[QUOTE=Pablo1983;8923154]La marcha que se llevó a cabo en la tarde de este sábado en el obelisco no hace otra cosa que confirmar que “sí se puede ser más odiador compulsivo”. Lejos de defender a Macri, ellos capitalizan en cada uno de los concurrentes el odio hacía el pobre o a los que despectivamente denominan “negros”.
Sin embargo, cuando las grandes empresas o bancos obtienen ganancias en cifras siderales a costas de los tarifazos y unos pocos se la llevan toda afuera, mientras que el país se endeuda postergando a generaciones enteras, ellos ahí consideran que el gobierno pudo haberse equivocado ( en el mejor de los casos) pero no es corrupto como los otros. Por supuesto este pensamiento no salió de la noche a la mañana, sino que fue construido por los grandes medios de comunicación que hicieron que muchos tan sólo repitan lo que ven o escuchan creyendo que es verdad.
No hay nada nuevo bajo el sol. Es la vieja grieta Argentina que excede los nombres propios de Macri y de Cristina. Unos que creen en la meritocracia. Otros que creemos que la construcción debe ser colectiva. Unos que creen que la riqueza les pertenece y es exclusiva de ellos por “haber trabajado toda su vida”. Otros que creemos en la movilidad social ascendente y la justicia social. Unos que consideran que la educación y la salud debe ser privada y otros que estamos orgullosos de que sean políticas públicas. Unos que quieren un país para una minoría. Otros que creemos que el país debe ser para la mayoría.
¿Sobre la cantidad? Hay algunos asombrados, pero en lo personal no me sorprende en absoluto. Buscan generar un golpe de efecto justamente para causar ese asombro, pero con toda la furia había tres cuadras llenas. Haciendo un cálculo estimativo de 50.000 personas por cuadra, estaríamos hablando de 150.000, una cifra muy lejana a lo que se denominó: “la marcha del millón”. Alfonsín sí juntó un millón de personas en una recordada marcha, Macri no estuvo ni cerca.
Por otro lado hablan de que fueron autoconvocados que se movilizaron con su tarjeta SUBE, mientras que se pudieron apreciar en las inmediaciones del obelisco varios micros (hay vídeos de esto) y en forma paralela operaron en las redes con un ejercito de trolls (los planeros del teclado) que por supuesto nunca van a reconocer que “los pagan con sus impuestos”.
Hablando de impuestos. ¿Alguna vez han escuchado a un rico quejándose que pagaba poco de impuestos? Sin embargo, acá a algunos laburantes les hicieron creer que pagaban poco de gas o de luz. Hoy, muchos de ellos, tienen que elegir entre necesidades primordiales como son tener estos servicios o comer. Este es sólo un ejemplo del tremendo daño que causa el neoliberalismo desde su aparato comunicacional.
Estos cuatro años también sirven de ejemplo para aquellos que creen que “todos los políticos son iguales” “que gobierne quien gobierne ellos viven de su trabajo”. ¿Podes comprarte la misma cantidad de cosas que hace cuatro años trabajando la misma cantidad de horas?
El domingo 27 seguramente nos encontrará festejando a quienes estamos desde este cordón de la vereda porque se terminarán cuatro años de destrucción absoluta y de un país que ha sido hipotecado por un Presidente que se creyó el dueño de una estancia o el gerente de una empresa.
Sin embargo, no hay que subestimar al enemigo como ellos hicieron con nosotros con el “no vuelven más”. La derecha Argentina está al acecho y ya se está preparando para volver a la carga dentro de cuatro años. Nuestra misión será no darle lugar y hacerle entender a cada trabajador bien nacido que nunca más puede volver a votar en contra de sí mismo.
En una semana se van. Ojalá sea para siempre.[/QUOTE]
Pablo Labanca? No sabía que tenías cuenta en TuRiver.