El presidente de River reveló que desde la apertura del mercado de pases el celular le suena permanentemente para realizarle ofrecimientos, aunque sin demasiada seriedad.
A pesar de que no hay tantas estrellas y figuras como en otras épocas, River es una auténtica vidriera del fútbol mundial y sirve como medida para saber si un jugador está capacitado para dar el salto a un club importante de Europa, razón por la cual varios intermediarios apuestan sus fichas a la banda roja.
Sin embargo, en este momento no hay desesperación en Núñez para traer refuerzos. “Me llaman cien representantes por día. De todos los que se comunican conmigo, uno puede llegar a valer la pena. El tema es cuando le pido la carta del club con la oferta. No me llaman más”, reveló Daniel Passarella, en declaraciones a Clarín.
Con respecto a las posibles ventas, Gabriel Funes Mori y Erik Lamela son los principales candidatos a emigrar, aunque el Kaiser advirtió que no piensa desprenderse fácilmente de ellos. En cuanto a las incorporaciones, la llegada de Andrés D’Alessandro está más cerca de ser una ilusión que algo concreto.
El presidente de River reveló que desde la apertura del mercado de pases el celular le suena permanentemente para realizarle ofrecimientos, aunque sin demasiada seriedad.
A pesar de que no hay tantas estrellas y figuras como en otras épocas, River es una auténtica vidriera del fútbol mundial y sirve como medida para saber si un jugador está capacitado para dar el salto a un club importante de Europa, razón por la cual varios intermediarios apuestan sus fichas a la banda roja.
Sin embargo, en este momento no hay desesperación en Núñez para traer refuerzos. “Me llaman cien representantes por día. De todos los que se comunican conmigo, uno puede llegar a valer la pena. El tema es cuando le pido la carta del club con la oferta. No me llaman más”, reveló Daniel Passarella, en declaraciones a Clarín.
Con respecto a las posibles ventas, Gabriel Funes Mori y Erik Lamela son los principales candidatos a emigrar, aunque el Kaiser advirtió que no piensa desprenderse fácilmente de ellos. En cuanto a las incorporaciones, la llegada de Andrés D’Alessandro está más cerca de ser una ilusión que algo concreto.
Y si, River, mal y todo, es una buena vidriera para un jugador, para que después pegue el gran salto a Europa, que es lo que desean prácticamente todos. Hay muchos representantes que están interesados en que sus jugadores jueguen en River. Deben ofrecer cada tipo pedorro, vaya uno a saber quiénes son.
Pero ojo, que River es un arma de doble filo. Si sos mediocre, seguro que te va mal, te convetís en un paria y a lo mejor después te quedás sin equipo 6 meses porque no te quiere nadie (Rosales, Fabbiani, Gerlo, Archubi)
yo creo que pasarella va a saber manejar este asunto, si era el gordo ya hubiera vendido a funes mori y lamela en la primer oferta que hacian para robarse toda la plata
