Si el oficialismo respeta la norma impuesta por la costumbre y el estatuto -que consiste en convocar los comicios para el primer sábado de Diciembre- estamos a 9 meses exactos de las elecciones en las que se eligirán las autoridades que gobernarán River Plate durante los siguientes 4 años.
Ahora sí estamos en los inicios de la etapa electoral, aunque algunos de grosera manera la anticiparon desde hace unos 2 años traslando al seno del organo de dirección y administración la pelea por heredar el aparato político del oficialismo.
Así fueron agravándose inexorablemente las nefastas consecuencias de la peor gestión de la historia riverplatense.
La inusual proliferación de candidatos, alentada desde los despachos oficiales, se irá dispersando hasta que queden el número de listas razonables en atención a la cantidad de votantes.
La Agrupación Tradicional River Plate elegirá sus candidatos en las elecciones internas durante la Asamblea a celebrarse el próximo 28 de Abril y suponemos que los demás candidatos también surgirán de procedimientos democráticos. Eso sería bueno para recuperar la institucionalidad tan degradada en los últimos mandatos.
Mientras tanto los riverplatenses tenemos la gran oportunidad de debatir seriamente proyectos y modelos durante estos 9 meses recuperando la calidad institucional.
Ya se avizora que el fracaso del nefasto modelo de gestión de los negocios del fútbol dará lugar a una confrontación de ideas entre un modelo de conducción privatizado o gerenciado priorizando los intereses empresariales y el retorno al modelo tradicional de una gestión social, transparente y compartida con la totalidad de los socios.
En definitiva el modelo que dió origen y crecimiento a nuestro River Plate.
Si el oficialismo respeta la norma impuesta por la costumbre y el estatuto -que consiste en convocar los comicios para el primer sábado de Diciembre- estamos a 9 meses exactos de las elecciones en las que se eligirán las autoridades que gobernarán River Plate durante los siguientes 4 años.
Ahora sí estamos en los inicios de la etapa electoral, aunque algunos de grosera manera la anticiparon desde hace unos 2 años traslando al seno del organo de dirección y administración la pelea por heredar el aparato político del oficialismo.
Así fueron agravándose inexorablemente las nefastas consecuencias de la peor gestión de la historia riverplatense.
La inusual proliferación de candidatos, alentada desde los despachos oficiales, se irá dispersando hasta que queden el número de listas razonables en atención a la cantidad de votantes.
La Agrupación Tradicional River Plate elegirá sus candidatos en las elecciones internas durante la Asamblea a celebrarse el próximo 28 de Abril y suponemos que los demás candidatos también surgirán de procedimientos democráticos. Eso sería bueno para recuperar la institucionalidad tan degradada en los últimos mandatos.
Mientras tanto los riverplatenses tenemos la gran oportunidad de debatir seriamente proyectos y modelos durante estos 9 meses recuperando la calidad institucional.
Ya se avizora que el fracaso del nefasto modelo de gestión de los negocios del fútbol dará lugar a una confrontación de ideas entre un modelo de conducción privatizado o gerenciado priorizando los intereses empresariales y el retorno al modelo tradicional de una gestión social, transparente y compartida con la totalidad de los socios.
En definitiva el modelo que dió origen y crecimiento a nuestro River Plate.
Cada dia mas cerca…por lo menos ya no lo vamos a volver a ver a la morsa cerca de River, pero va a tardar mucho en reparar todo el daño que nos hizo Aguilar en estos 8 años tambien…
Son sólo 9 meses, pensemos en los que se tuvieron que bancar nuestras viejas para que nacieramos. Ahora sí hay que interiorizarse en serio y participar. Saludos
Si el oficialismo respeta la norma impuesta por la costumbre y el estatuto -que consiste en convocar los comicios para el primer sábado de Diciembre- estamos a 9 meses exactos de las elecciones en las que se eligirán las autoridades que gobernarán River Plate durante los siguientes 4 años.
ojala que ya fuera diciembre