Idolos - lo que se dice ídolos en serio - hay solamente cuatro: Amadeo Carrizo, Angel Labruna, Norberto Alonso y Enzo Francescoli. Basta. No hay mas. Basta. Punto final. Finish. Terminado. Say no more. Las carreras, logros obtenidos, identificacion y servicio hacia el club de esta gente esta a un nivel superior al de todos los demas.
Luego de ellos, mas abajo, hay una gran cantidad de excelentes jugadores los cuales (permanentemente o solo por momentos) han sabido vestir los colores con nobleza y han aportado lo suyo a grandes logros del club. Muchos son discutibles, si por mas o por menos, pero como ejemplos, entre muchos otros (tiempos modernos unicamente): Ortega, Gallardo, Burgos, Crespo, Saviola, Mascherano, Cavenaghi, Salas, Ramon Diaz, Alzamendi, etc.
Luego, mas abajo, hay jugadores que por habilidad o trayectoria, han sido de buenos a regulares y sin embargo han aportado lo suyo para escribir sus (pocas) lineas en la historia del club. Ejemplos: Falcao, Yepes, Comizzo, Coudet y muchos mas.
Es por eso que hablar de Fabbiani “idolo”, cuando es un tipo que hasta el momento ha hablado mas de lo que ha jugado, no solamente es un dolor al higado de cualquier hincha de River que se precie. Es graduarse de cabeza de termo a cabeza de termotanque. Con altos honores.