El estadio, ahora propiedad de la Iglesia, corre riesgo ante una oferta para realizar emprendimientos inmobiliarios. Fue el Papa quién frenó el avance de las negociaciones, pero esto significa un grave problema para este patrimonio del deporte nacional. ¿Qué pasará cuándo no esté Francisco? ¿Debería adquirirlo el Estado?
Todo el tiempo se puede ver cómo cae el patrimonio de Bs As, perdiendo para siempre la arquitectura que le brindó fama mundial. Este caso, sin obviar la gravedad de los otros, es mucho más especial. Hay una historia conocida por todos y el recuerdo de grandes ídolos o hazañas que descansan entre sus puertas. Además, sigue siendo útil y está en buenas condiciones a pesar de sus años.
El estadio, ahora propiedad de la Iglesia, corre riesgo ante una oferta para realizar emprendimientos inmobiliarios. Fue el Papa quién frenó el avance de las negociaciones, pero esto significa un grave problema para este patrimonio del deporte nacional. ¿Qué pasará cuándo no esté Francisco? ¿Debería adquirirlo el Estado?
Todo el tiempo se puede ver cómo cae el patrimonio de Bs As, perdiendo para siempre la arquitectura que le brindó fama mundial. Este caso, sin obviar la gravedad de los otros, es mucho más especial. Hay una historia conocida por todos y el recuerdo de grandes ídolos o hazañas que descansan entre sus puertas. Además, sigue siendo útil y está en buenas condiciones a pesar de sus años.
Por un lado es una lástima que pueda desaparecer el Luna, por su historia, su capacidad y su ubicación es ideal para muchos eventos. Por otro lado, en este último tiempo Buenos Aires ha sumado muchos otros lugares que están tomando su lugar.
Sería una lástima porque es un lugar histórico, el estado no puede permitir que lo tiren.
Aunque hoy en día, ningún boxeador argentino puede llenar el luna, está muy venido a menos el boxeo argentino