Acaban de informar en Radio La Red que Matías Almeyda habría arreglado su incorporación a River por 6 meses, sin goce de sueldo.
Gorosito dio el OK debido a la lesión de Ahumada.
Ojalá se confirme, y podamos disfrutar al “Pelado” dentro de una cancha nuevamente.
[LEFT]Edit: Dejo la nota que acaba de salir publicada en el Diario Olé.[/LEFT]
“Tenía muchas ganas”
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Regresa el Pelado. Sí, sí. ¿Quién viene, Gorosito? Sorpresa total, Matías Almeyda está en Núñez firmando su contrato y se sumará al equipo a los 35 años. Y pensar que venía jugando con los veteranos en el torneo del Super 8…
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La lesión de Oscar Ahumada en el tobillo puede demorarse más de la cuenta y hay rumores de que se puede tornar crónica. Y sorpresivametne una de las alternativas parece ser un viejo histórico del River. Matías Almeyda ya está en Núñez para firmar su contrato porque tiene todo acordado para sumarse al club de los viejitos piolas y si aprueba la revisión médica podría integrar el trío junto a Marcelo Gallardo y Ariel Ortega.
Hasta hace una semana estaba jugando el torneo de Super 8 y allí fue donde tiró sus primeros centros. “¿Sos el cinco que necesita Pipo Gorosito para raspar?”, le preguntaron. Y el Pelado no dudó: “A River voy corriendo”. Y se le va a dar porque tendrá la chance de reeditar sus mejores momentos futbolísticos. Está grande y seguramente no será fácil la puesta a punto y la recuperación del ritmo de competencia, pero en el físico no se nota.
El Pelado se inició como suplente de Leo Astrada y su primera alegría fue el gol que le metió a la Universidad de Chile, que le sirvió a River para llegar a la final de la Copa Libertadores que ganaría en 1996, de hecho su último partido con la camiseta millonaria fue el 26 de junio de 1996, cuando River venció al América de Cali en la final. De River pasó al Sevilla y de allí se mudó a Italia, donde jugó para la Lazio, el Parma y el Inter. Con la Selección jugó los Juegos Olímpicos de Atlanta y los Mundiales de Francia 98 y Corea - Japón 2002. También jugó la Libertadores para Quilmes y la última vez que participó oficialmente ese torneo fue el 11 de mayo del 2005 ante la Universidad de Chile.
Almeyda, con 35 años, no se resignaba a ser un ex jugador, es por eso que aceptó la invitación del Beto Acosta y estuvo jugando en Fénix, en la Primera C. Su regreso a las canchas no fue el deseado, porque terminó viendo la tarjeta roja por raspar más de la cuenta. También probó suerte en el showbol, cuando Maradona era el imán y terminó aceptando la propuesta de Fútbol Senior, con la camiseta de River.
El año pasado también estuvo cerca de regresar, le hicieron la revisión médica y él mismo decidió bajarse por temas personales. Se alejó, se dedicó a su tambo en Azul pero nunca pudo sacarse la pelota de la cabeza y ahora parece que la vuelta es cosa seria. “Esta tarde se hace la revisión médica”, confirmó la dirigencia de River. “Tenía muchas ganas de volver”, le dijo el volante a Olé y se metió en el consultrio…
Almeyda vuelve en un momento crítico de River, en el que se necesitan referentes para poder soportar la presión de una hinchada que va a exigir desde el primer momento. Tiene chapa y espalda como para soportarla y lo más importante, tiene ganas.