Trump Presidente: Powell nominado a la Reserva

Alla el voto ni siquiera es directo. Bush Jr gano una elecciones que había perdido en el “voto popular”, ya que en el sistema electoral yankie solo se vota para recomendar a los “electores de cada Estado” determinado candidato, y estos son quienes terminan eligiendo al Presidente.

Aca una explicación de Wiki mas clara que la mía:

Cuando un ciudadano vota por su candidato a presidente, esta persona está votando realmente para instruir al elector de su estado hacia dónde debe ser dirigido su voto en el Colegio Electoral. Por ejemplo, si un ciudadano deposita su papeleta por el candidato del partido republicano, realmente esta persona está ordenando al “elector” de su estado para que vote por ese candidato en la reunión de electores en el Colegio Electoral, lo mismo en el caso demócrata. O lo que es lo mismo, quien gane el voto popular en un determinado estado, conseguirá el respaldo de “los electores” y, por tanto, los votos estatales a ese candidato y su partido.
De darse el caso de que ninguno de los candidatos obtenga más de 270 votos electorales, la Duodécima Enmienda a la Constitución entra a regir y el Congreso decide quien será el nuevo presidente. La combinación de congresistas de cada estado tiene derecho a un voto por estado y una mayoría simple de estados da un ganador.

El voto popular no elige al presidente en EE.UU.

En Estados Unidos el voto popular directo no elige el presidente. Esa función recae sobre un colegio electoral de 538 electores provenientes de los 50 estados y el Distrito de Columbia (la capital) que depositan los votos por el candidato que haya ganado en su estado. Quien acumule 270 o más votos electorales, gana la presidencia.
El colegio electoral fue instituido por los representantes de los estados que conformaron la unión de la república, a finales del siglo XVIII, con el propósito de proteger los intereses de cada estado individual y evitar el dominio de las regiones más pobladas del país.
Por lo general, quien gana el voto electoral gana también el voto popular pero ha habido antecedentes en los que sucedió lo contrario, por lo que los críticos dicen que el sistema es anticuado, antidemocrático y no representa los intereses del pueblo.
También podría darse un empate de votos electorales y, de ocurrir, la decisión final podría recaer sobre la Cámara de Representantes y donde las delegaciones de cada estado votan en bloque o sea, un voto por delegación. Se podría dar el caso que el presidente sea elegido con apenas 26 votos.
Cambiar el sistema, sin embargo, sería una jaqueca constitucional.

Estados grandes vs. pequeños Image caption El complejo sistema del colegio electoral se enseña en los colegios. En 1787, representantes de los 13 estados que se unieron para formar los Estados Unidos de América y el Distrito de Columbia se reunieron en una Convención Constitucional para discutir la mejor manera de elegir a sus líderes que fuera justa, equilibrada y representativa de todos.
La elección directa por voto popular se descartó en aras de proteger a los estados más pequeños del poder de los grandes. Hay que recordar que la independencia de los estados era, y sigue siendo, parte fundamental de la estructura política del país.
Los estados con menor población temían que sus intereses no fueran abordados a nivel nacional. Particularmente los estados sureños con muchos esclavos, como Virginia, cuya población con derecho al voto era reducida, así que en una elección popular directa no ejercería mucha influencia.

Se decidió crear un colegio electoral al que cada estado aporta electores según el tamaño de su población pero con ciertos ajustes para equilibrar las cosas. El número de electores de cada estado se establece de acuerdo a cuántos representantes envía la Cámara Baja y cuántos senadores a la Cámara Alta.
Como los estados con mayor población envían más representantes a la Cámara Baja, es lógico que tengan más electores en el colegio electoral, pero se ajusta con los electores correspondientes a los senadores puesto que cada estado envía únicamente dos al Congreso, no importa su tamaño.
El Distrito de Columbia, Washington DC, por no ser un estado no tiene ni senadores ni representantes con voto en el Congreso pero se le otorgan tres electores para los comicios presidenciales como parte del mismo método de controles y ajustes.
En la actualidad, 538 miembros conforman el colegio electoral. California, el estado más populoso, aporta 55; Wyoming, uno de los menos poblados, aporta tres.

El ganador se lo lleva todo Image caption Barack Obama pasó la mayoría del tiempo haciendo campaña en estados péndulo como Ohio. Cada estado realiza su propia elección presidencial interna. Básicamente, cuando el ciudadano de un estado deposita su voto por un candidato presidencial su deseo es que se envíen todos los electores de su estado al colegio electoral a votar por el candidato que escogió y así se hace si ese candidato obtiene la mayoría del voto popular en el estado.
Aunque no es ley en todos los estados, los electores tienen el compromiso de depositar sus votos electorales a favor del candidato que ganó en sus estados. En 2012, quien reciba 270 o más votos electorales gana la presidencia de Estados Unidos.
Sin embargo, es un sistema en el que el ganador se queda con todo y el que muchos consideran ha tergiversado la representación del pueblo en sus líderes y la forma como estos hacen campaña.
El sistema que tenemos es muy enredado y no representa la voluntad del puebloDixie Swanson, autora de “El Presidente Accidental”

Si un candidato gana por un voto directo en California, se lleva todos los votos electorales. De la misma manera, si gana por cinco mil votos directos en Wyoming, se lleva apenas tres votos electorales.
Dixie Swanson, ex asesora de un grupo de presión en Washington y autora de la trilogía “El Presidente Accidental”, aboga por el establecimiento del voto popular para la elección presidencial.
“El sistema que tenemos es muy enredado y no representa la voluntad del pueblo”, dijo a BBC Mundo. "Los estadounidenses somos un pueblo sencillo, vamos a votar por Romney o por Obama y no queremos intermediarios entre nosotros y nuestro voto.

Estados olvidados Image caption Florida es crucial para Mitt Romney y su campaña fue intensa en este estado. Swanson dice que con el ganador en un estado llevándose todos los votos electorales se viola el derecho fundamental de “una persona un voto”. Añade que, para propósitos de campaña, los candidatos solo se concentran en aquellos estados donde tienen posibilidad de ganar, olvidándose del resto.
“Dedican toda su atención a los estados ‘péndulo’ como Florida, donde dicen lo que allí quieren oír para ganar ese voto y luego van a Iowa a decir otro tanto para llevarse la elección allí”, comentó.
Lo que señala Dixie Swanson se puede resaltar con el poco tiempo que han dedicado Barack Obama y Mitt Romney a estados como California, Nueva York o Nueva Jersey, que están asegurados para el presidente, o en Texas, Arizona y los estados del sur, firmemente en el bolsillo del candidato republicano.

La autora de “El Presidente Accidental” sostiene que la manera como los candidatos juegan con el sistema de voto electoral ha eliminado el propósito original de reconocimiento a todos, no importa el tamaño. Con la adopción del voto popular, los candidatos tendrían que dirigirse a toda la nación, sostiene.
El colegio electoral no ha cambiado. Solo fracasado. 1824 fue al la cámara de representantes. 1876, 1888 y 2000. La persona que ganó el voto popular perdió el electoral y no fue presidente. Pero ya está anticuado.
“Somos un solo país. Ya tenemos mucha oportunidad de tener representación estatal en la Cámara de Representantes y el Senado. No es necesario poner una barrera entre el pueblo y la elección del presidente”.
Para Swanson, el fracaso del colegio electoral es patente cuando el presidente es elegido por ellos más no por el voto popular. Esto sucedió ya en 1824, 1876, 1888 y, más recientemente, en 2000, cuando George W. Bush ganó la presidencia contra Al Gore con 271 votos electorales pero no con la mayoría del voto popular.
“No queremos tener Bush contra Gore otra vez. Dependemos de la certidumbre de nuestras elecciones de lo contrario sufre la transición suave de poder, sufre la democracia y sufre el pueblo pues no es su decisión quién gana”, recalcó Swanson.

Empates y otras particularidades Image caption La elección entre George W. Bush y Al Gore, en 2000, casi crea una crisis constitucional. Con una elección basada en el voto popular, en el que se cuentan millones de sufragios, la posibilidad de un empate es prácticamente inexistente. Con el sistema del voto colegiado, en el que se manejan apenas 538 votos, esa posibilidad es mayor. En las elecciones de 2012, por lo menos, los analistas han formulado 38 escenarios posibles donde se puede dar un empate entre los dos candidatos.
Aquí las cosas se complicarían pues no todos los estados requieren que sus electores se adhieran al candidato que se les ha encomendado según el resultado de la votación popular.
En la elección de Bush contra Gore, fue una pesadilla para este país. Tenemos un período de transición entre la elección e inauguración. Son dos meses y medios cruciales para una transición suave. Con el colegio electoral, si hay un empate, no sabremos hasta la primera semana de enero quién será presidente.
Si algún elector decide cambiar el voto -se les conoce como electores infieles- sería concebible que una persona que nadie conoce, determine quién sea el próximo presidente. “Eso simplemente viola todos los principios democráticos de nuestro país”, advirtió Dixie Swanson.
Se han dado incidentes en que los electores cambian de parecer pero no han afecta la el resultado de la elección. Pero en esta ocasión, la contienda es tan cerrada que eso podría pasar. Podría volverse en una batalla campal entre electores.

Si persiste el empate, quedaría en manos de la Cámara Baja elegir al presidente. En ese caso cada delegación de cada estado tiene derecho a un voto. Los representantes de cada estado tendrían que decidir entre ellos por quién dar su voto conjunto y, como se pronostica que esta cámara tendrá mayoría republicana, Mitt Romney sería presidente en caso de empate.
Por otra parte, según la Constitución, el Senado estaría encargado de elegir vicepresidente y, como se prevé que estará controlado por los demócratas, ese cargo recaería sobre Joe Biden. Serían un presidente republicano y un vicepresidente demócrata generando seguramente un gobierno muy curioso.
“Hay algunos que piensan que no sería una mala idea tener un verdadero gobierno bipartidista pero es no es por lo que votamos”, expresó Dixie Swanson.
Aunque los partidos políticos en algunos estados se oponen a cambiar el sistema electoral porque estiman que perderían influencia, varias encuestas indican que hay apoyo para adoptar el sistema de elección popular directa.
Eso requeriría un cambio a la Constitución, lo que significa la aprobación de dos terceras partes en ambas cámaras del Congreso y la aprobación de tres cuartas partes de las legislaturas estatales. Como van las cosas en Estados Unidos, el horno no está para bollos.

Estados con más votos electorales CALIFORNIA… 55
TEXAS… 38
FLORIDA… 29
NUEVA YORK…29
ILLINOIS…20
PENNSYLVANIA…20
OHIO…18

Pero no tienen tanta representación como acá

Pensa que el 20% voto a Massa en 2015 quedando como tercera fuerza
Pensa que el 17% voto a Binner en 2011 (socialismo) quedando como segunda fuerza y superando a la UCR y al PJ disidente.
Pensa que el 23% voto a Carrio en 2017 (coalición cívica) quedando como segunda fuerza y superando a la UCR

Alla si bien hay partidos chicos no tienen la fuerza como acá (tienen la misma representación que la izquierda casi)

Quien dijo una falacia ?

Me vas a hacer llorar. Mi primer voto fue por el MAS en el 93. Sacamos el 2% :lol: No rompimos un carajo, ja. La binariedad creo que se rompio recien en el 2003. Todas las elecciones anteriores desde el 83 estaban polarizadas. Alfonsin-Luder, Angeloz-Menehem, Bordon-Menehem, De la Rua-Duhalde. Googlea los porcentajes de los demas partidos en cada una de esas elecciones y comparalas con la polarizacion americana y vas a ver que es mas o menos lo mismo.

---------- Mensaje unificado a las 19:53 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 19:51 ----------

Estoy de acuerdo. Pero como le decia al otro “joven” KKK, la ligera despolarizacion es un fenomeno reciente en Argentina. Tengo la impresion de que despues de estas elecciones algo puede llegar a ocurrir en ese sentido en EEUU tambien.

Si, ya lo se… pero en estricto rigor, aca tampoco elegimos a algunos candidatos (listas sabanas y candidatos testimoniales). Y aca tambien rotan los puestos… que en definitiva es lo que KKK reclamaba.

---------- Mensaje unificado a las 19:59 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 19:58 ----------

Ni en pedo… nadie va a dejar que se mueva el status quo en usa… los que mandan (los que tienen la papota) no lo van a dejar.

La falacia es entrar en la comparación con el sistema argentino para atacar mi posición, falacia del hombre de paja se llama.

Sí, en realidad me refería al partido devenido del MAS, AyL.
Fijate que acá casi es elegido jefe de gobierno un tipo como Lousteau con un partido creado hacía 5 minutos, algo totalmente imposible de recrear en EE.UU. por ejemplo.

Quien gana al final? Supuestamente Turd Sandwich habia bajado en las encuestas despues de los emails.

No, papa, estamos debatiendo, no te sientas atacado :lol:

Falacia es mentir. Aca nadie dijo ninguna mentira. En todo caso se puede argumentar que desde tu punto de vista se esta haciendo una falsa equivalencia, algo que me parece que parte de cierta desinformacion. Ross Perot tambien armo un partido en 5 minutos en los 90 y saco un porcentaje decente de votos. En muchos distritos en USA gobiernan partidos independientes o locales. De hecho, el candidato a presi del partido Libertario es el gobernador del estado de New Mexico.

---------- Mensaje unificado a las 20:16 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 20:12 ----------

Tampoco me parece que una despolarizacion electoral significaria una rotura del status quo (sea lo que sea que eso signifique) o un “peligro” para una supuesta casta comandante.

La puta madre qué grande que es el ex gordo.

//youtu.be/xrkPe-9rM1Q

Gana Hillary por la minima

1 me gusta

@catracho; quien gana?

---------- Mensaje unificado a las 13:11 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 13:10 ----------

perdemos todos

5 Me gusta

Interesantes artículo sobre cómo el Partido Republicano pasó de ser republicano moderado a una mezcla de conservador, autoritario, religioso y libertario. Y como encaja Trump en todo eso.

That the contemporary Republican Party shares a name with the Republican Party of the 1970s — or even of the ’80s or ’90s — has created massive confusion over just how distinct its worldview is. According to one measure of ideology used widely by political scientists, the most conservative Republican in the House 25 years ago, when the House attacked a Republican president for the heresy of increasing taxes, would be among the most liberal House Republicans today. “I’m a conservative from the conservative wing of the conservative movement,” Speaker of the House Paul Ryan said earlier this year, marveling at how he has become a mainstream figure among his peers. “I was always kind of a bomb-thrower from the right … it just shows you that we have shifted the center far to the right, in a good way.”

qepd catrachdios

Si gana la Hilaria habrá Tercera Guerra Mundial:

//youtu.be/htsJxDja5Jo

Para el que sepa ingles nada más que decir:

8 de Noviembre
VOTE COMO SI EL MUNDO DEPENDIERA DE ESO.

Dijo Hillary, cuando el presidente/a da la orden de ataque nuclear debe cumplirse en 4 minutos. Si yo soy presidenta vamos a ATACAR a Irán.

---------- Mensaje unificado a las 04:02 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 03:57 ----------

Ahora Michael Moore recomienda votar a Trump.

//youtu.be/3a9qJSKX6Xg

La elección de Trump será el “fuck you” más grande registrado en la historia de la humanidad.


Michael Moore votará a Donald Trump para decirle Fuck You al corrupto sistema estadounidense.

//youtu.be/4lMp_363B2c

2 Me gusta

Las elecciones Yankees más picantes e importantes de la historia?

Para mí, teniendo en cuenta que terminan eligiendo los electores o que de última el que va a elegir es el Congreso, no hay chances de que no gane Hillary.

1 me gusta

El cambio se dio en la década del sesenta. Cuando el partido demócrata se volvió comunista (antes de eso sólamente estaba FDR), los conservadores tradicionales que votaban demócratas pensando en los ideales de Andrew Jackson se sintieron estafados y se volcaron al partido republicano y crearon una división dentro del mismo. Por un lado estos ex demócratas se volvieron muy duros y los demás republicanos para no quedar como demócratas se fueron endureciendo. Si tuviésemos que comparar, el actual partido republicano es el antiguo partido demócrata de hace 2 siglos y el partido demócrata es un asqueroso comunismo.

Un caso interesante es el Ku Klux Klan, fundado por sureños demócratas que votaron siempre demócratas hasta la década del '30. Luego en la década del '50 y '60 se volvieron republicano.

Hillary o Trump, ¿elección crucial?

[SPOILER]Por Alberto Ferrari Etcheberry *
Los ciudadanos de Estados Unidos elegirán los electores que designarán presidente y vice. Hace mucho que ambos contendientes no muestran un similar y generalizado rechazo a pesar de sus diferencias; Hillary Clinton es la primera mujer con chance de ser presidente; los republicanos con Trump, billonario de borroso currículum ajeno a la política, apelan a la candidatura heterodoxa nacida en 1952 con Eisenhower. Las internas mostraron algo no previsible: Hillary fue desafiada por un veterano senador de un estado de escasa población convertido por seguidores jóvenes en la expresión de un reformismo crítico. Con Trump el proceso fue el opuesto. Candidato marginal fue derrotando a los políticos de tipo habitual sin un programa claro, salvo lo deducible de sus expresiones contra adversarios y minorías, inclusive las mujeres; así logró la postulación y fue definiendo la base social de su propuesta: los blancos pobres de las decaídas zonas industriales castigadas por la globalización financiera. No puede sorprender entonces que ninguno coseche amplias simpatías. Sin embargo, se afirma que con una u otro habrá un cambio hasta drástico en la dirección del país: se coincide en el alcance que el poder de un presidente implica para Estados Unidos. Esas opiniones no se compadecen con su complejo sistema institucional.

Constitución

Es común afirmar que la nuestra de 1853 sigue a la de Estados Unidos de 1787 aunque son las reformas de 1860 las que la convirtieron en sistema federal. Tampoco es cierto que sea una copia: la de 1787 no contiene normas sustanciales: no define siquiera que está fundando una república federal y representativa. Fue consecuencia de las profundas diferencias entre los trece Estados originales (Rhode Island no envió delegados y varios se negaron a firmar el texto final) para reemplazar el sistema de The Articles of Confederation, una laxa vinculación sin poder ejecutivo. Convocada para enmendarlos se pretendió abolirlos bajo impulso de los tenedores de los degradados certificados de la deuda pública y se agregó que los estados grandes rechazaban la igualitaria representación por Estados y los pequeños querían una legislatura de un voto por Estado. La Constitución sólo se ocupa de las reglas de juego, instrumentales, que posibilitaron llegar a un Congreso con la Cámara de Representantes basada en la población y el Senado representando a los Estados igualitariamente. Y entre esas reglas la principal: la reforma de la Constitución con las enmiendas, vigentes cuando sean ratificadas por las tres cuartas partes de los Estados. También la Constitución: hubo que negociar con la mayoría federalista, y en varios Estados la ratificación se condicionó a las enmiendas exigidas por los antifederalistas que se conocen como Bill of Rights. Algunas se usaron en el texto de 1853: Derechos y Garantías, pero hay una diferencia esencial en nuestra Constitución: obligan al gobierno federal y a las provincias y en los Estados Unidos el Bill of Rights era sólo de alcance federal; una limitación a la autoridad nacional, “(que) garante sólo contra la interferencia del Congreso” dijo la Suprema Corte en 1875.

La Constitución norteamericana es el comienzo de la construcción del estado nacional que el poder judicial va a ir edificando desde 1803. Bajo la guía de John Marshall la Suprema Corte fue ampliando sus propios poderes restringiendo los de los Estados. La esencial diferencia nace por la guerra civil. La enmienda 13 de enero de 1865 abolió la esclavitud pero no obliga a los Estados; iniciativa de Lincoln, asesinado en abril, cuyo interés era evitar la secesión. Concluida la guerra la 14(1868) por primera vez se aplica a todos los Estados: ciudadanía, privilegios e inmunidades, debido proceso, igualdad en la protección de las leyes. La 15 (1869) establece el sufragio racial: “ El derecho a votar no será coartado por ningún Estado por razones de raza, color o previa condición de servidumbre.” Han pasado más de 80 años y es obvio recordar que la práctica siguió un camino distinto. Los constituyentes de 1853 ampliaron el modelo: los derechos civiles son de todos los habitantes, art. 14 que abre las puertas a la inmigración. En Estados Unidos no se reconocía al inmigrante los derechos civiles, por eso su rápida adquisición de la ciudadanía fomentada por los caciques políticos. Acá el inmigrante se mantuvo extranjero prefiriendo la eventual representación de los cónsules, aunque el principio jussolis permitió la nacionalización de la descendencia nacida en el país

Bipartidismo

Se describe al sistema como limitado a dos partidos, Republicano y Demócrata. Salvo en 1912, así ha ocurrido a partir del fin de la guerra de secesión, pero ha habido terceros candidatos influyentes: Perot, 1992, Anders, 1980; Wallace, 1968; La Follette, 1924; Weaver, 1892. En 1912 Teddy Roosevelt con el Partido Progresista superó al presidente republicano Taft permitiendo la victoria del demócrata Wilson.

Desde el comienzo se tendía a la agrupación política; los federalistas son considerados el primer partido. Las divisiones estaban asentadas en claros conflictos de intereses y en las colonias ya existía la representación de la población. Se alertaba contra la “tiranía de las mayorías” y se forjó en Filadelfia una conducta de compromisos y consensos que no debilitó las propuestas del federalista Hamilton de alianza con los titulares de la riqueza.

Pero la Constitución para las masas pobres era vista como un instrumento de las elites comercial y financiera. Así surgieron los antifederalistas y a partir de ellos Jefferson construye el primer partido Republicano. Federalistas y Jeffersonianos fueron el fundamento del bipartidismo posterior aunque fue constante la formación de organizaciones o terceros partidos, habitualmente encausando propuestas económicas o sociales concretas. Una larga lista de nombres lo expresa; me limito a los principales, ambos de los años 1890: los populistas o People Party, granjeros endeudados perjudicados por el patrón oro y el proteccionismo industrial, que hacia 1896 se integraron en el partido Demócrata tras William J. Bryan, quien abrió el partido a la representación de distintas minorías sociales; y los Progresistas de Robert La Follete, quien logró ser gobernador de Wisconsin y que en 1912 apoyaron a Teddy Roosevelt. Tras el fin de la guerra de secesión el Partido Republicano de Lincoln, desde entonces the GOP, Great Old Party fue el absoluto dominador. Los demócratas eran el partido de los estados sureños vencidos y ganan por primera vez la presidencia con G. Cleveland en 1884 y 1892 por disidencias republicanas, que se repetirán en 1912 a favor de Wilson. Pero hasta 1930 no se disputa: Estados Unidos es “big business plus Republican Party”. El cambio raigal es Franklin D. Roosevelt. El partido Demócrata comenzado con Bryan y Wilson adquiere un liderazgo que hace del New Deal la base de la vida norteamericana. Desde entonces los demócratas tienen la fuerza de su representación social, las distintas minorías, raciales, religiosas, sindicales, inmigrantes, frente a un partido Republicano limitado al gran poder económico que debe recurrir a candidatos ajenos a sus cuadros, como Eisenhower y Reagan, o que volvió a mostrar la debilidad partidaria con el segundo Bush, quien ganó con un fraude convalidado por la Suprema Corte, un nuevo actor político. En contraste, los demócratas llevaron candidatos, buenos o no, de sus propias filas, como corresponde a su representación social: Truman, Stevenson, Kennedy, Johnson, Carter, Dukakis, Clinton, Gore, Obama. Nada nuevo hoy: los republicanos tras un externo, Trump; y los demócratas con un cuadro propio, Hillary. Sin embargo hay mucho nuevo: la debilidad del sistema político en su conjunto, más visible en el otrora GOP. Los terceros agrupamientos han cumplido la función de incorporar programas; así ocurrió, para los demócratas, con los populistas y los reformistas y ahora para los republicanos con el Tea Party. En el caso demócrata significó debilitar y luego perder su tradicional base sureña, pero forjaron el partido del New Deal y de las minorías de todo tipo, hoy hasta de Warren Buffet y en buena medida de Wall Street. Nada similar puede decirse del GOP, que parece un conjunto de profesionales de la política buscando los prejuicios de la población para su sostén.

Los Estados

Aun con la influencia si se quiere unitaria de los federalistas el poder de los Estados fue y es mucho mayor, de hecho y de derecho, que el de las provincias argentinas. Por ejemplo, corresponde a los Estados la legislación común y a sus jueces su jurisdicción; si la Cámara de Representantes tiene que elegir al presidente cada estado tendrá un voto. Hoy por primera vez un importante y creciente número de legislaturas de los Estados están coincidiendo en proponer una reforma constitucional en base a una facultad constitucional nunca usada: “El Congreso a petición de las legislaturas de los dos tercios de los Estados, convocará a una Convención para tratar las enmiendas propuestas”. Se trata de negar los derechos de la enmienda 14 a los hijos nacidos en el territorio de Estados Unidos de padres no admitidos legalmente. También se sostiene la necesidad de incorporar límites al endeudamiento gubernamental. Muestra que en muchos Estados se receptan valores, opiniones y aun necesidades que dominan los discursos de Trump. Más allá de eso las facultades de los estados como las que permiten influir seria y hasta fraudulentamente en los derechos de los votantes o en la composición de los distritos electorales señalan un doble poder que a menudo escapa al observador extranjero. A mi juicio, con excesiva rapidez se califica a Estados Unidos de nación-estado, concepto de marcado europeísmo. En Europa, nación, sinónimo de pueblo, es un hecho histórico de profundas raíces, muy anterior a la organización política e institucional que se denominó estado nación y esencialmente ajeno a la realidad americana. El hecho histórico Estados Unidos se va creando luego de la revolución y con las distintas etapas inmigratorias, desde los WASP a los llamados latinos, manteniendo en un limbo específico a los nativos y a la población de color. Hoy es común la designación afroamericanos, pero durante mucho tiempo se criticó el uso por los ciudadanos inmigrantes de toda designación que importara mentar su origen nacional. Ese fue el sentido de la afirmación “América para los americanos” que el propio Teddy Roosevelt usó en 1916 para denostar a quienes pretendían denominarse “German-americans” y que luego se popularizó como síntesis crítica de la doctrina Monroe. Quiero con esto subrayar que se construyó el estado y que desde el estado se fue conformando, aun hoy, el pueblo, la nación. En alguna medida como dijo Sarmiento respecto de la Argentina: el estado se construye con decretos y luego hay que construir a los argentinos.

Si en algún momento la Suprema Corte amplió y afianzó el poder nacional últimamente se insinúa una tendencia a favor del poder de los Estados. Agréguese la tradición de migrar internamente buscando los Estados más dinámicos en buena medida siguiendo la movilidad del capital. Texas ya no es sinónimo de cow-boys sino de bancos y petróleo y a California la define más el Silicon Valley que la meca del cine. ¿Cuál es y dónde está el pueblo? Me parece indudable que para encontrarlo no sirve el concepto europeo. Esa situación se refleja en el relativo poder presidencial, que es adonde apunto. La política interna y externa de Estados Unidos es una informe sumatoria de los titulares de esa doble soberanía con una creciente influencia del poder económico y financiero en especial el ligado a la globalización como que ésta tiene su eje en Estados Unidos. Bien o mal, Hillary Clinton representa esta situación estructural y también militar y no parece que Trump implique la posibilidad de un cambio en una tendencia que poco debe a la decisión política presidencial y nada a la voluntad de los votantes.

  • Untref.

http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-313420-2016-11-04.html[/SPOILER]

Gran artículo. Una verdadera joya.

¿Los demócratas se hicieron comunistas en los 60s? ¿El partido demócrata es un asqueroso comunismo?
¿Con quien se hicieron comunistas los demócratas, con JFK? ¿Kennedy era comunista?
¿La Hilaria es comunista? Raro que todavía no pusiste que Trump quiere imponer el comunismo ruso.
Expláyate más y mejor porque así eres tu el que parece un fascista.

Trump: “EE.UU. dejará de derrocar regímenes extranjeros”

2 Me gusta

Va a ganar Trump y me parece que es lo mejor. Perro que ladra no muerde dice el dicho. En cambio la otra enferma bipolar cornuda e hipocondríaca es muy peligrosa, está muy mal de la cabeza.

3 Me gusta