Tragedia de Once: TBA afirma que los frenos no fallaron
Fuentes de la empresa aseguraron a LPO que la hipótesis de una falla en los frenos quedó prácticamente descartada. Los peritajes mostrarían que no hay marcas de los frenos de emergencia en los rieles. Tampoco se escucharía en las grabaciones de la cabina ninguna queja o comentario del chofer sobre dificultades en ese sentido. No descartan otra falla ni un eventual error humano.
Las primeras informaciones brindadas por los testigos de la tragedia daban cuenta de una posible falla en los sistemas de frenos. Algunos pasajeros afirmaban haber sentido una disminución en la velocidad; otros, en cambio, aseguraban que la formación ingresó llamativamente muy rápido al anden.
Más tarde, los propios funcionarios públicos alimentaban esa hipótesis. “Estamos frente a un accidente muy grave. Un tren que entraba a la terminal, a 26 kilómetros por hora, chocó con la punta del anden. Habría sido un desperfecto con los frenos. Impactó con el paragolpe y los vagones se plegaron unos sobre otros”, decía Juan Pablo Schiavi desde la estación de Once, a pocos minutos de la tragedia.
Lo cierto es que en TBA ya dan por descartada esa posibilidad. Fuentes de la empresa explicaron a LPO que los peritos que estuvieron trabajando ayer en la estación no detectaron las características marcas que dejan los frenos de emergencia. Lo consideran un dato a tener en cuenta.
En ese sentido, el director de Material Rodante y Nuevo Servicio de la empresa TBA, Roque Cirigliano, aseguró esta mañana a la prensa que no descarta la posibilidad de que el incidente se deba a un “error humano”.
Desde TBA aseguraron a este medio que ya se escucharon todas las grabaciones de la cabina del conductor. En rigor, ese tren Toshiba -nº 3772 e identificado con la chapa 16- había comenzado a operar a las 02:45 de la mañana y hasta el momento del choque había sido manejado por otros tres conductores. Por eso, se analizaron las grabaciones de toda la jornada, de los cuatro conductores.
En ningún momento, explican desde TBA, se escucha alguna queja, comentario o mención sobre el mal funcionamiento de los frenos. Y agregaron: “Es muy difícil que fallen en los Toshiba”.
El fundamento de la empresa es el siguiente. Esa formación sale de Caballito -la estación anterior a la de Once- y alcanza una velocidad máxima de 70 kilómetros por hora, pero cuando ingresa a Once lo hace a 26 kilómetros por hora, como indican todos los protocolos. Eso demostraría que sí funcionaban los frenos, pero que algo sucedió a partir de allí.
¿Qué fue lo que sucedió para TBA? Todavía no está claro. No descartan que pueda haber ocurrido otra falla ni que se haya tratado de un error humano, o incluso una conjunción de ambas situaciones.
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