¿Marcelo Gallardo quiere un Velocirraptor para River?
El actual goleador del Torneo Transición 2017 y de la Copa Chile como atacante de Audax Italiano está siendo observado por el entrenador trasandino del famoso River Plate.
Mucho antes de convertirse en Velocirráptor, a Bryan Carrasco le asustaban los dinosaurios. Nada grave. Un pavor típicamente infantil. El mismo que compartía con la mayoría de los niños nacidos en los albores de los años 90 que habían tenido la posibilidad de visionar en algún momento de sus vidas Jurassic Park, la saga de ficción que recreaba las peripecias de aquellas criaturas prehistóricas. “Nosotros vivíamos en una población y éramos como cuatro familias en una casa, puros hermanos de mi mamá. Y en esa época estaba de moda esa película. Y me acuerdo que mi primo Juan Carlos, como era más grande, cuando nos portábamos mal nos decía: ‘Me voy a transformar en dinosaurio’. Y hacía el velocirráptor”.
Así, con este nítido recuerdo de infancia, arranca el relato vital que Carrasco, autor de 9 goles en lo que va de semestre siete en el Transición y dos por Copa Chile) comparte con La Tercera, sentado en un costado de la cancha de entrenamiento del complejo Ciudad de Campeones de Audax y en vísperas de la visita del cuadro de colonia a Concepción. Pero aquella premonitoria fobia era, en rigor, su único temor, pues en su niñez, es decir, en su prehistoria, Bryan vivía en un lugar que no estaba hecho para timoratos.
Nacido el 21 de enero de 1991 en la estigmatizada y convulsa población José María Caro, situada en el sector sur de Santiago, el desequilibrante futbolista creció rodeado de inseguridad. Pero con una certeza clara; que algún día llegaría a convertirse en futbolista profesional. Era una cuestión de supervivencia. “Cuando veía a mi mamá que trabajaba de las 8 de la mañana a las 9 de la noche en una empresa de pegamento y que los sábados hacía aseo en otras casas; o cuando de repente mis amigos andaban con zapatillas de marca y ella se encalillaba para yo no ser menos con mis amigos; sabía que si algún día salía a una cancha de fútbol profesional podía cambiar mi vida”.
Tras alcanzar los 200 duelos oficiales con Audax, Bryan Carrasco analiza su presente, proyecta su futuro y desclasifica su historia.
-¿Sabes que en su ultima visita de mediados de año a nuestro país el famoso Marcelo Gallardo entrenador de River Plate te vino a ver porque tenia excelentes referencias tuyas?-
-Si, me enteré porque me lo comunicó mi representante y no lo podía creer.-
-¿Te agradaría ser transferido a ese club argentino?.-
-Aquí en Audax me siento de maravillas porque lo quiero desde niño, pero poder jugar en River Plate seria el sueño de mi vida si se concretara.-
(extractado de un reportaje de La Tercera Deportiva, Santiago de Chile).
¿Marcelo Gallardo quiere un Velocirraptor para River?
El actual goleador del Torneo Transición 2017 y de la Copa Chile como atacante de Audax Italiano está siendo observado por el entrenador trasandino del famoso River Plate.
Mucho antes de convertirse en Velocirráptor, a Bryan Carrasco le asustaban los dinosaurios. Nada grave. Un pavor típicamente infantil. El mismo que compartía con la mayoría de los niños nacidos en los albores de los años 90 que habían tenido la posibilidad de visionar en algún momento de sus vidas Jurassic Park, la saga de ficción que recreaba las peripecias de aquellas criaturas prehistóricas. “Nosotros vivíamos en una población y éramos como cuatro familias en una casa, puros hermanos de mi mamá. Y en esa época estaba de moda esa película. Y me acuerdo que mi primo Juan Carlos, como era más grande, cuando nos portábamos mal nos decía: ‘Me voy a transformar en dinosaurio’. Y hacía el velocirráptor”.
Así, con este nítido recuerdo de infancia, arranca el relato vital que Carrasco, autor de 9 goles en lo que va de semestre siete en el Transición y dos por Copa Chile) comparte con La Tercera, sentado en un costado de la cancha de entrenamiento del complejo Ciudad de Campeones de Audax y en vísperas de la visita del cuadro de colonia a Concepción. Pero aquella premonitoria fobia era, en rigor, su único temor, pues en su niñez, es decir, en su prehistoria, Bryan vivía en un lugar que no estaba hecho para timoratos.
Nacido el 21 de enero de 1991 en la estigmatizada y convulsa población José María Caro, situada en el sector sur de Santiago, el desequilibrante futbolista creció rodeado de inseguridad. Pero con una certeza clara; que algún día llegaría a convertirse en futbolista profesional. Era una cuestión de supervivencia. “Cuando veía a mi mamá que trabajaba de las 8 de la mañana a las 9 de la noche en una empresa de pegamento y que los sábados hacía aseo en otras casas; o cuando de repente mis amigos andaban con zapatillas de marca y ella se encalillaba para yo no ser menos con mis amigos; sabía que si algún día salía a una cancha de fútbol profesional podía cambiar mi vida”.
Tras alcanzar los 200 duelos oficiales con Audax, Bryan Carrasco analiza su presente, proyecta su futuro y desclasifica su historia.
-¿Sabes que en su ultima visita de mediados de año a nuestro país el famoso Marcelo Gallardo entrenador de River Plate te vino a ver porque tenia excelentes referencias tuyas?-
-Si, me enteré porque me lo comunicó mi representante y no lo podía creer.-
-¿Te agradaría ser transferido a ese club argentino?.-
-Aquí en Audax me siento de maravillas porque lo quiero desde niño, pero poder jugar en River Plate seria el sueño de mi vida si se concretara.-
(extractado de un reportaje de La Tercera Deportiva, Santiago de Chile).
Si quieren algún nueve barato, malditos ratas, vayan por un delantero de área de la b nacional, que no tenga miedo de jugar con un caño en la cabeza, y que ande de racha.