Estoy cansado de que muchos hinchas se sigan comiendo el verso instaurado por los bosteros durante 20 años de que lo importante es alentar todo el tiempo, sin importar la verguenza que estemos pasando o que el equipo se arrastre durante todo el torneo, al punto tal de arrancar decididamente en promocion la temporada entrante. Tienen que entender que ellos lo hacían porque no sabían con qué darnos a nosotros, que teníamos más títulos, ganábamos más y mejor, teníamos una institución más ordenada, teníamos mejores jugadores, y eran casi todos de selección. De eso vivieron durante 20 años, hasta la llegada de San Bianchi. Antes de eso, cuántos títulos ganó esa hinchada?? Cuántos partidos ganó?? Cuántos jugadores de primer nivel tuvieron?? Nada de nada.
Creo que Ariel, no se si en este tema o en otro (no tengo ganas de revisar), fue el que dijo que hay que saber distinguir entre las buenas, las malas y las peores. “En las buenas, y en las malas mucho más” es una canción re copada, que reivindica la pasión y la lealtad que se le tiene al club cuando las cosas no salen, y eso está barbaro. Pero estas no son malas, mucho menos buenas. SON LAS PEORES. Y el hecho de comerse 5 con un equipo de mierda como lo es Tigre, y vernos alentando como si hubieramos ganado la Libertadores, nos da la pauta de la diferencia entre “aliento incondicional” y estupidez absoluta.
Asistimos a la racinguización y bosterización de nuestra hinchada. Y lo peor es que la mayoría está orgulloso de ello.