Los “furcios”, traspiés y ausencias de Scioli durante la campaña
El candidato presidencial titubeó y tuvo respuestas desafortunadas en su raid mediático. El incómodo paso por ShowMatch y los faltazos injustificados.
El candidato presidencial por el oficialismo, Daniel Scioli, protagonizó a lo largo de su campaña electoral una serie de episodios que bordearon el papelón. Desde su viaje a Italia cuando en Buenos Aires había miles de inundados, hasta su paso por el programa Showmatch, donde un imitador suyo le tocó la cola a su esposa.
Inundaciones. En agosto pasado, tras un fuerte temporal que azotó a la provincia de Buenos Aires, muchas localidades se vieron afectadas con miles de evacuados y pérdidas millonarias. Durante esos fatídicos días, el gobernador bonaerense había viajado a Roma para realizarse un tratamiento relacionado a su brazo ortopédico; además, de hacer una alto a la frénetica campaña. Tales fueron las críticas que recibió en ese momento, que debió adelantar su regreso al país.
Showmatch. El funcionario, el el marco de su campaña, fue invitado al programa de Marcelo Tinelli, al igual que sus rivales Mauricio Macri y Sergio Massa. Allí, Scioli fue acompañado por su esposa Karina Rabolini. Un imitador del candidato se presentó en el estudio y hasta bailó tango con la presidenta del Banco Provincia. El momento mayor tensión se vivió cuando le tocó la cola a Rabolini, quien se mostró incómoda con la situación.
Debate presidencial. Scioli decidió no participar del primer encuentro en la historia argentina, donde se presentaron los candidatos a ocupar el cargo de presidente. Si bien siempre dijo ser una persona abierta al diálogo, en dicha ocasión optó por no ser foco de atención ni recibir preguntas de sus contrincantes.
Sobre la violencia de género. El funcionario estuvo hace unos días invitado al programa de Mariana Fabbianbi, donde se abordó la problemática de los femicidios y la violencia contra las mujeres. Consultado por la periodista Mercedes Ninci sobre su candidato a diputado José Ottavis, denunciado por su exmujer por golpeador, Scioli se desligó del tema y atinó a responder: “Yo en cuestiones familiares no me meto, ni puedo opinar en un tema que no conozco”.
Minería. El último de los papelones lo pasó en un programa radial, donde consultado por la minería a cielo abierto, sostuvo: “Promuevo la minería sustentable, la minería razonable y la controlada. La que tiene un impacto, en primer lugar, social económico y productivo”. No contento con la respuesta, el periodista indagó: “¿Es lo que hace hoy?”. El gobernador bonaerense hizo silencio y alcanzó a titubear: “Hay que… controlar rigurosamente que se cumpla esto”. Incómodo con el cuestionario, cortó la entrevista antes de lo previsto.
Listo, siamo fuori de la vota (?)
Deberia, por una cuestion de dignidad. Pero es peronista y no conocen esa palabra.
Gracias Mario Markic, una muestra mas de su grandeza:
"Señora Presidenta:
Pase lo que pase el domingo, estamos a horas del comienzo de su inevitable y acaso tan temida despedida del poder. Pase lo que pase, el domingo o será uno consagrado por el voto de los argentinos, o habrá que elegir entre dos opciones unos días más tarde pero todo está allí, a la vuelta de la esquina.
O sea, Presidenta, ya aparece el otro. Será una bisagra histórica. Recuerde que usted lleva casi ocho años ejerciendo el poder, “empoderada”, como le gusta decir. Y por eso, nos imaginamos claramente su tristeza por estas horas frente al hecho consumado: la certeza de la ausencia de poder.
Usted señora, mostró en un tweet algo así como que lo que se viene es el fin del principio. Siempre fue rápida de reflejos señora, como para que nadie le diga ‘esto es el principio del fin y bla bla…’. Y está bien, y era lo esperable, confrontativa hasta el fin, siempre redoblando la apuesta.
Como cuando en aquel acto en Rosario frente al monumento a la Bandera Nacional usted dijo sin decir, pero todos lo entendimos, aquel propósito: el más antirepublicano que se recuerde, por lo menos de un gobernante civil.
Y ese “vamos por todo” estruendoso fue , aunque todo puede discutirse, el principio del fin. Porque, señora, no pudo con todo. De hecho debe ser raro para usted sentir que no está en el lugar de los candidatos ahora, que no compite.
Esta vez, si o si señora Presidenta, se tiene que ir. Y lo que son las cosas: ahí lo tendrá a Massa compitiendo por la banda y el bastón. El mismo que le cerró la puerta a su propósito de reelección.
Y estará Scioli, el hombre paciente al que usted humilló sin contemplaciones. Y usted sabe, lo sospecha, lo malicia: si gana y si aflora su gen peronista de la autopreservación es muy probable que, más temprano que tarde, la deje de lado, se olvide de usted. Que la traicione, en una palabra.
Y Macri, que viene desde otro palo y otra condición, y que empezó su aventura política desde la capital Federal: imagine si fuera él el elegido. Por eso, se viene el largo adiós, la melancólica retirada. Porque así de ingrata es la cosa: usted, señora Presidenta, a partir del 11 de diciembre volverá a ser una persona común y corriente. Una ciudadana más de a pie.
O sea, no habrá Tango 01 a su disposición, tanto como para ir a buscar a su hijo o a su hija en cualquier momento que quiera hacerlo, o llevar a bordo los regalos para su pequeño nieto.
¿Se acuerda que hasta se rompió la cabeza precisamente cuando estaba en esos menesteres domésticos? Porque si quiere hacerlo deberá pagar su pasaje como cualquiera de nosotros. Y podrá viajar gratis, claro, si acumula millaje como cualquiera de nosotros.
¿Cuánto de difícil será acostumbrarse a ser una ciudadana común? No la primera ciudadana, sino una entre tantas. Y extrañará seguramente que nadie esté obligado a escuchar lo que piensa sobre política, economía, deporte y sus vidas pasadas.
Con seguridad señora Presidenta, ahora que tiene la certeza de que comienza su melancólico retiro de la escena, sabe que ya no habrá cámaras que registren sus alegres pasos de baile, que acaso sigan, pero con la salvedad de que quedarán reservados para la intimidad de las fiestas familiares.
O para Bailando por un sueño: experiencia acumula. Porque aquel baile de los días felices traspasó las fronteras. ¿Se acuerda de Angola y del tractor de Moreno? Ya nadie se acuerda de Angola. Y cualquiera podrá imaginarse que recordará con infinita nostalgia esos discursos que estaban obligados a seguir millones de argentinos y que calurosamente aplaudían sus fieles acólitos entre el agitar de las banderas en la Casa Rosada y las desentonaciones jingleras de Ignacio Copani.
¿Quién usará, si así lo decide, -¿por algo será presidente no?- su balcón señora? Y qué pasará con el Salón de las Mujeres? Imagine que el próximo inquilino, con todo derecho por otra parte, lo deje de lado. Y peor aún, que a instancias de la primera dama se haga, por ejemplo, un salón de los estables de la patria para las cadenas nacionales.
Y ya como algo pesadillesco que el señor presidente decida terminar con el peregrinaje de Cristóbal Colón para devolverlo a su emplazamiento original.
[b]Señora Presidenta, usted sabe que cosas así pasarán por su cabeza cuando deba despojarse del poder. Y tal vez el nuevo presidente decida cambiar el protocolo también y “ellos y ellas” o el “para todos y para todas” sea dejado olímpicamente de lado.
Y acaso en poco tiempo más, porque en Argentina el olvido no necesita tiempo, ya los slogans que acompañaron sus años de gestión como “tenemos patria”, “no fue magia”, “ni un paso atrás”; y sobretodo el temerario y agresivo “vamos por todo”, tan poco digno de usted señora, pasen al limbo de las cosas descartables.[/b]
No podrá ya modelar ni formatear la vida ni la conducta de los argentinos. Podrá cambiar cosas en su vida o cercanas a usted, elegir también cambiar cosas en su lugar en el mundo, en el lugar que elija para vivir, tal vez pueda incidir en el dibujo de su jardín. Pero su revolución tendrá los límites de su vereda.
Porque señora, usted volverá a ser una persona común y silvestre, como se dice.
Y como pasaron al olvido cosas de Alfonsín y de Menem, uno se pregunta, y tal vez usted ya empezó a hacerlo, ¿qué pasará con Tecnópolis, nuestra feria tecnológica permanente? ¿Y con Zamba, el personaje para niños con su particular visión de la historia argentina totalmente repartida entre héroes y villanos, cipayos y patriotas, blancos o negros, buenos y malos? Visión que se parece tanto a su propio modo de entender la vida.
¿Y 678, el club de los amigos de la revolución nacional y popular seguirá en la misma pantalla o buscará refugio en las pantallas de los empresarios amigos? ¿Seguirá carta abierta exaltando las acciones de su gobierno? ¿O se encolumnarán como buenos soldados militantes con el mismo fervor de los que cambian de creencia religiosa de un día para otro?
Por ahora no señora, las tropas son leales. Ahí apareció Horacio González, el de la Biblioteca Nacional, diciendo que ellos van a votar a Scioli desgarrados, pero lo van a votar. ¿Y con Milani no estaban desgarrados-? ¿Y con Boudou tampoco estaban desgarrados? ¿Y con Jaime?
Usted se preguntará qué destino le espera a la Secretaría de Coordinación Estratégica para el Pensamiento Nacional -¿qué titulazo no?- que capitanea el intelectual del modelo Ricardo Forster.
¿Qué harán los artistas militantes frente a su inevitable ausencia? ¿Irán en busca de un nuevo productor? La palabra clave del tiempo que se avecina es “ex”. Usted señora, será una ex con todo lo que ello significa y connota porque el poder será de otro.
Será inevitable, pero así son las cosas del poder: almíbar y amargura. Como “ex” usted vivirá de recuerdos. Y en esa caravana desfilarán los fastos del Bicentenario. ¿Se acuerda de la Vuelta de Obligado y de todos los actos militantes perfectamente armaditos como una gran película de Hollywood?.
Y regresará también el recuerdo del regreso triunfal de la Fragata Libertad a Mar del Plata, y de su repentina amistad con el odiado Jorge Bergoglio.
Y toda esta película no es el principio del fin, pero tampoco es el principio de algo que continuará en el tiempo tal como usted lo dejó.
Señora: tampoco nos vamos a pasar la vida hablando de los buitres habiendo otros pájaros tan bonitos para ver.
No hay a la vista “Cristina parte 2”. Todo se olvida rápido por aquí ¿Vio?. Y volver al llano a algunos les cuesta mucho más que a otros. Depende de cómo se haya ejercido el poder.
Con toda humildad, no quisiera estar en sus zapatos señora Presidenta. "
Link: http://www.urgente24.com/245624-la-carta-de-despedida-de-mario-markic-a-cristina
Una oda al resentimiento.
una verdad irrefutable.
El Señoapresidencha es de Nelson, o en su defecto del roedor majul. La interpelación discursiva en 2da del singular a la presidenta viene en baja.
Verdades como puños.
Solo falta que termine en la cárcel y me doy por contento.
[quote=“Claymore, post:26729, topic:97742”]
Verdades como puños. Solo falta que termine en la cárcel y me doy por contento
[/QUOTE] En la cárcel? no querido, en la horca como terminó Mussolini. Así tiene que terminar, delincuente hdp.
Increíble lo de la entrevista de Scioli con Kustnetzoff, que limitada la cabeza del tipo que ante una mínima repregunta comprometedora tuvo que cortar la entrevista. Me impresiona como un tipo tan limitado puede llegar a ser presidente.
¿Quién es, el ayudante del vasco?
Cuál foto es la más representativa?
la uno?
o la dos?
Claramente la uno. La dos es el ideal kk, pero se quedaron en eso, en la esperanza de ser… y no.
DECADA
---------- Mensaje unificado a las 19:12 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 19:12 ----------
GANADA
Si, por Lazaro, Cristobal, y todos los que entraron a AFIP, IGJ y Aerolineas…
No te enojes, hace mucho que no metía esta chicana…
No, por el pueblo argentino.
Debo ser chipriota entonces o “ustedes” estan en el pais equivocado…
Cristina hizo estos, fue tan malo su gobierno y la gente que la rodea como el narco de Anibal que hicieron esto, macri a punto de ser presidente esto es otro de los logros Nefastos de Cristina
pimenteara el coman?