“Si el que me critica puede argumentar y podemos debatir, y eso nos lleva a enriquecernos, está genial. Una crítica puede ser porque no le gustás como persona, o por un gesto que le hacés, o por tener o no empatía. Luego está la crítica que se argumenta, como por qué a mi me gusta el café y a vos no. Si decís no me gusta porque no me gusta. La que es fría, distante, aislada, no le doy importancia. Puede ser mala o buena, pero la que es argumentada me gusta porque me abre los ojos. Después está la mala intencionada que viene de algún lado para querer desestabilizar. A esa ni siquiera la tomo porque sé de dónde viene”.
Uno de estos pelotudos que andan robando con la comunicación no verbal debería analizar la taradez de andar TODO EL MALDITO DÍA Y TODA LA MALDITA NOCHE con un termo en la mano. Para mí es una realización simbólica del deseo de llevar una poronga robusta a todas partes. Para mí eh. Pero como es Tristelme jamás lo dirán.
Están haciendo lo mismo que hicieron hace 5 años más o menos. No aprenden más, o no pueden hacer una obra de verdad porque tienen las napas a medio metro. Terreno de mierda, barrio de mierda, cancha de mierda.