Thread para analizar y criticar la gestión del gobierno (parte 1)

Una mínima muestra de lo que son estos idiotas a sueldo (en mi laburo pululan por todas las oficinas), típicos estúpidos con altanería que no te solucionan nada. Son todos así (con pequeñas excepciones), cortados por la misma tijera. MAS FIN DE CICLO QUE NUNCA.

Alex Freyre, al borde del ridículo en un programa de televisión

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Vos no entendes nada, el AmOr vence al odio opositor.
Por eso mandaron a cagar a piñas a Longobardi.

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Es un muñeco pegable el longo

Es verdad. Kerner lo quiso cagar a trompadas una vez en una entrevista en casa de gobierno.

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Ha me olvidaba, cristina, san pedro y scioli, la concha de tu hermana.

Esta toda zona sur bajo agua

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Vamos todavía!!! Ser largó la temporada!!!

Se encendió la mecha en Santa Cruz: Se acuarteló la policía | Urgente24

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Discurso mata título | “Soy abogada”, el latiguillo favorito de Cristina

Más allá de la polémica tras las declaraciones de Sabsay, la Presidenta tiene una obsesión con remarcar cada vez que puede que se recibió. Los casos más recordados.

Cuando el pasado 21 de octubre, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció el envío al Congreso del proyecto de ley para reformar íntegramente el Código Procesal Penal de la Nación, afirmó que es un reclamo de toda la sociedad “y no por las razones técnicas, jurídicas o específicas que muchas veces tenemos los abogados”.

Ese fue el discurso que colmó la paciencia del abogado constitucionalista Daniel Sabsay, quien en un enfervorizada exposición ante el coloquio de Idea, se desvió por unos instantes de las cuestiones meramente empresariales y apuntó a los conocimientos jurídicos de nuestra primera mandataria, al extremo de manifestar “no tener ninguna duda de que no es abogada” y de exigirle que “si es abogada, que muestre el título”.

La polémica desatada derivó en la respuesta de parte de funcionarios del Gobierno, tal es el caso del Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, quien pidió que Daniel Sabsay presente un encefalograma, sin aclarar qué título universitario comprobaría dicho estudio. Las voces en defensa de la presidenta se multiplicaron –a excepción de la atacada– e incluso resucitó la figura de Nilda Garré quien, a través de Twitter, afirmó que Sabsay “está para el manicomio”.

Lo cierto es que la polémica por el título de quien se autodefinió como una “exitosa abogada” en la Universidad de Harvard, había quedado prácticamente fuera de la agenda de los medios hasta las declaraciones de Sabsay. Sin embargo, Cristina ha remarcado, cada vez que pudo, que es abogada. Y lo ha hecho de las más diferentes formas y en momentos que difícilmente justificaran tal ratificación.

Una de las veces en las que la Presidenta mencionó la palabra “abogada” más veces, fue en febrero de 2010, cuando brindó un discurso en conmemoración del 133° aniversario del bautismo del Lago Argentino. En aquella ocasión, la Jefa de Estado se enredó al hablar de la potencia de las futuras represas de Santa Cruz –sí, las mismas que casi cinco años después siguen en veremos– y luego de mezclar kilovatios con megavatios, se disculpó con un “qué se yo, soy abogada”.

Sin embargo, en esa misma ocasión, Cristina recogió el guante de quienes la acusaban de usurpación de título. “¿Se acuerdan en la campaña que también dijeron que no era abogada?”, recordó la mandataria y se quejo, como era de esperar, de lo mensajeros: “hubo artículos, hubo inclusive una denuncia penal, hubo un Juez que tuvo que tramitar la denuncia penal de que yo no era abogada, por usurpación de título y tuvieron que venir de Universidad Nacional de La Plata con los títulos a la causa a mostrar que realmente era abogada”. Cristina, visiblemente enojada, se quejó por la “negación y la mentira permanente”.

Cristina hacía referencia a una denuncia de 2007, cuando en plena campaña presidencial surgió la polémica en torno a su título de abogada a raíz de las denuncias del periodista Cristian Sanz, quien dijo no encontrar registros de que la entonces senadora nacional se hubiera recibido: “Sólo encontramos datos de que cursó hasta tercer año en la Facultad de Derecho, pero no hay alumnos ni profesores que aseguren que se recibió de abogada; tampoco está matriculada en ningún colegio de abogados del país, ni siquiera en la provincia de Santa Cruz”.

A raíz de este hecho, la Universidad Nacional de La Plata emitió un comunicado con la firma del rector, Gustavo Adolfo Azpiazu, y del entonces Decano de la Facultad de Derecho –hoy Fiscal de Estado de la Provincia de Buenos Aires– Hernán Gómez, en el cual señalaban que “según todas las constancias obrantes en esta casa de altos estudios, la señora Cristina Elisabet Fernández se graduó en el mes de octubre de 1979, siéndole expedido el título de abogada el día 10 de diciembre de 1979”.

Desde entonces, Cristina remarcó cada vez que pudo que es abogada. Un acto de la UOCRA, la inauguración de viviendas en un partido de La Matanza, una videoconferencia con Jujuy, la pelea con los fondos buitre, la presentación del libro de Adrián Paenza, el lanzamiento del billete de Eva Perón, actos por fechas patrias, la inauguración de la Feria del Libro en Frankfurt, la cumbre de Jefes de Estado del Mercosur, o el encuentro mundial de sindicalistas en Ginebra; no importa la situación, el contexto o el auditorio, siempre encontró la forma de afirmar que está recibida de la carrera de derecho e, incluso, la locutora que la presenta en los actos oficiales y en las cadenas nacionales, también la presenta como doctora, lo cual implica un título más.

Incluso, en más de una ocasión tuvo algunos comentarios que rankean entre las frases más memorables que haya mencionado, como cuando contó que uno de sus “primeros casos como abogada”, le tocó una mujer golpeada por el marido. “Cuando me pidió que retirara la denuncia porque él la quería, dije que no agarraba más casos de esos porque la iba a terminar matando yo”, afirmó la Presidenta ante los asistentes al acto…por la ley de protección a la mujer.

En julio de 2013, Cristina celebró el éxito de los planes Fines, mediante el cual los ciudadanos que tenían sus estudios incompletos, podían acceder a un título. La Presidenta felicitó a una de las asistentes que logró recibirse de abogada, y la presentó como “colega”, para luego pedir “que nadie nos meta en la cabeza que no se puede ser lo que se quiere ser”.

Sin embargo, nada supera en la memoria colectiva al episodio vivido por la Presidenta en su gira por las universidades Georgetown y Harvard, en los Estados Unidos. En aquella ocasión, mientras era interrogada por la estudiantina, Cristina arrojó dos frases que quedarían en la historia. Ante un estudiante que manifestó su “privilegio” por poder hacerle preguntas cuando en Argentina la mandataria no brinda entrevistas, Cristina afirmó “esto es Harvard” y pidió que esas preguntas las dejen “para La Matanza”. Tras ello vino la pregunta que más la incomodó, y tuvo que ver con su situación patrimonial: “Toda la vida he tenido una determinada posición económica y es producto de que he sido una muy exitosa abogada”.

http://www.perfil.com/politica/Discurso-mata-titulo--Soy-abogada-el-latiguillo-favorito-de-Cristina-20141029-0042.html

Genial el video que se puede ver entrando al link.

Lo vi anoche en TN el discurso y no podía parar de reirme. Qué pedazo de sátrapa maquiavélica. Te tira eso y encima se caga de risa.

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se viene la ola naranja

Se armo bardo en TW entre cristina y obama

Traigan a esta mina para La Argentina que soy el primero en votarla. Escuchala, shigua.

//youtu.be/_04ZS7b43eU

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Siempre lamiendo bolas y cajetas foráneas.

CIPAYO

POPULISTA DEMAGOGO.

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Jajajaj imrpesentable.

impresentable es este desgobierno de delincuentes e inservibles.

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Al menos esta nota sí tiene un título

“Acá estoy después de nueve corridas”. Gracias a Dios, el discurso no fue en España y la Presi pudo mantener algo de dignidad ante los asistentes que presenciaron como Cristina mantenía una videoconferencia para inaugurar “La Matanza Expone”. Lo único que había para exponer era el concurso de natación forzosa de Laferrere y Virrey del Pino, pero no lo pasaron. Tampoco mostraron qué pasó con los dos mil millones de pesos para obras hídricas que prometió hace un año. A la vista del resultado, suponemos que se invirtieron en el Plan Verano Para Todos y llevaron piletas a los hogares de cada ganador de la década.

Más allá de eso, no deja de sorprenderme el enorme esfuerzo que pusieron para llevar a cabo la videoconferencia. No sólo llama la atención sino que resulta casi un esfuerzo supremo coordinar los astros para que, primero, dejara de llover y el intendente matancero no tenga que aparecer con esnorquel; y segundo, para que no hiciera demasiado calor y la conexión se pudiese llevar a cabo sin problemas, ni boicots antinacionalistas bajapalancas.

La noticia buena: los bonaerenses todavía no desarrollaron mutaciones aberrantes y sus cuellos permanecen libres de branquias. La mala: las escuelas que la Provincia pintó de naranja parecen boyas, pero no flotan.

Cristina estaba recién levantada, radiante y con toda la energía, como corresponde a una persona responsable que arranca el día cuando todavía es casi de noche –tipo 19,00 horas de la madrugada– así que pasó a explicar a los jóvenes metalúrgicos la importancia de ponerle “sosguar a los fierros” y que hay que aprovechar este momento “fundante” para llevarlo a cabo.

Luego de contar las habituales bondades de su Modelo de Redistribución de Inundaciones, destacó que su gobierno continuó la gestión energética de su difunto marido, a la cual definió como “revolucionaria”. Debo reconocer que estoy de acuerdo, no sólo porque es cierto que continuó con la joda energética, sino con el concepto revolucionario, etimológicamente hablando. Cualquier cambio generalizado que ponga patas para arriba una realidad es una revolución. Y sí, el kirchnerismo también hizo una revolución en materia energética, al convertir un país autoabastecido y exportador, en uno importador. Y todo se logró a menos de diez meses de iniciada la gestión de Néstor.

En una joda loca de palabras, Cristina se mostró en su mejor nivel. La misma mujer que hizo lobby para privatizar lo que luego expropiaría, pidió a los empresarios que pongan “reglas coherentes”. No solo se notó que faltó a la clase de Constitucional I cuando dieron Poderes del Estado, sino que se olvidó que es la jefa de un Gobierno que prometió no subir las retenciones, subió las retenciones, congeló el dólar, lo devaluó, lo prohibió y lo liberó parcialmente, reguló las importaciones, las trabó, las liberó a pedido, propuso una ley de medios para todos, sacó a las telefónicas por ser amigas, subsidió concesiones y las quitó sin mayores problemas.

También se quejó porque Estados Unidos “le da a la maquinita de imprimir” y que por culpa de eso tiene “una inflación del 3 y pico”. En la embajada yanki todavía se están cambiando los pañales del ataque de risa que les dio la afirmación de la Presidenta del tercer país con mayor inflación del mundo, en el que la impresión de billetes está a cargo de un vicepresidente con más causas que canas, y no tuvieron tiempo para remarcar que la inflación del último año fue del 1,5%. Sin embargo, podemos rescatar una buena: Cristina alguna vez pasó cerca de un apunte de Economía Política.

Como andaba quisquillosa porque este país está lleno de gente con problemas, también se enojó con los intendentes que ejercen presión impositiva. Se ve que en la facu de La Plata, el aula de Derecho Tributario no era fácil de encontrar. A continuación, remarcó que el salario mínimo de Argentina es el de mayor poder adquisitivo de Latinoamérica, demostrando que, no sólo le importa tres carajos que haya trabajadores por debajo de la línea de pobreza, sino que el aula de Derecho Laboral estaba al lado de la de Tributario y por eso no se enteró que siempre tuvimos el salario mínimo más alto de la región.

Luego de pasarse los últimos 84 meses amenazando con volver a 2001, pidió que se termine con el discurso apocalíptico, para luego avisar que si se paga a los fondos buitre, se cae la reestructuración de la deuda y volvemos a 2001. Finalmente, celebró la juntada porque a los empresarios no los llevaron “por el choripan” porque no eran militantes. Habría que ver cuál es el aspiracional de cada quien: lo que para unos se arregla con el almuerzo, para otros alcanza recién con una licitación o un crédito blando. De la polémica sobre su título no habló, aunque remarcó que es abogada.

No es que pretenda encarar para el lado de sus capacidades intelectuales, dado que los conceptos que acabo de mencionar se dan en la Facultad, pero si los ubicamos todos, es porque también los vimos en la secundaria, además de pertenecer al más sencillo sentido común. Por eso, a esta altura del partido, más que reclamar el título de abogada, habría que reclamarle un psicotécnico.

Porque una persona que se la da de culta no puede hacerse la ofendida porque “Estados Unidos creció en la década del 40 gracias a la guerra”, cuando fue el mismo motivo que nos llenó de guita a nosotros. No habremos tenido Plan Marshall, pero les enchufamos nuestros productos agropecuarios a cuanto país cagado de hambre encontramos tras la matanza de 50 millones de personas y la destrucción de cualquier medio productivo europeo.

En mi opinión personal, si tuviera que inventarme un título, habría elegido otro con más popularidad que el de abogado. Astronauta, stripper, campeón de karaoke, no sé. Sin embargo, el hecho de que se haya o no recibido, no me afecta desde el punto de vista de querer que me muestre el título, dado que en la Facultad de Derecho dejás un ladrillo y en cinco años le dejaron un diploma abajo. He conocido cientos de abogados que no pueden reconocer la diferencia entre un expediente y el cuaderno de comunicaciones de quinto grado. Son los que caen en una mesa de entradas, se acodan en la ventanilla, se acomodan el traje comprado en cuotas y te preguntan cuál es el criterio del juzgado para resolver una excarcelación, como si hubiera otro criterio que el del Código de Procedimiento. Ahí radica mi única duda: el analfabestialismo de la Presi no es excluyente para tener un título universitario.

Y si bien es cierto que para ser Presidente no hay que ser, precisamente, abogado –de hecho, más de la mitad de quienes nos gobernaron no lo fueron– la discusión pasa por otro lado. Chicos, si planteamos el debate entre que tiene o no tiene que tener título por el sólo hecho de si sabe o no sabe, le estamos pifiando. Es una cuestión de principios, de a qué te podés acostumbrar, de qué estás dispuesto a permitir.

El dilema con el título sí o título no, en el caso de la Presi hasta resulta diferente del de otros casos divinos de la última década. Cristina construyó su relato personal en base a la persecución política de la década de los setentas. Y según su historia, ella es una “exiliada interna”, porque se tuvo que ir a Río Gallegos para zafar de los militares, porque está claro que en Santa Cruz gobernaba Pérez Esquivel. Según sus propias palabras, Cristina se fue de La Plata por el peligro que resultaba vivir en una ciudad con tanta persecución política. Y fue ella misma quien dijo que dio las últimas tres materias en 1979. Pero resulta que en 1979, la Universidad de La Plata tenía al mismo rector, Guillermo Gallo, a quien acusan por la desaparición de 750 personas, entre docentes y alumnos. Ahí está uno de los mayores problemas del discurso cristinista: si fue a La Plata, ingresó a la facultad, presentó el DNI para dar las últimas materias y se recibió en 1979, tan militante no era.

Independientemente de todo esto, algo tiene que quedar en claro, alguna regla mínima tenemos que mantener sin violarla ni hacerle 32 pibes. Al menos una regla. Cada vez que se percibe una mentira, un engaño, un chamuyo, se dibuja un nuevo límite. En el mismo instante en que notamos que el otro cruzó la línea, aparece una nueva, instantáneamente, esperando a que nosotros decidamos si nos importa que el otro mienta y no la cruzamos, o si nos da exactamente lo mismo y también cruzamos la frontera.

“En esto también me mintió, pero no es para tanto”, es más de cornudos conscientes que de seres racionales y con un mínimo de amor propio. Y a los hechos me refiero: dijo que no esperáramos que “esta presidenta” devalúe, nos clavó la mayor devaluación desde la salida de la convertibilidad, dijo que el país no necesitaba un Plan B frente a la crisis internacional y terminó presentando el plan canje de calefones, dice que no hay cepo al dólar, dice que bajó la pobreza cuando es imposible caminar una cuadra sin tropezarse con un winner de El Modelo, dice que no hay problemas de empleo y que las empresas no están en crisis cuando las suspensiones son más comunes que un escándalo del Diego, dice que fue opositora al neoliberalismo cuando fue colgada de la lista y de las tetas de Menem en todas y cada una de las elecciones de 1989 a 1997.

Nos dijo que el mundo se “derrumba como una burbuja”, que estamos mejor que Australia y Canadá, que el Cabo Sosa de Valentín Alsina le avisó que ISIS la quería matar, que los bondis no iban a aumentar, que la inflación son los reyes magos, que nunca se construyeron tantas viviendas, que para 2010 tendríamos el tren Bala y que para 2009 el Almirante Irizar estaría en funciones.

Si nada importó, es lógico que tampoco importe que toda su fortuna se deba a que siempre fue y es una exitosa abogada. Pero al menos esa nos tendría que dar un poquito de escozor. Algo. Porque la única forma que encontró la Presi para justificar que es una multimillonaria empleada pública, es una profesión que nadie recuerda que haya ejercido.

No es la aptitud para el cargo, es la primera mentira para justificar el choreo. Si usurpó dos títulos o uno sólo –firma sus decretos como doctora, cuando eso sí está probado que no lo es– debería generar, aunque sea, alguna pregunta.

Al menos por curiosidad.

O por pudor.

Viernes. De la muerte, de los cuernos y de la mentira, no se salva nadie. Del kirchnerismo, tampoco.

Al menos esta nota sí tiene un título | Relato del presente

Mad, te banco en muchas … pero esta:

Lo de esta “lider” guatemalteca … Decime quien la banca. Me importa 3 pitos la republica. Llamó a los GRIEGOS! :lol: :lol: :lol:

Esa EMO vive en una nube de pedos. “Como líderes” … JAJAJAJAJA … la aplauden. JAJAJAJA! Dios quien esta piba. Es de LIBRO pobrecita.

Señores LA REPUBLICA en su concepto mas puro y sacro santo esta MUERTA.

Es una redundancia … Populista es peyorativo e incluye la demagogia. :mrgreen: Pero no se lo digas a un Pochista porque sos un herético.

Todo aquello que deje en ridículo a los kk es bienvenido. Igual, lo que dijo la guatemalteca lo trasladás a este desgobierno y es cierto. No me interesa que sea maestra, política, corredora de autos o futbolista. Me interesa el mensaje.

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“Trabajamos con el doble desafío de tener una policía democrática y popular. Una policía que sea del pueblo, y que defienda los intereses del pueblo, es una de las ideas más interesantes que podamos pensar”

Por favor, que nivel de pelotudez. Yo no entiendo, estas declaraciones lo único que hacen es que la gente se enoje. Esta mina no aparece nunca, la tienen escondida, habla un vez y dice una pelotudez monumental.

No dijo nada flashero, por que se va a enojar la gente? o la gente son todos los que piensan sistemáticamente en contra de todo lo que sea kernerista? :slight_smile: