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La peli más triste de la historia… según la ciencia
(Por: Valeria Martinez, Yahoo! España).- Cómo se iba a imaginar Franco Zeffirelli cuando hizo “El Campeón” en 1979 que iba a estar haciéndole un favor a la ciencia? A pesar de contar con un argumento simplón, su remake del filme ganador del Oscar en 1931 es la “Película más triste de la historia”.
Así lo ha determinado un grupo de científicos que afirman que la escena central del filme es la que provoca más lágrimas en los espectadores. En la película, Jon Voight da vida a un boxeador venido a menos que regresa al ring buscando ganar dinero para retener la custodia de su hijo, interpretado por Ricky Schroder.
El descubrimiento científico se centra en el clímax de la película – Alerta: ¡Si no la viste no sigas leyendo!– cuando el pequeño observa la pelea final de su padre que termina mueriendo. La intensidad del llanto y las tristes órdenes que el niño le da al padre para que despierte tienen lágrimas aseguradas.
¿Te acordás de la escena? (¡SPOILER!)
El descubrimiento lo han llevado a cabo James Gross y Robert Levenson, un par de científicos que llevan décadas investigando cómo afecta la tristeza al comportamiento humano, y para ello han buscado y experimentado hasta encontrar la escena perfecta que consigue emocionar a sus pacientes. El proyecto comenzó en 1988 y la búsqueda de las imágenes se centraba en conseguir emociones fuertes en los sujetos de estudio. Después de evaluar más de 250 filmes editaron las que mejor resultado daban y seleccionaron 78 clips que mostraron a un grupo de más de 500 personas para comprobar su reacción.
El resultado ha sido una lista de varias producciones que generan diferentes emociones y que muchos psicólogos y científicos utilizan en la actualidad. En resumen, la dramática escena entre Schroder y Voight es la que consigue la lágrima fácil y honesta de los espectadores, tanto en hombres como mujeres, y con más rapidez que lo que ocurre con la escena en la que Bambi pierde a su madre a manos de un cazador.
Los clips que consiguen emociones según el estudio son:
- Diversión: el orgasmo fingido de Meg Ryan en “Cuando Harry encontró a Sally”;
- Enojo: “El guardaespaldas“ y “Grito de libertad”;
- Alegría: vídeo de olas y una playa;
- Asco: “Pink Flamingos” y una escena de una amputación;
- Miedo: “El resplandor” y “El silencio de los inocentes”;
- Neutral: barras de color y formas abstractas;
- Sorpresa: “Capricornio uno” y “Melodía de seducción”;
- Tristeza: “El Campeón” y “Bambi”.
Con frecuencia los dramas “para llorar” los solemos dejar para una tarde invernal, pero lo cierto es que a todos nos encantan las historias que nos provocan unas lagrimitas en el cine, aunque sea en secreto y con mucho disimulo. La provocación de emociones que da el cine es lo que nos hace amar tanto el séptimo arte, dejarnos manipular por el terror, por los misterios de un buen thriller, por la adrenalina de una buena escena de acción, y por supuesto las lágrimas que derramamos cuando una escena nos toca el corazón.
Como pueden comprobar llorar en el cine es ciencia y no hay nada de qué avergonzarse. Así que no ahora es su turno, ¿con qué películas han llorado en el cine?
Mi película más lacrimógena fu “Siempre a tu lado”, y no soy fanático de los perros. Que la vea Pigu
