De Infobae, Gustavo Yarroch
Puede jugar en los cuatro puestos de la defensa. Con apenas 24 años tiene oficio y roce internacional. Cuenta con mucha capacidad para el juego aéreo. Básicamente por esas tres razones, Marcelo Gallardo les pidió a Rodolfo D’Onofrio y a Enzo Francescoli que hagan el mayor esfuerzo posible por incorporar a Paulo Díaz, el polifuncional chileno que podría convertirse en el único refuerzo de River en este mercado de pases.
Al menos hasta hoy, esa posibilidad no resulta sencilla. En primer lugar, porque River recién realizó la primera oferta formal en los últimos días: tuvo que esperar que se concretara la venta a Independiente del defensor Alex Barboza (3.000.000 de dólares por el 82,5% de su pase) para contar con parte del dinero para buscar al chileno. Si la ida de Barboza no se concretaba, a River le hubiera resultado poco menos que imposible salir al mercado.
El hecho de contar con un plantel que no se desarmó y la necesidad de achicar sus gastos para equilibrar los números de su tesorería harán que el actual mercado se parezca mucho al de mediados del año pasado, cuando fue el único equipo de la Superliga que no sumó ninguna cara nueva y así y todo en diciembre terminó celebrando la obtención de la Copa Libertadores ante Boca en el Santiago Bernabéu. En el mejor de los casos, ahora solo incorporará a Paulo Díaz.
River ya le hizo una oferta a Al Ahli de poco más de 3.000.000 de dólares y ese monto fue rechazado por el club árabe donde juega Díaz. Las autoridades de Al Ahli pretenden unos 4.000.000 de dólares “limpios” por el 80 por ciento del pase del ex San Lorenzo y en River ya saben que no les quedará otra que realizar una oferta más importante.
No es el único motivo por el que para River resulta compleja la llegada de Díaz. El nuevo director técnico de Al Ahli, el croata Branko Ivankovic, les dijo a las autoridades del club que quiere seguir contando con Díaz porque lo considera uno de los futbolistas más importantes del plantel. Sin embargo, el chileno no quiere saber nada con sumarse a la pretemporada que su equipo realiza en Austria y por ahora pasa unos días de descanso en su país.
A su manera, Díaz presiona a la distancia para que se concrete su pase a River, al punto de que le pidió a su padre, Italo, quien suele estar muy al tanto de todo lo que ocurre con su carrera, que ni siquiera le diga el nombre del club inglés que también pretende llevarse a su hijo.
Es la segunda vez que el “Muñeco” pide por el futbolista del seleccionado chileno, a quien River no pudo sumar a principios de año por razones económicas. En las oficinas del Monumental se preparan para formalizar una nueva oferta y esperan que esta vez sí les alcance para conseguir a este Díaz que para Gallardo está lejos de ser uno más de la guía telefónica.