El tema es cuando disminuye brutalmente por este tipo de prácticas la población femenina, y allí termina siendo la mujer un objeto valioso en algunas sociedades, en la cual pasa a ser comprada literalmente como si fuera un bien mercantil, como ocurre en algunos países árabes, que le pagan al padre por la hija, disfrazado esto para el.mundo occidental como “la dote”, que en realidad encubre una transacción de índole comercial.
En china está práctica le generó más que un control de la natalidad en las poblaciones rurales más arraigadas a las viejas tradiciones, un exceso de varones respecto a la cantidad de mujeres, con las consiguientes peleas por conseguir pareja, amén de disminuir el crecimiento vegetativo y con ello la renovación necesaria de la población. Por eso se empezó a darle importancia al lugar de la mujer en la sociedad, a pesar de que todavía los altos cargos del buró siguen siendo exclusivamente para hombres, las mujeres han obtenido lugar en líderes empresariales, culturales y hasta científicos en la china actual.