Se suicidó un nene de 12 años por acoso escolar
Un nuevo de caso de bullying, terminó en forma trágica en Temperley (Bs.As.). Un chico decidió quitarse la vida con un arma de su abuelo cansado de las burlas de sus compañeros.
El bullying refiere al abuso, al hostigamiento, a la intimidación, al maltrato, a la agresión psicológica y/o física que ejerce un alumno en contra de otro.
Según declaró en una entrevista al Canal 26, José Feletto, abuelo de la víctima -identificada como Víctor Feletto- el chico habría tomado la drástica decisión a partir del maltrato que recibía por parte de sus compañeros en el colegio al que asistía.
José Feletto contó que “él era constantemente burlado y golpeado por sus compañeros por su apariencia física”. Y señaló: “Ellos son los culpables, lo mató el colegio”.
“Me sacaron la vida, me sacaron un brazo. Me lo mataron”, dijo a ese canal de TV y agregó que “hacía días que había empezado a hacer ejercicio en la escuela, eso era una brutalidad, uno lo empujaba, otro lo tiraba porque eran chicos más grandes. Y todos hacen la vista gorda, el profesor que estaba y todo”.
El abuelo relató que “hace doce días lo tiraron y se golpeó el hombrito derecho pero no se le dio trascendencia. Hace cuatro días lo tiran de nuevo, del otro lado. Lo llevaron al hospital de Lomas (de Zamora) porque ya era grave, le dolía más que el otro. Le encontramos hematomas”.
Y siguió su relato: “El viernes a la mañana el nene quería que fuera yo. Fue la mamá y habló con la directora por el acoso que pasaba Víctor al hacer ejercicio. Le dijo que no se encontraba cómodo”.
Según contó el abuelo la directora le dijo que esta era una materia más y que si no iba perdía el año. “Ella dijo que iba a hablar con Víctor. Aparentemente, habrán hablado pero él era reservado. Cuando vino de la escuela, la abuela lo encontró raro pero no le dio importancia porque él era tranquilito, se guardaba las cosas. Se puso a jugar un poco con la abuela, ella le dijo: ‘te voy a traer la comida’. Le extrañó que no se la pidiera. Fue a la cocina y al rato sintió un disparo. Fue corriendo y no lo encontró. El nene había apagado la luz. Se sentó frente al televisor, agarró una 22 y se pegó un tiro”.
La muerte se produjo en la casa de sus abuelos donde el niño encontró en un mueble de la vivienda el arma de su abuelo y se disparó. La casa está ubicada en Ingeniero Mitre al 1000 de Temperley y se dio un rato después de que Víctor regresara de la escuela de enseñanza Media Nº 13, de Alsina al 2100.
Desconsolado, José busca explicaciones. Repasa lo vivido. “Si estoy yo, el chico no se mata. Lo hizo porque se encontró perdido. El mundo se le cerró”, dijo con dolor José y aseguró que Víctor “sabía que había armas” en el domicilio.
Cuando encontraron el cuerpo lo trasladaron al hospital Gandulfo. Ya estaba
muerto.