?

¿Cuántas experiencias de países periféricos, como Argentina, y de similar mejora en todos los aspectos posibles conocés? Me encantaría ser China, y pasar por encima de todo el mundo, pero no lo somos (por suerte en muchísimos aspectos no lo somos).
Lo mismo corre para Venezuela. ¿Quiénes organizaron los golpes de Estado contra Chávez? ¿Fue el pueblo o los sectores concentrados de la economía, junto con apoyo exterior y la porquería que vendieron los medios?

En general las personas y las empresas aspiran a tener el máximo beneficio posible, sea en estos dos países o en cualquier otra parte del mundo, donde encontramos unas doscientas naciones con menor inflación que las que Argentina y Venezuela tienen. El argumento de la especulación empresarial es muy endeble.

Lo de las flechitas se puede aplicar bien en un momento donde la economía está estancada, con la capacidad productiva inutilizada en un buen porcentaje, entonces la emisión monetaria puede levantar el consumo. Pero si lo hacés cuando la capacidad productiva está siendo utilizada al máximo generás una demanda que sobrepasa la oferta, y la consecuencia de eso es la suba generalizada de todos los precios, debido a que los empresarios argentinos, venezolanos, chilenos, mexicanos, italianos, etc, etc, etc, no van a resignar ganancias, y aunque lo hicieran, llegaría un momento en el cual no podrían continuar debido a que la producción no es flexible al cien por cien, no es que el que produce latas de tomates ante la noticia de que el gobierno aumenta el gasto con emisión en un 20 % va a poder aumentar su producción en ese mismo porcentaje si ya está siendo utilizada la capacidad instalada al máximo, porque eso implicaría una alta inversión que no se sabe si va a ser beneficiosa para el empresario.

Una medida anticíclica es aquella que apunta a ir en contra del crecimiento o descenso del ingreso nacional para no recalentar la economía o lograr que aumente el ingreso. Si vos aumentás el gasto cuando la economía está creciendo vas a tener como consecuencia un incremento de la inflación, pero si vos lo dejás estable evitás que aumenten los precios. Es una de las grandes diferencias entre pensar a corto y a largo plazo. Los que piensan a corto plazo logran que la economía crezca un 10 % anual a costa de una alta inflación que después te genera problemas con las tasas de interés, el tipo de cambio y las expectativas, todos factores que afectan a la inversión. En cambio, los que piensan a largo plazo, prefieren crecer menos pero que ese crecimiento sea constante.

Con respecto al orden emisión-inflación o viceversa, no siempre es el mismo, pero si el déficit fiscal se financia con emisión está más que claro cuál es el orden ¿no?

Los bancos multiplican el dinero pero esto tiene un límite, que es impuesto por el BCRA que regula la expansión mediante las tasas de interés que cobra o paga y mediante los encajes. O sea, por más que los bancos privados se pongan de acuerdo para que suba la inflación, van a tener un límite para prestar, porque no tienen el poder de crear emitir.

Con respecto a la última pregunta, se explica porque se llega a un momento en que se suben los precios por inercia, y no me refiero sólo a los precios de los productos sino también a los de la fuerza de trabajo. Ambas partes especulan con que los precios van a aumentar un determinado porcentaje y deciden aumentar sus precios en esa proporción. Además otro componente es la circulación monetaria. Cuando se imprimieron los billetes y se los saca a circular pueden dar infinitas vueltas, y en momentos en los que no tienen valor la gente intenta sacárselos de encima, gastando, lo que produce inflación. O sea, aumenta la velocidad de circulación del dinero.

¿Cuántas experiencias de países periféricos, como Argentina, y de similar mejora en todos los aspectos posibles conocés? Me encantaría ser China, y pasar por encima de todo el mundo, pero no lo somos (por suerte en muchísimos aspectos no lo somos).
Lo mismo corre para Venezuela. ¿Quiénes organizaron los golpes de Estado contra Chávez? ¿Fue el pueblo o los sectores concentrados de la economía, junto con apoyo exterior y la porquería que vendieron los medios?

Corea, Taiwan, Japón, la europa post guerra mundial. Buscá cualquier experiencia de desarrollo y vas a ver que ninguna tiene los niveles de inflación de Argentina y Venezuela. Y hablo de desarrollo, no de Venezuela y Argentina que no son ejemplos para nada de experiencias de desarrollo.

¿Cuál es la mejor manera para obtener el mayor beneficio posible si uno es productor? ¡Produciendo más! Es la única forma de crecer, y ante esa posición podemos apreciar como optaron por la especulación. Siguen ganando, con igual producción, e invierten el capital en negocios que no generan ningún rédito real en la sociedad (cuando no lo fugan). Esa sociedad que hizo un gran esfuerzo durante tantos años, financiando y/o subsidiando todas las actividades que se desarrollan en Argentina. La misma que apenas tiene un peso extra en el bolsillo lo gasta, por costumbre y gusto, sin recibir del otro lado una respuesta acorde. Vos decís que hay 200 países con menos inflación, y podría citarte un número interesante de los que poseen esquemas productivos diferentes. Otros tienen una clase empresarial mucho más importante que la nuestra, con otra mentalidad, como Brasil por expresar un ejemplo concreto. Después están los países que cuentan con un desarrollo mínimo, caso Bolivia, y recién están avanzando sobre las necesidades básicas no cubiertas de amplias mayorías (con fuerte intervención estatal también). Argentina sólo es comparable con aquellos que pasan por su misma situación, y caminan la misma senda. Una vez que los identificamos, tenemos que encontrar los avances en pobreza, igualdad, distribución, salario, etc.

No estoy de acuerdo con la primera oración. Esa elección, si bien no puede ser eterna, es útil hasta alcanzar un importante grado de desarrollo. Cuando la industria ya puede potenciarse por sí misma, y las oportunidades florecen en cada rubro porque se invirtió durante años (o décadas). Si la demanda sobrepasa la oferta, uno debe producir más en vez de subir los precios. Allí radica la principal diferencia en el discurso económico, y como te conté antes -basándome en mi experiencia personal- no hay nada mejor para las pequeñas y medianas. ¿Las grandes prefieren especular? Eso es lo que debe evitarse, con participación activa del Estado y políticas que frenen su imposición en el mercado. Si las solicitudes de trabajo aumentan un 20% en mi laburo, yo salgo a contratar gente encantado de la vida. ¿Por qué motivo alguien podría pensar de otro modo? Quizá porque las grandes empresas, multinacionales y corporaciones foráneas pero de igual modo las argentinas, piensan en rendir cuentas y facturar antes que cumplir con la demanda. Se perdió de lleno el rol social de una empresa, que necesita de sus trabajadores como del consumidor ante todo. Un capitalismo estilo Henry Ford, acorde al New Deal, centrado en la creación de bienes para avanzar y no dominar.
Si vos tenés el cliente en la puerta, la inversión siempre rinde sus frutos. Yo no podría pensar de otro modo, y pienso que el almacenero de la esquina que ahora tiene un mini súper tampoco.

Lo primero aparece, de nuevo, por medio de la especulación. Es mover el mercado, y generar mayor riesgo para el de “arriba”, al mismo tiempo que los de “abajo” adquieren una estabilidad superior. El gasto público se orienta en gran medida a obras, infraestructura, y también hacia los sectores más necesitados. Estos sectores gastan absolutamente todo, e impulsan desde abajo la economía. Las grandes obras del Estado, por su parte, ejercen presión desde arriba porque pocas PyMEs están a la altura de ejecutarlas (son subcontratadas). ¿Cómo se corta la cadena? Alguien recibe capital y no lo hace circular, se evaden los impuestos, sale plata del país, buscan la forma de importar en vez de producir, etc. Si los argentinos entendemos qué esquema nos conviene, para vivir mejor y no tener que sacrificar a las mayorías laburantes, podríamos controlarlo de otro modo.
Hacer hincapié en esa postura, más que pensar a corto o largo plazo, es estancar los precios pero también la producción. En otras palabras, seguir viviendo del mismo modo. Podemos aspirar a más, porque los recursos naturales están y la mano de obra gracias a Dios es estupenda. El crecimiento será constante mientras se trabaje, y no al frenar la creación de empleo o mejora salarial. Ningún empresario de verdad pretenderá estancarse, porque una vez comprobado el método para avanzar es muy frustrante. Si sos una gran empresa y llegaste a un límite de facturación simpático, es posible que no te importe y busques la forma para frenarlo. Los grandes festejaron el crecimiento argentino, hasta que alguien propuso compartirlo entre todos.

Es igual. El déficit aparece cuando un Estado sigue moviendo la economía pero del otro lado no hay respuesta, y el negocio del día se convierte en suba indiscriminada de precios. El capitalismo debe funcionar con privados activos, y si ellos apelan a estancar la economía terminarán prevaleciendo o generando un desorden importante. Es la realidad actual de Argentina.
Cuando Redrado dice que debemos pisar el freno, hace hincapié en que su mercado ideal se maneja a partir de las grandes empresas y no un Estado involucrado. Los pequeños y medianos deben someterse a los grandes, y así habrá estabilidad. Yo como pequeño iría a orinar en la puerta de su casa.

No me refería a esto, ni tampoco hago hincapié en lo material. Los bancos privados quisieron instalar una cotización implícita, o valor de referencia al margen del oficial. Se cansan de desafiar a la única autoridad monetaria, y quieren ser una sucursal paralela de ella pero en beneficio de los privados (sus negocios ante todo) en vez del Estado. También podríamos hacer hincapié en la actitud de bancos como HSBC, cuya imagen debería estar cayendo a pedazos.

El trabajador se ve obligado a especular una vez que se instaló la inflación, y no antes. Lo expreso como propietario, muy preocupado por la gente que me rodea porque sin ella sería imposible afrontar el trabajo. Esa inercia no es obra del Estado, y la pérdida de valor es parte del mismo proceso inflacionario. Todos los caminos conducen a Roma.

Fijate que nota tan interesante:

Se detectan tres períodos del comportamiento de la base monetaria a partir de 2004 (para facilitar la lectura se reduce al mínimo necesario la mención de cifras):

  1. Desde ese año hasta 2007: la expansión de dinero estuvo asociada a la compra de divisas, mientras que las operaciones del Tesoro nacional, o sea la caja del Estado (superávit fiscal), contribuyeron a absorber parte del efecto monetario expansivo. Durante esos años el Banco Central esterilizó (retiró pesos del mercado) mediante la colocación neta de Lebac y Nobac (papeles de deuda de corto plazo), la concertación de pases (operaciones financieras de tomar o entregar pesos a los bancos) y el cobro de redescuentos (préstamos a bancos) otorgados durante la crisis de 2001. En 2007, la base monetaria se expandió 24 por ciento respecto del año anterior.
  2. En 2008 y 2009: la expansión de dinero generada por las compras netas de divisas se redujo drásticamente en un escenario de profundización de la crisis financiera internacional. En este período la demanda de dinero fue abastecida mediante una reducción del saldo de Lebac y Nobac, la compra de títulos públicos en el mercado secundario y un menor saldo de pases pasivos para el Banco Central. En estos años el sector público continuó siendo un factor de contracción de la base monetaria. En esos años, el aumento de la base monetaria fue 10,2 y 11,8 por ciento, respectivamente.
  3. Desde 2010, el financiamiento al sector público constituyó un factor de expansión monetaria, junto a las compras de divisas. Con excepción de 2011, el Banco Central absorbió parte del efecto monetario expansivo principalmente mediante la colocación de Lebac y Nobac. La expansión de la base monetaria fue en 2010 del 31,1 por ciento, en 2011 del 39,0 por ciento y en 2012 del 37,9 por ciento.
    Entonces, en el lapso 2007-2013, con momento de expansión y contracción monetaria, los índices de precios se mantuvieron en niveles altos estables, ya sea en el indicador oficial (10 por ciento) o en los privados (20-25 por ciento). O sea, las tensiones inflacionarias fueron constantes independientemente del mayor o menor crecimiento de la base monetaria (emisión de dinero).
    En esos años, otros países tuvieron una expansión de la base monetaria mucho más intensa sin provocar alarma: Estados Unidos la aumentó 106,7 por ciento en 2008 respecto del año anterior; Reino Unido, 106,1 en 2009 y 51,7 en 2012; Brasil, 131,7 en 2010; Chile, 38,8 en 2011; Perú, 31,9 en 2012; y China la incrementó 30,6 en 2007 y 28,7 por ciento en 2010 en comparación interanual.
    Un análisis más profundo incluye el recorrido de los agregados monetarios amplios, lo que se denomina M3 (circulante en poder del público y el total de depósitos del sector privado y de organismos estatales, en pesos y dólares). O sea, casi todo el dinero de la economía. De los factores de crecimiento de esa variable, desde 2011 los principales fueron los préstamos en pesos al sector privado. Las operaciones del sector público en términos netos (impacto sobre base monetaria, más préstamos menos el crecimiento de depósitos), si bien han tenido un efecto expansivo a partir de 2011, éste fue de una magnitud muy inferior al asociado a los préstamos al sector privado. Por lo tanto, a partir de 2011 los préstamos en pesos al sector privado fueron la principal fuente de creación de los recursos monetarios (ya sea totales o del sector privado), y no la emisión de dinero para financiar al Tesoro nacional, como se insiste.
    El argumento reiterado por los hombres de negocios dedicados a la comercialización de información económica es: más emisión es causa de más inflación, y, además, esa mayor emisión es para atender la demanda de más fondos del Tesoro para financiar el gasto público. Así queda cerrado el círculo donde el culpable de los aumentos de precios es el Estado por emitir y gastar en forma irresponsable. La solución propuesta es el ajuste monetario y fiscal para bajar la tasa de inflación, sin mencionar que esa política tiene consecuencias negativas en la generación de empleo y nivel de actividad económica.
    Otro dato relevante del frente monetario es que la economía argentina tenía un muy bajo grado de monetización (cantidad de dinero en manos de la población) debido a décadas de elevada volatilidad económica, incluyendo cuasimonedas, y la megadevaluación de 2002. El aumento de la emisión permitió iniciar la recuperación de la monetización de la economía que, pese a los fantasmas sobre desbordes, todavía se encuentra por debajo de los años previos al estallido de la convertibilidad. El indicador M3 privado (es decir, el total de dinero sin sector público), que para la ortodoxia es lo que presionaría sobre los precios y el dólar porque habría supuestamente excedentes monetarios, en términos del PBI fue de 26,1 por ciento en el primer trimestre de 2013, cinco puntos porcentuales más bajo que en igual período de 2001. Y en ese lapso ha habido un intenso ciclo de crecimiento del Producto, generación incremental de bienes y servicios que para facilitar su circulación requiere de la ampliación de medios de pagos (moneda). En comparación con otros países de la región, la Argentina registra una mayor expansión en esos años porque viene de una situación más atrasada en términos de monetización, que incluyendo al sector público asciende a 33,4 por ciento del PIB. Pese a ello, todavía se encuentra por debajo del grado de monetización de Chile, Brasil y Colombia, que contabilizan 56,2; 40,0; y 38,7 por ciento del Producto, respectivamente.
    El discurso económico dominante seguirá insistiendo con la consigna de que la emisión de dinero es la causa de la inflación. Con datos duros se puede empezar a relativizarla, al tiempo que la heterodoxia puede mostrar que es capaz de un manejo prudente de la política monetaria con tasas de interés que seduzcan la inversión en pesos en función a cumplir objetivos de empleo, crecimiento y también de inflación.

Ninguna es comparable a la Argentina. Volviendo al punto inicial, las comparaciones sólo son justas en este tiempo y con respecto a iguales (países saliendo del tercer mundo). Reitero algo que expresé en mi mensaje anterior: me encantaría ser China hoy, pero sin pasar por los dramas chinos. Tampoco me gustaría vivir la Alemania o el Japón de 1950, y saber que mi generación está condenada a perderse. Otros tiempos, otra historia. En una chicana reciente alguien me preguntó si quería vivir en Cuba o Hong Kong, y mi respuesta fue que deseo hacerlo en Argentina. Una Argentina desarrollada, que explote su potencial y no se rebaje a vivir como un país diminuto. Vamos hacia Japón o Alemania, o mejor Dinamarca y Suecia, pero resignar nada ni a nadie.