El enemigo favorito
“Se han llevado nuestro carbón, nuestra agua, nuestro acero. Compran nuestras casas para usarlas un fin de semana al año. ¿Qué nos han dado a cambio? Absolutamente nada. Hemos sido explotados, vejados, controlados y castigados por los ingleses – y a esos van a enfrentar esta tarde, a los ingleses”. Aquel 5 de marzo de 1977, la arenga del capitán Phil Bennet antes del partido con Inglaterra retumbó en el vestuario galés de Arms Park.*
“Para Gales, ver Inglaterra” decía la entrada de la edición de 1898 de la*“Enciclopaedia Britannica.”""
Si las naciones son construcciones imaginarias de las sociedades que las conforman, Gales ha necesitado más imaginación que otras. Anexada a Inglaterra desde el siglo 16 por Enrique XIII, hasta 1998 el principado no tuvo Parlamento propio, ni sistemas legales o educativos separados de los del Reino Unido. Su lengua no tenía reconocimiento oficial, tampoco su bandera…
Para Hobsbawm, la comunidad imaginada -la nación- parece más realbajo la forma de unequipo de deportistascuyos nombres reconocemos. En este sentido el deporte es ideal para la autoafirmación de los pueblos. Pero ¿qué deporte? Pese a que su rugby ha obtenido una Copa del Mundo, en Inglaterra el equipo nacional representativo es de fútbol o de cricket.*
En cambio cuando en Gales se habla del*“equipo galés”, sólo significa su seleccionado de rugby: es la autoafirmación de una población periférica, proletaria, industrial, ante el dominio central, burgués, a través de un deporte creado por éstos. La medida de Gales es Inglaterra, y es en esta instancia en la quesu rivalidad con el vecino poderoso se plantea entre iguales, el único terreno en el que Gales no pide reconocimiento, sino que lo exige y es correspondida.
El sábado en Cardiff volverá a repetirse el enfrentamiento que paraliza al rugby de las Islas y contagia al mundo entero. Es por lejos la más disputada de todas las rivalidades, y la más pareja. A lo largo de 131 años que atraviesan tres siglos desde aquel primer encuentro de febrero de 1881 en Blackheath, de 123 partidos jugados Inglaterra se ha impuesto en 56, Gales en 55 y han empatado en 12. Y como no podía ser de otra manera, el sábado se juega todo: la obtención del campeonato (Grand Slam para Inglaterra o bi-campeonato para Gales), de la Triple Corona, y, para muchos jugadores, de un lugar en el equipo de los British & Irish Lions para el viaje a Australia…*
Cuando en el campo del Millennium se enfrenten los treinta elegidos, en las plateas unos recordarán el try de Scott Williams en Twickenham el año pasado, o aquel penal de Gavin Henson que, a tres minutos del final, en 2005, le aseguró a Gales la primera victoria en Cardiff en doce años, mientras a su lado otros sonreirán con la memoria del hat-trick de Will Greenwood en ese mismo estadio en 2001, de Bill Beaumont saludando a la multitud tras la victoria de Inglaterra en 1980, o de Will Carling y Martin Johnson vengando en el ingoal galés las afrentas de Gareth Edwards y J.P.R. Williams que en los años dorados pulverizaban el ingoal inglés.*
Gales espera en su casa, defenderá el título ante a su público confiada en la recuperación de su poderío, con un plantel experimentado que duplica en caps al de la visita. Una victoria será más dulce que nunca.*
Inglaterra quiere llevarse el torneo, y, recordando las palabras de Phil Bennet, llevárselo todo, simbólicamente mucho más que el Grand Slam, la Triple Corona y el primer lugar en la clasificación general de los 112 torneos jugados hasta 2013. Para lograr la hazaña llega con once jugadores que jugarán en el Millennium por primera vez.*
“Es cierto que Gales ya lo ha hecho” dice Andy Farrell “su experiencia puede ganar campeonatos, pero en algún momento hay que empezar a acumular la propia. Nuestra prueba suprema es ir allá, desafiarlos y ganar nuestro primer trofeo: es donde queremos estar”.*
¡Que empiece ya! ¡Que no termine nunca!
By Old Rugbeian, from Cardiff