El hincha de River dio su veredicto. Los jugadores siguieron la corriente. El DT estuvo en la misma línea. ¿A quién beneficia semejante dislate? Solamente un estúpido vive para la opinión del afuera. Generalmente una opinión mezquina, hipócrita, interesada y destructiva. Y no se trata de convertirnos en los simios ladrones que están del otro lado, ni mucho menos. Se trata de defender lo propio a capa y espada, por encima de todo, porque vivimos en un ambiente futbolero (y social en general) donde todos buscan pasarte por encima. Si te agachás, van a patearte y pisarte en el suelo. Mucho más si sos el gran destacado, por mérito propio y una historia que te respalda. En base a eso me parece necesario este tema, para enumerar lo más reciente que expuso una saturación generalizada y ganas de abandonar el papel de ingenuos. También para seguir insistiendo con la idea de erradicar una forma equivocada de manejarnos como institución.
River ganó 1 clásico después de 2 partidos casi regalados contra ellos, y de ser vitales para que consiguieran 1 título a puro afano. No olvidar cómo se llegaba a este partido. Sus últimos 2 títulos involucraron a River en forma directa. Primero fue víctima del choreo, pero después de su propia estupidez y complicidad con un sistema corrupto.
Hinchas
-Primera hora de la tarde, la gente de River comienza a movilizarse y pasa lo de siempre. La policía de Larreta y el poder judicial porteño le hace la vida imposible a los hinchas. La gente se cansa y no agacha la cabeza. Por primera vez en mucho tiempo hay incidentes, y un llamado de atención grande para el club: dejen de joder al socio y al hincha, y hagan algo para que paren con los malos tratos. No puede ser que, además de ligar, te quiten banderas, remeras o carteles que en otras canchas pasan sin problemas.
-El estadio alcanza un 80% de su capacidad y comienzan a calentar los equipos. Todos los canales tienen cortado el sonido ambiente, que dejan libre en otros estadios. El público hace justicia por mano propia, ante el silencio permanente de los medios y la impunidad del ambiente en general: “Villa se preso, y Villa se va preso”… “Borombombón, borombombón, es el equipo del violador”… Por menos otros se tuvieron que ir del país, pero a este ni siquiera son capaces de expulsarlo 1 fecha antes del clásico por un codazo descalificador que lesionó a su rival. Del árbitro no se habló el día siguiente. Habló la gente de River.
Equipo
-Entre el árbitro y los rivales quisieron pasarlos por encima de entrada, y demostraron temperamento. Por primera vez en mucho tiempo hubo quejas de los referentes y metieron a los bosteros en su campo a puro coraje y ganas de jugar. En el segundo tiempo quedó claro que el árbitro, condicionado, no iba a expulsar a nadie. Entonces los cagaron a patadas como no pasaba desde tiempos vangionistas. Ligaron otra vez y no tuvieron más que algún tiro al arco aislado. River insisitó siempre y tuvo premio. Les gritaron la victoria en la jeta, Palavecino los domó en el penal y después, y terminaron festejando con la hinchada. Como las mejores versiones de River en su historia.
-El capitán habló por compromiso pero puertas adentro el respaldo fue total. Palavecino fue obligado a pedir disculpas, y los meo otra vez indirectamente. Lo mejor que le pudo pasar al equipo fue sacar toda la bronca acumulada, porque los “buenos modos” habían sumado un peso muy grande. Es necesario jugar con la sangre en el ojo si podés dominarla y utilizarla a tu favor. El año pasado la “Grandeza” nos dejó con el culo al aire. Cuando hacés las cosas “bien” nunca te vas a quedar caliente, cuestionando a tu equipo, jugadores y cuerpo técnico. Con la mafia no hay modales que valgan.
El DT
Piña para el bocón que nos quiso cargar. Piña para el DT simio rival. Piña para el periodismo vende humo. Piña para los que quieren ocultar el desarrollo del partido, se quejan por el árbitr, operan con exageraciones a favor y en contra para desestabilizarte y son promotores de todos los relatos instalados. Ese es el camino a seguir, porque además hizo que a nivel institucional tengan que respaldarlo. Por primera vez el mufa dijo algo “polémico” (para los medios bosteros). River perdió su poder por falta de uso!!! Es el equipo con más convocatoria en Argentina y el que, por afano, mueve más guita. Sin River no existe el fútbol argentino y es lo primero que deben entender en el club.
Por último, dejo un extracto de una nota que subió Nico en otro tema (es del gordo Farinella)
Blockquote Hace unas fechas, Boca ganó sobre la hora con un gol de Figal en el Amalfitani y el defensor de Boca se lo gritó socarronamente a los hinchas de Vélez. ¿Lo echaron? No. ¿Lo suspendieron? No.
Cuando Troyansky festejó su gol, el 2-1 de Unión sobre la hora en la Bombonera, sacándose la camiseta a lo Messi en un Barcelona -Real Madrid, fue expulsado y sancionado por tres partidos por “incitar a la violencia”.
Parece que la violencia se incita de un lado solo.
El presidente del Tribunal de Disciplina sigue siendo Fernando Mitjans, que hace unos años confabuló con Angelici para aminorar las penas a los jugadores de Boca, antes de un partido importante. Increíblemente sigue en su cargo. Ahora, es el responsable de la sanción a Palavecino. Cuidado.
Hay miles de ejemplos de situaciones insólitas. No se le puede ganar a Boca. No se le puede gritar un gol a Boca. No se puede cobrar un penal en contra de Boca.
El gran problema que tenemos nosotros es que pretendemos vivir y jugar con grandeza en un fútbol absolutamente contaminado y ventajero. Todo el quilombo que armaron intenta disimular que jugaron otra vez a refugiarse y rezar que River no acertara en su intención de ganar en el Monumental. Todo el aparato mediático, cooptado por Boca y con frágil presencia riverplatense, hace el resto.
Los paneles periodísticos son 4-1 para Boca. Ahí son los putos amos. Quiero decirles a los hinchas de River que me escriben, lógicamente azorados por esta situación incomprensible, que los entiendo perfectamente.
La idea es intentar minimizar el fútbol que juega River y limitarlo a que recibe ayudas arbitrales para ganar.
Si River pretende jugar con corrección, limpiamente y respetando las buenas costumbres, será masacrado en la cancha, cada vez que juegue un clásico. Eso pasó los últimos tiempos, con la complicidad arbitral. River supo jugar este clásico como corresponde y mereció ganar de principio a fin.