No tenes los jugadores, que si, seran ofensivos, pero son livianitos para recuperar.
Borja: es una babosa.
Colidio/Solari: pueden cubrir algun espacio pero solo si tienen respaldo.
Echeverri: en su vida intento robar una pelota.
Nacho: hace lo que puede pero ya no le da.
Aliendro: se mueve en su quintita y poco mas.
Villagra: le esta costando.
De mitad de cancha para adelante no hay gente con capacidad de presión, y para colmo no se ve trabajo de bloque.
Coincido, pero me parece que Demichelis no tiene intenciones de presionar arriba, a él le gusta el fulbito. En el caso del partido de ayer, el desarrollo ideal era ganar 1-0, boludear con la pelotita hasta que termine el partido y tal vez pegar alguna contra para liquidarlo.
Es más, te digo que el segundo tiempo con Nacional, hizo algo parecido, empezó a boludear con la pelota y dormir el partido con toques iintrascendentes. Es como que naturalmente es la postura del equipo, sacamos ventaja y no se juega más.
Encima obviamente que este cheto de mierda iba a tener un equipo totalmente cagon, como te va a convencer de ir al frente y llevarte puesto al rival tremendo tilingo de mierda que no sabe ni lo que es una calle. Este River chetito a nivel equipo, club e hinchas esta creando una identidad de putitos que les da miedo putear a alguien. Hace unos años sacabamos chapa por cagarlos a patadas a los bosteros. Un desastre.
En 2018 estaban Armani que era superior a Barovero. Maidana, Montiel, Ponzio, Enzo Perez, Palacios. Un Pity Martinez muy superior al de 2015, Quintero, Pratto, Scocco, etc.
En 2018 había defensa sólida, y mucho mejor ataque.
En 2015 estaba Barovero que esta a la par de Armani 2018, la defensa era muy superior, el medio con Ponzio, Carlos Sanchez, Rojas y Pisculichi, tambien era superior al 2018, 2019 tenia mas tiki tiki con Palacios pero quedo demostrado en la final que para la copa no sirve eso, es preferible garantizar solidez, y arriba en 2015 un tal Alario, el mejor 9 desde Crespo hasta aca. Pelo y barba
Recontra superior. Armani en 2018 era “ganapartidos”, atajaba pelotas imposibles como un mano a mano a Benedetto, o uno a Everton de Gremio, Barovero no lo fue tanto en esa copa.