(APe).- La reacción socio-político-judicial se mueve por espasmos. Y sucede lo peor: los debates más profundos, más medulares, se dan con las esquirlas de la tragedia taladrando la piel social. Con la sangre aun tibia. Con los micrófonos y las cámaras puestos en la cara de las víctimas para violentar y enardecer. A los espectadores y a las propias víctimas. El debate sucede cuando no debe: una muerte provocada por un pibe es una extra sístole social. Es un sacudón de la tierra que se pisa. Es el cielo que se abre para que asome un Leviatán. Entonces lo que se discuta correrá por esos peligrosos carriles. Salpicado de ira, de sangre, de posturas extremas. De ausencia de un análisis serio y profundo que vuelva sobre por qué un niño termina matando. Qué recorrido histórico atravesó su vida, la de su familia, la de su barrio, la de su tierra, para que él terminara apretando un gatillo con el cerebro desolado, sin pensar, sin ser. Con un fuego en la nuca encendido por el desasosiego, la soledad intensa, el futuro impensable y el filtro para el sentir y el sufrir que se inhala por la nariz o por la garganta, que le cristaliza la cabeza y los pulmones.
Cuando un pibe mata se encienden todos los monstruos sociales y es siempre la misma secuencia circular, espasmódica: disparo, conmoción mediática, Gobernador poniendo sobre la mesa bajar la edad de imputabilidad a los 14. O los 12 o los 3, que para el caso es lo mismo. Una discusión sesgada, corrida del eje medular porque los sentimientos están a flor de la piel social. Cuando un pibe mata se comienza a estudiar cómo encerrarlos a todos y no cómo desollar -para analizar su endodermis- a un estado y a un sistema de gobierno que durante décadas generó, como huevos de serpiente, como piojo de la lana en el almohadón de plumas quiroguiano, una monumental exclusión. Una colosal desigualdad. Un corte de concentración máxima y reparto de migajas hacia el afuera. Una máquina de generar odio social. Y de desvalorizar la vida -la propia y por ende la del resto- porque dejó de existir un rumbo, un por qué y un para qué vivir.
¿Por qué no se instala sobre las mesas el debate de lo que no se hizo, no se hace -y probablemente no se hará- por el pibe antes de que mate? ¿Existe la voluntad profundamente política de evitar que el pibe mate? Si se analiza la endodermis del sistema para transformarlo y generar alternativas y caminos diversos en la historia de ese niño, ¿quedará al desnudo que la exclusión es una estrategia política pensada y desarrollada por regímenes dictatoriales con la complicidad sistémica de gobernantes, gobernadores y gobernatrices? Entonces, si el problema se aborda en el sacudón de la extra sístole, cuando el pibe mata, habrá reacción social, ejecución pública mediática, pleamares de mano dura y todo seguirá igual. Los 500 mil pibes que no estudian y trabajan en la provincia -que para consultoras privadas son 800 mil- seguirán al borde del abismo o se irán cayendo a las honduras. La droga, corriendo como un riacho en pendiente en las barriadas pobres, herramienta oscura de dominación y selección, les seguirá carcomiendo la voluntad, las inhibiciones, la cabeza y el pecho. Y de todos ellos, alguno matará. Entonces volverá la reacción cíclica y espasmódica. Y habrá más cárceles e imputabilidad a más baja edad. Los 8, los 6, los 4. Un camino sin salida si no se discute en serio. Lejos de la sangre y de la muerte fumándose un puro en el sillón de la victoria.
El juez en lo Contencioso Administrativo Luis Arias se ha cansado de denunciar el cableado entre policía, política y delito. (Luciano Arruga es la síntesis del terrorismo de Estado en democracia). Arias no ha sido el único. Lo único que logró fue el escándalo de las comadres. La comunidad férrea no deja pasar la luz de la endoscopía.
Algunos números oficiales y desadjetivados para poder comprender: las estadísticas de la Procuración General de la Suprema Corte bonaerense registran, en los primeros seis meses de 2010 -última actualización- 1362 homicidios en la Provincia. 1264 cometidos por adultos y 98 por chicos. Apenas un 7,1% de los crímenes. En ocasión de robo los asesinatos en manos de adultos fueron 29. Y criminis causa -para ocultar otro delito- 26. En total, 55.
Pibes menores de 18 años cometieron 9 crímenes en ocasión de robo y 4 criminis causa. En total, 13. Un 19.11 por ciento de los homicidios en el marco delictual.
En 2009 hubo 2775 muertes violentas. 2580 en manos de adultos y 195 crímenes cometidos por chicos. Apenas un 7,02%. De los homicidios en el marco de un delito, un 22.15 corresponde a menores de 18 años. La proyección de 2010 parece, incluso, más baja. Estos últimos son los números a los que hay que apuntar, aunque duelan y desgarren. Son las erupciones de la exclusión, las reacciones ante la desigualdad, el producto de la máquina de fabricar odio social, de la vida en disvalor.
Pre-venir implica llegar antes. Antes de la muerte. Evitar que el arma llegue a esas manos que todavía no han terminado de crecer, desde donde se sabe que llegan. Evitar que se conviertan en mano de obra de trabajo sucio para las fuerzas ocultas. Intervenir en la historia de los niños antes de que se quiebre como un cristal. Y sangre en los pies descalzos del futuro. Antes de la extra sístole. Antes de la punición infantil, la visibilidad. Antes de la ejecución pública, la ternura.
Mas alla de la reaccion de cada uno ante un delito,lo mas importante es ver cual es la genesis de un pibe de 12 años que anda afanando,el ambiente en el que se mueve es fundamental,siempre va a ser mas facil querer matar a una persona que resolver el problema,por eso EE UU con su pena de muerte en determinados Estados lograron bajar la delincuencia :roll:
Como siempre opino en estos temas el problema esta en el sistema, en este caso tiene mucho que ver el Penitenciario que saca verdaderos marginales del mejor ser humano que haya caido por error,el tipo que delinque sea por el motivo que lo haya llevado a hacerlo tiene chances casi nulas de reinsertarse,piensan las 24 hs del dia en que no les rompan el culo y en andar buscando gatos nuevos para copar la ranchada en vez de tener una motivacion para reinsertarse.
Una anecdota:
Mi señora labura en el Patronato de Liberados y a hacer socio ambientales la acompaño yo en la camioneta,nos toca estar en barrios realmente jodidos, el mas heavy que visite es el de la bajada de la autopista,mi sorpresa cuando esperaba a mi jermu fue ver a los pendejos llegando del colegio,a esos guachines caritas sucias que gracias a la hija de puta de nuestra presidenta tienen la obligacion de ir al cole porque si no a sus mamas les sacan la Asignacion,estas para mi son medidas tendientes a incluir a los pendejos,a que tengan la misma oportunidad que la de cualuiera de nuestros hijos a educarse y seguro en el ambito escolar podran dicernir mejor sobre lo bueno y lo malo que estando en la calle.
Nosotros somos parte de este sistema, nosotros votamos y aceptamos dentro de esta Democracia Burguesa,no podemos hacernos los desentendidos ya que el guachaje que hay hoy es mas responsabilidad nuestra como ciudadanos que de ellos,que a mi parecer son victimas. Como bien dijo un forista,nosotros tenemos los medios para educar a nuestros pibes, nosotros crecimos del lado lindo de la historia( yo no tanto,pero como pude la remè).Estos pibes estan a merced de los mas grandes que los hacen sus mulos y les enseñan que robarle a un gil es bueno,hay tambien una gran falta de valores,de respeto,pero tambien producto de lo que somos como sociedad.
Querer matar a un niño de 12 años en que se diferencia de pedir el aborto o la pena de muerte?
[b]10 Motivos para No bajar la edad edad de Punibilidad a los 14 años en Argentina.[/b]
Escrito por [Popular](http://comunicacionpopular.com.ar/author/Popular/) on Jan 26th, 2011 en la sección [Actualidad](http://comunicacionpopular.com.ar/actualidad/). Podés seguir cualquier respuesta a esta entrada a través de [RSS 2.0](http://comunicacionpopular.com.ar/10-motivos-para-no-bajar-la-edad-edad-de-punibilidad-a-los-14-anos-en-argentina/feed/). Podés dejar un comentarios a esta noticia
PORQUE SERÍA REGRESIVO: En el Derecho Internacional de los Derechos Humanos rige el principio de no regresividad y de progresividad: está prohibido regresar a instancias anteriores de la cobertura de un derecho, y solo se puede avanzar en dicha cobertura. El Código Penal sancionado en 1921 establecía la edad de punibilidad en 14 años. Durante el gobierno peronista, en 1954, se estableció en 16 años, en el marco de una política dirigida a la protección de la infancia (Ley 14.394). La Dictadura, en una de sus primeras medidas (Decreto Ley 21.338), derogó parcialmente esa norma, y fijó la edad de punibilidad en 14 años, decisión que mantuvo en el Régimen Penal de la Minoridad, creado en 1980 (Decreto Ley 22.278). En mayo de 1983, meses antes de la recuperación de la democracia, la edad de punibilidad volvió a establecerse en los 16 años. Regresar a la edad establecida por la Dictadura no parece una medida dirigida a la mejor protección de nuestros niños y adolescentes.
PORQUE EL ÚNICO OBJETIVO ES EL CASTIGO: El mandato constitucional establece que el sentido de la privación de la libertad no debe ser el castigo, sino la adecuada preparación para la vida en libertad. Sin embargo, la discusión de estos proyectos, luego de un hecho grave que involucró a un adolescente de 14 años, revela que el único objetivo es establecer políticas de castigo sobre esta población, violentando ese mandato, y confundiendo a las personas que creen que esta reforma le será aplicada a ese joven, lo que es falso.
PORQUE NO ES CIERTO QUE SEA EL ÚNICO MODO DE BRINDAR GARANTÍAS A LOS ADOLESCENTES DE 14 Y 15 AÑOS: Decir que el único modo en que una persona acceda a las garantías constitucionales es introducirlo en el sistema penal es por lo menos una falacia. Las garantías las tenemos todas las personas de todas las edades, el problema es que muchas veces no se cumplen ni se respetan. Es responsabilidad de los jueces aplicar las leyes, y velar porque todas las garantías de todas y todos los ciudadanos, se cumplan conforme la ley.
PORQUE NO SE TRATA DE SANCIONAR MÁS LEYES, SINO DE CUMPLIR LAS QUE YA EXISTEN: La Convención sobre los Derechos del Niño y la Ley de Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061) tienen plena vigencia, así como todos los tratados internacionales de derechos humanos que establecen todos los derechos a los que son acreedores cada niño y cada niña que vive en nuestro país. Sin embargo, la mitad de ellos carece de condiciones básicas de existencia: no tienen cloacas ni agua potable, ni vivienda, ni educación y salud de calidad, ni viven en un ambiente sano, ni tienen acceso a oportunidades, actividades recreativas, vacaciones, futuro. Hay leyes que dicen que tienen derecho a todo esto, pero no hay jueces que las apliquen ni funcionarios que las ejecuten.
PORQUE LA CANTIDAD DE ADOLESCENTES DE 14 Y 15 AÑOS QUE COMETEN DELITOS GRAVES ES ÍNFIMA: Diputados y diputadas, senadores y senadores deberían pensar si es justo sancionar una ley que, más allá de sus intenciones, será aplicada para el castigo, y que significará un retroceso en cuanto a las políticas dirigidas a la infancia, para atender, de modo punitivo, los hechos que cometen un puñado de adolescentes. Según una investigación de Unicef, la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, y la Universidad Nacional de 3 de Febrero (UNICEF - UNICEF Home argentina/ spanish/Adolesce ntes_en_el_ sistema_penal. pdf)
sobre un total de 1800 adolescentes menores de 18 años privados de libertad por causas penales en el país, un 17 % son no punibles, es decir menores de 16 años: 300 adolescentes. Ahora bien, cuando se analizan los delitos que se les imputan a aquellos 1800 adolescentes privados de libertad, los datos indican que un 15 % está imputado de homicidio (incluyendo la tentativa de homicidio, es decir, los casos en que no se produjo el resultado muerte): 270 casos. Si aplicáramos la proporción entre punibles y no punibles, tendríamos que, de esos 270 casos, solo 46 (el 17 % de 270) corresponderí an a adolescentes de entre 14 y 15 años.
Pero esa cifra es más baja aún si tomamos la cifra del total de homicidios dolosos que se cometen al año en nuestro país: unos 2000. De esa cantidad, en unos 200 participan menores de 18 años. Y de esos doscientos, según declaraciones del director regional de Unicef para América Latina y el Caribe, Nils Kastberg, en solo 15 casos participan menores de 16 añoshttp://http: //www.pagina12. com.ar/diario/ sociedad/ 3-123922- 2009-04-26. html
Este análisis no supone quitar importancia a una sola muerte violenta producida por la intervención de un adolescente, pero entendemos que una decisión de política criminal de la gravedad de la que se intenta, debe analizar a qué población está destinada, con qué objetivos, y a qué costos, antes de tomarse.
PORQUE SI EL ESTADO NO ES CAPAZ DE CONTROLAR LAS INSTITUCIONES DE ENCIERRO QUE HOY TIENE, MUCHO MENOS PODRÁ CONTROLAR LAS QUE PIENSA CREAR: Todos los días hay noticias acerca de muertes en lugares de encierro (76 por causas violentas y/o dudosas durante 2008, según los registros del Centro de Estudios en Política Criminal y Derechos Humanos) El viernes 24 de abril, la justicia ordenó cerrar un hogar de niños, niñas y adolescentes regenteado por la Fundación de Julio Grassi, luego de que un niño de ocho años intentara ahorcarse, hastiado de los abusos cometidos contra su persona, y de que se recopilaran otras tantas denuncias. La Argentina ratificó el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos y Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes en noviembre de 2004, pero no implementa los mecanismos de visita a los lugares de detención para prevenir los abusos, los malos tratos y la tortura. Esa es otra norma vigente que no se cumple, casi cinco años después de ser sancionada.
PORQUE EL SISTEMA PENAL ES DISCRIMINATORIO, SELECTIVO, ESTIGMATIZANTE: Es decir: no persigue a todos por igual, sino a los más pobres, los más vulnerables, los que menos “esfuerzo” tienen que hacer para caer en sus redes. Y cuando los captura, los separa del resto de la sociedad, los marca. Nadie que pase por una institución del sistema penal sale sin huellas, a veces en el cuerpo, casi siempre en su psiquis. Y las huellas son más profundas y dolorosas cuando se provocan en niños y adolescentes.
PORQUE LOS PIBES SON EL ESLABÓN MÁS DÉBIL DE LOS GRUPOS DELICTIVOS Y LAS EMPRESAS CRIMINALES: Casi siempre que un adolescente está inmerso en una situación violenta, es porque alguien con más edad y con más poder, lo ha utilizado. Un niño de 14 años difícilmente robe un auto para cometer otros delitos. Lo más seguro y lo que indican todas las investigaciones es que recibe un arma y una paga miserable por conseguir ese auto que luego irá a un desarmadero, para que muchos de los que reclaman la baja en la edad de la punibilidad compren más baratos los respuestos para sus autos.
PORQUE LAS PENAS PREVISTAS NO SON INTOCABLES: Se utiliza como un argumento a favor de la baja de edad de punibilidad, que se fijarán penas bajas (lo que no es cierto, al menos en el proyecto presentado por el Dr. Raúl Zaffaroni y la Dra. Lucila Larrandart, en el que se permiten penas de hasta siete años para la franja de 14 y 15 años, y de quince años para la franja de 16 y 17, lo que transformaría al régimen argentino en el más gravoso y represivo de Latinoamérica) . Pero hasta estas penas draconianas pueden elevarse: basta que suceda algún hecho trágico, o lo suficientemente difundido por los medios, para que se dupliquen, o tripliquen, frente a un próximo clamor popular. Del mismo modo que sucedió con la presión del ex ingeniero Blumberg, en 2004, en que los máximos de pena aplicable a ciertos delitos subieron a los cincuenta años, obviamente sin ningún efecto en cuanto a la disminución de esos delitos.
PORQUE VAN A METER PRESOS A LAS PRINCIPALES VÍCTIMAS DEL NEOLIBERALISMO QUE ESTA SOCIEDAD VOTÓ Y ACEPTÓ DURANTE UNA DÉCADA: Los adolescentes que hoy tienen 14 y 15 años nacieron entre 1994 y 1995, cuando millones de votantes reeligieron a Menem, y sus políticas, con la consecuencia de desintegració n social, marginación de millones de personas, destrucción de la escuela pública, pauperización y desempleo de los padres de estos adolescentes.
fuente:
Centro de Estudios en Política Criminal y Derechos Humanos
Buenos Aires, 21 de Mayo de 2010
NINGUN PIBE NACE CHORRO !!
NO A LA BAJA EN LA EDAD DE IMPUTABILIDAD !!
APDN – LA PAMPA apdnlapampa@hotmail.com
Si hay un incendio primero lo apagas y despues tomas las medidas para evitar que vuelva a suceder, no al reves. Hoy salgo a la calle y un hijo de puta de 10 años me pega un balazo porque me viene a chorear todo puesto, y mañana esta en la calle de nuevo. Ustedes los defienden.
Este argumento quizás sea el más sustentable de todos. Peeeeeeeeeeero… depende de qué es lo que entiendas por “avance” y qué es lo que entiendas por “retroceso”. O sea, hay algo concreto -por lo menos en mi opinión-, que es que el ser humano entra cada vez más rápido en la adolescencia, no sólo física sino también mentalmente. O sea, si citaban simplemente la norma del Derecho Internacional (que supuestamente, estaría cubierta con la parte de la Constitución que habla de “pactos preexistentes”) era suficiente. Ahora, la otra parte en la que muestran a la edad de imputabilidad oscilando tanto, muestran justamente que quizás no es tan inconstitucional que se baraje el cambio. Y en realidad, si nos atenemos a las palabras de nuestra Presidente, que dijo que “el problema no era bajar la edad de imputabilidad, sino hacerlo en un marco en que se evalúe el derecho juvenil en su totalidad”, nos damos cuenta de que en realidad, NO ES inconstitucional. Si no, nada más fácil para Cristina que decir eso. Y si hay algo que le reconozco a Cristina después de su extensa participación como congresal, es su conocimiento legislativo (aunque a veces se pase el Congreso por el equivalente femenino de “las guindas” :mrgreen:)
Bueno, en esto definitivamente NO COINCIDO. A ver, vamos por partes. Lo último que dicen es cierto: si vos bajás la edad de imputabilidad, eso de por sí no va a condenar al asesino de este hombre de Tolosa.
Ahora bien, este manifiesto deja notoriamente de lado algo. Acá se hace mucho hincapié en el “castigo” que representa para el joven, cuando NO ES, ni por las tapas, el motivo por el cual se encierra a la gente. El privar de la libertad a alguien (sobre todo cuando hablamos de un asesinato) no implica que vos aislás a ese joven en un encierro para castigarlo. Lo aislás PARA QUE NO LE HAGA DAÑO A OTROS. Ese joven YA PROBÓ su capacidad de dañar. Vos aislás en prisión a la gente que demostró que no puede vivir en sociedad, con las normas que la misma sociedad, a través de sus distintas instituciones, dictó para su convivencia.
La intención de las cárceles NO ES castigar, es CORREGIR. Si sirven o no de instituciones correccionales (tal es su nombre) es harina de otro costal y de otro debate. En ésto, esta publicación no sólo hace sapo en desconocer eso, sino que además, con tal de defender a la minoridad, en ningún momento se preocupa de las consecuencias que tienen sus actos.
En esto sí estoy de acuerdo. No sé a quién se le ocurre defender un proyecto de este tipo basados en esta falacia.
Bien… acá el debate entre el problema de fondo que origina la delincuencia (sobre todo en su faceta más violenta) y las consecuencias. A ver, yo estoy de acuerdo en este punto. El problema acá es ¿qué hacemos mientras alguien se ocupa de ésto? Sigo insistiendo, el problema es más educación, mejor distribución de la riqueza, cero desnutrición, blablabla. Y HAY que hacerlo. Y no jodan conque no hay fondos: de países como Inglaterra (que supuestamente entra dentro de los “capitalismos salvajes”) se van constantemente tipos ricos a vivir a otro lado (el último caso que recuerdo es el de Phil Collins) porque tienen impuestos a las ganancias que bordean el 80%. Acá, algunas veces se llegó a hablar de que impuestos por encima del 33% son … (no recuerdo la palabra exacta, pero se hablaba prácticamente de un despojo). Y yo estoy de acuerdo depende de a QUIÉN le encajes ese impuesto. Que le encajes a un tipo de clase media con un sueldo más o menos alto un impuesto de ese tipo, es una cargada. Que a un Grobocopatel se lo encajes, sería altamente positivo. O a una Amalita Lacroze de Fortabat, y - por qué no - a un Magnetto.
(me acordé… que eran “expropiativos”… la puta, en el Reino Unido se la pasan “expropiando” gente… :mrgreen::mrgreen::mrgreen:)
Ahora bien, mientras no hagas un cambio de raíz en la sociedad (un cambio radical, como quien diría :mrgreen:), las consecuencias van a seguir siendo las mismas. Yo creo que AMBAS cosas tienen que implementarse en conjunto. Ahora bien, las soluciones de fondo van a tardar, por lógica.
Bien. Si se aplica la idea que proponemos algunos (que esta clase de medidas se apliquen sólamente contra los delitos graves, más concretamente, contra un asesinato) la cantidad de menores a condenarse va a ser ínfima también. ¿Cuál sería el problema, entonces? Si delitos de esa magnitud se pueden ver como “ínfimos” a la luz de las estadísticas, ¿cómo puede ser que no sean “ínfimos” los menores a los cuales se les aplicaría la baja de la imputabilidad?
Claro. Entonces, la solución es dejar a menores que asesinaron, libres, para que puedan volver a matar. Aclaro otro problema: el Estado TAMPOCO está en condiciones de garantizar la vida de los ciudadanos que, en base al artículo 14 de la Constitución, tienen el derecho de trabajar, comerciar y ejercer toda industria lícita. Yo entiendo perfectamente todo lo que dicen en este punto, y entiendo perfectamente que esto se debe modificar. Un preso no es un animal infrahumano, es simplemente un tipo que está privado de algunos derechos constitucionales (ALGUNOS) por su condición de condenado, por ejemplo, el de transitar libremente por el país, el de votar y algunos más.
Ahora bien, si yo tengo que preservar derechos y tengo conflictos entre preservar un derecho o el otro… digo, yo prefiero preservar primero el del tipo que no delinque. Repito, NO ESTOY HABLANDO de criminalizar a los menores que cometen delitos menores. Pero entre salvaguardar el derecho de un lugar digno de detención y salvaguardar el derecho de un ciudadano a que no lo maten, no tengo ninguna duda: el segundo.
Fantástico. Otra vez el debate respecto de los problemas de fondo. Y no puedo estar más de acuerdo. Ahora bien, ¿qué hacemos con quienes pierden la VIDA en manos de estos menores?
Bien. Hay que ir al fondo del asunto y encargarse de los adultos. Y caerles con todo el peso de la ley. En eso estamos de acuerdo.
A ver, vamos por puntos con esto. Primero, no sé de dónde sale esa voz que habla de “penas bajas”. Yo (en mi caso), sería partidario de seguir con el sistema como está para los delitos comunes. Para los delitos como un asesinato, NI EN PEDO estoy a favor de las “penas bajas”. Como ya me cansé de decir por acá, para mí quien perdió el respeto a la vida no lo recupera más. Por ende, ni a palos me interesa que se coma “hasta siete años”.
Después, hablar de “penas draconianas” en general… a ver, hablemos un poco en particular. Si el problema es un delito de secuestro, en el cual se lo privó de la libertad a un ciudadano pero después del rescate fue liberado, me parece que el código penal está perfecto. Ahora bien, si hablamos de un secuestro seguido de muerte… yo no estoy de acuerdo en subir las penas porque sí, sino hacer cumplir las que ya están, como dicen. Pero si le encajan 50 años a un tipo que secuestra y mata a alguien, discúlpenme pero eso no me hace sufrir en lo más mínimo. Y si baja o no el delito después de eso, tampoco me preocupa en lo más mínimo. Un tipo que secuestra y mata a alguien, como fue el caso que le sucedió a Blumberg, para mí se merece PERPETUA sin posibilidad de jamás salir a la calle. Porque está recontra visto que no tiene el menor respeto por una vida humana, entonces, ese tipo no se merece vivir en la sociedad con el resto de los seres humanos. Hablar de robos, de asaltos, y de delitos que no sean violentos (o sea, excluyendo los delitos de violación, mutilación como cada vez es más común en los bondis bonaerenses, o asesinato)… sí, en eso estoy de acuerdo con el artículo.
Bueno… en este punto tienen mucha razón.
Resumiendo… como siempre, en este tipo de visiones, estoy de acuerdo salvo cuando se llega al límite de la pérdida de la vida humana. Eso es un delito irreparable. Y no creo que deba ser “teorizado” junto con todo el resto de los delitos. Que te roben guita, un celular, el auto… macho, todo eso se recupera y nada de eso justifica, como bien dicen los pibes estos que publicaron este artículo, el criminalizar de más a gente que sufrió las consecuencias de uno de los gobiernos más viles y más cipayos de la historia (y ojo, que fue con la anuencia de muchos ciudadanos argentinos). Ahora bien, todo para mí tiene ese límite clave: la vida humana. Cuando se pasa ese límite, se me acabó la contemplación.
10 motivos para no bajar la edad de punibilidad a los 14 años en Argentina
[spoiler] 10 Motivos para No bajar la edad edad de Punibilidad a los 14 años en Argentina.
Escrito por [Popular](http://comunicacionpopular.com.ar/author/Popular/) on Jan 26th, 2011 en la sección [Actualidad](http://comunicacionpopular.com.ar/actualidad/). Podés seguir cualquier respuesta a esta entrada a través de [RSS 2.0](http://comunicacionpopular.com.ar/10-motivos-para-no-bajar-la-edad-edad-de-punibilidad-a-los-14-anos-en-argentina/feed/). Podés dejar un comentarios a esta noticia
[b]Hay intereses que están instalando un problema y un objetivo que no va a llevar a nada más que una sociedad represiva y controlada, com más delincuencia. [/b]
Paremos la pelota y no nos dejemos arrastrar por la locura mediática y su manía de inventar problemas y amenazas que solo sirven para llevar al poder a supuestos protectores que siempre son derechosos y que aumentan los problemas sociales. Paremos. Pensemos un poco. No pensar, dejarse llevar por un miedo inducido nos convierte en marionetas, ¿o no?
PORQUE SERÍA REGRESIVO:
En el Derecho Internacional de los Derechos Humanos rige el principio de no regresividad y de progresividad: está prohibido regresar a instancias anteriores de la cobertura de un derecho, y solo se puede avanzar en dicha cobertura. El Código Penal sancionado en 1921 establecía la edad de punibilidad en 14 años. Durante el gobierno peronista, en 1954, se estableció en 16 años, en el marco de una política dirigida a la protección de la infancia (Ley 14.394). La Dictadura, en una de sus primeras medidas (Decreto Ley 21.338), derogó parcialmente esa norma, y fijó la edad de punibilidad en 14 años, decisión que mantuvo en el Régimen Penal de la Minoridad, creado en 1980 (Decreto Ley 22.278). En mayo de 1983, meses antes de la recuperación de la democracia, la edad de punibilidad volvió a establecerse en los 16 años. Regresar a la edad establecida por la Dictadura no parece una medida dirigida a la mejor protección de nuestros niños y adolescentes.
PORQUE EL ÚNICO OBJETIVO ES EL CASTIGO:
El mandato constitucional establece que el sentido de la privación de la libertad no debe ser el castigo, sino la adecuada preparación para la vida en libertad. Sin embargo, la discusión de estos proyectos, luego de un hecho grave que involucró a un adolescente de 14 años, revela que el único objetivo es establecer políticas de castigo sobre esta población, violentando ese mandato, y confundiendo a las personas que creen que esta reforma le será aplicada a ese joven, lo que es falso.
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PORQUE NO ES CIERTO QUE SEA EL ÚNICO MODO DE BRINDAR GARANTÍAS A LOS ADOLESCENTES DE 14 Y 15 AÑOS:
Decir que el único modo en que una persona acceda a las garantías constitucionales es introducirlo en el sistema penal es por lo menos una falacia. Las garantías las tenemos todas las personas de todas las edades, el problema es que muchas veces no se cumplen ni se respetan. Es responsabilidad de los jueces aplicar las leyes, y velar porque todas las garantías de todas y todos los ciudadanos, se cumplan conforme la ley.
PORQUE NO SE TRATA DE SANCIONAR MÁS LEYES, SINO DE CUMPLIR LAS QUE YA EXISTEN:
La Convención sobre los Derechos del Niño y la Ley de Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (Ley 26.061) tienen plena vigencia, así como todos los tratados internacionales de derechos humanos que establecen todos los derechos a los que son acreedores cada niño y cada niña que vive en nuestro país. Sin embargo, la mitad de ellos carece de condiciones básicas de existencia: no tienen cloacas ni agua potable, ni vivienda, ni educación y salud de calidad, ni viven en un ambiente sano, ni tienen acceso a oportunidades, actividades recreativas, vacaciones, futuro. Hay leyes que dicen que tienen derecho a todo esto, pero no hay jueces que las apliquen ni funcionarios que las ejecuten.
PORQUE LA CANTIDAD DE ADOLESCENTES DE 14 Y 15 AÑOS QUE COMETEN DELITOS GRAVES ES ÍNFIMA:
Diputados y diputadas, senadores y senadores deberían pensar si es justo sancionar una ley que, más allá de sus intenciones, será aplicada para el castigo, y que significará un retroceso en cuanto a las políticas dirigidas a la infancia, para atender, de modo punitivo, los hechos que cometen un puñado de adolescentes. Según una investigación de Unicef, la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, y la Universidad Nacional de 3 de Febrero (UNICEF - UNICEF Home argentina/ spanish/Adolesce ntes_en_el_ sistema_penal. pdf)
sobre un total de 1800 adolescentes menores de 18 años privados de libertad por causas penales en el país, un 17 % son no punibles, es decir menores de 16 años: 300 adolescentes. Ahora bien, cuando se analizan los delitos que se les imputan a aquellos 1800 adolescentes privados de libertad, los datos indican que un 15 % está imputado de homicidio (incluyendo la tentativa de homicidio, es decir, los casos en que no se produjo el resultado muerte): 270 casos. Si aplicáramos la proporción entre punibles y no punibles, tendríamos que, de esos 270 casos, solo 46 (el 17 % de 270) corresponderí an a adolescentes de entre 14 y 15 años.
Pero esa cifra es más baja aún si tomamos la cifra del total de homicidios dolosos que se cometen al año en nuestro país: unos 2000. De esa cantidad, en unos 200 participan menores de 18 años. Y de esos doscientos, según declaraciones del director regional de Unicef para América Latina y el Caribe, Nils Kastberg, en solo 15 casos participan menores de 16 añoshttp://http: //www.pagina12. com.ar/diario/ sociedad/ 3-123922- 2009-04-26. html
Este análisis no supone quitar importancia a una sola muerte violenta producida por la intervención de un adolescente, pero entendemos que una decisión de política criminal de la gravedad de la que se intenta, debe analizar a qué población está destinada, con qué objetivos, y a qué costos, antes de tomarse.
PORQUE SI EL ESTADO NO ES CAPAZ DE CONTROLAR LAS INSTITUCIONES DE ENCIERRO QUE HOY TIENE, MUCHO MENOS PODRÁ CONTROLAR LAS QUE PIENSA CREAR:
Todos los días hay noticias acerca de muertes en lugares de encierro (76 por causas violentas y/o dudosas durante 2008, según los registros del Centro de Estudios en Política Criminal y Derechos Humanos) El viernes 24 de abril, la justicia ordenó cerrar un hogar de niños, niñas y adolescentes regenteado por la Fundación de Julio Grassi, luego de que un niño de ocho años intentara ahorcarse, hastiado de los abusos cometidos contra su persona, y de que se recopilaran otras tantas denuncias. La Argentina ratificó el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos y Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes en noviembre de 2004, pero no implementa los mecanismos de visita a los lugares de detención para prevenir los abusos, los malos tratos y la tortura. Esa es otra norma vigente que no se cumple, casi cinco años después de ser sancionada.
PORQUE EL SISTEMA PENAL ES DISCRIMINATORIO, SELECTIVO, ESTIGMATIZANTE:
Es decir: no persigue a todos por igual, sino a los más pobres, los más vulnerables, los que menos “esfuerzo” tienen que hacer para caer en sus redes. Y cuando los captura, los separa del resto de la sociedad, los marca. Nadie que pase por una institución del sistema penal sale sin huellas, a veces en el cuerpo, casi siempre en su psiquis. Y las huellas son más profundas y dolorosas cuando se provocan en niños y adolescentes.
PORQUE LOS PIBES SON EL ESLABÓN MÁS DÉBIL DE LOS GRUPOS DELICTIVOS Y LAS EMPRESAS CRIMINALES:
Casi siempre que un adolescente está inmerso en una situación violenta, es porque alguien con más edad y con más poder, lo ha utilizado. Un niño de 14 años difícilmente robe un auto para cometer otros delitos. Lo más seguro y lo que indican todas las investigaciones es que recibe un arma y una paga miserable por conseguir ese auto que luego irá a un desarmadero, para que muchos de los que reclaman la baja en la edad de la punibilidad compren más baratos los respuestos para sus autos.
PORQUE LAS PENAS PREVISTAS NO SON INTOCABLES:
Se utiliza como un argumento a favor de la baja de edad de punibilidad, que se fijarán penas bajas (lo que no es cierto, al menos en el proyecto presentado por el Dr. Raúl Zaffaroni y la Dra. Lucila Larrandart, en el que se permiten penas de hasta siete años para la franja de 14 y 15 años, y de quince años para la franja de 16 y 17, lo que transformaría al régimen argentino en el más gravoso y represivo de Latinoamérica) . Pero hasta estas penas draconianas pueden elevarse: basta que suceda algún hecho trágico, o lo suficientemente difundido por los medios, para que se dupliquen, o tripliquen, frente a un próximo clamor popular. Del mismo modo que sucedió con la presión del ex ingeniero Blumberg, en 2004, en que los máximos de pena aplicable a ciertos delitos subieron a los cincuenta años, obviamente sin ningún efecto en cuanto a la disminución de esos delitos.
PORQUE VAN A METER PRESOS A LAS PRINCIPALES VÍCTIMAS DEL NEOLIBERALISMO QUE ESTA SOCIEDAD VOTÓ Y ACEPTÓ DURANTE UNA DÉCADA:
Los adolescentes que hoy tienen 14 y 15 años nacieron entre 1994 y 1995, cuando millones de votantes reeligieron a Menem, y sus políticas, con la consecuencia de desintegració n social, marginación de millones de personas, destrucción de la escuela pública, pauperización y desempleo de los padres de estos adolescentes.
Centro de Estudios en Política Criminal y Derechos Humanos
Buenos Aires, 21 de Mayo de 2010
NINGUN PIBE NACE CHORRO !!
NO A LA BAJA EN LA EDAD DE IMPUTABILIDAD !!
APDN – LA PAMPA apdnlapampa@hotmail.com[/spoiler]
ni siquiera lei el articulo que puse yo :lol: solo vi el titulo:lol:…
hacia más de un mes que no entraba… e iban por la pagina 9,… bastante con que entre a saludar (?)…
Iba a contestar punto pot punto la TREMENDA ESTUPIDEZ que subieron Master y después el presi, pero veo que Martín ya refutó todo correctamente, de manera satisfactoria.
Me parece que la gente que no quiere que se baje la edad de imputabilidad no tiene absolutamente NADA para sostener esa postura. Argumentos pobres, fácilmente refutables, contra todo sentido común. No entiendo como siquiera se discute esta posibilidad. Es tan lógico lo de bajar la edad, es tan sensato. Hasta Cristina lo dijo. No hinchen más los huevos.
Fue un artículo para promover el debate, justamente lo que hizo Martín en vez de descalificar. Si te hubieras tomado el trabajo de leer lo que se escribió antes te hubieras dado cuenta de los puntos de acuerdo.
Estoy en desacuerdo con bajar la edad de imputabilidad en otros crímenes. Para el asesinato y violación hay que estudiarlo. Y que los adultos compartan parte de la condena
Leí perfecto todo. Los 10 puntos y los comentarios de Martín. Para mí una postura contraria a la baja es digna de descalificación, que querés que te diga.
¿Para toda clase de delito? ¿No contemplas responsabilidad para un tutor de alguien de 14 años?
De hecho Martín estaba de acuerdo o parcialmente de acuerdo con la mayoría dela artículo.
El que me parece peor es el punto PORQUE EL ÚNICO OBJETIVO ES EL CASTIGO. Esto puede ser desde los que argumentan, pero los objetivos de las cárceles, según la constitución, no es el castigo, sino la seguridad de la población
Pero Master, el tema es así: si vos tenés un pibe capaz de matar (por motivos sociales o familiares) sin que se le mueva un pelo, capaz de volverlo a hacer si se presenta la oportunidad, porque tiene plena libertad de hacerlo… ¿Dónde quedan las verdades de ese artículo? Enterradas. Lo único cierto es que el primer valor que tenés que defender es la vida. Después vienen todos los demás, dado que la vida no se puede recuperar. Una vez que alguien es una amenaza para la vida de inocentes, no hay argumento válido para que tal amenaza siga en pie. Es TAN CLARO, tan evidente, que para mí no admite discusión, es axiomático. A menos claro, que salte alguien que diga que la vida no es el valor más importante. Es el único caso en que admitiría discusión el tema.
Entonces como la vida no se puede recuperar y no hay que castigar (total, esto de hacerse cargo está pasado de moda), bueno, ok vamos a prevenir: un pibe de 14 que sacó una vida: adentro, para que no saque más vidas hasta que pueda salir sin ser una amenaza para los otros que quedan vivos por ahí. Mirá que propuesta preventiva genial y expeditiva.
PD: Leé el thread, en vez de proponer lo que anteriormente ya estuvo refutado.
yo no propuse nada… no me voy a poner a discutir pelotudeces que lo único que hacen es desviar la atención de las cosas realmente importantes… mi postura sobre este tema la deje en claro varias veces… y curiosamente nunca nada fue refutado…
Si no vas a discutir porque te parece que esto son pelotudeces, perfecto, pero no te metas a decir gansadas.
Si querés discutir, metete, pero usando argumentos no-estúpidos. Gracias.