El ayuntamiento de Madrid permitió la remodelación del Bernabéu imponiendo tres condiciones:
- Mantener la capacidad inicial (antes de las reformas)
- Mantener la Edificabilidad
- No avanzar sobre espacios desocupados previamente (esto impidió que se construya el hotel y que se avance con pilares sobre Paseo de Castellana.
Incluso, tal vez, mermó un poco la capacidad porque se reformularon accesos en el lateral Oeste para retirar escaleras de acceso al cuarto anfiteatro y se debieron retirar filas de las cabeceras para contar los soportes del SkyWalk 360.
Otra cosa: sobre el lateral Este (Padre Damián), debió ceder para uso público una plaza. Es un espacio privado (propiedad del Club) para uso público. Esa es la definición que se le dió.
De hecho, en un momento dado, se había pensado en reducir la capacidad del estadio. Finalmente se decidió mantener la capacidad mínima requerida por FIFA para una final de Mundial: 80.000 espectadores al menos.