EL KICHNERISMO BORRA CON EL CODO LO QUE ESCRIBIÓ CON LA MANO
Nada nuevo. Frente al adverso fallo del implacable juez Thomás Griesa, que obliga a la Argentina a pagar 1.330 millones de dólares a “fondos buitres”, el Gobierno hizo lo mejor que sabe: culpar a la herencia recibida. Una herramienta nada original, gastada ya por otros “inquilinos” de Casa de Gobierno.
El primero en hablar fue el ministro de Planificación, Julio De Vido, quien señaló a “los responsables políticos, desde Martínez de Hoz y a Cavallo” por la sentencia adversa. ¿El kirchnerismo? Bien, gracias.
En el mismo sentido, esta tarde Hernán Lorenzino aseguró que pagarle a los fondos buitre “es injusto e ilegal”, al tiempo que adelantó que el Gobierno hará “un pedido de revisión” y que recurrirá “a todas las instancias internacionales que sean necesarias” a efectos de zafar.
A ese respecto, el ministro de Economía no dudó en subir la apuesta al decir: “No creemos realmente que sea una solución justa pagarles a los fondos buitres. De alguna manera es pagar a costa de los que con su esfuerzo hicieron que la Argentina estuviera hoy en condiciones de pagar su deuda”. ¿Qué tiene que ver el sabor del limón con la altura del Obelisco?
Los compromisos contraídos deben cumplirse, es así de simple. Esto ocurre en Estados Unidos, en Europa y en la China. La mejor estrategia para no tener que pagar es la de no endeudarse. Luego, no puede protestarse por ello, por más que los tenedores de deuda tengan cara de buitres.
Lejos de mostrar soluciones al tema como se debe, Lorenzino insistió en el camino que demostró no funcionar. “El gobierno argentino estará el lunes presentando un pedido de revisión de este fallo de Griesa ante la Cámara", advirtió el funcionario. ¿Qué cree el ministro que dirá la Cámara? ¿Realmente espera que le den razón a la Argentina, un país que no cumple con sus mínimos compromisos adquiridos?
No hace falta recordar que, en caso de que no se acate la orden judicial, el magistrado Griesa ya anticipó que echará mano a los pagos por u$s3.100 millones que la Nación debe hacer en diciembre en Nueva York a los acreedores que aceptaron reestructurar sus deudas. En buen romance: esos fondos se cobrarán por las buenas o por las malas. ¿No es mejor que sea de buena manera?
Lo ocurrido esta tarde demuestra que el Gobierno no cuenta con un “Plan B”, siquiera para anticiparse a los hechos. De la misma manera, acaba de caer el vergonzoso mito de que el Banco Central cuenta con casi 45 mil millones de dólares en reservas.
El costo de este desacierto no es gratuito: no solo el país ha quedado al borde del default técnico, sino que los bonos se derrumbaron en un 13% y el Merval promete resultados nada optimistas de cara a este viernes. Eso sin hablar de la imagen que tendrá la Argentina a futuro. ¿Qué grado de confianza merece un país que no se hace cargo de sus deudas? Peor aún: ¿Cómo calificar a una Presidenta que no deja acto público para jactarse de que jamás pagará esos compromisos contraídos?
El propio Griesa se vio molesto por las palabras de Cristina y en sus fundamentos aclaró ese punto. "Desde el momento de la decisión de la Cámara de Apelaciones del 26 de octubre, los más altos funcionarios de la Argentina han declarado que la Argentina pagará a los bonistas (que entraron al canje) pero que no pagaría un sólo dólar a los tenedores de títulos originales que no entraron al canje”, indicó el magistrado en su duro fallo.
A esta altura, hay una cuestión que debería haber tenido en cuenta el propio Lorenzino: a través del Decreto 319 del año 2004, el gobierno de Néstor Kirchner aceptó litigar en esos estrados foráneos y en esas condiciones.
Dice el artículo 8 de esa normativa: “Autorízase la prórroga de jurisdicción a favor de los tribunales estaduales y federales ubicados en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos de America, y la renuncia a oponer la defensa de inmunidad soberana, incluida en la Carta de Contratación (“Engagement Letter”) y su enmienda aprobadas por el Artículo 7° del presente decreto”. ¿Cómo se explica el silencio de Lorenzino respecto a este tópico? ¿Cómo protestar contra un estrado judicial que oficial y oportunamente se aceptó?
Es curiosa la paradoja que deja a la vista este culebrón de bonistas, deudas y buitres. La primera mandataria de un país, enriquecida a través de una usuraria circular emitida por la más sangrienta dictadura militar, protesta por la ambición de fondos buitres que solo buscan lo mismo que ella: abultar sus propios patrimonios.
Eso sí, a diferencia de esta última, esos “buitres” sí pueden explicar el origen de sus fortunas, por más polémico que sea.
EL KICHNERISMO BORRA CON EL CODO LO QUE ESCRIBIÓ CON LA MANO
Nada nuevo. Frente al adverso fallo del implacable juez Thomás Griesa, que obliga a la Argentina a pagar 1.330 millones de dólares a “fondos buitres”, el Gobierno hizo lo mejor que sabe: culpar a la herencia recibida. Una herramienta nada original, gastada ya por otros “inquilinos” de Casa de Gobierno.
El primero en hablar fue el ministro de Planificación, Julio De Vido, quien señaló a “los responsables políticos, desde Martínez de Hoz y a Cavallo” por la sentencia adversa. ¿El kirchnerismo? Bien, gracias.
En el mismo sentido, esta tarde Hernán Lorenzino aseguró que pagarle a los fondos buitre “es injusto e ilegal”, al tiempo que adelantó que el Gobierno hará “un pedido de revisión” y que recurrirá “a todas las instancias internacionales que sean necesarias” a efectos de zafar.
A ese respecto, el ministro de Economía no dudó en subir la apuesta al decir: “No creemos realmente que sea una solución justa pagarles a los fondos buitres. De alguna manera es pagar a costa de los que con su esfuerzo hicieron que la Argentina estuviera hoy en condiciones de pagar su deuda”. ¿Qué tiene que ver el sabor del limón con la altura del Obelisco?
Los compromisos contraídos deben cumplirse, es así de simple. Esto ocurre en Estados Unidos, en Europa y en la China. La mejor estrategia para no tener que pagar es la de no endeudarse. Luego, no puede protestarse por ello, por más que los tenedores de deuda tengan cara de buitres.
Lejos de mostrar soluciones al tema como se debe, Lorenzino insistió en el camino que demostró no funcionar. “El gobierno argentino estará el lunes presentando un pedido de revisión de este fallo de Griesa ante la Cámara", advirtió el funcionario. ¿Qué cree el ministro que dirá la Cámara? ¿Realmente espera que le den razón a la Argentina, un país que no cumple con sus mínimos compromisos adquiridos?
No hace falta recordar que, en caso de que no se acate la orden judicial, el magistrado Griesa ya anticipó que echará mano a los pagos por u$s3.100 millones que la Nación debe hacer en diciembre en Nueva York a los acreedores que aceptaron reestructurar sus deudas. En buen romance: esos fondos se cobrarán por las buenas o por las malas. ¿No es mejor que sea de buena manera?
Lo ocurrido esta tarde demuestra que el Gobierno no cuenta con un “Plan B”, siquiera para anticiparse a los hechos. De la misma manera, acaba de caer el vergonzoso mito de que el Banco Central cuenta con casi 45 mil millones de dólares en reservas.
El costo de este desacierto no es gratuito: no solo el país ha quedado al borde del default técnico, sino que los bonos se derrumbaron en un 13% y el Merval promete resultados nada optimistas de cara a este viernes. Eso sin hablar de la imagen que tendrá la Argentina a futuro. ¿Qué grado de confianza merece un país que no se hace cargo de sus deudas? Peor aún: ¿Cómo calificar a una Presidenta que no deja acto público para jactarse de que jamás pagará esos compromisos contraídos?
El propio Griesa se vio molesto por las palabras de Cristina y en sus fundamentos aclaró ese punto. "Desde el momento de la decisión de la Cámara de Apelaciones del 26 de octubre, los más altos funcionarios de la Argentina han declarado que la Argentina pagará a los bonistas (que entraron al canje) pero que no pagaría un sólo dólar a los tenedores de títulos originales que no entraron al canje”, indicó el magistrado en su duro fallo.
A esta altura, hay una cuestión que debería haber tenido en cuenta el propio Lorenzino: a través del Decreto 319 del año 2004, el gobierno de Néstor Kirchner aceptó litigar en esos estrados foráneos y en esas condiciones.
Dice el artículo 8 de esa normativa: “Autorízase la prórroga de jurisdicción a favor de los tribunales estaduales y federales ubicados en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos de America, y la renuncia a oponer la defensa de inmunidad soberana, incluida en la Carta de Contratación (“Engagement Letter”) y su enmienda aprobadas por el Artículo 7° del presente decreto”. ¿Cómo se explica el silencio de Lorenzino respecto a este tópico? ¿Cómo protestar contra un estrado judicial que oficial y oportunamente se aceptó?
Es curiosa la paradoja que deja a la vista este culebrón de bonistas, deudas y buitres. La primera mandataria de un país, enriquecida a través de una usuraria circular emitida por la más sangrienta dictadura militar, protesta por la ambición de fondos buitres que solo buscan lo mismo que ella: abultar sus propios patrimonios.
Eso sí, a diferencia de esta última, esos “buitres” sí pueden explicar el origen de sus fortunas, por más polémico que sea.
No sólo no lo generó, sino que lo negoció. Y lo resolvió casi totalmente, lo que no es totalmente: lo convirtió en deuda interna y convirtió nuestras reservas en papelitos. Hay que negociar lo que queda en forma externa.
Pero así y todo, el préstamo de Venezuela a tasas de usura, no cuenta?
Lo de Venezuela no es fondo buitre, o sea, no va al nudo de la nota. Cuenta, claro que sí.
Con respecto a la resolución… alguna resolución le tenían que dar. Y era lo más lógico renegociar con quitas de la deuda. Claro, obviamente si le preguntás a los del PO, te van a decir que había que dejar de pagarla directamente, y si le preguntás a Macri, que la tenías que pagar al 100%.
Recordemos que el máximo culpable justamente de nuestra deuda se llama Domingo Felipe Cavallo, quien fue el que autorizó la conversión de la deuda privada de los grandes empresarios de siempre en deuda del país, limpiando todas las cagadas que se habían mandado los Soldati, Fortabat, Macri, etc. en sus empresas y transfiriéndoselo al Estado. No recuerdo el nombre del ministro de Economía que autorizó semejante desatino. Pero lo que sí no me caben dudas… esos dos tipos deberían ESTAR PRESOS.
No entiendo sinceramente, más allá del folclore con que se apodan como buitres ciertos movimientos financieros, qué deuda es buena y se debe pagar, y qué deuda es mala y no hay que pagarla. A mí siempre me educaron con que lo que pido prestado lo tengo que devolver. Espero que mis hijos tomen como premisa lo que se les enseña de familia y no lo que manifiesta el Gobierno. Una deuda es una deuda, se la debamos a Chávez ó a la Piratonga Inc.
El problema viene de antes: porqué se contrajo la deuda, en qué condiciones, y por sobre todo, qué se hizo con lo que nos prestaron. Ahí surgen las respuestas, que cierran al dedillo con lo que dijiste después: hay que sentar en el banquillo a los que contrajeron deuda que perjudicó al país. A Domingo Cavallo y a todos los anteriores. Prisión y confiscación de bienes.
El fondo buitre se llama buitre justamente porque se comporta como esa ave carroñera. Compran bonos de países que están en un status de prácticamente incobrables, los pagan al 5/10/15% de su valor a quienes REALMENTE nos prestaron la guita (los VERDADEROS PERJUDICADOS), y pretenden cobrar el 100% de la deuda más los intereses. O sea, invertir un peso para ganar 50.
A mí me preocupa, en todo caso, el jubilado italiano que compró esos bonos. ¿Me explico? Porque ese SÍ FUE POSTA el que nos prestó originalmente la guita y al que garcaron. No los buitres que lo compraron después por moneditas pretendiendo sacar jugo de las piedras.
Esa es la diferencia entre un fondo buitre y Venezuela. Venezuela sí nos prestó la plata.
Pero así funciona el juego de la timba financiera, señor. Siempre fue y siempre será así. Si como país vas a cuestionar su funcionamiento, entonces no le pidas de prestado a nadie y listo. HACIA ADENTRO, juzgá a los que se endeudaron a futuro para nada, pero HACIA AFUERA, dejá de gritar como si fueras el dueño de la razón, sentate y negociá lo mejor posible hasta el último centavo que quedes debiendo, papi. Así se hacen las administraciones serias. Que ésta lo era hace unos 5 ó 6 años, hasta que perdió el rumbo.
La deuda externa es ilegítima e ilegal y no haya que pagarle una mierda a estos hijos de puta. El gobierno que lo hace como este y los anteriores son infames traidores a la patria y están incumpliendo el fallo del juez Ballesteros del año 2000 en la causa Olmos que declara la ilegalidad de la deuda externa. Son cipayos e infames traidores a la patria y, si esta yegua quiere pagarla que la pague con los 80 palos verdes que tiene de patrimonio en calafate… Acá, lo que hay que pagar, es la deuda INTERNA con los jubilados, los pobres y los trabajadores
martinez de hoz,cavallo uno de los maximos responsables de esto…decada del 80 en el banco central,decada del 90 en el ministerio economia…increible el daño que le hicieron al pais.
Si en el mundo se están “salvando” a los bancos dudo mucho que algún día veamos preso a Cavallo y cía. Algunos argumentan que es posible enjuiciarlo, pero habría que ver que se necesita.
Respecto a porqué no se investigó la deuda, claramente tuvo que ver con la incapacidad política de plantear esa opción. Es fácil pedir eso desde el patio de la facu de sociales pero en la realidad es un poquito mas complejo. No eramos Ecuador, que tenía su petrolera como fuente de divisas para pagar deuda y reactivar la economía, y en donde faltó voluntad política (hasta la llegada de Correa).
Totalmente de acuerdo, esos son los responsables directos junto al nefasto de los 90, Alfonsin, Kirchner, duhalde, la actual y todos los que, a pesar de la manifiesta ilegalidad, la siguen pagando… Dios y la patria; se lo demandarán algún día?? Algún día irán todos estos asesino en cana??