Eso dije yo, cabe una denuncia y millonaria, profesionales, empleados de River resultaron heridos y corren riesgos de salud por culpa de la inoperancia o participación de bosta en ese hecho lamentable.
Ramiro tiene mas goles que dani stone en los superclásicos.
Barovero tiene mas que todos los delanteros de Boca juntos.
Tal cual viejo, por mas que haya estado bien la actitud de Donofrio, defender al club no solo es entrar como patovica al medio de la cancha. Que hagan lo que corresponde legalmente, si no es un MAMARRACHO.
Barovero tiene mas goles que parapam en superclasicos.
Las dirigencias de River y de Boca, capaz ante los medios, pero dentro de todo mantenían una buena relación. No sé como será a partir de ahora. Quedaron dos posiciones muy antagónicas, es peligroso. Creo que la grieta (Lanata dixit) es más profunda que cuando nos tocó descender, ellos (hinchas, jugadores, hasta CD capaz) quedaron con la sangre en el ojo.
Estan re calientes con la tapa de Olé estos retrasados, porque dice “Segui participando” y la verdad que yo estoy mas caliente porque esa tapa hace alusión al fallo ridículo de que pueden seguir participando en Copas Libertadores futuras, son unos hijos de re mil puta.
Juro por lo que mas quieran que lo unico que me interesaba es que nos dieran por ganada la serie. El resto me chupa el quinto forro de las pelotas, es algo que a nosotros ya no nos incumbe
Alguien sabe como fue el tema del tipo ese que mataron y nos clausuraron la bandeja?
Necesito muchos argumentos estos dias en mis discusiones con bosteros.
Que alguien le ponga abandonamos o algo asi. Tipo bandera blanca.
una verga la sancion pero bueno lo mejor que puede hacer River es ganar esta copa y yo le tengo fe,lo de este fallo del orto ya en la siesta se veia venir esta verguenza por como dilataban el asunto.
Boca podría participar de la copa libertadores 2016 (si clasifica)
Tiembla Velez
:twisted:
Hicieron la “salomonica” los de la Conogol. Que se vayan a lavar las patas!
Eso fue por otras causas, entre hinchas. O como a Corinthians, se le murió un hincha por bengala y no pudo jugar por 18 meses creo de local.
Pero acá, no fue un hincha, o un policía. Donde ahí hay se toca de otro lado el tema de reglamentaciones y sanciones.
Acá, hubo agresión/atendado contra la vida de los protagonistas directos del partido: JUGADORES DE FÚTBOL, DT, árbitros y/o autoridades. Y el reglamento lo dice, pero ahí lo aplicaron o mejor dicho, lo manejaron a su gana, sino la sanción deportiva, era la de no jugar la próxima edición de la competencia, como mímino.
Algo que nos podría haber pasado peor a nosotros con el tema Pezzotta, por ejemplo.
PD: los bosteros ponían las excusas de la invasión y enfrentamiento barra en la confitería… eso es cualquiera, eso no es ni en día de partido y la causa está y la denuncia se hizo, que no se resuelva es ora cosa, que no jodan.
Lo del hincha no fue fuera del estadio ademas?
Buenos días. Una vergüenza la sancioncita que le dieron a los sucios. Pero lamentablemente ya lo esperabamos anoche. Se bajó los lompas la CONMEBOL. 4 partidos sin público, cuatro??? Ouede competir internacionalmente. RIDÍCULO.
Otra cosa, no veo en la resolución que indique que ganamos 3 a 0; dice DESCALIFICACIÓN, pero en ningun momento deice RIVER GANÓ LA SERIE 3-0.
VERGONZOSO.
Es boquita del pueblo, el siempre favorecido. Como leí arriba que habian sacado un fallo y la FIFa LO DEVOLVIO no me quiero imaginar que decia.Si hubiese sido un equipo boliviano lo suspenden internacionalmente hasta que Evo se enliste en la juventud hitleriana.
Morder a un rival (Luis Suárez) - 9 partidos ( perderse Mundial y Copa América de facto) y 4 meses sin ejercer tu profesión.
Poder dejar ciegos a varios jugadores - 4 partidos a puerta cerrada y no poder vender unas cuantas entradas.
…
saludos
Cagones de mierda en la Conmebol.
El fulbo es pa’ vivo’
Dale Bo, dale Bo, dale Bo, dale Boca que no ha pasado nada, canta la hinchada “xeneize” en los momentos de adversidad de un partido y sentencia como sentenció la Conmebol para el caso más bochornoso que a equipos argentinos haya involucrado en la historia de la Copa Libertadores de América.
El periodista Jean-Baptiste Alphonse Karr escribió en una columna publicada en la revista Las Avispas, allá por 1849, aquello de “cuanto más cambie, es más de lo mismo” que luego el italiano GIuseppe Tomasi di Lampedusa adaptó en su obra El Gatopardo (1958) con su “cambiar para que nada cambie” o anunciar una revolución conmovedora para en la práctica conservar intacto el núcleo de las cosas.
Y ese fue el mensaje que anoche cerró un capítulo vergonzoso del fútbol sudamericano.
Boca debe hacer por lo menos un gol y no puede, apenas si se acerca al arco rival y se van 0-0 al entretiempo. Momento de volver a la cancha. Un grupo de hinchas de Boca lanza un químico en plena manga habitada por los jugadores de River, los quema, les provoca cegueras temporales, jugadores y cuerpo técnico del equipo local quieren seguir, ante la evidencia de que esto no podía ocurrir. Discuten, amagan a pelearse con los rivales. El público local anuncia que todo será peor. Lanzan un drone con un fantasma. Llenan botellas con agua y las lanzan contra los jugadores, que sólo podrán irse del campo de juego 2 horas y 24 minutos después de haber tenido que iniciar el segundo tiempo no sin antes, cómo olvidarlo, saludar a los hinchas que, representados por aquel de la manga, provocaron un escándalo que el mundo miró asombrado.
Se anunciaba lo lógico: un castigo ejemplar. El desarrollo de los episodios era insólito y en esa sintonía falló la Conmebol. Boca eliminado, River a cuartos, un puñado de partidos sin público en la Bombonera, un poco de plata y nos damos la mano. Que tampoco es para hacer de esto un escándalo, che.
¿Cambiar? ¿Qué es eso de cambiar? ¿Sancionar a Boca, el del negocio millonario para todos? ¿A quién se le ocurre? Ahora, que no se atreva un hincha de un club de segunda línea a lanzar gas pimienta contra los jugadores del equipo rival porque ahí si, ahí sí ¿eh?, ahí se termina la joda y castigamos con todo el peso de la ley y bla bla bla…
La Conmebol, como papá o mamá cuando se pasan de permisivos amparados en el sentimiento, le dijo a Boca “esta vez te la dejo pasar. Te saco de la Copa con todo el dolor del alma porque si no esto será un escándalo pero es la última vez. La próxima no habrá concesiones” y el chico… el chico sabe que es demasiado grande e importante para que ese papá o esa mamá cumplan con la advertencia. No pasará.
“Son las reglas del juego, el fútbol es para vivos”, grababa en marzo de 2012 un Juan Carlos Crespi con su particular modo de barrabravear las declaraciones en el marco de la inclusión poco clara del jugador Santiago Silva por parte del club. El dirigente dejó una marca con aquella frase que ayer funcionó una vez más con la sagacidad de Daniel Angelici en su descargo en Asunción ante el tribunal disciplinario de la Conmebol que valoró los esfuerzos del club por aportar datos para el esclarecimiento de los hechos y presentarse a su vez como querellante en la causa.
El letargo en la oficialización del fallo hacía caer con el paso de los minutos la coartada del fallo ejemplificador, del llamado de Blatter, de los ojos del mundo mirando a Sudamérica. Y cerca de la medianoche, cuando el cansancio de una jornada agitada ya no deja lugar para el pataleo, hubo sanción que dice, básicamente, que ganaron los dos. Boca por lo que pudo haber sido y no fue (sanción severa a la Bombonera y la expulsión por un tiempo prudencial de competencias internacionales) y River porque pasó a cuartos faltándole disputar 45 minutos ante Boca, como visitante, y con apenas un gol a favor.
Se olvidaron los integrantes del tribunal (el urugayo Adrián Leiza, el brasileño Caio César Vieira Rocha y el boliviano Alberto Lazada; los otros dos no pudieron llegar a Paraguay) del atraco a los jugadores de River, de la bandera que anunciaba el desastre, del drone con el fantasma, de las botellas lanzadas al campo de juego, de la falta de solidaridad entre, al fin y al cabo, colegas de trabajo y de ese saludo final para congraciarse con la hinchada que fue en definitiva el sello que el propio Boca, a través de sus jugadores con los brazos en alto, le puso a esta historia y que la Conmebol legalizó. Aquí Boca, aquí no ha pasado nada.
Loana Viera
---------- Mensaje unificado a las 12:05 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 12:00 ----------
Esto es joda
Sí, señor, esto es una joda. Olvídese de todo lo que escuchó en estas últimas 48 horas. De la sanción ejemplar, del gas pimienta, del perdón, de la vergüenza y del bla-bla mediático. Nada de todo lo que le pasó por la cabeza tiene sentido hoy. El negocio lo hizo de nuevo y lo volverá a hacer cuando sea necesario. Todo en nombre del fútbol y de la mugre en la que se convirtió.
La sociedad argentina está enferma. Eso es cierto, pero también lo están los dirigentes nacionales e internacionales que se llenan los bolsillos viajando por el mundo, hablando en nombre del Dios fútbol. Un Dios cada vez más pagano y sensiblemente más idiota.
Por alguna razón en particular, en algún momento la “cultura del aguante” se transformó en la justificación desmedida de todo lo que ocurre dentro de una cancha de fútbol. Por alguna razón, los estúpidos del paravalancha creen que ellos también juegan y están obligados y dispuestos a interferir con la trampa en nombre de sus colores cuando sea necesario.
Piense un segundo. Repita en su cabeza las canciones del club que sigue o del que es hincha. Diga en voz alta cuántas canciones hablan de la gloria deportiva, del aliento a los jugadores . ¿Ninguna? ¿Dos? ¿Tres? No, no soy adivino. Es la lógica que nos invade desde hace más de veinte años. Ya no se alienta al club, se alienta a la barra, a una hinchada que promete “correr”, “matar” en nombre de “ser distinta a los demás” fomentados por el negocio negro de la mafia de la redonda.
“Jugador número 12” se hace llama la barra más sangrienta e idiota del fútbol argentino. ¿En qué momento se les hizo creer que ellos también jugaban? “Los borrachos del tablón”, “La Guardia Imperial” y cuantas más son copias unas de otras. Todas asociaciones ilícitas de cobardes apañadas por el Estado y por los dirigentes. ¿Qué imperio defiende la barra de Racing? Ninguno. Perdón, sí el de los negociados de los que son cómplices desde hace décadas la dirigencia celeste y blanca.
Es así en todas partes de nuestro país porque esto es joda y lo seguirá siendo. Mientras usted se indigna, los delincuentes que quemaron a jugadores de fútbol seguirán entrando a una cancha mientras. Y usted, por miedo, lo mirará desde la televisión. En tanto, el infame de Agustín Orión sigue ganando miles de dólares o el impresentable de Daniel “Cata” Díaz, aplaudiendo a delincuentes. ¿Sabe por qué? Porque esto es joda, señores, y ya nada se puede hacer.
Juan Cruz Sanz