Me gustan èstas construcciones entre el sentido y el absurdo. La unión del salvajismo de los “bàrbaros” con el divertimento onomàtopeyico del “ja” se asemejaban, espacio mediante, con el afamado pirata, contra de Barbazul (hincha de boca:mrgreen:) y con mi propia barba. Ademas de la conguencia melòdica barbaroja, con bandaroja.
En fin, un delirium apotioticum. Si me saliera ponerme … gallina de verdad o pablito de river, tendrìa la vida arreglada.
Lo suyo es la traducción de jorge o una alusión sentimental?
Abrazo.
Imposible no coincidir con vos. Esa es nuestra historia. El problema está cuando no podémos ejercerlo. Boca en aquel partido del torneo de primera, nos ganó por el arbitro, y en el que le siguió, el arbitraje dejó mucho que desear. La vara sigue siendo desigual, entonces parece que ni el futbol pudiera salvarnos.