Kirchnerismo

:lol: :lol: :lol:

Cuando gobernas tenes que dar explicaciones,te guste o no,a mi me parece perfecto que un ministro,diputado,gobernador,etc.,conteste las criticas de la oposición.

Ojo, yo no estoy diciendo que cierren el debate. A mi si me preguntas en ese lugar haria las declaraciones justas y necesarias, ponele me parece al pedo el ‘parece que en otros canales no me pasan mucho’ de hoy, eso no demuestra grandeza y no porque busque boludeces para criticarla porque los critico en cosas puntuales pero es mi forma de pensar como manejarse claro está que es aceptable que lo haga asi.

Y mira…si esta mina que es Presidente Constitucional y en las primarias saca mas del 50% de los votos desde un centro de formacion de opinion como Clarin/Canal13/Radio Mitre/TN y sus 124868593 canales que repiten en el interior solo la nombran para darle palos y tenes por otro lado al hipototamo de Lilita que saca el 3% de los votos y machacan con ella todo el tiempo como si fuera la Pachamama sabelotodo CREO QUE ES COMPRENSIBLE QUE SE TE ESTRESEN LAS PELOTAS.

Lo de Magneto es repugnante.

El tema es que lo de Magnetto sea alevoso es un tema de Magnetto, quiero decir… quedara en cada uno reconocer cuan poco serio es y darle o no pelota, porque en definitiva es un privado. Ahora que el estado entre en ese juego me parece repudiable porque está representando los intereses de todos. Pasa que tambien los medios de comunicacion estan al filo de publico y lo privado por eso es un tema cuestionable…

El problema no es Magnetto, ni el diario Clarín, ni Ernestina. El problema es que un privado acumule por sí solo 300 medios de comunicación.

Sin dudas, pero recien el 2009 se supo que Clarin era tan grande?

Y, yo me habré enterado por ese entonces. Claramente era algo que, si bien imposible de ocultar, estaba bien escondido.

Los números que el Gobierno no quiere ver

Por [b]Martín Lousteau[/b] | Para LA NACION

La semana pasada desde esta columna se analizaron algunas cifras que la oposición pareciera ignorar a la hora de interpretar su derrota en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias. Las mismas mostraban la existencia de nada menos que 17 millones de votantes (trabajadores formales, jubilados y perceptores de la Asignación Universal por Hijo) cuyo poder adquisitivo había mejorado claramente desde las elecciones de 2009.
Un estudio llevado a cabo por Hugo Haime parece confirmar la importancia electoral que ha tenido dicha dinámica. Los resultados revelan que, a la hora de explicar su sufragio, lo que más destacaron los votantes de la Presidenta fueron: la mejora en la situación de los jubilados (48%), la lucha contra la pobreza (33%), el subsidio a la niñez (30%), la generación de fuentes de trabajo (29%) y la mejora general de la economía (24%).
En los últimos ocho años, el ingreso promedio por habitante creció 60% en términos reales; y el gasto público per cápita es hoy diez veces superior al de aquel entonces. Se crearon tres millones y medio de puestos de trabajo, con lo que el desempleo pasó del 18% al 7,3% en el mismo lapso, mientras el salario real promedio trepó un 37%. Con estas cifras el país debería sentirse distinto, subido a un ascensor que, ya alejado del Infierno y también del Purgatorio a los que solía referirse Néstor Kirchner, nos llevara con tranquilidad pero sin pausa al Cielo del desarrollo.
Pero todo el crecimiento de estos años no parece haber servido para lograr progresos estructurales e irreversibles. Hoy existen más de nueve millones de compatriotas en situación de pobreza, un guarismo similar al del año 1995, aunque antes se los desamparara y hoy afortunadamente existan recursos para otorgarles un subsidio. Seguramente no contribuya demasiado a sus posibilidades de mejora el padecer una inflación que está entre las más altas del mundo y que cuadruplica al promedio de los países de nuestra región.

Todo el crecimiento de estos años no parece haber servido para lograr progresos estructurales e irreversibles

Desde 2003 gastamos 52 mil millones de dólares en infraestructura y otros 60 mil millones de dólares en subsidios a servicios publicos básicos. Sin embargo, seguimos sin trenes, con nulos cambios en la infraestructura terrestre y portuaria, y con un significativo deterioro en materia energética. El censo de 2010 revela que, de los doce millones de hogares que hay en nuestro país, uno de cada cuatro no posee agua de red, el 47% no tiene cloacas, un 40% utiliza gas en garrafa como combustible para su vivienda, y más de la mitad no tiene computadora. A pesar de la publicidad oficial en Fútbol para Todos, el déficit habitacional de la Argentina continúa sin ser abordado seriamente, tal como nos lo recuerdan de vez en cuando dolorosos episodios como los del Parque Indoamericano a fin del año pasado o las protestas más recientes en Jujuy . Es en esa matriz de abandono de la acción estatal, de librar a la gente a su suerte en condiciones de marginalidad, que comienza a tejerse en Argentina un entramado cada vez más oscuro y sórdido, en el cual la inseguridad también cambia cualitativamente con el avance del narcotráfico.
Finalmente superamos la meta de asignar seis puntos del PBI a la educación pero, tal como lo demuestran los resultados de las pruebas PISA, ésta no mejoró y sigue alejada del estándar de calidad que se precisa para lograr una mayor integración social y verdaderas posibilidades de competir desde una posición de igualdad en el mundo que viene. Y año tras año vemos cómo se retrasa el inicio del ciclo lectivo en alguna provincia.
Los pilares principales del modelo, según la propia concepción del oficialismo, se vienen deteriorando. Debido al aumento de los precios domésticos, la competitividad del tipo de cambio se ha ido perdiendo. Este es uno de los factores que explica por qué el intercambio comercial de nuestra industria con el resto del mundo pasó de estar en equilibrio a ser claramente deficitario: hoy se da en dicho sector un drenaje de dos dólares por cada tres que el complejo sojero genera vía exportaciones. Y el número total de obreros industriales ocupados resulta todavía un 4% inferior al existente en 1997, a pesar de un crecimiento acumulado de la producción superior al 40%. Esta es la realidad, más allá de todos los discursos de reindustrialización.

A pesar de la publicidad oficial en Fútbol para Todos, el déficit habitacional de la Argentina continúa sin ser abordado seriamente

De esta manera se reduce paulatinamente el excedente comercial y la cuenta corriente se vuelve negativa. Si a ello le agregamos el panorama fiscal caeremos en la cuenta de que en la nursery nos acaban de cambiar de gemelos: teníamos los Superávit y ahora nos quedamos con los Déficit. Por si ello fuera poco, en los primeros ocho meses de este año hubo una salida de capitales por 15 mil millones de dólares (desde mitad de 2007 los argentinos sacaron del sistema ahorros por la friolera de 72 mil millones). En este contexto, las reservas internacionales están cayendo por primera vez desde 2002, mientras el resto de los países de América latina sigue aumentando el volumen de este importante reaseguro para tiempos difíciles.
No caben dudas de que la situación económica es, en el sentir de todos los argentinos, incomparablemente mejor que el nadir que experimentamos en 1998-2002. Pero si el Gobierno pretende mantener la tendencia a futuro para cumplir tanto con la expectativa de quienes le dieron su apoyo en las urnas como con los deseos de progreso de los que no, haría bien en mirar estos otros números.
La cuestión no pasa por reivindicar la recuperación de la autoridad presidencial o la necesidad de intervención para equilibrar la acción de los mercados, ni por gastar cuantiosas sumas en áreas que no son prioritarias. El verdadero desafío consiste en que la gente sienta la presencia cotidiana, real y efectiva de un Estado que esté abocado a ampliar y mejorar continuamente, hoy y hacia el futuro, los servicios que brinda a sus ciudadanos. Si existe la firme decisión y somos capaces de trabajar colectivamente, aprendiendo a acumular logros y a corregir errores, podemos lograrlo.

Los números que el Gobierno no quiere ver - lanacion.com

Ahora seguramente critican porque lo escribió Lousteau.

Seguro que faltan cosas por hacer , numeros por bajar cosas por mejorar la presidenta siempre lo dice que hay cosas por hacer , que el gobierno tiene errores. pero que se hizo MAS que muchos gobiernos con los K . no quedan dudas.

lo de Loustau son cifras que se saben, a él le gusta darle una determinada mirada crítica, cuando todos podemos ver, analizar, fijarnos, que todas las estadisticas, computos e indices sociales han mejorado notablemente año a año, trimestre a trimestre… no hay pais en el mundo que sea perfecto, siempre hay cosas para HACER y MEJORAR, lo bueno, es que hace años que se esta HACIENDO y MEJORANDO, y nada indica lo contrario, el proyecto sigue avanzando, y cada vez es mas la gente que lo apoya e intenta participar, entre todos, podemos asegurarnos que se haga todo, por mas que no nos gusten quienes esten en el poder, lo mejor es PARTICIPAR.

abrazo!!!

Que raro que La Nación no subió también esta opinión de Lousteau…

Ayer se dieron a conocer los datos del escrutinio definitivo de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO). No hubo sorpresas: la fórmula CFK-Boudou arrasó con el 50.24% y el orden de sus seguidores no se vio alterado. Lo que sí continúa llamando la atención es la reacción de los opositores ante la derrota.
Como si no pudieran salir del estupor ante un resultado que consideraban inesperado, se mueven sin rumbo alguno. Algunos apalean las estadísticas intentando dar otra interpretación a lo inapelable. Otros denuncian fraude. Socios hasta hace veinte días muestran las diferencias que, en rigor, siempre tuvieron. Y mientras un candidato reconoce la imposibilidad -aunque use el término improbabilidad- de la tarea que le aguarda, las estructuras partidarias piensan súbitamente cómo transformar una elección presidencial en otra de control legislativo.
Cierto triunfalismo había invadido a la oposición y parte de la prensa más crítica luego de las elecciones en Santa Fe, Capital y Córdoba. Decir que esa visión era poco menos que incomprensible implicaba en esos momentos nadar contra la corriente. Sin embargo, las encuestas serias venían reflejando una intención de voto superior al 45% para la Presidenta. Y lo hacían de manera consistente, mes tras mes, lo cual achicaba el margen de error. Ese apoyo masivo se sustenta en mejoras objetivas para un porcentaje no menor de la población en temas tan centrales como la situación económica. Vale la pena, entonces, analizar estas cifras que algunos continúan eligiendo ignorar a su propio riesgo.
En primer lugar, para el universo de 7,5 millones de trabajadores formales la pauta de incremento salarial promedio se ubicó en estos años por encima del alza de los precios. Así, la inflación – siempre molesta y con múltiples efectos negativos – ha sido para ellos poco más que un problema de timing. Con un tipo de cambio relativamente estable, estos sectores han disfrutado en los últimos dos años de un incremento del 40% en el salario en dólares (que ya se encuentra 33% por encima del existente en 2001). Si a ello le sumamos que no hay alternativas de ahorro que protejan de la inflación, el resultado lógico es el boom de consumo que estamos experimentando.
Por otro lado, la movilidad previsional sancionada en octubre de 2008 hizo posible que el haber de los 5,7 millones de jubilados también le ganara a la inflación: desde marzo de 2009, el poder adquisitivo de la jubilación mínima se incrementó un 8%. Y a ello hay que sumarle que dentro de ese grupo se encuentran 2.5 millones de ancianos que hace un lustro no tenían cobertura y hoy sí gracias a la moratoria llevada a cabo en la administración de Néstor Kirchner.
Finalmente, en diciembre de 2009 el Gobierno implementó por decreto la Asignación Universal por Hijo. Este programa significa una transferencia anual de recursos equivalente al 0,7% del PBI (US$ 9500 M) para 3,6 millones de beneficiarios. Si bien el poder adquisitivo del beneficio se fue erosionando como consecuencia de la inflación (en especial en el rubro alimentos), lo cierto es que su incidencia en la estructura de ingresos de los beneficiarios ha sido muy significativa: un hogar típico cuyo jefe es trabajador informal tiene en la actualidad una capacidad de compra 38% superior a la de fines de 2009.
Así, sumando padres beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, trabajadores formales y jubilados tenemos un universo de casi 17 millones de adultos con ingresos reales mayores a los de la elección previa (realizada en un contexto opuesto, es decir con recesión), en la que el Kirchnerismo había sido derrotado.
Para una sociedad acostumbrada a vaivenes y crisis recurrentes, y con el cataclismo de 2001 todavía muy presente en el imaginario colectivo, la dinámica económica descripta juega un rol muy significativo, más allá de otros aspectos que pueden influir en la simpatía o antipatía por un gobierno y la decisión a la hora de votar. Despreciar este hecho sólo puede inducir a apelaciones discursivas incorrectas que la mayoría de la gente siente ajenas, tal como quedó demostrado por los escasos votos obtenidos en el campo opositor.
Con una ciudadanía que se ha expresado tan claramente y con razones tan válidas, el verdadero desafío, tanto del Gobierno como de la oposición, parece transcurrir ahora por otros carriles. Las mejoras logradas con cierta facilidad en estos años serán complejas de replicar. Los desajustes macroeconómicos han venido siendo disfrazados a fuerza de despilfarrar recursos provistos por una coyuntura internacional prácticamente inmejorable, como la que experimentó nuestra región hasta recientemente. Existe el riesgo de que las expectativas con que tantos se manifestaron en las internas – y seguramente también en la elección del 23 de octubre próximo – no se vean satisfechas en los próximos cuatro años. Y aún así, casi no se ven candidatos pensando con seriedad el largo plazo, que es lo único que puede servir de faro cuando las aguas del corto plazo se ponen movidas“.

Me sorprendió mucho la data que me tiraste ayer de que en la UBA en económicas hay un consenso tan grande tanto en alumnos como en profesores sobre las políticas económicas kirchneristas.

igualmente, entre “economistas”, el paño de contadores que son la mayoría del estudiantado lo desconozco, pero en su mayoria son seres apolíticos y “tecnicos” jeje
El debate político se da entre los economistas, la carrera primordial de la Univercidad de Ciencias Económicas, la carrera que investiga y analiza la realidad SOCIAL, porque por sobre todas las cosas, los economistas tenemos que ver nuestra carrera desde una óptica Social, la Economia para el Bien Social.

NTERNACIONALES | ACLARO Y NO OSCURECIO
08.09.2011 | 11:38 hs.
NEW YORK TIMES JUSTIFICA SU ELOGIO A LA ARGENTINA

Este es el artículo que levantó la polvareda.

El fin de semana el prestigioso diario norteamericano publicó una columna sugiriéndole a Obama que “copie” algunas medidas del gobierno de Cristina para reactivar la economía. Obvio, levantó polémica. El autor aseguró que su artículo molestó “porque di ayuda y confort al enemigo”.

            [b]Ian Mount [/b]es el periodista que escribió la columna que elogió las políticas del gobierno de [b]Cristina Fernández[/b] para levantar la economía y le “[i]recomendó[/i]” a [b]Barack Obama[/b] copiar algunas de ellas para reactivar Estados Unidos.

Obviamente, sus palabras generaron polvareda. Vía Twitter, el periodista aclaró varios puntos sobre su artículo: “Yo sabía que la pieza podía ser controvertida cuando la propuse con la gente en el New York Times. Eso es generalmente lo que quieren los editores de opinión”.
“Hay tres razones principales por las que algunas personas no les gustó, dos racionales y una menos: Primero, algunas personas se quejan de las estadísticas, y cuando un gobierno como el actual falsea los indicadores de inflación, es difícil saber la pobreza real, por ejemplo. Segundo, hay un argumento económico filosófico. Y la última, le di ayuda y confort al enemigo”, evaluó.
Aseguró que Argentina “es un país extremadamente polarizado ahora mismo. Ya sea que estés 100% a favor o 100% en contra” y destacó y que la polémica surge porque “como mencione cosas positivas acerca de los últimos 8 años, debo estar pagado por ese gobierno" y comentó: “Lo gracioso es que no soy kirchnerista”.
“Si uno no explica la economía como un total desastre, es K“, se quejó y, aseguró que pese a criticarle cosas es real que, a pesar de ello, fue el gobierno kirchnerista el que ayudó a la economía a crecer.
Finalmente, contó que el artículo “fue dirigido a aquellos en los EE.UU. que quieren poner en práctica las medidas de austeridad al igual que los EE.UU. amenaza a la punta en la recesión“ y destacó que en Argentina “fue el gasto y no las medidas de austeridad lo que hizo salir a la Argentina de la crisis”.

Seguimos con la campaña “el kirchnerismo no es un progresismo” :twisted::

estás igual!! el colapso del progresismo conceptual

Uno de los más desopilantes fraudes conceptuales en materia de análisis electoral de los últimos meses fue, sin duda, el que asimila los resultados del FPV en las PASO en la Ciudad de Buenos Aires con el de las elecciones a Jefe de Gobierno: “Son lo mismo, solo dos puntos de diferencia, no hubo voto cruzado”, comentan rapidito sus epígonos.
Desconoce esta masacre a la inteligencia, en general, el fenómeno de cruce de votos que se generalizó en favor de la fórmula nacional del FPV a lo largo y ancho de la Patria, y en particularla enorme diversidad en la dinámica de la elección local y nacional en la CABA , por un motivo muy sencillo y elemental : en una participa Macri y en otra no lo hace.
La ausencia del actual Jefe de Gobierno reorganiza el escenario electoral, lo despolariza y plantea otra estructura de comportamiento electoral, totalmente distinta entre una y otra elección.
Suponer que Cristina también hubiera perdido por veinte puntos las elecciones presidenciales en la CABA a manos de Macri, que es lo que se deduce de la afirmación que asimila los resultados del FPV en las elecciones distritales y las PASO, solo es un gesto desesperado por mantener la vitalidad de una cultura política en ya muy prolongada agonía: el progresismo porteño. Deconéctenlo!
Sin duda, de haberse mantenido como candidato a presidente Macri --cosa que no hace por los resultados catastróficos que hubiera obtenido, especialmente duros en su propio distrito-- y de haber competido contra Cristina en las PASO, la Presidenta hubiera (al menos) duplicado en votos en la propia CABA a Mauricio, como, por otra parte, lo mostraban todos los estudios de opinión previos al renunciamiento del actual Jefe de Gobierno porteño a sus pretensiones presidenciales.
En fin, progres, que si es por comparar números similares para sacar conclusiones falsas, les sugerimos otros numeritos parecidos , pero más entretenidos que el 27/ 30 de Filmus-Cristina.
Por caso, Chupete de la Rúa obtuvo el 48,5% de los votos a presidente, y el Tío Cámpora, el 49,5%, por un puntito… !! Son lo mismo, papá! Jejeje. Conceptual y políticamente , la progresía ya da lástima.

[b]La población en las villas creció más del 50 por ciento

[/b]07/09/11

Son cifras que abarcan el período 2001-2010. Pese al crecimiento económico, 163.587 personas viven en las villas porteñas. La Rodrigo Bueno, ubicada en Costanera Sur, quintuplicó sus habitantes.
Por Ismael Bermúdez

  1. EL ASENTAMIENTO ENCLAVADO EN RETIRO ES UNO DE LOS QUE MAS CRECIO EN LOS ULTIMOS AÑOS. PASO DE 12 MIL HABITANTES EN 2001 A MAS DE 26 MIL EN LA ACTUALIDAD, UN 117% MAS DE GENTE.

En la Ciudad de Buenos Aires lo que más crece es la población que vive en las villas y en los asentamientos.
Según las cifras del Censo 2010, en esos barrios precarios hay 56.165 personas más respecto de 2001, un incremento del 52,3%. Y como la población porteña creció en esos 9 años en apenas 114.013 personas, se desprende que la mitad de ese crecimiento tuvo como destino las villas y los asentamientos, con sus consecuencias ambientales, sanitarias y de infraestructura.
En total, en las villas de emergencia y asentamientos porteños viven 163.587 personas distribuidas en 40.063 viviendas que ocupan 259,9 hectáreas. En 2001 sumaban 107.422.
Las villas más numerosas son la 21-24 en Barracas, la 31-31 bis en Retiro y la 1-11-14 en el bajo Flores que suman 80.000 personas. En 2001 en esos barrios precarios residían 53.000 personas. Un incremento del 50%.
En contraste, casi una cuarta parte de las 1.425.840 viviendas porteñas – 340.975 unidades – están “deshabitadas” porque corresponden a oficinas, pero también porque son casas o departamentos que están en venta, en alquiler o en avanzado estado de construcción.
En la zona de Retiro o Puerto Madero, las viviendas “deshabitadas” trepan al 40%, el grueso por las construcciones como “inversión” desarrolladas en los últimos años.
Aunque no hay datos de la procedencia de estos nuevos contingentes de porteños, el grueso proviene de países limítrofes (Paraguay y Bolivia) y de Perú. En toda la Capital, viven 381.778 extranjeros, 65.039 más que en 2001.
De aquí se infiere que más de la mitad del crecimiento poblacional se explica por la radicación de extranjeros atraídos, según el INDEC, por las mejoras sociales y económicas de los últimos años.
La presencia de las villas y asentamientos está concentrada en 4 barrios porteños.
En Villa Lugano, Soldati y Riachuelo representan el 32,9% de la comuna; en Barracas, Boca, Nueva Pompeya y Parque Patricios el 16,3%; en Constitución, Retiro, San Telmo el 14,3%, y en Flores-Parque Chacabuco el 12,1%. Respecto de 2001, los mayores crecimientos se registraron en Retiro y Barracas.
Debido al aumento de la población en villas y asentamientos, en las comunas 1 (Retiro), 7 (Flores y Parque Chacabuco) y 8 (Villas Lugano, Soldati y Riachuelo) la población creció entre 3 y 5 veces por encima del promedio de la Ciudad, que fue de apenas el 4,1%.
Así, en esos barrios carenciados, el ritmo de crecimiento poblacional es muy similar, y muchas veces superior, al de buena parte del GBA. Por esa razón, algunos especialistas señalan que hay una “conurbanización porteña”, estableciendo casi una unidad sociogeográfica ya que muchos de esos barrios son linderos con los partidos del GBA.
En promedio, en las villas viven 4,1 personas por hogar, aunque en algunos asentamientos trepa a 7,3 por vivienda, generando serios problemas de hacinamiento habitacional.
“En las comunas 1, 4 y 8 (que corresponden a esos barrios), el porcentaje de hogares hacinados supera el 18,9%”, alcanzando el 22,2% en la comuna que incluye Villa Soldati-Lugano, de acuerdo a un informe de la Dirección de Estadísticas y Censos (DGEyC) de la Ciudad de Buenos Aires. Pero si este indicador se restringe “a las villas, inquilinatos, hoteles, pensiones y casas tomadas el porcentaje de los hogares hacinados ronda el 50%”, cuando en el resto de la Ciudad “apenas llega al 6,3%”.
Otro dato es que las comunas 4 y 8 tienen los porcentajes más altos de hogares que no disponen de inodoros con descarga a la red cloacal pública.
“Los hogares con deficiencia de este tipo de servicio ascienden a alrededor de 10.000”, que se concentran en las comunas 4 y 8 donde están las villas de La Boca y las de Villa Lugano, según el relevamiento de la DGEyC.
En las villas, los habitantes del 73,3% de los hogares no son propietarios ni inquilinos, por lo que son clasificados en el rubro “tenencia precaria” de la vivienda. Otro 10,2% es inquilino y apenas el 16,5% es propietario del terreno y la vivienda. Para el resto de los porteños, estos números están invertidos, ya que 2 de cada 3 habitantes son propietarios de sus viviendas.
Según el Censo 2010, en la ciudad de Buenos Aires 71.275 hogares cocinan o calefaccionan sus viviendas con gas a garrafa: son un 40% más o 21.223 hogares más que en 2001, debido al incremento de la gente que vive en inquilinatos, villas y asentamientos.

Esa nota la publicó la semana pasada, mostrando los tres o cuatro principales puntos fuertes del gobierno, así que no sé de qué estás hablando. Esta semana se dedicó a remarcar en los puntos en los que el gobierno demuestra su incapacidad y en la incapacidad de la oposición de capitalizarlos como parte de su campaña política.

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