Porque recordemos, que lo de Pekerman-Tocalli como bien sabemos en el fútbol Argentino y en AFA, fue un “accidente”, ya que era raro que alguien se haga cargo de los juveniles presentando un proyecto serio y largo plazo como ellos. Venía respaldado de un buen laburo en Chile y Argentinos, pero nada más.
Y como bien dice ahí, Grondona que no te echa, hace lo posible para que te vayas solito. Pero como estos empezaron a laburar bien, encima metieron un par de títulos seguidos en sub 20, y bueno…
Hoy se volvió a los amiguismos, a los familiares, a los acomodos, etc. O sea, lo mismo que antes de Pekerman. Lo mismo que pasa en las inferiores de los clubes, pasa en las selecciones juveniles.
Por eso no puedo estar mas de acuerdo con este Párrafo:
Las consecuencias de la no-planificación del fútbol argentino en los proyectos de selecciones juveniles poco tienen que ver con el ocaso del fútbol de barrio pero sí con la oficialización de las categorías inferiores de los clubes como mesa de negocio de representantes y ex-futbolistas de dudosa moral. La sub-20 es apenas un marco de exposición de la putrefacción del sistema grondonista.
Además, la gente que sabe laburar en inferiores las rajan a la mierda, o bien las tienen cobrando muy poca guita para el laburo que hacen.
Cómo puede cobrar un DT de una 6º o 7º división en un club de primera, $3000? o uno de infantiles $1700? claro viejo… y después se quejan de que tengan que “buscar otras entradas de dinero”, entiéndase como arreglos con padres, representantes, intermediarios, dirigentes, etc. El mismo sistema termina corrompiendo a todos.
Y encima si pones a tipos que no están preparados para manejar jóvenes hoy, estás hasta la manos.
Porque hoy partamos de que los jovenes cambiaron en muchos aspectos, ya sea en la vida social, familiar, educación, maduración, respeto, etc y si no te amoldas, aprendes, y profesionalizas ciertas áreas (psicología, docencia, nutrición, etc) para mejorar o controlar a los jóvenes en esos aspectos, el deterioro en el futbol formativo va a ser peor. Después le echan la culpa a las camadas como hacen Grondona, Humbertito, Batista, Perazzo… “y, pasa que antes salían mas y mejores jugadores, son camadas…”, si también algo de eso, pero hay que saber contrarrestarlo y si no moves el papo para hacerlo, seguimos en la mediocridad e involución.
Después termina pasando esto con lo que también coincido:
Los juveniles que tapan los huecos que dejan las pesadas obligaciones de sueldos de los cuatro capangas del plantel, van arrastrando su mala alimentación y sus peinados encrestados a la espera de la oportunidad de tomar el primer avión que los deposite en la poderosísima liga portuguesa o en la emergente liga ucraniana. Los pobres pibes llegan con lo puesto a primera, en medio de una confusión mental absoluta: no saben si quieren jugar al fútbol o ser los próximos Cristianos Ronaldos.
Si no se quema antes, la estrella emergente se va, y con suerte volverá con el rabo entre las patas el mediocre que se fué hace tres años. Eso sí, bañado del prestigio del que deambuló por Italia, España o Rusia y con el 15% del pase depositado en Euros.