Gendarmería, Prefectura y FFAA

No se supone que el fallo que aplicó el gobierno precisamente blanqueaba esos suplementos ?

A mi los pelotudos de la 60 me hicieron llegar tarde al trabajo. Y los que vigilaban el corte de calles en el Ministerio de Trabajo era la Federal.

La verdad, ni idea.

Que burrada¡¡¡¡¡

En su caso, yendo a la Justicia Federal, podran plantear (cada gendarme) el caracter remunerativo de los suplementos. Pero de ahi a hablar de pago en negro, una burrada del diputado.

Me imagino que la denuncia la hizo Echegaray, al que tanto le molesta “dice que” los evasores.

Miércoles 17 de octubre de 2012 | 16:08
La Policía Bonaerense recibirá un aumento en las horas adicionales
Será de entre el 14 y el 20 por ciento según el tipo de custodia que deban realizar los efectivos; entrará en vigencia en noviembre

Hasta un 20 por ciento aumentarán los montos de los servicios adicionales que prestan los efectivos de la Policía Bonaerense por custodia en espectáculos públicos, bancos e instituciones según una disposición del gobierno provincial que entrará en vigencia en noviembre.

El Ministerio de Justicia y Seguridad bonaerense, a través de una resolución interna publicada hoy en el Boletín Oficial, presentará un incremento indirecto, de entre el 14 y 20 por ciento, en los salarios de los integrantes de la fuerza provincial que realizan ese servicio adicional conocido como Polad.

A partir del 1 de noviembre el servicio de categoría 1, custodia de espectáculos o reuniones públicas, pasará de 15 pesos a 18 pesos por hora, un 20 por ciento de aumento; y la categoría 2, presencia en bancos, instituciones de créditos o locales que guarden valores, pasará de 18 a 21 pesos (16 por ciento).

Mientras que para la categoría 3, la correspondiente al acompañamiento de pagadores, recaudadores, traslado de valores y seguridad de personas o bienes, pasará de 21 a 24 pesos (14 por ciento). La custodia en hospitales y organismos centralizados o descentralizados de la Administración Pública, quedarán encuadradas en la primera categoría.

La medida dispone además que el monto por horas adicionales no debe superar “los porcentajes máximos con relación al sueldo básico del oficial de policía de las Policías”, siendo para la categoría 1 el 29 por ciento del total de la remuneración mensual, para la categoría 2 el 34 por ciento y, finalmente, para la categoría 3 el 40 por ciento.

El último incremento de las horas adicionales había sido otorgado por el Gobierno bonaerense el 26 de octubre del año pasado. En ese momento se elevó de 10 pesos a 15 pesos la categoría 1, de 12 pesos a 18 pesos la categoría 2 y de 14 pesos a 21 pesos la última categoría.

La Policía Bonaerense recibirá un aumento en las horas adicionales - lanacion.com *

te referis a los mismos que fueron echados a patadas (literalmente) de la protesta por los gendarmes? :stuck_out_tongue:

Una vez mas el tiempo DEMOLIO la mentira oficial.

Mientras tanto en Santa Cruz, si SE VOLTEO un gobernador y el actual Peralta ya tuvo que soportar movidas raras.
Pero DE ESO NO SE HABLA

Desconozco, si pasó eso, bien por ellos ( los que los echaron a patadas )

Creo que el unico canal que lo mostró fue America, habia un par que se quisieron infiltrar en la protesta y los sacaron rajando, no llegue a escuchar todo bien pero vi que eran gente de alguna manera vinculada a Biondini

¿Y qué eseprabas, que haya un golpe de estado para ganar un discusión de internet?

para no abrir temas al pedo…aparte de todos los problemas de las fuerzas de seguridad y militares…la fragata en ghana…ahora palmo y quedo varada la fragata espora que mandaron al ejercicio atlas sur en sudafrica…iban a enviar la espiro y en preparativos rompieron las maquinas, aprestan de urgencia la espora y fue en africa…temo lo que puede ocurrir si envian un barco auxiliar para remolcarla…ok conque se desconfie de los militares (aunque paso el tiempo suficiente para el recambio generacional) pero es inadmisible el estado que se encuentra la armada, la argentina con el frente maritimo que tiene y sus aspiraciones antarticas no puede tener la flota completa inoperante y sin ningun tipo de mantenimiento dejando sin proteccion nustros mares.
la labor de la inutil garre parejita, destruyo las fuerzas armadas y ahora se carga las de seguridad…que esperan para rajarla ?

Anoche estaba escuchando q esto, lo de ghana, podria haber pasado en casi cualquier lado… Con todos los paises con problemas con los fondos buitres es asi?

Yo rescato el modo de protesta… En otro momento se hubiesen alzado en armas y quien los para?

La crisis de prefectos y gendarmes

El “salario imposible” de los K

Con la negativa del gobierno al reclamo de un básico de 7.000 pesos, el conflicto con los prefectos y gendarmes ha dado otro salto. Los suboficiales de gendarmería consideraron una “burla” la ratificación del decreto oficial, por lo que resolvieron una reducción del 50% en sus servicios. Después de haber repetido durante días que el conflicto se debía a una “liquidación salarial defectuosa”, Abal Medina reivindicó la aplicación del decreto oficial. Pero a renglón siguiente, echaron al autor de la norma, el hermano de la ministra Garré.

La medida no fue acompañada por la derogación del decreto que reemplazó los adicionales por un ‘complemento’ que será absorbido con futuros aumentos o ascensos. En vista de lo anterior, los efectivos reclamaron un salario básico de 7.000 pesos.

Pago en negro y jerarquías militares

Según se supo en estos días, los ajustes estaban previstos en el presupuesto 2013 -nada tenían, por lo tanto, de liquidaciones defectuosas. El decreto de Garré eliminó un conjunto de adicionales y suplementos “en negro”, los cuales representaban hasta el 80% de la estructura salarial de las fuerzas. Pero dejaron en pie algunos “complementos” que hablan por sí solos: 13.000 pesos ‘limpios’ para los jefes y sólo 3.000 pesos -y sujetos a las deducciones por ganancias- para los de menor rango. La poda fue tan arbitraria y desigual como el régimen de “adicionales” que vino a suplantar. Los adicionales con mayor peso “se otorgaron a través de los seis decretos firmados entre 2006 y 2010 por Néstor y Cristina Kirchner” (Clarín, 10/10).

Esa estructura salarial sólo entró en crisis cuando dos fallos de la Corte establecieron el carácter remunerativo de los adicionales, lo que permitió que muchos efectivos se ampararan en ellos y cobraran salarios mayores. La Corte también había fallado a favor del reajuste de los haberes jubilatorios congelados entre 2002 y 2008. Pero mientras los juicios de jubilados eran apelados -o sencillamente ninguneados- por la Anses, las medidas cautelares en favor de las fuerzas de represión se pagaban puntualmente. Antes que esta enormidad alcanzara trascendencia, el gobierno decidió ‘limpiar’ de adicionales el sueldo de prefectos y gendarmes -y, de paso, someterlos al ajuste.

La discrecionalidad de los recortes es la consecuencia necesaria del carácter vertical de los aparatos de represión del Estado: la autoridad sólo se manifiesta plenamente a través del ejercicio de los actos arbitrarios -o sea, de aquellos que emanan de la aplicación lisa y llana del principio de autoridad. El carácter opresivo de la institución policial y militar se expresa en su estructura interna.

Presupuesto trucho, “modelo” inviable

El reclamo de un salario básico de 7.000 pesos plantearía un gasto adicional de 4.000 millones de pesos en 2013. Y bastante más si -como se prevé- desata un pedido similar en las restantes fuerzas. La factura a pagar se agranda por la misma expansión de la Gendarmería, que duplicó sus efectivos bajo el kirchnerismo. Pero, en definitiva, el régimen de pago en negro abarca al conjunto de las administraciones estatales y provinciales.

Gobierno y opositores

En vistas de lo anterior, se ha reforzado un inédito frente único del gobierno y opositores, de “6,7,8” y de Clarín, contra el reclamo de los 7.000 pesos de básico. En la conferencia de prensa de este martes, Abal Medina reivindicó “el crecimiento de la gendarmería” en estos años, “con equipamiento y efectivos”. Con esa política, los K quisieron sortear la crisis de seguridad planteada por la descomposición imparable de la Federal y la Bonaerense.

Pero los K no han podido evitar que al interior de la Gendamería y la Prefectura se instalen las mismas contradicciones sociales que en el conjunto del “modelo”: los efectivos de la seguridad democrática trabajan con salarios en negro (como lo hace el 35% de los trabajadores del país) y deben hacer changas para sobrevivir.

El reclamo presupuestario o salarial de los efectivos del aparato de represión comporta, objetivamente, un reforzamiento de su capacidad de coerción contra el pueblo. Pero, al mismo tiempo, conduce a un choque con el propio régimen y aparato estatal que esos efectivos defienden.

Como todas las crisis planteadas por la bancarrota capitalista y la declinación del arbitraje oficial, las fuerzas políticas y las clases sociales intervienen en esta crisis en pos de una salida favorable a sus intereses. Los socialistas revolucionarios no podemos dejar de hacerlo. Denunciamos el reforzamiento represivo que reclaman oficialistas y opositores, así como también todo el andamiaje de delación y espionaje contra el movimiento popular (Proyecto X, Ley antiterrorista). Señalamos el despotismo interior de las “fuerzas”, como consecuencia de su carácter de clase represivo. Oponemos a la sindicalización que reclama un sector de la burguesía -que se reduce a formar una comisión de gestión laboral- un sindicato con derecho de huelga y poder de veto sobre las órdenes que impliquen ataques contra la lucha de clases del movimiento obrero y del conjunto de los explotados.


La crisis de prefectos y gendarmes : Prensa Obrera 1243


La derecha contra los Gendarmes

En la crisis con la Gendarmería y la Prefectura, la prensa ha puesto el foco en un tema reiterativo: la disputa entre el secretario Berni y la ministra Garré por el control de las fuerzas de seguridad. Menos atención le ha prestado al documento firmado en el Congreso, “en defensa de la democracia”, solicitado por el kirchnerismo y secundado, en primer lugar, nada menos que por el PRO. Los voceros de los amotinados respondieron en forma defensiva, reiterando hasta el cansancio que son “hijos de la democracia” y, naturalmente, que tienen el objetivo de “defenderla”. Mejor hubiera sido que denunciaran el pacto entre los K y la derecha para contrarrestar lo que los propios gendarmes y prefectos reclaman -7.000 pesos de básico. El ‘ajuste’ no distingue a ‘nacionales y populares’ de ‘destituyentes’.

La burguesía no tiene en la agenda un golpe, de modo que la ‘democracia’ no se encuentra en peligro. Los capitalistas están más preocupados por el pago en pesos del bono en dólares de Chaco que por la reivindicación de los amotinados. Las oposiciones capitalistas a los K no demuestran la menor intención de ser gobierno hasta después de 2015. Tampoco los ‘caceroleros’ del 13S y del 8N se acercaron a los edificios ocupados. No tienen en la agenda un golpe, sino una derrota electoral de los K el año que viene y, más cerca en el tiempo, armar un escudo protector para que los K y sus amigos no se queden con los despojos de la Corpo a partir del 7D. En la Gendarmería, la derecha ‘realmente existente’ son los K -ejecutores de Proyecto X.

Dentro del conjunto de la situación política, los amotinamientos se integran a un conjunto de protestas y reclamos, cuya delimitación política está en proceso de desarrollo o definición. Cuando el método bonapartista del gobierno pierde su capacidad de disciplinamiento, el arbitraje oficial es desafiado por todas las clases sociales. En estas circunstancias, los socialistas deben desarrollar en la práctica la delimitación política de clase, y de ningún modo refugiarse en el propagandismo o en el autoaislamiento bajo el pretexto de distinguirse en la confusión general.

La firma del ‘acta democrática’ en el Congreso demuestra que la derecha parlamentaria está a la defensiva y que sigue sucumbiendo a iniciativas del oficialismo.


La derecha contra los gendarmes : Prensa Obrera 1243

Una crisis de Estado y los socialistas

El amotinamiento de las fuerzas estatales de represión (Gendarmería, Prefectura, Armada, etc.) es, con ciertos límites transitorios, una crisis del Estado.

No estamos ante un soviet de soldados, pero los reclamos salariales de la tropa han dejado al desnudo un enorme agravio de la tropa y una lucha interna de las camarillas de los mandos y el gobierno. El amotinamiento no ha cambiado la naturaleza represiva de las fuerzas en cuestión, pero ha quedado claro que no pueden funcionar como lo venían haciendo; y han hecho ver reivindicaciones que entran en contradicción con la naturaleza y la función de una fuerza que ocupa el centro de la represión de los trabajadores y movimientos sociales que desarrollan reivindicaciones similares o afines. Se filtra, de este modo, sobre un sector ultrasensible del aparato estatal, la presión que ejerce la bancarrota capitalista, en primer lugar sobre la capacidad fiscal de los gobiernos pero también a través de un personal que desarrolla labores, debido a esa misma crisis fiscal, fuera del ámbito de las fuerzas represiva (‘changas’). La frecuencia de estos casos lleva a suponer que entre los amotinados podría haber personal con experiencias en el movimiento sindical. Numerosos voceros de los amotinados revelaron su condición paralela de docentes, técnicos y, en algunos casos, obreros de la construcción.

La sindicalización

El planteo de la sindicalización ha sido tomado, de un modo diferenciado, por los mandos superiores y sus asesores y, por otro lado, por sectores de la tropa. En un marco inflacionario galopante, es natural que las cúpulas recojan la necesidad de una representación que gestione el tema de los salarios -incluso porque el índice oficial es mentiroso- porque un fallo de la Corte ha cuestionado el sistema de adicionales y porque el Presupuesto nacional no establece una previsión de aumentos salariales para los empleados del Estado.

La consideración de estas necesidades no modifica la naturaleza ni la función de estos aparatos -al contrario, procura consolidarlas frente al desafío que representa el derrumbe fiscal para la estabilidad de los aparatos de seguridad-, pero es claro que alimenta la crisis de conjunto, entre otras cosas porque pone en entredicho el ‘ajuste’ desde los sectores encargados, en última instancia, de imponerlo contra los trabajadores. No es casual que en las manifestaciones que se registran en Grecia o España aparezcan policías y bomberos que se identifican con los reclamos populares.

Estos planteamientos, como correspondía esperar, han desatado una polémica, en primer lugar entre los distintos estratos del aparato represivo, que tienen un objetivo de contención. En algún caso aislado ha incluido, entre los voceros ocasionales de la tropa, el planteo de que las fuerzas en cuestión se despojaran de su condición represiva social y política. Es un planteo incompatible con el Estado capitalista, o sea que solamente podría realizarse en la práctica bajo otro Estado. Pero precisamente por esto, el planteo expone lo que sería el último estadio de la crisis, que ya no se limitaría a las fuerzas represivas sino que afectaría al conjunto de las relaciones sociales existentes. Uno de los voceros sancionados, según la prensa un ex sacerdote, desarrolló en una entrevista televisiva la necesidad de que la Gendarmería dejara de estar encuadrada en el Código Militar y la elaboración de un estatuto nuevo para esa fuerza.

Transición política

La polémica que se ha desatado es objetiva, o sea que no puede ser ignorada. No se puede esperar, para tomar posición, a la llegada de los ‘momentos decisivos’, cuando todos los problemas de la transición política hacia ellos han dejado de existir, precisamente porque arribaron a su plena madurez y a su desenlace. El arte de la política socialista (y, más exactamente, de la estrategia) consiste, de nuevo precisamente, en agotar la experiencia con todas las fases de la transición política, del estado de cosas actual a la victoria de la clase obrera, por medio de una actividad concreta, para conquistar en ese desenlace una posición dirigente.

Conquistar una posición organizativa dentro de las fuerzas que se encargan en forma directa de la represión estatal, sobre la base de una posición clasista, es tan legítimo y necesario como lograrlo en una institución parlamentaria o judicial del mismo Estado. No hay que olvidar tampoco que una fuerza represiva ejecuta las leyes que vota el Congreso y los fallos que dicta la Justicia. Tampoco hay que olvidar las contradicciones del régimen constitucional, que derivan de la pretensión de igualar, en el derecho, la desigualdad que caracteriza al régimen social que ese derecho preserva. El amotinamiento de la Gendarmería y la Prefectura, como antes ocurrió con policías de provincia, desnuda la desigualdad social que impera en las fuerzas represivas, entre jerarcas y tropas, y desnuda también que esa desigualdad es absolutamente necesaria para establecer la relación de obediencia entre mando y tropa, que caracteriza a las fuerzas represivas.

Parafraseando una frase famosa: ninguna crisis política nos es ajena (a los socialistas).

Una crisis de Estado y los socialistas : Prensa Obrera 1243

Y los agoreros del golpe se quedaron muzza? jajajajajajaja. Tienen H2O en la cabeza (O de oxígeno, no cero como dijo la presidente. Tampoco dijeron nada de la pelea de los gendarmes con los militantes camporistas con la remera de UPCN. Y tampoco dijeron nada de la agresión física a una chica por ser del pro por parte de militantes de la campora…

Ah y este no era un gobierno conciliador que no reprimía las protestas? lo vieron al pelotudo de berni bajando en helicoptero, como dijo el hijo de tato, a lo robert duvall en apocalypsis now jajaja, payasesco, para sacar a 50 tipos, increíble.

Y ni hablemos de lo que pasó en jujuy no? ninguno tampoco dice nada no? qué raro…

Así cobran los gendarmes golpistas… y así viven…

La inseguridad se combate con sueldos en negro y viáticos de 9 pesos por día
Por Jorge Lanata

12/10/12

" Lo que más calor te da es andar pidiendo permiso para pasar al baño. Toda la noche mate y cuando te querés acordar estás ahí metido, con los de la Federal en la garita y la Shell cerró y tenés que andar pidiéndole el baño a algún vecino a las dos o tres de la mañana.

Baño químico hay en algunos puntos, no en todos, y los turnos son largos, de 12 por 24, se pone difícil” , dice Gabriel.

“En el monte todo es baño” , dice y se ríe, avergonzado, con cierta melancolía por las noches llenas de humedad y estrellas, en el monte, cuando esperaba la madrugada en una carpa improvisada con alguna vianda para matar el hambre. En villa Los Alamos la noche no tiene estrellas, las bandas se agarran a los tiros y los vecinos se pelean a los gritos. En las villas de Merlo y Quilmes, cuando gana el silencio, Gabriel cierra los ojos y vuelve a Misiones. Gabriel es “jefe de familia a distancia”, allá quedaron la vieja y el pibito, su hermano menor, que todos los meses esperan el giro que les llega de Buenos Aires, donde Gabriel está asignado al Plan Centinela. Gabriel cobra tres mil pesos en mano.

“¿Y qué voy? ¿A dejarla tirada a mi mamá? La obra social no le sirve y tuve que pagarle una aparte”.

La madre de Gabriel es discapacitada y el chico estudia. Gabriel trabaja en negro sus francos, haciendo de seguridad privada: custodia los traslados de un cargamento de tabaco. Tiene 30 años y alquila una casita en Campo de Mayo con un compañero. Gabriel es un “camisa lisa”, así le llaman a los gendarmes del escalafón más bajo, los que no tienen ninguna estrella en los hombros.

Fernando es cabo primero y entró a la Gendarmería cumpliendo un sueño ajeno: es hijo de un policía de la provincia de Misiones que siempre quiso ser gendarme.

“Cuando me ponga el uniforme me van a respetar” , decía. Hoy mismo, diez años después, lo trata con el cuidado de un vestido de fiesta. El uniforme marcó su destino pero lo separó de su familia: Fernando tiene 31 años y una hija de siete, Rocío, que vive con su mamá en Misiones. Ni el teléfono ni las cartas pueden unir la geografía: su hija y su mujer fueron expulsadas de Buenos Aires por la falta de trabajo. Y eso que ella estaba recién recibida de maestra jardinera, pero fue imposible. Sólo duraron en la ciudad seis meses y tuvieron que volver a San Vicente. Fernando guarda unos dibujos y un par de fotos en la billetera. Las fotos que se quedó mirando un largo rato después de su primera noche en La Cava, cuando fue recibido por un tiroteo entre dos bandas e hirieron a uno de sus compañeros. Fernando cobra cinco mil trescientos pesos por mes y nueve pesos de viáticos por día. Las noches de tiroteo cuestan 130 pesos y se llaman “operativos nocturnos”.

“Vivís prestado, ¿cómo vas a vivir? Si querés comprar algo tenés que meterte en cuentas”, dice. Fernando vive en Bella Vista y paga novecientos pesos de alquiler.

Cristina Kirchner volvió de Lima y durante todo el conflicto decidió dejar el helicóptero: fue desde Olivos a la Casa Rosada en auto para evitar a los gendarmes que custodian el helipuerto.

Escribió en este diario Daniel Santoro que Héctor Schenone, el ahora ex jefe de la Gendarmería, fue el 27 de junio pasado al sepelio en Rosario de los nueve gendarmes que murieron en un accidente automovilístico en la ruta 3 al salir de la toma del Cerro Dragón, en Chubut.

“Vos estuviste en Cerro Dragón, ¿no?” , le dijo allí a Schenone una chica de 14 años, hija de un sargento fallecido.

“No, no es mi función” , le respondió Schenone.

“Pero los mandaste en avión y los sacaste en ómnibus y se mataron” , insistió ella.

“Ellos habían pedido salir lo antes posible”, se defendió él.

“¿Sabés por qué?” , le preguntó/contestó ella.

“Porque no tenían ni agua corriente y estaban viviendo como animales”.

El salario de Schenone es de unos 100.000 pesos gracias a una medida cautelar.

Al segundo día del conflicto el aparato de propaganda del Gobierno acusaba de golpistas a los gendarmes y prefectos que protestaban por sus salarios, y Nilda Garré anunció que pasaba a retiro a diez prefectos generales y a diez comandantes de Gendarmería.

“Queda así normalizada la situación” , aseguró. Una semana después renunciaba su hermano al puesto de jefe de gabinete del área, como uno de los responsables del conflicto.

Al tercer día un grupo de militantes de UPCN se agarró a los golpes con los prefectos que protestaban en el edificio Guardacostas. Fueron identificados como militantes de La Cámpora.

Abal Medina –quien había firmado el decreto de recorte salarial y que había denunciado, a su vez, un complot golpista– dijo el martes que era imposible otorgarles un básico de 7.000 pesos. El sueldo básico en blanco quedó establecido en 2.697 pesos.

Según una encuesta de Management & FIT, el 83,3 por ciento de los argentinos señala al de la inseguridad como su principal problema.

El Gobierno la enfrenta con salarios en negro y viáticos de nueve pesos por día.

Investigación: JL/María Eugenia Duffard/Amelia Cole

Que pasó al final con el conflicto en Gendarmería ? Como se arregló ?

quiza no con todos…porque parte de ellos tienen cierta independencia politica, pero ghana es parte del commonwealth, era previsible algo asi. por otra parte minga de fondos buitres, el estado argentino emitio esa deuda, es legitima y ahora queda obligado a resolver ese default parcial, el reclamo es justo y debio implementarse algun otro bono o forma de contentar en parte a los portadores de esas obligaciones.
aca el gran tema sigue siendo cuando se van a hacer cargo de la tripulacion y visitantes varados a su suerte en africa…porque evidentemente para el gobierno el buque ya fue…
para la promocion siguiente de guardiamarina el viaje de estudio lo haran en banana y kayak en san clemente.


aun no se arreglo, levantaron la protesta y negocian, segun lei por ahi se reglamentaria una resolucion ministerial que en negro elevaria los sueldos a los niveles que pedian, dejando asi fuera a los retirados…aun resta saber si eso sera cierto, si lo aceptaran y si eso se firma que ocurrira con las otras fuerzas de seguridad que tambien se ven rezagadas con respecto a los haberes.