Casi cerrado Maradona hasta el 2014
Parecía que su continuidad estaba entre nebulosas, condicionada a diferentes imposiciones que enquistaría el presidente de la AFA en el camino y que las cosas recién se aclararían después de la visita de Diego Maradona a Venezuela para dar clínicas de fútbol y, según algunos rumores, hasta oír alguna propuesta de su amigo el presidente venezolano Hugo Chávez para tomar el mando del seleccionado de aquel país. Sin embargo, Martín Arévalo, periodista de TyC Sports pero también personaje muy cercano -a veces, hasta repugna el ejercicio de defensa continua- al Diez, aseguró que las supuestas piedras en el camino ya habían sido sorteadas y están todas las partes armonizadas y enlistadas -hay directivos que se oponen, pero no están dispuestos a levantar la voz- para que el camino de Maradona como seleccionador tenga revancha en Brasil 2014, además de la Copa América del año que viene en la que seremos anfitriones. Lo único que restaría es pulir detalles, que no incluirían la remoción de sus colaboradores, para que, a la vuelta de la excursión por Venezuela, Maradona firme su nuevo contrato. La evaluación del proceso que culminó en Sudáfrica y demás cuestiones a sopesar y reflexionar se harán después de que el seleccionador ya haya cristalizado su firma. Grondona confirmó que ya dialogó con el propio Maradona y se reunirán el lunes, según le confirmó al portal 442.
No había plan B, tal como había explicado el presidente de Argentinos Juniors, Luis Segura, que puso su renuncia como Secretario de Selecciones Nacionales a disposición, aunque Grondona todavía no se la aceptó. Todo continuará de la misma manera, al parecer. Bilardo también continuaría desde su, todavía poco claro, puesto de Secretario Técnico, aunque la idea de Grondona es que deje de ser un extra fantasmal y tenga más participación. Si Maradona quiere, sus laderos continuarán siendo los inexperimentados Mancuso y Enrique -basta de creer que porque jugaron al fútbol saben diagramar tácticamente con maestría-, aunque nuevamente están en el aire nombres como el de Gamboa, de buena relación con Maradona y con experiencia probada como para colaborar con seriedad desde el aspecto táctico. Sería un gesto de enorme grandeza que el propio Diego muestre reacción y sume a su staff a un verdadero profesional en el arte de la dirección técnica para que le brinde una mirada más allá del panorama sidieguista.
Sería esencial que, puertas para adentro, haya una fuerte autocrítica, algo que no hubo en Sudáfrica -”Alemania tuvo las ideas que no tuvo en el resto del Mundial”-, para que el nuevo proyecto tenga una raíz fuerte desde el principio y no se derrumbe a mitad del camino, como pasó en los últimos ciclos. Y cuando decimos proyecto, no se remite únicamente a Maradona DT de la Selección, sino también a los juveniles y demás elementos que componen la pintura final de lo que es la Selección. Que los egos, cruces, venganzas y demás expresiones cabareteras, de las que llovieron en estos menos de dos años de Maradona al frente del seleccionados, no se repitan para autodestruir los próximos cuatro años. Basta de excusas también, como la falta de tiempo para trabajar y el tener a los jugadores diseminados por el planeta, porque Tabárez, Dunga, Bielsa o Martino jugaron bajo las mismas condiciones y consiguieron desarrollar circuitos y estilos definidos para trazar una idea que vaya más de las inspiraciones individuales.
Ingenuidad al margen, como argentinos y devotos del fútbol que somos, esperemos que no sea una decisión con tintes políticos, con segundas intenciones ligadas a la caja registradora, el atractivo comercial del genio de Fiorito u otros intereses secundarios volcados al primer plano. Dejemos de desperdiciar lo que tenemos, que no es poco y da para más que una humillante goleada en unos conformistas cuartos de final.