Lo que tenían los Guns, y gran parte del rock hasta Nirvana inclusive, es que eran auténticos. Era más naturalidad que pose, eso sumado a un cantante muy carismático en el escenario y un puñado de buenas canciones ejecutadas en generosas giras mundiales.
Me alegra mucho si se concreta la noticia de que estos Guns N’ Roses de ahora vengan a la Argentina. Y no hay dudas de que iré a verlos.
No creo que el hecho de que no vengan con su formación original le quite mérito al asunto: tampoco era la formación original en 1992 y 1993, en sus primeras visitas. En realidad, fue una banda que fue haciendo un recambio interesante de integrantes en comparación con otros grupos (hasta el punto de que el único integrante original, sea su líder de siempre); Para los Use Your Illusion, ya se había ido Steven Adler, el batero original, y el fundador Izzy Stradlin’ grabó los discos pero no hizo la gira, reemplazado por Gilby Clarke. No era un integrante más, Izzy. Hasta diría que después de Axl era el más importante, por lo menos en materia compositiva. Aún así, sin Izzy, los 4 conciertos de los Guns en el Monumental fueron históricos. También, en el '92 y '93 llegaron con un nuevo miembro oficial (Dizzy Reed, tecladista) y con un puñado de músicos extras (incluidas coristas y “vientistas”). Slash y Duff McKagan pueden haber sido muy carismáticos para la consideración de los fans, pero tampoco estamos hablando de grandísimos instrumentistas. Es más, Duff ni siquiera es bajista originalmente, sino baterista.
Bien. Quien haya escuchado Chinese Democracy puede confirmar que los músicos que Axl contrató son considerablemente superiores técnicamente que los anteriores. Y no sólo eso, el disco es impresionante, y son temas que valdrían la pena escucharlos en vivo, más allá del exceso de post-producción del disco. Es un disco pesado, denso, que no se agota con un par de escuchadas… a simple oída suena como una bola de sonido, un tsunami de sonido: infinitas capas de voces, teclados, bajos, guitarras, cuerdas… pero detrás de todo ese abrumante estructura, hay excelentes canciones, más del estilo de los Use… que de Appetite For Destruction.
En fin, creo que valió la pena la espera, y que Axl grabó uno de los mejores discos del género de los últimos años, indiscutiblemente gunner.