Kirchnerismo

QUE LA CRISIS LA PAGUEN LOS CAPITALISTAS!!!

Publicada 20/11/2011
Al inicio de la semana / Roberto Cachanosky
Finalmente Cristina empezó con el ajuste

El ajuste no es otra cosa que hacer subir los precios artificialmente baratos y retrasar los artificialmente caros. Esto recién comienza y es el mercado de cambios es el que está forzando al Gobierno a hacer lo que siempre dijo que no iba a hacer.

El 9 de febrero de este año, refiriéndose a los subsidios a la energía y al transporte, decía Cristina Fernández en un discurso en el Chaco: “por otra parte, como estos son bienes, servicios fundamentalmente, de los que no se puede prescindir y que tienen un gran impacto en el consumo, porque la gente si le aumentan demasiado los servicios restringe el consumo y va al pago de servicios que no crean nuevos puestos de trabajo” (sic). Tratando de traducir al castellano básico lo expresado por Cristina Fernández, lo que nos estaba tratando de decir era que al tener artificialmente baratas las tarifas de los servicios públicos, la gente disponía de más dinero para consumir y reactivar la economía. Habría que preguntarle a la presidente qué le hizo cambiar de opinión, ya que la eliminación de los subsidios, por ahora en energía, gas y agua, no se limitará a los que viven en Puerto Madero, Barrio Parque o en los countries, sino que le pegará de lleno a la mayoría de la población. Inicialmente “vendieron” la eliminación de los subsidios diciendo que se los sacaban a los más ricos, pero enseguida surgió lo de la declaración jurada, con lo cual, se viene el tarifazo. Vamos a ver cómo “venden” el aumento del transporte cuando llegue el momento. Tal vez digan que no es justo que el que toma el colectivo en Barrio Parque esté subsidiado.
Pero volviendo al discurso de Cristina Fernández, lo que olvidó decir que es que en economía nada es gratis. Alguien está pagando los subsidios con impuestos, consumiendo stock de capital o el impuesto inflacionario. La medida anunciada por Cristina Fernández es lo que ella tantas veces dijo que se negaba a hacer y que finalmente tiene que hacer: el ajuste. ¿Qué significa ajustar la economía? Cambiar los precios relativos. Los precios que están artificialmente bajos se suben y los que están artificialmente altos suben menos. Generalmente estos ajustes se hacen para tratar de equilibrar las cuentas públicas, como fue el rodrigazo del 4 de junio de 1975. En ese momento Celestino Rodrigo devaluó el peso (subió el dólar) e incrementó las tarifas de los servicios públicos y combustibles, al tiempo que aumentaban menos los salarios. El resultado fue la primera huelga general que la CGT le hizo a un gobierno peronista.
En esta oportunidad empezaron con algunas tarifas de los servicios públicos mientras el mercado se encarga de devaluar el peso. Es decir, a diferencia del rodrigazo, y por más que Moreno le responda con un cañón a la ley de la oferta y la demanda, el mercado se está llevando las reservas del Central forzando una devaluación. Es solo cuestión de tiempo. Obsérvese que el dólar está barato para lo que es este modelo económico y las tarifas de los servicios públicos fueron “pisadas”, al igual que el dólar, como mecanismos antiinflacionarios. Nada tan diferente a lo que se hizo en infinidad de planes anteriores que terminaron mal.
¿Por qué decidieron ahora aplicar un tarifazo? Porque el gasto público en subsidios se les fue de las manos, con un proyectado para este año de $ 70.000 millones. Además, la energía artificialmente barata le está pegando en el saldo de balance comercial por el incremento de las importaciones de combustibles para sostener funcionando el sistema energético. Esto les achica aún más el saldo de balance comercial y les quita poder de fuego para financiar la constante fuga de capitales que tuvo el kirchnerismo desde el 2003.
Un párrafo para la encuesta en la cual a uno le preguntarán si quiere dejar de ser subsidiado. Pregunta: ¿cuáles son los parámetros que tomará el gobierno para decidir a quién subsidia y a quienes no? Si se van a guiar el nivel de ingreso y relacionarlo con la canasta básica total del INDEC que marca la línea de pobreza, hasta los linyeras van a quedar por encima de la línea de pobreza. De manera que el sistema será asimilable al que usa la AFIP para autorizar a una persona a comprar dólares: el sistema del dedómetro o parecemetrometo.
Tiene el gobierno en este momento, al menos, dos frentes complicados: a) el frente fiscal con necesidad de aplicar un tarifazo y b) el frente externo en que hay drenaje constante de reservas de las arcas del Central.
El frente fiscal ni por casualidad lo resuelven con el tarifazo en energía y agua. Y el frente externo, a pesar de las cebitas con que le tira Moreno al mercado creyendo que tiene un misil tierra-tierra, lejos está de ser dominado. Mirando el balance del Banco Central se observa que al 7 de noviembre seguían subiendo los adelantos al Tesoro (emisión monetaria para financiar el gasto público), el rubro Otros Pasivos, que incluiría préstamos para disimular la pérdida de reservas, llegó a $ 21.728 millones. Al 31 de mayo pasado, antes que se acelerará la fuga de capitales, Otros Pasivos era de $ 4.917 millones, es decir, multiplicó por algo más de 4 este rubro. Si hoy fueran a una convertibilidad, el tipo de cambio de conversión sería de $6,62 por dólar al 7 de noviembre mostrando un claro deterioro respecto a las semanas anteriores. Aclaro, no digo que el dólar tiene que estar en $ 6,62, solo afirmo que si se quisiera ir a una convertibilidad esa sería la paridad que surge de los números del balance del BCRA. En enero del 2010, cuando Marcó del Pont se hizo cargo del Central, esa misma relación era de $ 4,30, así que la capacidad de demolición del patrimonio del Central ha sido proverbial. Finalmente, y esto es lo más preocupante, siguen aumentando los redescuentos a las entidades financieras. Estos redescuentos se otorgan cuando hay problemas para hacer frente a los pagos en ventanilla.
¿Cómo sigue la historia? Si aceptamos que la ciencia económica no es justamente el fuerte del kirchnerismo, todo parece indicar que el próximo paso consistiría en forzar una baja de la tasa de interés justo en el medio de una corrida cambiaria. ¿Para qué? Para que la economía no se les enfríe, porque si se les cae la actividad económica, la recaudación baja, aumenta el déficit fiscal y el tarifazo tendría que ser complementado con más medidas de restricción del gasto, la antítesis del modelo populista del gobierno.
El problema es que está científicamente comprobado que cuando hay presiones sobre el tipo de cambio, la tasa de interés tiende a subir. ¿Por qué? Porque la gente retira pesos de los bancos para comprar dólares. Al retirar plata de los bancos estos tratan de retener a sus depositantes ofreciéndoles más tasa de interés (salvando las diferencias, recordar el 2001). Si el gobierno fuerza una baja de las tasas de interés el retiro de depósitos se acelerará para comprar dólares. Sería como subirse al banquito, ponerse la cuerda en el cuello y saltar. Se estarían ahorcando solos.
En síntesis, el corralito a la compra de dólares fue presentado como un combate contra la evasión y el lavado de dinero, ahora el anuncio del tarifazo que está disfrazado de eliminación de los subsidios a los más ricos, es el primer paso hacia un cambio de precios relativos o, dicho en castellano básico: la fiesta se acaba. Con lo cual se confirma mi pronóstico de que o el gobierno ajustaba la economía o se encargaba el mercado de ajustar, y el mercado está forzando el ajuste con la corrida cambiaria. Por ahora, el mercado está empujando al gobierno, paso a paso, a hacer el ajuste. Si el gobierno se resiste a aceptar la realidad y sigue con el relato del modelo exitoso, o implementa mal el ajuste, las complicaciones serán mayores a las actuales. Digamos que la situación económica no está para que improvisados sigan con sus primitivas medidas. Aquí hace falta confianza y ciencia económica. El problema es quién se anima, entre los economistas serios, a sentarse en el sillón de ministro que es como una silla eléctrica por el populismo y la soberbia del kirchnerismo.

Finalmente Cristina empezó con el ajuste - Economa para todos

Me da tanta risa que huyan del término tarifazo. No lo quieren reconcoer, pero eso es lo que se viene. Es como cuando no hablan de la inflación, otra palabra prohibida en el kirchnerismo. Sigan profundizando el modelo muchachos.

Me matan las conclusiones que sacas de lo que va a venir ahora sólo porque se le quita el subsidio a aquellas personas que tienen la posibilidad de pagarlo.

Hay veces que algunos parece que están rogando que se vaya todo a la mierda sólo para venir a echar en cara a los que bancamos o votamos a Cristina

Pero Dylan es así, cree que Cristina es una conchuda y que los empresarios argentinos no tienen nada que ver con la inflación. Es de los que se informan bien.

Ahora la culpa es de los empresarios nicklas jajajajajaja, haceme cagar de risa un poquito dale dale que tengo tiempo. Hace 8 años, sí 8 años entendés 8 repito 8 por si no te quedó claro, que están repartiendo guita, varios se recontraforraron y ahora se acabó la guita y hay que recuperarla de alguna manera.


Claro estoy esperando eso. Solamente a esas personas se le quita? jaja, el impuestazo es también para los que pueden pagar 300% más? cuando se vengan los aumentos del bondi y demás es para los que pueden, el colectivero les va a decir disculpe sr uds puede pagar 4.50 o 1.25? a ver dónde trabaja? dale che que llego tarde la puta que te parió…
Volvé a lpm pibe.

Nicklas, entendiste que son 8 años no? :lol::lol:

Tirá chistes belén, porque otra cosa ahora no te queda.

Me causa gracia como escribís nada más, no es mala onda. Ya está arduo debatido esto, cuando pase todo lo que vaticinás hablamos, para mí no es una mala medida la de los subsidios más que nada por cómo se la implementó.

Ya está harto debatido jajajajajajajaja, me hacen cagar de risa, tenés el mismo disquito que todos. Si no te preocupes que voy a ser el primero en venir a cagarme de risa.


Ah del artículito de gianluca nada no?

Qué mala onda y poco sentido del humor, che. Hace 500 años que están diciendo que el gobierno gasta de más, que hay que reducir el gasto público, y una vez que se hace se crispan todos. Además se intenta implementar de manera equitativa, es una medida redistributiva porque la plata que se ahorra es con la que va a contar el estado para, por ejemplo, no tener que bajar el salario a los jubilados. No lo veo mal para nada. Después el futurismo que podamos llegar a hacer no deja de ser futurismo. La economía se expande y se retrae, el pueblo eligió a la persona más indicada para poder afrontar lo que se viene, esperemos que salga todo bien. Si a vos te causa gracia que al país le vaya mal es cosa tuya, a mí no me causaría gracia ni me gustaría, con ningún gobierno. Vos votaste a Macri y yo no salgo a festejar que se caen los edificios.

8|
No te pases de lista

Me parece perfecto. Que empiece Altamira.

Sigo insistiendo, grandes argumentos los tuyos. Te quejas de cosas que no sucedieron nunca pero lo hacés por las dudas.
La quita de subsidios es para aquellas personas que pueden pagarlos sin necesidad que el estado los ayude, punto. De tarifazo no tiene nada.
Lo sorprendente es que te quejas de la quita de subsidios a los que pueden pagarlo, pero nada decís del proyecto de Macri para que aumente el abl a todos. Eso no es injusto de verdad?

PD: Para volver a LPM tendría que alguna vez haber estado ahí. Quizá con la manera de fundamentar que tenés vos, el que tendría que ir no soy yo precisamente.

Saludos che.

Publicada 20/11/2011
Al inicio de la semana / Roberto Cachanosky
Finalmente Cristina empezó con el ajuste

El ajuste no es otra cosa que hacer subir los precios artificialmente baratos y retrasar los artificialmente caros. Esto recién comienza y es el mercado de cambios es el que está forzando al Gobierno a hacer lo que siempre dijo que no iba a hacer.

El 9 de febrero de este año, refiriéndose a los subsidios a la energía y al transporte, decía Cristina Fernández en un discurso en el Chaco: “por otra parte, como estos son bienes, servicios fundamentalmente, de los que no se puede prescindir y que tienen un gran impacto en el consumo, porque la gente si le aumentan demasiado los servicios restringe el consumo y va al pago de servicios que no crean nuevos puestos de trabajo” (sic). Tratando de traducir al castellano básico lo expresado por Cristina Fernández, lo que nos estaba tratando de decir era que al tener artificialmente baratas las tarifas de los servicios públicos, la gente disponía de más dinero para consumir y reactivar la economía. Habría que preguntarle a la presidente qué le hizo cambiar de opinión, ya que la eliminación de los subsidios, por ahora en energía, gas y agua, no se limitará a los que viven en Puerto Madero, Barrio Parque o en los countries, sino que le pegará de lleno a la mayoría de la población. Inicialmente “vendieron” la eliminación de los subsidios diciendo que se los sacaban a los más ricos, pero enseguida surgió lo de la declaración jurada, con lo cual, se viene el tarifazo. Vamos a ver cómo “venden” el aumento del transporte cuando llegue el momento. Tal vez digan que no es justo que el que toma el colectivo en Barrio Parque esté subsidiado.
Pero volviendo al discurso de Cristina Fernández, lo que olvidó decir que es que en economía nada es gratis. Alguien está pagando los subsidios con impuestos, consumiendo stock de capital o el impuesto inflacionario. La medida anunciada por Cristina Fernández es lo que ella tantas veces dijo que se negaba a hacer y que finalmente tiene que hacer: el ajuste. ¿Qué significa ajustar la economía? Cambiar los precios relativos. Los precios que están artificialmente bajos se suben y los que están artificialmente altos suben menos. Generalmente estos ajustes se hacen para tratar de equilibrar las cuentas públicas, como fue el rodrigazo del 4 de junio de 1975. En ese momento Celestino Rodrigo devaluó el peso (subió el dólar) e incrementó las tarifas de los servicios públicos y combustibles, al tiempo que aumentaban menos los salarios. El resultado fue la primera huelga general que la CGT le hizo a un gobierno peronista.
En esta oportunidad empezaron con algunas tarifas de los servicios públicos mientras el mercado se encarga de devaluar el peso. Es decir, a diferencia del rodrigazo, y por más que Moreno le responda con un cañón a la ley de la oferta y la demanda, el mercado se está llevando las reservas del Central forzando una devaluación. Es solo cuestión de tiempo. Obsérvese que el dólar está barato para lo que es este modelo económico y las tarifas de los servicios públicos fueron “pisadas”, al igual que el dólar, como mecanismos antiinflacionarios. Nada tan diferente a lo que se hizo en infinidad de planes anteriores que terminaron mal.
¿Por qué decidieron ahora aplicar un tarifazo? Porque el gasto público en subsidios se les fue de las manos, con un proyectado para este año de $ 70.000 millones. Además, la energía artificialmente barata le está pegando en el saldo de balance comercial por el incremento de las importaciones de combustibles para sostener funcionando el sistema energético. Esto les achica aún más el saldo de balance comercial y les quita poder de fuego para financiar la constante fuga de capitales que tuvo el kirchnerismo desde el 2003.
Un párrafo para la encuesta en la cual a uno le preguntarán si quiere dejar de ser subsidiado. Pregunta: ¿cuáles son los parámetros que tomará el gobierno para decidir a quién subsidia y a quienes no? Si se van a guiar el nivel de ingreso y relacionarlo con la canasta básica total del INDEC que marca la línea de pobreza, hasta los linyeras van a quedar por encima de la línea de pobreza. De manera que el sistema será asimilable al que usa la AFIP para autorizar a una persona a comprar dólares: el sistema del dedómetro o parecemetrometo.
Tiene el gobierno en este momento, al menos, dos frentes complicados: a) el frente fiscal con necesidad de aplicar un tarifazo y b) el frente externo en que hay drenaje constante de reservas de las arcas del Central.
El frente fiscal ni por casualidad lo resuelven con el tarifazo en energía y agua. Y el frente externo, a pesar de las cebitas con que le tira Moreno al mercado creyendo que tiene un misil tierra-tierra, lejos está de ser dominado. Mirando el balance del Banco Central se observa que al 7 de noviembre seguían subiendo los adelantos al Tesoro (emisión monetaria para financiar el gasto público), el rubro Otros Pasivos, que incluiría préstamos para disimular la pérdida de reservas, llegó a $ 21.728 millones. Al 31 de mayo pasado, antes que se acelerará la fuga de capitales, Otros Pasivos era de $ 4.917 millones, es decir, multiplicó por algo más de 4 este rubro. Si hoy fueran a una convertibilidad, el tipo de cambio de conversión sería de $6,62 por dólar al 7 de noviembre mostrando un claro deterioro respecto a las semanas anteriores. Aclaro, no digo que el dólar tiene que estar en $ 6,62, solo afirmo que si se quisiera ir a una convertibilidad esa sería la paridad que surge de los números del balance del BCRA. En enero del 2010, cuando Marcó del Pont se hizo cargo del Central, esa misma relación era de $ 4,30, así que la capacidad de demolición del patrimonio del Central ha sido proverbial. Finalmente, y esto es lo más preocupante, siguen aumentando los redescuentos a las entidades financieras. Estos redescuentos se otorgan cuando hay problemas para hacer frente a los pagos en ventanilla.
¿Cómo sigue la historia? Si aceptamos que la ciencia económica no es justamente el fuerte del kirchnerismo, todo parece indicar que el próximo paso consistiría en forzar una baja de la tasa de interés justo en el medio de una corrida cambiaria. ¿Para qué? Para que la economía no se les enfríe, porque si se les cae la actividad económica, la recaudación baja, aumenta el déficit fiscal y el tarifazo tendría que ser complementado con más medidas de restricción del gasto, la antítesis del modelo populista del gobierno.
El problema es que está científicamente comprobado que cuando hay presiones sobre el tipo de cambio, la tasa de interés tiende a subir. ¿Por qué? Porque la gente retira pesos de los bancos para comprar dólares. Al retirar plata de los bancos estos tratan de retener a sus depositantes ofreciéndoles más tasa de interés (salvando las diferencias, recordar el 2001). Si el gobierno fuerza una baja de las tasas de interés el retiro de depósitos se acelerará para comprar dólares. Sería como subirse al banquito, ponerse la cuerda en el cuello y saltar. Se estarían ahorcando solos.
En síntesis, el corralito a la compra de dólares fue presentado como un combate contra la evasión y el lavado de dinero, ahora el anuncio del tarifazo que está disfrazado de eliminación de los subsidios a los más ricos, es el primer paso hacia un cambio de precios relativos o, dicho en castellano básico: la fiesta se acaba. Con lo cual se confirma mi pronóstico de que o el gobierno ajustaba la economía o se encargaba el mercado de ajustar, y el mercado está forzando el ajuste con la corrida cambiaria. Por ahora, el mercado está empujando al gobierno, paso a paso, a hacer el ajuste. Si el gobierno se resiste a aceptar la realidad y sigue con el relato del modelo exitoso, o implementa mal el ajuste, las complicaciones serán mayores a las actuales. Digamos que la situación económica no está para que improvisados sigan con sus primitivas medidas. Aquí hace falta confianza y ciencia económica. El problema es quién se anima, entre los economistas serios, a, sentarse en el sillón de ministro que es como una silla eléctrica por el populismo y la soberbia del kirchnerismo.

Pregunta: ¿cuáles son los parámetros que tomará el gobierno para decidir a quién subsidia y a quienes no?

Esto es fenomenal. Vamos a descostillarnos un poco de risa con el mediopelaje gráfico.

El tipo muy convincentemente hace una editorial muy filosa implicitando que maneja información bañada de puras certezas donde podemos ver en la cita, el tipo se pregunta a sí mismo como hará el gobierno para tomar las medidas que él, nunca supo desde el vamos.

En definitiva, el tipo estuvo en pelotas toda la nota y seguramente, lo habrán mandado a hacer desde la gerencia del nefasto diario milico y oligarca, estas operetas dominicales que deleitan al empresario que ya no va a poder ser subsidiado desde su country en Pilar…

Es que votan a Macri y se viven cayendo los edificios entendés??? decime si entendés o no, entendés que se caen??? entendés??? Hace 4 años que se caen, C-U-A-T-R-O, no sé si me entendés, 4 años, te lo repito 4.


:lol:

Por desagracia Altamira no tiene las mismas posibilidades que los funcionarios K que tienen su empresita…

Y cómo se paga el BOTOX? Ay, estoy tan graciosa en el día de hoy…:mrgreen:

Te parece poco??? Los subsidios van a ser otorgados de una manera completamente arbitraria que se desconoce, eso es muy preocupante, teniendo en cuenta los numeros del kirchnerismo para considerar a una persona pobre.


Jajaja no tiene botox Altamira… Lo aclaro por si alguno le cree a esta chica…

¿Cómo podés determinar arbitrario a algo que todavía no se implementó?

Se dan cuenta que se corren tanto a la izquierda que repiten las mismas gansadas que la derecha…

¿Cómo podés determinar que Altamira no tiene botox cuando es evidente que se hace estirar el cutis? :lol: