Poco más de nueve meses después del fatídico 26 de junio, Mariano Pavone sigue con el mismo dolor. “Quisiera volver el tiempo atrás para patear el penal de nuevo”, le contó a Olé. Y, disparó: “Yo quería seguir y los dirigentes no me quisieron”.
En aquel penal atajado por Juan Carlos Olave, en el partido de vuelta de la promoción, se terminó el vínculo con Mariano Pavone. Ni siquiera el gol convertido un rato antes pudo frenar el hostigamiento hacia su persona. Tiempo después, explicó: “El hincha no estaba enojado conmigo por haber errado el penal, sino por el hecho de que no siguiera porque pensaba que no quise jugar en la B. Y eso me revienta, ya que eso no es verdad”.
Las versiones fueron muchas. Lo económico picó en punta para su partida y el delantero de Lanús da su versión. “Ni siquiera hubo una reunión. Si no arreglamos en lo económico estaba en todo su derecho. Pero ni siquiera nos reunimos… Aunque fuese me hubieran ofrecido dos pesos, por compromiso”, disparó.
Y, concluyó: “Cuando llegué, sabía con la situación que me iba a encontrar: el tema de los promedios, jugadores que hacía un montón de tiempo que no cobraban. Pero no me importó, fui porque vestir la camiseta de River era cumplir un sueño. El tema era poner la cara, demostrar que no me escondí”.
[b]“Revancha del descenso no voy a tener nunca. El tema era poner la cara, demostrar que no me escondí. Pero si los dirigentes, a pesar de tener el aval del técnico, no te quieren, tampoco podés hacer maravillas, ¿no?”
“No sé qué pensar. Porque hubo cosas de las que después me enteré. Como aquella vez que se dijo que no jugamos porque Caruso, Maidana y yo habíamos ido a pedir por la deuda, y era todo mentira. Imaginate: yo cobré los dos primeros meses y después no cobré más. ¿Voy a esperar a que falten tres días, cuando River se juega el partido más importante de la historia, para ir a reclamar una deuda? Pero sale eso justo cuando nos sacan del equipo, y no era verdad. Y después me enteré de que fue una excusa para sacarme.”
“Después también salió el tema de mi señora, que se dijo que Passarella la había piropeado, algo que tampoco fue cierto. Y al fin de semana siguiente tampoco jugué. Cada vez que salía algo, no jugaba.”
“Passarella me decepcionó. Encima, antes de esta temporada, yo había hablado con Almeyda tres veces, ya tenía su visto bueno pero nunca me llamaron. No se portaron bien, deberían haberle dado una explicación al hincha y no decir por atrás que no se arregló en lo económico.”
“Me gustaría tener otra posibilidad. Pero hoy River tiene buenos delanteros, y yo estoy en Lanús que me abrió la puerta en un momento difícil. Además, con Passarella de presidente me parece difícil.”
“Fue muy duro para todos. Sabíamos que era algo difícil de asimilar y que íbamos a quedar todos marcados. Me apoyé en la familia, mis amigos. No sé si para pasar el momento, porque eso nunca lo vamos a superar, pero sí para darme cuenta de que mi carrera seguía.”
“El equipo siempre lo armó Juan (López), y Passarella nunca se metió ni vino a dar una charla técnica. Sin dudas lo de Jota Jota fue injusto. Con él hicimos una buena temporada. Es más, creo que si no hubiésemos tenido la presión por el promedio, habríamos hecho muchos más puntos.”
“Todos tenemos parte de culpa. Hay que analizar desde ahí a tres o más años para atrás por un tema dirigencial. Son un montón de cosas. River, siendo lo grande que es y con la plata que le ingresó por ventas de jugadores, debería tener una concentración y un campo de entrenamientos lujosos; en el Monumental los vestuarios 10 puntos, las butacas como en el estadio Bernabéu… Pero en infraestructura no hicieron nada.”[/b]