Es un error quedarse en Roca para hablar del maltrato a los pueblos indigenas. Desde el y hasta nuestros tiempos, nadie los ha reconocido con la importancia que tienen. Y no hablo solamente de los gobiernos que se han sucedido, tambien de la sociedad en gral.
Que ganas me dan de tirar abajo el monumento a Urquiza cada vez que paso por Figueroa Alcorta y Sarmiento.
El que habla mal de Roca es una basura
Mucha gente habla mal de Roca porque lo ubica en la línea de Mitre. Otra, habla bien de él porque hace exactamente lo mismo.
Es bueno aclarar los tantos, y exoponer la realidad porque posee muchos matices. Pocos podrían afirmar que estas palabras pertenecen a Pellegrini:
“No hay en el mundo un solo estadista serio que sea librecambista, en el sentido que aquí entienden esta teoría. Hoy todas las naciones son proteccionistas y diré algo más, siempre lo han sido y tienen fatalmente que serlo para mantener su importancia económica y política. El proteccionismo industrial puede hacerse práctico de muchas maneras, de las cuales las leyes de aduana son sólo una, aunque sin duda, la más eficaz, la más generalizada y la más importante. Es necesario que en la República se trabaje y se produzca algo más que pasto”.
Ahora que se volvió a hablar de Malvinas, está bueno decir que Roca es quien reanuda el reclamo sobre Malvinas después de 35 años, siendo Rosas el anterior reclamante.
Puntal del siglo XXI ??? sin dudas Axel Lopez…
Traslado todo acá para no mezclar con otros temas. Escribí un poco.
[QUOTE=melezama;6573297]Yo tampoco soy plenamente rosista. :mrgreen:
O sea, hay cosas del gobierno de Rosas que históricamente fueron notables. De hecho, San Martín lega su sable a Rosas, no por estar de acuerdo con su política interna (es sabido que el General trataba de meterse lo menos posible en eso) sino como reconocimiento al coraje de Rosas para proteger a la Argentina de las agresiones externas, ejemplo Vuelta de Obligado. Ahora, la postura de Rosas con respecto a quienes no compartían sus políticas no era precisamente un dechado de virtudes. Era bastante sanguinario el tipo. Y a veces me pregunto hasta qué punto por necesidad política y hasta qué punto por sadismo.[/QUOTE]
Rosas vs Sarmiento vs Roca, ¿quién es más sanguinario?
Tres nombres y una visión controvertida de los mismos, ¿pero quién era más sanguinario? Sin duda los tres habrán tenido sus muertes y sus campañas, muchas de ellas políticas y virulentas. También los tiempos eran acordes a esa violencia, recordemos siempre que, en el caso de Juan Manuel de Rosas, no había un ejército nacional, ni estado nacional, eso implica, no había monopolio de la fuerza de seguridad por parte del Estado. En este sentido, era común las milicias propias privadas de cada uno de los terratenientes, e inclusive se extendería hasta la actualidad, los comisarios afines a un terrateniente. Y además que ninguno era moco de pavo. Es como pretender que haya una burguesía nacional, tan simple como si el capital privado local no quiere invertir en industria, no se le puede obligar a que lo haga. De la misma manera, es obvio que cualquier medida contraria a sus intereses, la respondan con sangre y no con elegantes palabras y discursos, o autocríticas.
El proceder de cada uno, lo que comentan sus adversarios de ellos y los pensamientos y palabras que expresaron, hablan de qué tipo de semblante tenía cada uno.
Juan Manuel de Rosas
[SPOILER]En el año 1833 Rosas, preparó y organizó la Campaña de Pacificación del Indio. Había tratado a los indios desde su niñez, pasada en la estancia materna del Rincón de López más allá del Salado. Su abuelo, Clemente López de Osornio, fue muerto por ellos; su padre, León Ortiz de Rozas, pasó mucho tiempo en las tolderías. Para ese motivo, creó un diccionario de 4 lenguas para poder interperlarlos y dialogar.
Por si alguno lo quiere comprar, está a $800 en Mercado Libre.
Poco antes de dejar el gobierno, Rosas propuso a la Sala una triple ofensiva contra los indios (Bulnes, Quiroga y él). Quiroga – que sería el comandante en jefe – eliminaría a Yanquetruz llegando hasta el Colorado, donde se le juntaría la división de la izquierda de Rosas para seguir juntos contra Chocory y ocupar el “país de las manzanas” (Neuquén). Bulnes debería imponerse a los araucanos del sur de Llanquihué, territorio de Chile.
“Muy bien organizados, Rosas contrató ingenieros como Feliciano Chiclana […] que harían excelentes observaciones astronómicas, geográficas y estenógrafas […]. Llevaba médicos, sacerdotes, agrimensores, baqueanos, una provista maestranza y arregló el suministro de provisiones en todo el recorrido. El total: dos mil hombres a tres caballos por soldados(cuatro para los oficiales)…”.
Se estableció como consecuencia orden y paz en la frontera.
Estaban por el año 1835 los indios al mando de Cafulcurá, ese poderoso cacique que había venido del otro lado de los Andes. Cafulcurá y Rosas los líderes de los dos bandos en conflictos, mantuvieron una relación de negociaciones que mantuvo tranquilidad en la frontera. Pero ésta tranquilidad muchas veces fue rota. Cafulcurá fue un jefe poderoso con muchos hombres bajo su cargo y fue durante cuarenta y ocho años un líder indiscutido de las comunidades indígenas. A él recurrieron miles de caciques desesperados para ponerse bajo la protección de la “Confederación de Salinas Grandes”. Esta Confederación fue la mejor organización de los bandos indígenas.
Por otro lado, Rosas, administraba establecimientos. Conocía bien los misterios indígenas, supo hacerse respetar por los más importantes caciques, entre ellos Cafulcurá.
Un cacique llamado Cachel dijo:
“Juan Manuel, nunca me ha engañado, yo y mi tribu moriremos por él, porque las palabras de Juan Manuel son con las palabras de Dios”.
Durante este tiempo de paz, Salinas Grandes y Buenos Aires fueron dos centros de poder con gran intercambio.
La caída de Rosas rompe la buena relación con la Confederación de Salinas Grandes. Buenos Aires comienza a vivir otra vez los ataques de los bandos indígenas al retirarse desprotegidas.
La expedición de Juan Manuel de Rosas y su pacto con Calfucurá
El general Juan Manuel de Rosas, gobernador de Buenos Aires, comienza su expedición hacia el interior patagónico en 1833, con una fuerza de 1.400 hombres y 500 lanceros de los caciques Catriel y Cachul. La primer etapa lo lleva junto alRío Colorado. La segunda se prolonga hasta la isla Choele Choel y desde allí hasta la confluencia del Río Negro con el Neuquén. A su paso instala el Fortín de Valcheta, a 350 kilómetros al Oeste de Carmen de Patagones. (Luego, por otros gobiernos, en 1862, se funda Guardia Mitre, en 1869 General Conesa y en 1879 la definitivamente pacificada Choele Choel ya abandonada por los indios. En San Carlos de Bariloche llegó el blanco a instalarse en 1860).
Estanislao Zeballos dice: “Al internarse Rosas en el desierto no tenía plena confianza en estos bárbaros que dejaba a sus espaldas (se refiere a losranqueles) ya que en caso de fracaso de la expedición, podían volverse enemigos terribles". Efectivamente, los ranqueles del cacique Rinque, de quien Pincén era yerno y capitanejo, habían hostigado de mil formas a la columna expedicionaria deRosas, quien tenía razones para desconfiar de algo peor a su regreso.
Como también conocía el general la vieja enemistad de Ranqueles y Araucanos, se atrajo a Calfucurá, un borogano de Chile, para instalarlo en Salinas Grandes, territorio que conocía por haber ido antes a malonear.
Los araucanos de la tribu boroga, ya tenían una importante presencia enCarhué (lugar estratégico o lugar de población), donde habían llegado en 1818 alrededor de 5.000, en su mayoría chusma, es decir, no guerreros sino simples familias con niños y ancianos. Emigraron de Chile donde habían luchado junto a los españoles contra el ejército republicano y los militares de la nueva Nación independiente se lo reprochaban. Al frente de ellos vino el cacique Cañiuquir.
Calfucurá hace un convenio con Rosas que ambos mantuvieron durante muchos años, hasta la caída de éste último en la batalla de Caseros del 3 de febrero de 1852. Lo mismo ocurrió con los pampas. Sólo los ranqueles siguieron rebeldes, sin haber podido ser controlados totalmente ni aún por Calfucurá, a pesar de su enorme fuerza.
La alianza Calfucurá-Rosas, luego que éste demostrara su energía con los rebeldes, permitió al gobernador recuperar 2.000 cautivos. El cacique recibió 1.500 yeguas, 500 vacas, alcohol, ropas, yerba, azúcar y tabaco, más otras 8.000 yeguas por año. El jefe indio pidió y recibió la divisa federal y el Restaurador (Rosas) le apadrinó una hija, que llamó Manuelita Rosas. Además, el gobernador festejó la fecha aniversario de la Revolución Patria, el 25 de Mayo de 1833, a orillas del ríoColorado, con caciques de Calfucurá, así como de Catriel, Cachul, Antaún y Nicacio.
La presencia del cacique en Salinas Grandes (al norte de la Pampa), aseguraba los abastecimientos de sal a Buenos aires. Las 120 leguas se hacían en carretas en viaje de ida y vuelta que demoraban dos meses. Asimismo, Calfucurá se comprometió a no invadir la provincia y, a impedir la entrada de araucanos de Chile que vinieran a malonear. Las feroces invasiones de mapuches hambrientos de los años 1837 y 1839, fueron rechazadas por Calfucurá. Algunas menores, de poca monta, rara vez podían operar en tan enormes espacios muy difíciles de controlar, pero si éstas tenían éxito, al regresar a sus tolderías le enviaban regalos o participación de sus robos.
En su mensaje de 1840, Rosas dice: “Las numerosas tribus de indios amigos, continúan dando ejemplos de fidelidad”. Es pues evidente que las relaciones del Restaurador con los aborígenes fueron siempre bastante buenas y era popular entre muchas tribus pampas y araucanas, como lo verifica y escribeCarlos Darwin, quien lo visita en su campamento junto al río Colorado.
Ese mismo sentimiento hacia el Restaurador, se mantenía 18 años después de su derrota, como lo dice en 1870 el explorador inglés George Chaworth Musters a su paso por Carmen de Patagones.
Es cierto que Calfucurá, como otros caciques araucanos chilenos se instalaron en diversas zonas de Neuquén luego de crearse la república en el país vecino. ¿Por qué? Porque fuerzas realistas del Sur a cambio de la colaboración indígena, les prometían la independencia de España. En estas luchas participaron algunos núcleos mapuches que progresivamente eran atacados por el ejército, que estuvo sobre los indígenas con la caída de Ancud en 1826. A raíz de ello, varios núcleos araucanos que estuvieron enfrentados con Santiago de Chile y temían represalias del ejército, se trasladaron a zonas argentinas, en especial Neuquén. Entre ellos, Calfucurá.
Por esa época, Buenos Aires, tenía por enemigos peligrosos a los realistas del Sur de Chile, muchos de los cuales dirigían los malones sobre las estancias de Chascomús, Dolores, Areco, etc. (“Ceferino Namuncurá” - Gobane Pag. 166).
Calfucurá, que no podía ni quería regresar a su Araucanía natal (Chile), buscó astutamente una alianza con el poderoso gobernador Juan Manuel de Rosas, mandamás indiscutido de la provincia de Buenos Aires. Para ello decidió negociar, comenzando por ganarse su confianza por medio de una contundente prueba de lealtad y con fuertes muestras de aliado útil.
Versión mapuche del pacto Calfucurá – Rosas.
El citado doctor Gregorio Alvarez, que murió casi centenario, como es bastante común entre los araucanos, en su libro “El Tronco de Oro”, trae como apéndice un viejo y muy interesante manuscrito de “mi paisano y amigo”, donPablo Paillalef, de Piedra Pintada, (Neuquén), (Pag. 128).
Paillalef, hombre con fama de correcto e inteligente, dice tener las fuentes de su familia y en particular de su padre, un prestigioso cacique, “que pasó a la eternidad a la edad de 110 años (quizás más), estando a mi lado…”. De ese manuscrito sacamos lo referido al conocimiento y amistad de Juan Calfucurá conJuan Manuel de Rosas.
Paillalef exigió en vida se respetara su redacción y así lo reproducimos:
"Relacionado referente al reputado cacique Huircán residente en Ferrohue(Chile), habiendo hecho lo que quiso con los demás loncos (caciques), que habían en el vecino país ganándoles a todos en la batalla que tuvo con ellos; como Huircán ya calificándose como el único en la valentía que no había otro, resolvió venirse a la Argentina para hacer otro tanto de lo que llevaba hecho juntamente con sus gentes.
"En primer lugar invadió el Azul (Provincia de Buenos Aires) haciendo cuantos estragos con los habitantes de ese pueblo, cautivando chicos y chicas y todo lo que encontró a su paso, vacas y yeguarizos todo lo que pudo reunir arrió con todos los regresando a su país aun más sintiéndose más valiente que nunca.
"En lo mejor de su viaje, a Huircán se le ocurre otro pensamiento adverso motivando la reunión de su capitanejos en un paraje llamado Carrare, quien le comunica sus aspiraciones. Había un cacique en Llañma, Chile, de nombre Callfu Curá; por el sólo hecho Huircán de satisfacer su intrépida bravura, lo sentencia aCallfu Curá que de pasada por la cordillera se proveería de colihue verde para darle una sova y si su tribu se oponía también la liquidaría; estas palabras deHuircán que les pasó a sus capitanejos que lo conceptuaron con acento aprobatorio y poniéndose de acuerdo.
"Callfu Curá era un cacique de espíritu conciente, así Dios lo ayudó en su amenaza. El día de la conferencia Huircán con sus capitanejos, en la noche siguiente se produjo una deserción de tres hombres de su tropa dispuestos para presentarse a Callfu Curá para ponerlo en conocimiento del plan que Huircánllevaba contra él. Cuando hubo enterado de la noticia Callfu Curá también entabla una conferencia con sus capitanejos y con la tribu explicándole de la amenaza del adversario temible, quienes convinieron de las medidas que habría de tomar para atacarlo a Huircán.
"El amenazante traía su tropa fraccionada en cuatro grupos distanciados de uno al otro, a cada una de ellas comandaba un capitanejo y Huircán en el grupo del medio como es sabido que todo jefe lleva su protección, decididamente convenido todos, el grupo que se hacía de puntero tenía la orden de acamparse en el paraje Marrepu Menuco (diez pantanos), al norte de Neuquén, y desde allí formando un solo regimiento y armarse de colihue para la espalda de Callfu Curá;como el amenazado Dios lo tenía en la mano, estaba al tanto del plan Huircanista.
"El obstáculo que le presenta Callfu Curá en ese caso que en número de gente era muy reducido y no como su atacante, le redoblaba; que no era un chiste para ponerse al frente de él. Lo que le hacía favorable que Huircán traía su tropa dividida. Lo espera tranquilo en el paraje ya citado trayendo de vaqueano los tres hombres conocedores que era su salvación y su triunfo.
"Cuando se acampó el grupo y creyó conveniente, le pegó el salto liquidándolo a todos, y era la mejor forma para ejecutar un zarpazo, de esta naturaleza debido por el terreno que no era montoso, que era ya parte de la cordillera. Para no advertir sospecha alguna avanzaban un poco más adelante para hacer lo mismo con el segundo grupo, continuando así hasta darle el fin a los cuatro; solamente por mandato de Callfu Curá dejando vivos a los niños cautivos.
“Ganando la batalla se adueña de todos los animales tomando rumbo a la Capital Federal presentándose al Gobierno Argentino para hacerle la devolución de todos los seres inocentes que llevara Huircán. Cuanto padres habrán abrazado nuevamente a sus hijos que lo contaban perdido, reconociendo el gobierno la buena acción del intrépido y venerable cacique y en prueba de su merecido galón le otorgaron posesión a su pedido, entonces territorio La Pampa, con todas sus gentes; y que solicitó a la vez que se le repartiera ración a todos los Mapuches que habitaban en este suelo. También fueron aceptados los negocios entre los huinca y el aborigen, como ser el tejido de todas clases, sogas crudas, plumas de avestruz y demás cosas, todos ellos deberían ser canjeados por animales, llegándose a consideración todo el pedido por el Callfu Curá…”.
Esta versión mapuche explica cómo Calfucurá, ya viviendo en Neuquén, es allí donde vence a su enemigo, rescatando no sólo el ganado sino en especial cautivos que entrega en número de 2.000 a Rosas. Es con esta relación y el gesto del cacique, que puede llegarse al tratado y confiar en él como un aliado para proteger la frontera y la Provincia de Buenos Aires, de nuevos ataques provenientes de Chile y de Neuquén.
La versión de Estanislao Zeballos, de que Rosas había llamado aCalfucurá desde Chile, encuentra aquí una más lógica explicación. No lo llamó, sino que lo invitó a quedarse, una vez venido de tan buena fe, extendiéndose hasta el Sur de Córdoba y llegando en parte a San Luís y Mendoza. Los indígenas aprenden de los cristianos a tomar mate y a fumar.
Calfucurá, para imponer su autoridad sin discusión, ataca y vence a los díscolos. Así mata en combate a Rondeau y su segundo Melín, como a otros jefes, sin afectar a los indios en general, incluida la viuda de Rondeau. Luego negocia con los caciques Cheuqueta y Chocorí (huiliches) del Colorado, Llanquetruz y Painé (ranqueles), Catriel (puelche) y Guadmané (picunche), consolidándose como indiscutido gran jefe de la Pampa.
El valeroso cacique Cañiuquir, jura dedicar su vida a vengar la muerte de su amigo Rondeau, prometiendo cortar la cabeza del araucano. Lo buscó con empeño y lo enfrentó con grupos de indios por él seleccionados, con una fuerza superior a los mil hombres-lanza. También lo hizo junto a tropas militares. Al fin, traicionado por Buenos Aires, olvidó su vieja venganza jurada y se unió a la Confederación comandada por Calfucurá. En un combate contra el ejército,Cañiuquir fue capturado. “La Gaceta Mercantil” de Buenos Aires, el 2 de agosto de 1836 publicó: “… allí mismo fue colgada la cabeza del tan ponderado como malvado Cañuquir”. Como se advierte, los “civilizados” cortaban y exhibían cabezas humanas, y sus ejércitos tenían un toque de clarín que ordenaba “a degüello” a los vencidos, heridos o no, después de un combate.
El cacique Railef viene de Chile a matar a Calfucurá en venganza del cacique mapuche Toriano, muerto por otros borogas. Como no encuentra a su presa, se dedica a malonear en la provincia. Logra un botín de 100.000 cabezas de ganado. Cuando comienza el camino obligadamente lento de retorno a Chile, con su botín. Rosas le indica a Calfucurá que cumpla su compromiso de atacar a los invasores trasandinos, y éste así lo hace. Alcanza a Railef en Quentucó, matándolo junto a 500 de sus indios. El resto huye hacia la vecina república. También rescatan cautivos y todo el ganado robado, que envía al Gobernador.
La misma función cumple Calfucurá contra los caciques Cañiuquir y Cañuepan. También, cuando el general unitario Juan Lavalle invade la provincia, los indios apoyan al gobernador Rosas. Es, en fin, un período de casi dos décadas en queCalfucurá se convierte en muy eficaz gendarme que no deja entrar malones de indios araucanos provenientes de Chile, lo cual indica que no podía estar en esos momentos en muy buenas relaciones con los mapuches de su país de origen, aunque posteriormente, cuando reanuda hostilidades, estos le aportan guerreros. “Soy guapo y capaz de cumplir”, decía.
“Durante la paz de Rosas –escribirá después el coronel Álvaro Barros que participó de las guerras contra los indios– la población rural llegó a extenderse hasta muy cerca de las Salinas Grandes, alcanzando un inmenso desarrollo la riqueza pública. Poblar el desierto en 1850, era un hecho realizado en 20 años de paz y ¿por qué no decirlo? de acierto, dadas aquellas circunstancias, en la manera de tratar a los indios”.[/SPOILER]
Domingo Faustino Sarmiento
[SPOILER]Sarmiento es ampliamente reconocido por su dicotomía de Civilización o Barbarie. En ella identifica claramente a la barbarie con el gaucho, el mestizo, el caudillo, el hombre de la tradición del campo, es definitiva, a la ruralidad en su conjunto. A la civilización en cambio, la identifica con la ciudad, la organización urbana y el moralismo aplastante.
Dirá Vicente Fidel López el día de su muerte: “Era hombre que valía mucho, sin la menor duda; pero él estaba persuadido de que valía muchísimo más; se creía un genio, y lo decía sin el menor empacho.
Al actuar en política, cuando encontró un obstáculo en su camino, y para suprimirlo halló que el medio más rápido era el crimen, no vaciló un momento y lo suprimió. Benavides, Virasoro, el Chacho, dicen bien a las claras que ese hombre que, en el fondo era cultísimo y sincero, amante –cuando su espíritu estaba sereno- de lo justo, de lo bueno y de lo humano, arrastrado por la pasión, no se detenía ante el asesinato ni ante actos de suprema barbarie, como la exhibición de la cabeza del Chacho en la punta de una pica, en la plaza de Olta”
Así se expresaba Sarmiento, en un lenguaje ciertamente bárbaro: “Quisiéramos apartar de toda cuestión social americana a los salvajes por quienes sentimos sin poderlo remediar, una invencible repugnancia”. En una carta le aconsejaba a Mitre: “…no trate de economizar sangre de gaucho. Éste es un abono que es preciso hacer útil al país. La sangre es lo único que tienen de seres humanos esos salvajes”.
Otro dato de utilidad, es el coronel Ambrosio Sandes, considerado el más sangriento oficial del Ejército Argentino puesto que no dejaba prisioneros, a quien, Sarmiento, le encomendó la tarea de barrer con el interior y cambiar 8 gobernadores.
Tras el pésimo manejo de la muerte del Chacho y el repudio generalizado en su contra, Sarmiento renuncia al cargo de gobernador con solo 2 años de gestión, y Mitre le encomienda el viaje a EEUU para sacarlo de escena. Es allí donde Adolfo Alsina lo recomienda como presidente y es electo sin saberlo por el Congreso.
La guerra contra el caudillo
El triunfo de Sandes en el Alto de la Angostura en San Luis el 2 de abril de 1863 concluyó con el degüello de los derrotados, sin embargo los federales consiguieron algunas victorias en Río Seco, en la misma provincia, mientras que otra partida resultó derrotada en Catamarca. El coronel Francisco Clavero quién había fusilado a Aberastain, ingresó en Mendoza desde Chile derrotando a las tropas unitarias.
Mientras se alternaban los triunfos y las derrotas, Peñaloza reunía a sus tropas en Patquia movilizándose el 20 de mayo, ese día comandando 1000 hombres se dirigió a San Juan encontrándose con Sandes en Lomas Blancas, donde se combatió ferozmente, los federales llegaron a lanzar piedras a sus rivales, el oficial unitario recibió una nueva herida, se le calculaban que ya tenía unas 50 que cubrían su cuerpo, sin embargo el oficial mitrista obtuvo el triunfo y la caballería del Chacho se dispersó.
Pero Peñaloza con un buen conocimiento del terreno desapareció y las tropas nacionales no lo pudieron ubicar, mientras tanto en Córdoba estalló una rebelión favorable al Partido Federal, el nuevo gobernador solicitó la ayuda de Peñaloza, quién ingresó a la ciudad el 14 de junio siendo saludado con entusiasmo por gran parte de la población.
Permaneció 14 días en la ciudad, donde imperó el orden y la tranquilidad, a diferencia de las invasiones unitarias, una sola casa fue asaltada y el responsable recibió el correspondiente castigo. El gobierno nacional envió entonces a Paunero con 4000 hombres para sofocar el intento rebelde, uno de los oficiales era el teniente Julio Argentino Roca, el 27 de junio se produce la batalla de Las Playas, con saldo favorable para Paunero que mandó matar a todos los oficiales tomados prisioneros.
Nuevamente los unitarios no pudieron apresar al Chacho que escapó al frente de 200 hombres luego de romper el cerco armado por Paunero, el caudillo se dirigió a Los Llanos riojanos donde arribó el 6 de julio, pero sabiendo que andaban tras de él se internó en las montañas, pasó a Chile y luego ingresó por San Juan, en su incansable recorrido logró provocar confusión entre sus perseguidores, a su vez lograba sumar nuevas incorporaciones a su columna cada vez que atravesaba una población.
En Mendoza muere Sandes, uno de los oficiales más sanguinario que respondía a las órdenes de Mitre y Sarmiento, al ser herido a la salida de una pulpería, mientras tanto Peñaloza se encontraba nuevamente en Patquia al frente de 1000 hombres dispuesto a marchar hacia San Juan.
Sarmiento como director de esa guerra de exterminio le dio la orden a Arredondo de proceder “ejecutivamente contra quienes resulten criminales” fórmula que le permitía fusilar a los montoneros sin ningún tipo de juicio. Si bien Sarmiento renunció el 23 de mayo por discrepancias con el Ministro de Guerra, continuó ejerciendo el cargo y dirigiendo las acciones contra las provincias, decretó el Estado de Sitio en La Rioja, lo cual era inconstitucional porque no tenía jurisdicción sobre esa provincia.
El nuevo jefe de la guerra fue Paunero pero todos continuaron recibiendo órdenes del sanjuanino particularmente Arredondo que se encontraba en La Rioja combatiendo al Chacho, Sarmiento pretendía que todo el país se movilizara para defender San Juan contra las intenciones del caudillo.
El 13 de octubre Peñaloza sale de Patquia, llega a Caucete conde se encontró con las tropas enviadas por Sarmiento, en pleno combate llegaron refuerzos para las tropas unitarias decidiendo el resultado de la lucha, El Chacho nuevamente debió huir.
El riojano llegó a Olta con doce hombres y su mujer, instalándose en la casa de Felipe Oros, el 12 de noviembre el capitán Ricardo Vera acompañado por 30 hombres ingresó a la casa donde se encontraba El Chacho quién se entregó sin intentar resistencia, es detenido y Vera procedió a informar a su superior el mayor Irrazábal, que al llegar hace amarrar al detenido y una vez atado procede a lancearlo, El Chacho pretende hablar pero Irrazábal da la orden que lo ultimen a tiros, después hace cortar su cabeza y la expuso sobre una pica en la plaza de Olta.
Vera fue el encargado de llevarle la noticia del asesinato de Peñaloza a Sarmiento, el capitán escribió tiempo después que al escuchar el relato de las circunstancias de la captura y la forma horrible de su muerte, el sanjuanino le dio un fuerte abrazo “mostrando verdadero gozo en el triste fin de aquel desgraciado”.
Sarmiento no sólo se regodeó por la forma en que se procedió con El Chacho sino que hizo barrer la plaza de San Juan a la esposa de El Chacho, Victoria Romero de Peñaloza, atada a una barra de grillos.
El 13 de noviembre le escribió a Mitre estas espantosas palabras: “…he aplaudido la medida, precisamente por su forma. Sin cortarle la cabeza a aquel inveterado pícaro y ponerla a la expectación, las chusmas no se habría aquietado en seis meses”[/SPOILER]
Julio Argentino Roca
De Roca se puede destacar una frialdad calculadora. A diferencia de Sarmiento, Roca no concebía al indio como una muestra de barbarie, sino más bien de desorden. Además para él, tal y cual lo plasmaría en su gobierno, le importaba el firme manejo del Estado y la determinación de éste en el impacto de la vida cotidiana del país, de su organización estructural, y del control que implica el alcace de un Estado Nacional. Fue continuador de una política que él no inició, con tan solo 34 años se haría cargo del Ejército Nacional siguiendo si a un sanguinario como Adolfo Alsina, y para Roca importaría mucho más la brevedad que le imponía el gobierno y la oligarquía reinante, que un barrido y un aplastamiento del indio como raza o como signo de atraso. No menos responsable, es dueño de una heroicidad que no merece, cuya fama lo catapulta a la presidencia de la Nación.
Por ende, el coronel Roca no es el ideólogo de una Conquista de un Desierto, sino que en realidad, es un término de larga data, desde 1810, sobre una fantasía racista y positiva del razonamiento biologicista del siglo XIX. La expedición se planea por ley nacional sancionada por el Congreso allá por 1862 y tuvo varias etapas. El gran ideólogo es Adolfo Alsina, quien como ministro de guerra, llegó a crear el famoso zanjón que lleva su nombre para evitar las incursiones y el robo de ganado. La razón principal para que los pueblos originarios incursionaran sobre las tierras, se debe a la extinción del ganado cimarrón que implicaba el robo de ganado para su comercio en Chile y por la ruptura de los términos de intercambio pactados con Rosas que le permitían subsistir mejor. Muerto Alsina en 1876, Roca es nombrado ministro de guerra y se le encarga que culmine la tarea. Allí propone tres soluciones: exterminarlos, diseminarlos o incorporarlos. “A mi juicio, el mejor sistema para concluir con los indios, ya sea extinguiéndolos o arrojándolos al otro lado del río Negro, es el de la guerra ofensiva que fue seguida por Rosas que casi concluyó con ellos…” expresaba Roca.
[QUOTE=Sebastiano;6573507]Después de la ““conquista”” fue cuando se asentó definitivamente la oligarquía agraria ya que las familias más pudientes se beneficiaron formidablemente con el reparto de tierras, por ende desde el comienzo de la fundación del estado moderno ya podemos hablar de desigualdad.
Después empezaron a arrendar esas tierras a los “chacareros”, que eran los inmigrantes que venían a laburar. Cosechaban y a la vez le dejaban listo el terreno a los invernadores (propietarios de ganado y de las tierras) para que los mismos se engorden para la exportación (tenían fuertes lazos con el mercado inglés). Es decir, le daban el terreno para que los chacareros cosechen y a la vez se adueñaban de un porcentaje de la renta del chacarero, que les dejaba el terreno preparado, negocio redondisimo.
Así construyó la riqueza y el peso político el famoso “campo”, motor del naciente estado moderno.[/QUOTE]
Sobre la “Conquista” del “Desierto”
Si, el problema con “Conquista el Desierto” es que, primero, no es acuñado por Julio, sino que la narrativa de la frontera es frondosa, difícil de clasificarse, abarca prácticamente todo el siglo XIX, pero tiene un núcleo de cristalización en la producción de obras escritas entre 1870 y 1930. Muchos de ellos memorias militares, relatos literarios, cuentos de fogón, crónicas periodísticas, semblanzas biográficas, mensajes al Congreso Nacional, partes telegráficos, cartas que se envían jefes de uno y otro bando, capitulaciones, convenios y tratados, que se articulan en gran parte en la Expedición al Río Negro comandada por Julio A. Roca tanto en sus prolegómenos y genealogías, como en sus consecuencias, estertores y codas. De modo que al mismo tiempo que puede verse la centralidad de dicha expedición que es la que acaparó el nombre que la designa (se llama Conquista del Desierto, sobre todo a esa expedición) se la puede leer como un eslabón de una larga cadena de otras expediciones, tratados, campañas, acuerdos, traiciones y manipulaciones. Probablemente pueda considerarse que el o los textos literarios sobre el desierto argentino, ya habían sido escritos en años anteriores. Si se piensa en el impacto que había producido La Cautiva (1838) de Esteban Echeverría en los primeros años del romanticismo rioplatense o en la eficacia de una obra como el Facundo (1845) de Domingo F. Sarmiento, o en el Martín Fierro (1872-1879) de José Hernández así como en Una excursión a los indios ranqueles (1870) de Lucio V. Mansilla puede verse que el motivo del desierto, el malón, la partida, los desertores y la frontera ya eran, en los años ‘70, temas recurrentes de la literatura argentina.
Empecemos por hacer una cronología del suceso.
1810: La Primera Junta ordena expedición a Salinas.
1815: San Martín solicita adhesión de los pehuenches para el ejército.
1820: Los pampas firman el tratado de Miraflores y se unen a la Provincia de Buenos Aires
1820-4: Campaña de Martín Rodriguez, durante la presidencia de Rivadavia, para luchar contra los indios.
1833-34: Juan Manuel de Rosas inicia la Expedición de Pacificación del Indio
1855: Calfucurá en alianza con Urquiza, inicia expedición contra la República de Buenos Aires de Mitre, en la batalla de Sierra Chica comandada por el General Hornos, siendo éste ampliamente derrotado.
1864: En plena Guerra del Paraguay, se inicia otra campaña en el sur de la provincia de Buenos Aires.
1867: Se firma en el Congreso Nacional la ley 215 que dicta unilateralmente llevar la frontera sur a la ribera de los ríos Negro y Neuquén, estableciendo la instrucción de otorgarles a las naciones indígenas todo lo necesario para su existencia fija y pacífica para lo cual mandó darles territorios a convenir
1872: Invasión de Calfucurá con 6000 hombres a la provincia de Buenos Aires. Sarmiento inició la modernización del equipamiento básico del ejército nacional.
1875: A finales de 1875, los indígenas se reorganizaron y reaccionaron contra el avance de la frontera sur de la Argentina. Adolfo Alsina, ministro de Guerra bajo la presidencia de Nicolás Avellaneda, presentó al gobierno un plan que más tarde describió como el plan del Poder ejecutivo es contra el desierto para poblarlo y no contra los indios para destruirlos.
1876: Se forma la zanja de Alsina.
1877: Muerte de Adolfo Alsina, es electo Julio Argentino Roca como ministro de Guerra.
1878: Se financia la campaña mediante ley del Congreso Nacional.
El proceso de conformación subjetiva que implicaba “conquista del desierto” es una construcción literaria, de fantasía sobre lo que pasaba en esas tierras. Sin dudas que también, antropológicamente, servía para limpiar culpas y subsanar conciencias. A lo que voy, no es por defender exclusivamente a Roca de la responsabilidad que implicaba apretar el gatillo, sino que la Campaña del Desierto, responde a una gesta de muchos años y de larga data, sumado a la conflictividad entre los sectores dominantes y oligárquicos. Es decir, después de Rosas, no quedaba ninguno con un pensamiento nacional. Habría que haber pensado más en Rosas y no tanto en sacarlo, porque precisamente como se puede ver en la cronología, Rosas funcionaba de tapón para toda la conflictividad que apareció con su exilio, tanto la guerra contra el indio en forma de genocidio en la patagonia, el chaco y Paraguay. Y por último, pasa como con Menem, se responsabiliza únicamente a Menem de los 90, cuando hubo toda una generación de políticos, empresarios, legisladores, jueces y responsables con poder que lo sostuvieron, lo profundizaron y perfeccionaron para sus intereses, más todos los que no dijeron nada siendo testigos de semejante vejación. Con Roca pasa lo mismo, no es por exonerarlo, sino por poner en relieve la implicancia de todo un sector de la sociedad, fundamentalmente los que tienen poder y compararlo con los procesos anteriores como el rosismo para valorizar las acciones de éste último.
Segundo, si, fueron 14 familias el total de las beneficiadas, y también es correcto que la mayor fue la del traidor Martínez de Hoz que durante las invasiones inglesas, en el Consulado de Belgrano, Martínez de Hoz rápidamente firmara sumisión a la corona británica. Pero no por ella mucho más productiva ni mucho más oportuna. La Patagonia sigue tan improductiva como en 1880. Si me permitiría la pregunta, contrafáctica por supuesto, de qué hubiese pasado si no estuviera en mano de esos tipos, ¿tendría algún otro tipo de uso?
Tercero, en el territorio encontrado por Roca, hay petróleo. Olvidate de Vaca Muerta, de Comodoro Rivadavia y de la mayor explotación hidrocarburífera de la Argentina sin el terrotorio asegurado por Roca. La cuestión de la soberanía nacional era inminente, asegurarse esos dominios ya era cuestión de segundos. Sin duda que, la campaña inclusiva de Rosas hubiese sido un mejor atajo para evitar la guerra, que se pone de manifiesto después de la caída en Caseros. La reaparición de los malones que habían cesado en 1835 y la figura de Cafucurá que pasó de ser un indio jodido, a un federal rosista, a volver al malón después de 1853. De ahí que, continuada la tarea de Rosas, hoy tendríamos una mestización mucho más solidaria como la de los maoríes en Nueva Zelanda. Y nuevamente trae a colación, si Rosas era un tipo tan sanguinario como para evitar lo que Roca tuvo que concretar. Si Rosas fuese realmente sanguinario, Roca hubiese sido una carmelita descalza. Pero creo que fue todo lo contrario.
Cuarto, el reclamo de Sobernía sobre Malvinas. Roca reinstaura, a diferencia de Urquiza, Mitre, Sarmiento y Avellaneda, que se hicieron olímpicamente los pelotudos, la discusión sobre Malvinas. Bernardo de Irigoyen, el canciller encargado de reflotar la cuestión, utiliza todos los documentos de Rosas que le permitieron clarificar los reclamos argentinos y la documentación pertinente a la ocupación argentina de Luis Vernet en las mismas. Muchas cositas fueron quemadas del Archivo Nacional por Bartolito, qué curiosidad. Por otra parte, sin el territorio de la Patagonia, ¿¿¿cómo podés decir que las Malvinas forman parte de la plataforma submarina de tu país si tu país no tiene el territorio costero lindero a esa plataforma submarina???
[QUOTE=melezama;6571848]Y sí. Rosas es otro personaje contradictorio de la historia argentina, como lo es Sarmiento. Hoy en día está de moda reputearlo a Sarmiento por su (RECONOCIDO) odio para con los pueblos originarios y con los gauchos (llegó a decirle a Mitre, por entonces presidente, en una carta “…no trate de economizar sangre de gaucho. Éste es un abono que es preciso hacer útil al país. La sangre es lo único que tienen de seres humanos esos salvajes”), ignorando que fue el primer interesado en educarlos (para la escuela pública fue VITAL el impulso de Sarmiento desde su presidencia) y además, que fue un desarrollista visionario a quien debemos el puntapié inicial a los Ferrocarriles Argentinos.
Son personajes bastante controvertidos.[/QUOTE]
Sarmiento vs Roca, ¿quién hizo más por la educación?
Sarmiento hizo muy poco por la educación en Argentina. Cuando tuvo la oportunidad fue un fracaso. Le debemos la meteorología sin duda, funcional al estudio de la mejor rentabilidad de la tierra productiva. Fundó un par de escuelas, pero estuvo MUY LEJOS de pretender educar al gaucho, porque ellos eran portadores de barbarie, para ello, había que implantar la cultura europea para extripar el campo de la ciudad. Sarmiento buscó educar a los inmigrantes y a los más pobres urbanos.
Adiviná quién hizo los cambios de la gran tranformación en la educación Argentina.
Estuviste lejos: Julio Argentino Roca.
Hay 2 leyes clave: la famosa 1420 y la ley Lainez.
Julio es el presidente con mayor cantidad de escuelas construidas de la historia argentina, solamente superada por Perón.
La educación en su primer mandato
Al iniciar su primera presidencia en 1880, lo hace convencido de que la prioridad en materia educativa debe ponerse en extender la educación primaria a los sectores populares. Dice en su primer mensaje al Congreso: “Hemos extraviado hasta cierto punto el rumbo de la educación de la juventud argentina, fomentando en grande escala, con una preferencia exagerada a la enseñanza superior, las profesiones liberales de que actualmente se siente plétora entre nosotros”.
Consecuente con este objetivo, sanciona la ley Nº 1420 de enseñanza laica y obligatoria, la que sienta las bases de nuestro sistema educativo. Los debates en el Congreso se centran sobre todo en la cuestión religiosa y el ministro de Justicia e Instrucción Pública, Eduardo Wilde, defiende con eficacia los puntos de vista de Roca.
La significación de esta ley ha hecho olvidar el fenomenal salto cuantitativo que tuvo la educación pública popular durante el primer gobierno de Roca. Al asumir, las escuelas públicas llegaban a 1214, mientras que seis años después alcanzaban el número de 1804, con un incremento del 48,6%. Se dio especial prioridad a la formación de maestros -sin los cuales no podía extenderse el sistema educativo- y es así como las escuelas normales que en 1880 eran sólo 10, en 1886 habían llegado a 17, aumentando en 70%. En cuanto a los alumnos, al asumir Roca había 86.927 y al dejar la Presidencia lo educandos llegaban a 180.768, con un incremento del 118%. Pero el salto más espectacular estuvo en la cantidad de docentes: de los 1.915 que había en el año 1880, seis años más tarde éstos llegaban a 5.348, con un incremento del 179,3%. Es así como la cantidad de alumnos por docente pasó de 45,4 en 1880 a 33 en 1886.
En términos cuantitativos, el gran salto de la educación primaria argentina tuvo lugar durante el segundo gobierno de Roca. En un mensaje al Congreso, mientras promediaba su primera administración, planteó la necesidad de dar un sesgo más práctico a la enseñanza. Al referirse a la educación secundaria dijo que era necesario que “la instrucción secundaria no sea la escuela preparatoria para los estudios facultativos exclusivamente, sino el medio de difundir una instrucción capaz de preparar al estudiante para todas las funciones de la vida social del ciudadano”.
Una concepción similar mostró al referirse a la enseñanza superior: “Sería de desear, tal vez, que esos establecimientos (universidades) no fueran tan concurridos, para evitar el aumento ya alarmante de los jóvenes que se dedican a carreras parásitas, cuando tanto necesitamos de inteligencias y brazos productores”.
Consecuente con estas ideas, concreta una serie de iniciativas: se promueve la enseñanza técnica mediante la creación de escuelas de aprendices anexas a los talleres de ferrocarriles del Estado, Central Norte y Andino; se crean diversas escuelas de Artes y Oficios y de Veterinaria y Agronomía; se crea la escuela de Ingenieros de San Juan, orientada a la minería y la escuela de Agricultura en Mendoza con especialización vitivinícola.
También se contratan maestras norteamericanas, dado que el modelo educativo norteamericano -promovido en nuestro país por Sarmiento- era considerado por Roca como el más próximo a nuestras necesidades, por ser el que entonces daba un sesgo más productivo a la enseñanza.
Respecto a la universidad, se dictó la ley que dio marco a sus estatutos y se dotó a la facultad de Medicina del Hospital de Clínicas.
Pero la política educativa de Roca no dejó de lado los valores trascendentes de la nacionalidad. Baste mencionar que durante su primer período de gobierno, por iniciativa del Poder Ejecutivo, el Congreso sancionó leyes para financiar la publicación de las obras completas de Juan B. Alberdi y Domingo F. Sarmiento, la Historia Argentina de Vicente F. López y la Historia de San Martín de Bartolomé Mitre.
En su último mensaje al Congreso, meses antes de terminar el primer período, Roca pudo así decir: “De esta manera digo, pues, con verdad, que la instrucción pública se halla completamente organizada en su legislación y reglamentación, habiéndose dado durante la presente administración la ley de instrucción primaria y su reglamentación, el plan de estudios de los colegios y escuelas normales con los reglamentos de esos establecimientos, y por fin la ley sobre universidades y los estatutos que las rigen”, para luego agregar con legítimo orgullo que “la República Argentina es la más adelantada en materia de educación de las naciones de América del Sud”.
La educación en su segundo mandato
Roca vuelve a la Presidencia doce años después. Así como su esfuerzo principal durante la primera presidencia estuvo dirigido a extender la educación primaria, en la segunda buscó modernizar la enseñanza para darle fines más prácticos y productivos, estableciendo una mayor vinculación entre la educación y el trabajo, como también lo había buscado durante el primer período.
Dice respecto a este punto Armando Braun Menéndez en la Historia de las Presidencias de la Academia Nacional de la Historia: “Roca y su ministro (Magnasco) se hallaron convencidos de que la instrucción pública debía orientarse hacia nuevos horizontes, más técnicos, más prácticos, para evitar la búsqueda en los estudiantes de la estéril vanidad del título. Al anticipar a los legisladores las ideas que el nuevo gobierno se proponía impulsar, les advirtieron que la instrucción general, para ser fecunda, debía, a su juicio, contraerse a ciencia y artes de aplicación, a cosas prácticas, a las lenguas vivas y a conocimientos de utilidad mate- rial e inmediata. En síntesis: menos doctores y latines; en cambio más técnicos”.
A meses de haber asumido la segunda presidencia, en su primer mensaje al Congreso, Roca explicitaba esta política: “Se hace indispensable entrar resueltamente en ese orden de ideas (la enseñanza práctica) y abandonar tradiciones y costumbres cuyos deplorables resultados pueden sentirse y palparse no sólo entre nosotros sino en todas las civilizaciones que se han dejado dominar por ellas. En la esperanza de poder contribuir a esos objetos, solicitaré vuestra colaboración para la fundación de colegios y escuelas de agricultura, y demás industrias de inmediata aplicación”.
En ese mismo mensaje de 1899, destacaba al modelo educativo de los Estados Unidos como el más adecuado a nuestras necesidades: “El gran poder industrial y el inmenso desarrollo agrícola de los Estados Unidos no son la obra de la improvisación o el acaso, sino el resultado de la educación industrial propagada con perseverante ahínco por todos los medios, desde los primeros días de su existencia, siendo en algunos estados precepto constitucional el establecimiento de escuelas de agricultura y debido a ello es que se les ve instruidas con envidiable profusión en todo el vasto territorio de la República.”
Consecuente con esta idea, en 1900 se enviaron los primeros 20 jóvenes becados a los Estados Unidos para estudiar en escuelas industriales y agrícolas, programa que en los años subsiguientes se mantuvo y amplió.
El ministro Magnasco preparó un proyecto de reforma del sistema educativo, que entre otras iniciativas contemplaba transformar la mitad de los colegios nacionales en colegios industriales y agrícolas, buscando así vincular el sistema educativo con el mundo del trabajo.
En 1901, en el mensaje al Congreso en el que anticipó el envío de este proyecto Roca dijo: “En vuestras primeras sesiones os daré cuenta del decreto destinado a reorganizar debidamente la enseñanza secundaria, conforme a sus fines propios y a las exigencias que la economía nacional impone particularmente a nuestra instrucción”.
Para explicitar este concepto agregó: “La vieja educación enciclopédica y siempre doctrinaria va siendo enérgicamente desalojada y sustituida, ante el reclamo unánime de los más notables pensadores, por la enseñanza que calcula la utilidad del valor de sus máquinas. Escuelas y colegios son hoy establecimientos de la más noble industria: la que trata de producir elementos sociales del mayor valor civilizador, mejorándolos gradualmente y habilitándolos así para vencer en la concurrencia del trabajo y de la inteligencia productiva”.
Magnasco defendió con firmeza y elocuencia sus proyectos en el Congreso, pero fue derrotado. Los defensores de la cultura enciclopedista al estilo francés convergieron con intereses de las provincias, las que creían que sustituir un Colegio Nacional por uno de Agricultura o Industria era una suerte de “menoscabo”. Una frase del ministro Magnasco fue interpretada como crítica hacia el general Mitre -en ese momento aliado político de Roca- y terminó frustrando la aprobación del proyecto en Diputados y provocó la renuncia de Magnasco.
Pero la obra de gobierno de Roca en su segunda presidencia no se frustró por este traspié. Creó las escuelas comerciales de Capital, Rosario, Concordia y Bahía Blanca; la Escuela Industrial de la Nación; el Instituto de Agronomía y Veterinaria y diversas escuelas prácticas de Agricultura en combinación con el ministerio del ramo. En el campo universitario, se creó el Instituto del Profesorado de Lenguas Vivas, se estableció la independencia económica de las universidades y se inauguró el nuevo edificio de la Facultad de Medicina.
En términos cuantitativos, el gran salto se dio en los territorios nacionales, que entonces comprendían a un tercio del actual territorio continental. Entre 1900 y 1904, las escuelas de los territorios nacionales pasaron de sólo 13 a 128; los docentes de 32 a 220 y los alumnos de 199 a 6.836, realizándose así un salto educativo espectacular en el área del país menos poblada.
Pero este impulso positivista, no olvidó a la cultura y la historia. Durante este segundo gobierno se inauguró el nuevo local del Museo de Bellas Artes, se ampliaron las instalaciones del Museo Histórico y el Archivo General de la Nación y se instaló la Biblioteca Nacional en la antigua sede de la calle México, confirmándose en su dirección a Paul Groussac, nombrado en el cargo por Roca en 1884, durante su primera presidencia.
Si bien el proyecto formal de reforma educativa con el cual Roca quería corregir su propia obra educativa del primer mandato se frustró en el Congreso, pudo igualmente terminar su segundo mandato con avances indiscutibles. Esto dijo en su último mensaje al Congreso en 1904, meses antes de terminar el segundo período: “Dignos de mencionarse son los movimientos que se operan en todo el país en favor de la enseñanza práctica, encauzada por los métodos activos modernos, que toman, como elemento de educación del carácter, de la inteligencia y del cuerpo, el trabajo en todas su esferas, adaptado a la vida escolar, para dar una preparación integral al hombre y al ciudadano del porvenir”.
Y si todo eso no te convence, te dejo el siguiente videíto de Canal Encuentro.
Y otro sobre la ley Lainez
[QUOTE=Delem9;6573689]Sería bueno conversarlo, pero se me enfría el morfi
Recomiendo mucho el último libro de Galasso, su “Historia Argentina”, porque hay matices interesantes. También en otras obras, pero el viejo es muy piola para exponer argumentos y datos que se suelen dejar a un costado.[/QUOTE]
[QUOTE=Delem9;6574511]No pasa por una defensa. Si uno lo analiza desde puntos de vista como “Roca genocida” o “Roca fundador del Estado moderno” es imposible refutar su figura para bien o mal. Galasso explica con lujo de detalle cada intervención en el tiempo que vivió, y las decisiones que tomó para merecer un título u otro.
Su generación está llena de tipos nefastos, pero no todos apelaron a entregar soberanía o generar un Estado limitado y dependiente. De Saldías en la cultura a Sáenz Peña (Roque) en lo político podemos rescatar a muchos personajes. En gran medida sostenemos la idea de un Estado importante gracias a Roca. El mismo Sarmiento, que no es un tipo agradable en mi humilde opinión, tuvo sus aciertos y arrepentimientos. Es interesante verlo morir en Paraguay, mientras educaba a un chico nativo y aniquilaba a Mitre en cada correspondencia. Lo tomo como un pedido de disculpas, que se manifestó en las acciones finales de su vida.
Poco tiempo atrás escuché a José Burucua en una charla, y él comentó los motivos para catalogar como genocidio a la mal llamada conquista del desierto. Ninguno hace hincapié en Roca, ni en los planes que programó por cuenta propia al acordar o luchar según el caso. Los nativos que habitaban la región eran extremadamente violentos y si no acordaban con el hombre blanco iniciaban enfrentamientos a muerte. Sin ir muy lejos todos tenemos presente la historia del pueblo Mapuche, llegado desde Chile, que aniquiló a gran parte del pueblo Tehuelche. Los sobrevivientes fueron sometidos y perdieron para siempre sus tradiciones. Es muy difícil, tanto ayer como hoy, enfrentarte a alguien que desconoce toda piedad o los derechos del prójimo en una disputa. El contexto nacional y mundial, además, era muy diferente al que se generó luego de las guerras mundiales. La humanidad entendió muchas cosas que ya no tolera, por suerte, entre golpe y golpe.[/QUOTE]
[QUOTE=Sebastiano;6574546]Desde mi humilde punto de vista no se puede decir que Roca fue alguien “bueno” por el exterminio hacia los indígenas, pero es irrefutable que con Roca en 1880 se consolida en nuevo estado moderno. Y si, los nativos eran violentos, así como lo eran los invasores (la diferencia es que ellos contaban con la pólvora). Para el nuevo estado era vital ampliar las fronteras y para eso había que correr a los nativos.
Dentro de ese contexto, como vos decís, estos personajes miraban con muchísimo entusiasmo hacia Europa y en el caso de Sarmiento también hacia EE.UU. Un ejemplo es la Constitución de 1853 hecha por Alberdi, el avance del estado moderno sobre América Latina era inminente, buscaban eliminar los viejos rezagos de la estructura neo-colonial.
Es difícil hacer un juicio de valor hacia estos personajes, porque la cosmovisión era otra en ese momento.
Lo que si se puede decir es que Roca benefició a la elite y concentró esas tierras de la “conquista” en muy pocas manos. Su hijo también hizo el tratado Roca-Runciman en el que cagaban notablemente a Argentina por tener relaciones carnales con Inglaterra. En general el avance del estado moderno en A. Latina va de la mano con estas elites nacionales que buscan insertarse en el mercado capitalista mundial como proveedores de materias primas.[/QUOTE]
[QUOTE=nachocarp7;6573775]Para mi hay cuestiones imposibles de conciliar. Esos tipos entregaron el país. La misma historia que se repitió más adelante. Cuando se ataca la soberania economica y politica, el camino para mi es uno solo: repudio. Y no puedo aceptar medias tintas ni contemplar datos que se dejen a un costado. La entrega sistemática del país por ciertos sectores en la historia de la Argentina es un dato por sí solo que pesa más que cualquier otra cosa.
Ojo, no es en contra del libro eh. Seguramente es interesante. Pero no coincido para nada en defender a esos personajes. De hecho me parece inconcebible.[/QUOTE]
[QUOTE=nachocarp7;6576816]En el mismo siglo, un par de décadas atrás, tenías a entregadores como Rivadavia, y a tipos que intentaron defender la soberanía como Rosas. Entonces ese argumento del contexto, si bien juega su papel, no me convence para nada, porque evidentemente había argumentos para pensar de otra manera. Ya en aquellos tiempos había tipos que pretendían forjar un país que escape a la lógica productora de materia prima para el desarrollo inglés.
En lo esencial, esos personajes atentaron contra el desarrollo de un país industrializado. Los ferrocarriles y la tierra, pilares fundamentales para el desarrollo, todo a servicio de Inglaterra. No hay contexto que lo justifique.
Y esa admiración por lo europeo y desprecio por lo propio fue una constante de toda nuestra historia eh, lamentablemente. No lo reduciría a esa época solamente. Lo podés seguir viendo ahora.[/QUOTE]
[i]“La industria nacional nace apenas, y abandonada a su solas fuerzas sin el apoyo eficaz y permanente del Estado, quedará ahí debilitándose en inútiles ensayos, sin poder competir con los productos de la industria extranjera que inundan nuestros mercados. Valdría más nuestro lino si de las manos del colono pasase a la fábrica para convertir su grano en aceite y su fibra en hilo. ¿Cuánto dinero menos saldría del país en esta sola materia? Podremos sufrir durante los primeros tiempos, porque no hay revolución económica que no produzca ciertas alteraciones. Podremos extrañar la calidad de los artículos, pero irá a aumentar el fondo común, el capital nacional. Es precisamente el capital el que nos hace falta para desarrollar en vasta escala nuestra potencia productora y hacer nuestra independencia política. He pronunciado la palabra independencia y la repito, porque los pueblos que no elaboran y perfeccionan su materia prima para sus consumos ordinarios y necesitan que se las venda todo hecho y perfeccionado de afuera, se hallan sujetos a las conveniencias, complicaciones y eventualidades de los mercados extranjeros. ¿Qué resorte mágico debemos tocar para despertar a los pueblos del interior y hacer surgir las fábricas, los ingenios, las bodegas colosales en todo el país? Tenemos dos recursos: ferrocarriles fáciles y baratos para que las provincias puedan intercambiar recíprocamente sus productos y protección franca, valiente y constante de la industria nacional”.
Julio Argentino Roca
citado por Raúl Scalabrini Ortíz en “Historia de los ferrocarriles argentinos”
[/i]
Como bien dice Delem, recurramos al libro de un zurdito como Galasso para ver que nos dice al respecto. En el capítulo XXI titulado “Roca al Poder”, en la página 619 con el subtítulo de “La frustración del proyecto”, argumenta lo siguiente:
“Cuando se habla del proyecto del 80, al igual que en la mayor parte de las referencias a “la generación del 80”, se cometen equivocaciones provenientes de la falta de rigor en la definición de sus protagonistas, así como de su programa. Se dice generalmente que “triunfó el proyecto del 80” y que este consistiría en “la Gran Argentina, productora de carnes y cereales, receptora de inmigrantes, Europa en América”. Se trataría entonces del proyecto de la oligarquía porteña (hacendados y comerciantes bonaerenses) que llevarían a la Argentina a la condición de semicolonia británica, altamente exitoso para la clase dominante, pero no para el resto del país. Desde ese punto de vista, nada tienen que ver Roca, Pellegrini, Wilde, José y Rafael Hernández, Bernardo de Irigoyen y tantos otros que manejaron el país entre 1880 y 1886, pues precisamente su proyecto, estaba centrado en evitar esa especialización de economía complementaria, así como no caer en la subordinación financiera del Imperio Británico.
Su proyecto, en definitiva, el desarrollo de un capitalismo nacional autónomo, NO PUDO CONCRETARSE y ESE FRACASO consolidó la Argentina agroexportadora, semicolonia de los ingleses. NO ERA ESE el proyecto del PAN, sino otro, TOTALMENTE ANTAGONICO, pero había llegado demasiado tarde, pues el otro proyecto había sentado sus bases inmediatamente después de Pavón (Mitre). Y de ahí la frustración”.
Es difícil de creer que el roquismo haya sido el primer proyecto de desarrollo industrial del país, pero lo fue. De hecho las primeras y más grandes industrias se crearon en sus gobierno, por ejemplo, Alpargatas, Bagley, y la más grande de Argentina, Liebig con 5000 trabajadores. Sin duda eran de capitales extranjeros y muchos de sus directores eran extranjeros, pero eso también implicó la contratación de profesionales argentinos para muchas de las tareas y la necesidad de una clase media más educada que en otros tiempos, que aprendieron el know how dentro de las fábricas de capitales extranjeros y fueron impulsados por las políticas del Estado Nacional mediante la contracción de deuda externa, pero que el saldo positivo de la producción agro exportadora y de la naciente industria, permitó devolver los préstamos, e inclusive pagar los contraídos por Urquiza y Mitre. De a poco se fue generando una burguesía nacional que fue contratando trabajadores que inclusive después serán los anarquistas y socialistas que pujarán por mejores condiciones sociales. Roca estuvo muy cerca de expropiar trenes británicos pero se vio frustrado por Estanislao Zeballos que a último momento tranzó con los británicos. No obstante, el gobierno roquista construyó ferrocarriles y hacia 1886 las líneas férreas administradas por el Estado, de calidad óptima totalizaba 2800km mientras que las británicas eran de 3029km. Rafael Hernández, tío de José e intendente del Partido de Belgrano (hoy barrio) decía: “La idea del proteccionista hace camino, acabamos de escuchar la palabra del presidente en la Exposición en Mendoza, proclamando la necesidad de proteger directa e indirectamente a nuestras industrias, de emplear nuestro dinero en la explotación de las materias primas y sus transformaciones industriales. Y la provincia de Buenos Aires le contesta preparando su exposición en La Plata”.
Otro aspecto desconocido es que la Sociedad Rural Argentina estaba en contra el gobierno de Roca. Julio Argentino Roca no asistió a la inauguración ni clausura de 1881, y en 1882 la SRA criticó al gobierno provincial por el incremento de los impuestos rurales, en 1883, una nueva alza de impuestos encendió otra ronda de críticas se quejaban de que la autoridad no es muy respetuosa que digamos de los derechos de los ciudadanos. La elección a presidente de la SRA de Enrique Sundblad (1880-82) y 1884-6) y Leonardo Pereyra (1882-4) ofrece testimonios de la crítica actitud de los ruralistas hacia el gobierno. Ambos eran hombres de conocidos antecedentes opositores: Sundblad había sido un fiel seguidor del Partido Liberal de Mitre; y Pereyra, entonces también mitrista, se volvería algunos años más tarde un defensor entusiasta de la UCR. Lo mismo puede decirse de José María Jurado, quien alcanzó la presidencia en 1886. A comienzos del 86, Jurado dió un discurso y argumentó abiertamente que el gobierno se hallaba divorciado de la opinión pública, y que se fundaba sobre la violencia y la imposición. Con la mentira, con la falsía, pérdida de confianza y la fe mutuas ¿qué queda al fin? LAs insidias, la pillería ruín, despreciable en cualquier otro acto de vida, el lodo arrojado a manos llenas, la cachiporra, el puñal del compadrito, la fuerza bruta. Para Jurado, ello había traído problemas adicionales, pues la irresponsabilidad del gobierno, incapaz de evitar “situaciones vergonzosas y denigrantes”, había dañado la reputación internacional del país, en especial entre los inversores extranjeros, había contraído el crédito externo.
Cualquier coincidencia con la SRA contra Alfonsín o la actualidad, no es mera casualidad.
Con la muerte de Roca, muere el roquismo y es el fin del PAN, todo lo que vino después fue el desguase del Estado, en su forma mitrista. Lo más asemejable y saludable para el país fue Alvear. Ni el hijo Julio Argentino Roca Jr fue lo mismo que el padre y mucho peor con el pacto que hizo. Es como pretender que Raul Ricardo y Ricardo sean lo mismo, por suerte son iguales, sino lo unico que compartirían son los calzoncillos y trajes.
[QUOTE=Riversito75;6574601]Hay que entender los contextos, también. Es un poco taxativo quizás hablar de sentimiento patriótico y vendepatrias en una época en la que el país apenas pasaba el medio siglo, estaba poco poblado y desarrollado y había un lógico desprecio por todo lo que fuera hispano ante la decadencia del ex colonizador (visto como retrogrado) y cierta admiración, también lógica en aquel momento, por las corrientes filosóficas y el poderío económico anglo-francés.
Yo lo entiendo perfectamente que hayan soñado con una “Europa” en sudamerica, al estilo de lo que termino siendo Canadá o Australia en Oceanía, tiempo después.[/QUOTE]
[QUOTE=Riversito75;6580984]Pero nacho… que era en ese momento “lo propio” ?
Rosas te parece un ejemplo de escape a la logica productora de materia prima ? No coincido para nada. Me parece mas el ejemplo del modelo de un feudo como lo que terminaron siendo muchas provincias hasta bien entrado el siglo XX.
Y a Rivadavia lo podes acusar de muchas cosas, pero de ultima lo que estaba “entregando” era una ex colonia española, casi sin historia, que no era representativa de una raza ni una cultura (aun). Eran simplemente tipos cuyos ancestros cercanos habian hecho la loca travesia de venirse hasta aca, escapandose del yugo monarquico, y estaban descifrando cual era la que mas les convenia. Aca no estamos hablando de jefes mapuches o charruas que traicionaron a su gente para que se instale el colono, como pudo haber pasado en Africa o Asia. Aca eran todos colonos en una tierra nueva y casi inexplorada. No es que habia admiracion por lo europeo, ERAN basicamente europeos (o España en ese momento quedaba en otro continente?) como aun hoy lo es etnicamente un enorme porcentaje del pais, a diferencia de lo que ocurre en otros paises de latinoamerica, y en todo caso, tenia todo el sentido del mundo tomar por referencia a los paises que estaban ganando la pulseada global, tanto en lo economico como en lo politico y cultural. La revolucion industrial todavia estaba en pañales en la epoca de Rivadavia de todas formas.
Y mas alla de que si, fue un negocio bastante espurio en cuanto a las condiciones que se firmaron, era logico que los ferrocarriles y demas desarrollos industriales fueran aportados por las potencias europeas de ese momento. O quien te crees que construyo los primeros ferrocarriles en Australia, NZ y Canada ? Paises que se independizaron muchisimo despes que nosotros. Hicieron mal en “admirar” a europa en vez de respetar “lo propio”, lease su escencia oceanica (?) o esquimal ?[/QUOTE]
Esta es para vos, te va a enamorar:
“Mi opinión es que el comercio sabe mejor que el gobierno lo que a él le conviene; la verdadera política consiste, pues en dejarle la más amplia libertad. El estado debe limitarse a establecer las vías de comunicación y a levantar bien alto el crédito público en el exterior.”
Julio Argentino Roca
Roca no miraba ni admiraba lo extranjero, Roca es la derecha Nacional. Hoy, lamentablemente, la derecha son tipos como Macri y boluditos como Massa, ambos impresentables, sin discurso y mucho menos la épica de los grandes hombres del PAN como Roca, Carlos Pellegrini, Joaquín V. González. Inclusive ellos tuvieron grandes críticas y se propusieron los cambios necesarios para alterarlas, como el famoso y exquisito documento de Bialet Massé “El Estado de las clases obreras en Argentina” que fue lapidario. Roca agarró el guante y aceptó el desafío de transformar ese problema con las medidas y la perspectiva de la época. Se publicó en 1904 con el título Informe sobre el Estado de las Clases Obreras en el Interior de la República. Esta monumental obra, ordenada y financiada por el Estado, fue el prólogo de una ley de trabajo. El resultado fue un moderno tratado que contemplaba la jornada laboral de ocho horas, la supresión del trabajo nocturno, el sábado inglés, la prohibición del trabajo de menores de catorce años, un salario mínimo para trabajadores del Estado, preaviso, licencia con goce de sueldos, reconocimiento de las organizaciones obreras y -quizá lo más importante- tribunales de trabajo. El proyecto fue rechazado en Senadores y rápidamente olvidado. El país y sus hijos más postergados debieron esperar hasta la llegada de Perón para terminar con estas injusticias.Sin embargo, pudo dar continuidad a leyes que dieron origen a otras tantas instituciones imprescindibles en toda Nación moderna y que también debemos a Roca son: la Ley 1804 de creación del Banco Hipotecario Nacional, la Ley 1257 de creación del puerto de Buenos Aires -Puerto Madero- y la Ley 4349 que creó la Caja de Jubilaciones y Pensiones de los agentes de la administración pública, primera ley de previsión social, entre otras.
Es lamentable que en Argentina no haya una derecha nacional responsable como lo fue el roquismo. Creo que la implementación del mitrismo y sus continuadores fueron funestos para el país. De existir un roquismo hoy en día, tendríamos un país con alternancias como EEUU, entre demócratas y republicanos, que no implicaría como lo vemos en la historia Argentina, grandes retrocesos, sino que, con distintas miradas, harían por impulsar el país a la grandeza, sin duda coincido que se parecería mucho más a Australia y Nueva Zelanda, que de hecho lo fue, porque Swift Argentina financiaba las pérdidas de Canadá, AUS y NZL y todavía sobraba.
Coincido con que la derecha argentina desde hace muchisimo tiempo es impresentable. Ahora, eso de que Swift Argentina financiaba las perdidas (?) de Aus/NZ/Can… mas datos, por favor.
El diario socialista La Vanguardia, reprodujo la discusión en el Senado: “El senador De la Torre ha demostrado en su informe que el comercio de carnes enfriadas está monopolizado por un trust de frigoríficos extranjeros que operan en el país con la protección oficial del gobierno inglés y la complaciente tolerancia del gobierno argentino. Es un trust que gana sumas fantásticas. En el caso del frigorífico Swift, se sabe que con un capital de 45 millones de pesos ha ganado en cinco años 91 millones de pesos. Es un trust que defrauda a la Dirección de Impuesto a los Réditos, pues en el caso del frigorífico nombrado, la compañía Swift Internacional ha compensado las pérdidas de sus filiales de Australia, Nueva Zelanda y Río Grande, con las ganancias obtenidas por la filial argentina, sustrayéndose esas sumas de las ganancias efectivas y reduciendo el pago del impuesto a los réditos; todo ello con la complacencia del Ministerio de Hacienda. […] Pero donde el senador De la Torre hirió de muerte a uno de los ministros acusados, es al referirse a los ganaderos tratados con guante blanco por los frigoríficos. De las palabras del legislador santafesino se desprende que el ministro de Agricultura y sus parientes reciben de parte de los frigoríficos un trato excepcional. Sus novillos son clasificados para un destino que no tienen en la realidad y que es favorable para los vendedores; mientras en casi todas las demás compras los frigoríficos clasifican la hacienda dándole un destino también distinto al que luego tienen, pero esta vez desfavorable para el vendedor. […] El senador santafecino fue, en esta parte de su exposición, tan preciso y categórico, y dio tal cantidad de datos, fechas y precios, que creemos que al ministro de Agricultura no le queda otra solución que la renuncia. Por mucho menos han caído gabinetes íntegros en países donde existe un concepto cabal de ética política y administrativa."
Discurso de Lisandro de la Torre en la cámara del Senado. 21 de junio 1935.
Alem, de la Torre y Nisman, un solo corazón.
Bueno, pero, primero, la conversacion que “hurtaste” del otro thread que yo venia llevando con el amigo zurdoide nachocarp7, hablaba de otra epoca, como minimo 100 años antes. Segundo, ahi estamos hablando de las perdidas de la empresa Swift, no de Australia y Cia. en aquellos territorios.
Yo simplemente no acuso de vendepatria a gente a la que hace 200 años, siendo colona de una monarquia europea en decadencia, se le ocurrio armar una patria para, entre otras cosas, justamente, comerciar con otras potencias de ese continente.
Hablar de derecha, izquierda, industrializacion, progresismo, conservadurismo, europeismo, cipayismo, etc. u opinar bajo esos preceptos sobre la realidad de hace 200 años en el rio de la plata me parece erróneo
PD: Nisman, dejate de joder, bolu…
Lo interpretaste mal, lo que yo dije justamente tenía que ver con las filiales de la empresa Swift. La comparación estaba en el grado de desarrollo que se podría haber obtenido de continuar con esa forma de pensar y de utilizar al Estado a diferencia de los gobiernos previos y los gobiernos subsiguientes. Teniendo en cuenta: el ínfimo grado de desarrollo tecnológico de Australia y Argentina hasta 1930, el tipo de exportaciones y forma de capitalización de ambos países, la administración neocolonial y la dependencia de los mercados británicos.
De paso dejo este material interesante de una comparación entre Argentina y Australia: http://www.cei.gov.ar/userfiles/CEI-REVISTA-6-NES.pdf
Estoy de acuerdo en que son confusos y complejos esas categorías de análisis, fundamentalmente porque son europeas y acá la realidad es muy distinta, además de que siempre que se quiere implementar sin tener en cuenta el contexto en el cual se lleva a cabo. Lo que sí es real y es el punto de inflexión que quiero marcar, es que había, dentro del sector dominante de la época, una concepción distinta. Mientras el “mitrismo” era puramente terrateniente, apareció el “roquismo” con un planteo totalmente distinto que le aportó a la Historia Argentina, una dosis sustancial de inversión nacional y de fortalecimiento estatal que son claves para el desarrollo productivo.
PS: Los tres son doctores corchazos.
Que lo parió, Lucho conducción! :mrgreen:
Así vale la pena entrar al foro un sábado a la tarde. Gran sorpresa.
Seeee… pero comparar a Lisandro con Manis… nah !
La confusion se dio porque en tu primer post me pareció que decias que la empresa Swift argentina bancaba a estados/colonias inglesas deficitarias.
En lo demas estoy de acuerdo
Muy bueno lo del consumidor de proteínas en polvo.
Siempre se aprende con [MENTION=56287]Luchom9[/MENTION], el 9 titular del equipo
Si estamos hablando de fútbol poneme en el medio, de 5, atacar sin defender no está en mis entrañas:mrgreen:
Pellegrini fue tambien el que dijo que es necesario que este pais produzca algo mas que pasto no?
---------- Mensaje unificado a las 05:36 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 05:28 ----------
Yo tengo entendido que si bien Roca tuvo esos ideales industrializadores, en la practica solo lo realizo en un par de industrias especificas. No fue un intento en el entero de la economia Argentina.
Un profesor mio tiene como teoria la dicotomia entre librecambio y proteccionismo. Dice que todas las naciones de bien sanjaron ese dilema en favor del proteccionismo (Hamilton en EEUU, Zollverein, y Liszt en Alemania, etc.). Pero es reconocido por la CEPAL al dia de hoy, que el proceso de sustitucion de importaciones no podia llevar los mismos resultados a Latinoamerica. Hablaron de esto en algun lado?
---------- Mensaje unificado a las 05:38 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 05:36 ----------
COn respecto al tema, si San Martin le entrego su Corvo, a mi ya me da cosa pararme a pensar.
“No soy de partido alguno sino de la Patria”
30 de marzo: Hace 223 años nacía uno de los más grandes hijos de nuestra Argentina: Juan Manuel de Rosas.
Extractos de la “Carta de Hacienda de Figueroa” (leerla completa), donde Rosas nos deja su profundo pensamiento sobre la Organización y Constitución Nacional:
“…En este lastimoso estado es preciso crearlo todo de nuevo, trabajando primero en pequeño; y por fracciones para entablar después un sistema general que lo abrace todo. Obsérvese que una República Federativa es lo más quimérico y desastroso que pueda imaginarse, toda vez que no se componga de Estados bien organizados en sí mismos (…); de consiguiente si dentro de cada Estado en particular, no hay elementos de poder para mantener el orden respectivo, la creación de un Gobierno general representativo no sirve más que para poner en agitación a toda la República a cada desorden parcial que suceda, y hacer que el incendio de cualquier Estado se derrame por todos los demás. Así es que la República de Norte América no ha admitido en la confederación los nuevos pueblos y provincias que se han formado después de su independencia, sino cuando se han puesto en estado de regirse por sí solos, y entre tanto los ha mantenido sin representación en clase de Estados; considerándolos como adyacencias de la República.”
“El Congreso general debe ser convencional, y no deliberante, debe ser para estipular las bases de la Unión Federal, y no para resolverlas por votación.”
“El Gobierno general en una República Federativa no une los pueblos federados, los representa unidos: no es para unirlos, es para representarlos en unión ante las demás naciones: (…) En una palabra, la unión y tranquilidad crea el Gobierno general, la desunión lo destruye; él es la consecuencia, el efecto de la unión, no es la causa,”
---------- Mensaje unificado a las 16:38 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 16:23 ----------
[quote=“leo_ez, post:197, topic:88393”]
Pellegrini fue tambien el que dijo que es necesario que este pais produzca algo mas que pasto no?
---------- Mensaje unificado a las 05:36 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 05:28 ----------
Yo tengo entendido que si bien Roca tuvo esos ideales industrializadores, en la practica solo lo realizo en un par de industrias especificas. No fue un intento en el entero de la economia Argentina.
Un profesor mio tiene como teoria la dicotomia entre librecambio y proteccionismo. Dice que todas las naciones de bien sanjaron ese dilema en favor del proteccionismo (Hamilton en EEUU, Zollverein, y Liszt en Alemania, etc.). Pero es reconocido por la CEPAL al dia de hoy, que el proceso de sustitucion de importaciones no podia llevar los mismos resultados a Latinoamerica. Hablaron de esto en algun lado?
---------- Mensaje unificado a las 05:38 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 05:36 ----------
COn respecto al tema, si San Martin le entrego su Corvo, a mi ya me da cosa pararme a pensar
[/QUOTE]No existían muchas industrias en el momento de Roca, la electricidad todavía no estaba en su apogeo, entonces lo que buscaba Roca era valor agregado sobre las materias primas. No obstante, a diferencia de Sarmiento que creía que lo único importante era la educación de valores de la primaria y que no hacía falta el secundario, Roca tiene el crecimiento más grande de escuelas primarias, secundarias, alumnos y docentes de toda la historia superado únicamente por el peronismo. Qué quiere decir eso? El trabajador educado puede aprender más rápido técnicas que no están explotadas en el país y así diversificar la producción.
Ese texto no te lo escribe un versero como Sarmiento. Es notable la diferencia entre un hombre de acción y un hablador.
Sobre lo otro, Leo, es posible, estás hablando de exponentes del siglo XIX y ahora estamos en otro momento histórico. El proteccionismo de producir todo en el país puede no ser viable en Argentina como lo fue en la época del peronismo. Ese era EL momento histórico para hacerlo. Hoy en día creería que la producción debe ser compartida por todo el continente, con especificidades, pero con una regulación común de manera cooperativa. Con el ejemplo de los últimos 40 años, capaz esa cooperación también es inviable.
Con el ejemplo de los últimos 40 años y de la UE, capaz esa cooperación también es inviable.