Dunga pidió disculpas por su reacción en una conferencia pasada y después insistió con sus críticas a la prensa. Y en la práctica, así se los vio a Julio César y Luisao, separados por Robinho. Dicen que fue un chiste…
¿Qué te pasha, Dunga? ¿Qué te pasha, Brasil?
“Quiero pedir disculpas al hincha brasileño por mi actitud. El hincha ha apoyado y no tiene nada que ver con problemas personales o de otra situación. Sólo quiero trabajar y que me dejen trabajar”, dijo Dunga el día previo al choque contra Portugal, después de que insultara a un periodista en la anterior rueda de prensa.
Y siguió refiriéndose a las críticas que viene recibiendo: “Para mí, esto (el Mundial) es sólo una oportunidad para poner en práctica lo que me enseñaron mis padres: que un hombre, para ser hombre, tiene que tener virtud, coherencia, dignidad, transparencia y pedir disculpas cuando hace algo mal. Y mi madre, además de lo que tiene que sufrir por mi papá (tiene Alzheimer), sabe que lo que están haciendo a su hijo no se debe hacer a ningún ser humano. Mi mamá, que es maestra de historia, me enseño el amor a nuestro país. Hay que ser patriotas. tenemos que luchar por nuestro país, nuestra familia, nuestros amigos. La adversidad sólo nos hará crecer”.
Más allá del perdón de Dunga y la posterior crítica, el DT se apenó por el mal estado de la cancha donde enfrentarán a Portugal, en la que no pudieron practicar en la previa al partido que definirá seguramente qué selección queda primera en el grupo. En la práctica hubo chicos de visitas y algunas sonrisas, como siempre, de Kaká.
Claro que una cámara registró un momento raro, entre el arquero Julio César y Luisao, hasta que apareció Robinho para separarlos. Hasta en Brasil se sorprendieron por ese entredicho, en un momento bueno del equipo, con dos victorias y toda la ilusión. Dicen que fue un chiste…
Dunga pidió disculpas por su reacción en una conferencia pasada y después insistió con sus críticas a la prensa. Y en la práctica, así se los vio a Julio César y Luisao, separados por Robinho. Dicen que fue un chiste…
¿Qué te pasha, Dunga? ¿Qué te pasha, Brasil?
“Quiero pedir disculpas al hincha brasileño por mi actitud. El hincha ha apoyado y no tiene nada que ver con problemas personales o de otra situación. Sólo quiero trabajar y que me dejen trabajar”, dijo Dunga el día previo al choque contra Portugal, después de que insultara a un periodista en la anterior rueda de prensa.
Y siguió refiriéndose a las críticas que viene recibiendo: “Para mí, esto (el Mundial) es sólo una oportunidad para poner en práctica lo que me enseñaron mis padres: que un hombre, para ser hombre, tiene que tener virtud, coherencia, dignidad, transparencia y pedir disculpas cuando hace algo mal. Y mi madre, además de lo que tiene que sufrir por mi papá (tiene Alzheimer), sabe que lo que están haciendo a su hijo no se debe hacer a ningún ser humano. Mi mamá, que es maestra de historia, me enseño el amor a nuestro país. Hay que ser patriotas. tenemos que luchar por nuestro país, nuestra familia, nuestros amigos. La adversidad sólo nos hará crecer”.
Más allá del perdón de Dunga y la posterior crítica, el DT se apenó por el mal estado de la cancha donde enfrentarán a Portugal, en la que no pudieron practicar en la previa al partido que definirá seguramente qué selección queda primera en el grupo. En la práctica hubo chicos de visitas y algunas sonrisas, como siempre, de Kaká.
Claro que una cámara registró un momento raro, entre el arquero Julio César y Luisao, hasta que apareció Robinho para separarlos. Hasta en Brasil se sorprendieron por ese entredicho, en un momento bueno del equipo, con dos victorias y toda la ilusión. Dicen que fue un chiste…