¿No hay edad para el amor? Ella tiene 43, él 16 y ya tienen una hija.
AUSTRIA.- Lo que comenzó como un escándalo con denuncia judicial incluida, ahora es una historia de amor que algunos celebran y otros rechazan.
Renata, de 43 años y Ervin, de 16, son pareja hace tres años, viven juntos y tienen una hija. De más decir que el romance no sólo provocó rechazo en sus comienzos, sino que también le costó una denuncia penal a la mujer, que fue condenada a 22 meses de cárcel.
Aunque la relación todavía provoca reacciones encontradas, la pareja decidió casarse simbólicamente hace dos meses, dado que la mujer espera un hijo de Ervin. Además, se mudaron juntos.
“Nuestra vida matrimonial es bastante normal” asegura la mujer a un medio local. “Ervin se levanta a las 6 de la mañana, se hace el desayuno y se va en tren a la escuela. Yo me quedo en la casa, cocino y cuido a nuestra pequeña hija”, contó.
Ervin por su parte, se refirió a la relación que tiene con las otras hijas de su actual mujer. “Son como amigas para mi, y también nuestras niñeras”, bromeó sobre sus “hijas postizas”, de 16 y 21 años.
Finalmente, hablaron de los 27 años que los separan. “Nos amamos de verdad, la edad no es un tema”, concluyó la mujer. (Terra.com.ar)
¿No hay edad para el amor? Ella tiene 43, él 16 y ya tienen una hija.
AUSTRIA.- Lo que comenzó como un escándalo con denuncia judicial incluida, ahora es una historia de amor que algunos celebran y otros rechazan.
Renata, de 43 años y Ervin, de 16, son pareja hace tres años, viven juntos y tienen una hija. De más decir que el romance no sólo provocó rechazo en sus comienzos, sino que también le costó una denuncia penal a la mujer, que fue condenada a 22 meses de cárcel.
Aunque la relación todavía provoca reacciones encontradas, la pareja decidió casarse simbólicamente hace dos meses, dado que la mujer espera un hijo de Ervin. Además, se mudaron juntos.
“Nuestra vida matrimonial es bastante normal” asegura la mujer a un medio local. “Ervin se levanta a las 6 de la mañana, se hace el desayuno y se va en tren a la escuela. Yo me quedo en la casa, cocino y cuido a nuestra pequeña hija”, contó.
Ervin por su parte, se refirió a la relación que tiene con las otras hijas de su actual mujer. “Son como amigas para mi, y también nuestras niñeras”, bromeó sobre sus “hijas postizas”, de 16 y 21 años.
Finalmente, hablaron de los 27 años que los separan. “Nos amamos de verdad, la edad no es un tema”, concluyó la mujer. (Terra.com.ar)
El sueño del pibe, el que a los 16 no soño con estar con una cuarentona no tuvo infancia, encima le clavo un hijo y la boluda ahora tiene que bancar al padre jajaja las cosas se dan vuelta!!