Intentó arreglar una pintura antigua y logró la peor restauración
| 22.08.2012 | 15:21h
No se veía del todo bien: la pintura estaba algo descascarada y se le notaba el paso del tiempo. Hasta que una anciana decidió hacerle un favor a la comunidad y se lanzó, por su cuenta, a restaurarla. El resultado: dejó prácticamente destruido un “Ecce homo” del siglo XIX que estaba en un santuario de la localidad española de Borja, Zaragoza.
La pintura está en uno de los muros del Santuario de Misericordia. Y no está claro qué van a poder hacer ahora que quedó arruinada. El concejal de Cultura de Borja, Juan María Ojeda, dijo a la agencia EFE que es “muy difícil” que se pueda recuperar porque la obra -un óleo pintado sobre una pared sin tratar- ya estaba “muy deteriorada” aún antes de la fallida restauración.
El intento por recuperarla fue realizado por una anciana “con una vida difícil”, un hijo discapacitado de 60 años a su cargo y que, con la mejor intención, entró en la iglesia y decidió “por su cuenta y riesgo” reparar la obra, explicó Ojeda.
El hecho fue dado a conocer por el Centro de Estudios Borjanos, que en su blog mostró fotografías del antes y del después de la pintura.
Intentó arreglar una pintura antigua y logró la peor restauración
| 22.08.2012 | 15:21h
No se veía del todo bien: la pintura estaba algo descascarada y se le notaba el paso del tiempo. Hasta que una anciana decidió hacerle un favor a la comunidad y se lanzó, por su cuenta, a restaurarla. El resultado: dejó prácticamente destruido un “Ecce homo” del siglo XIX que estaba en un santuario de la localidad española de Borja, Zaragoza.
La pintura está en uno de los muros del Santuario de Misericordia. Y no está claro qué van a poder hacer ahora que quedó arruinada. El concejal de Cultura de Borja, Juan María Ojeda, dijo a la agencia EFE que es “muy difícil” que se pueda recuperar porque la obra -un óleo pintado sobre una pared sin tratar- ya estaba “muy deteriorada” aún antes de la fallida restauración.
El intento por recuperarla fue realizado por una anciana “con una vida difícil”, un hijo discapacitado de 60 años a su cargo y que, con la mejor intención, entró en la iglesia y decidió “por su cuenta y riesgo” reparar la obra, explicó Ojeda.
El hecho fue dado a conocer por el Centro de Estudios Borjanos, que en su blog mostró fotografías del antes y del después de la pintura.