De pajero nomás cito las medidas según un diario peruano pero es básicamente esto.
El Gobierno inglés, en conjunto con la empresa privada, decidió combatir el cáncer que amenazaba con matar su fútbol, las barras bravas más conocidas como “Hooligans”. Estas son las principales medidas que se tomaron a partir de 1989:
1 La raíz del mal. El Gobierno Británico empezó a combatir las acciones violentas en todos los centros educativos.
2 La ley y el orden. A partir de 1990 se prohibió el ingreso de por vida a los estadios de los hinchas violentos y se estableció la pena de cárcel para los fanáticos que violaran las leyes, entre ellas la prohibición del porte de armas y el consumo de alcohol o drogas en los escenarios deportivos.
3 Comando especial. Agentes especiales se infiltraron en las barras para conocer al detalle a los violentos y su manera de operar. Así lograron crear una lista de 5.000 miembros de las barras bravas a los que les prohibieron el ingreso a los estadios.
4 Club de la pelea. Los 92 equipos profesionales del fútbol inglés crearon sus propios grupos de seguridad, lo que permitió disminuir paulatinamente la presencia de la policía uniformada en los estadios e incluso se eliminaron las mallas y los muros que separaban las tribunas de la cancha. Los clubes instalaron cámaras controladas bajo un circuito cerrado de televisión y un sistema de identificación de hinchas con lectores de huellas dactilares.
5 Asientos para todos. La ley incluía la implementación de asientos personales en todas las tribunas, que permitía la mejor identificación de los hinchas. La Federación Inglesa dio un plazo de nueve años a sus clubes afiliados para que sus escenarios cumplieran con la norma.
6 Puntos bonus. A partir de 1990, el Gobierno Inglés premió a los equipos que fueron adecuándose a las leyes. Les otorgó créditos y propició el acercamiento de las empresas privadas –sobre todo las televisoras– para que patrocinen a los clubes. Los clubes obtuvieron más ingresos para combatir a los delincuentes, contratar mejores jugadores y hacer de la Liga Premier un producto más atractivo. El costo de las entradas se elevó e hicieron del fútbol un espectáculo elitista.
7 Empadronamiento. Con la carnetización de los hinchas se los pudo identificar correctamente para saber si tenían antecedentes. A muchos de ellos se les impidió el ingreso a los estadios.
8 Todos juegan. Tras conocer la identidad de los ‘hooligans’, los bares y los servicios de transporte público no podían permitir el ingreso de esos delincuentes, de lo contrario recibían multas y todo tipo de sanciones.
Así se combatió con éxito la violencia en el fútbol de Inglaterra | El Comercio Perú
Hace falta una decisión que acá no hay. También es cierto que fijaron precios de entradas muy altos que hizo prohibitivo ir a los borrachines que eran los hooligans.
Un libro muy recomendable sobre el tema es “Entre los Vándalos” (Among the Thugs) de Bill Buford, un periodista yankie que yendo de Londres a Cardiff le tomaron el tren unos hooligans que rompieron todo y el tipo quedó fascinado. Formó parte de diferentes barras, participó en miles de combates y se fue justo antes de que se pudriera todo y te cuenta toda la organización de las barras inglesas por dentro.