Dejalo, Ya empezaron con lo de Aimar.
El ex delantero de la selección buscará ser el sucesor de Insaurralde; a los 40 años, habla de su pasado en River, la relación con Gallardo y Almeyda, su vínculo con el PRO y la crítica de Andrea Bocelli por meterse en política.
Julio Cruz. El jardinero, aquel alto delantero que comenzó en Temperley y Banfield, pasó a River para integrar el mejor equipo de los últimos años y luego saltó a Europa, le puso fin a su carrera como futbolista en 2010. Muchos títulos, tanto en el millonario como en el viejo continente, ahora su vida es otra. A los 40 años, eligió la política, y de la mano de Mauricio Macri, buscará ser candidato a Intendente de Lomas de Zamora.
Sin olvidar esos años de gloria con la pelota bajo los pies, Cruz decidió hace algunos años embarrarse y buscar un cambio desde adentro. Dejó de lado el vestuario, aunque los recuerdos no se irán: Banfield, River, Messi, Almeyda, Gallardo y hasta Andrea Bocelli, su amigo, quien le dijo estar “loco” por elegir este camino.
Arranquemos por tu nueva vida, tu lado político. Estás trabajando con el PRO, querés ser intendente de Lomas de Zamora ¿por qué?
Estuve muchos años afuera del país, con mi regreso (NdelR volvió en 2010, una vez que se retiró del fútbol) viendo cómo estaba la gente en la Argentina quise involucrarme. De la mano de Mauricio Macri, quien me dio la posibilidad y me incentivó, me subí al auto para mejorarle la calidad de vida a la gente en Lomas. Se que me meto en un territorio difícil, la gente sabe que no vengo a buscar nada personal, estoy entrenado a una cancha embarrada, pero la vida y el fútbol me enseñaron que es lindo tener desafíos. Con el fútbol ya se terminó, conseguí todo lo que quise, a nivel económico emocional y gloria, ahora a la política.
¿Cuándo comenzaste a charlar con Macri?
A Mauricio lo conocía del fútbol.
Estabas en la otra vereda vos…
Si, pero en el fútbol todos nos conocemos. A él lo vi varias veces en restaurantes, saludo de por medio, elogios de ambos. La relación en sí empezó hace dos años y medio en la Costa Argentina en un asado. Conocí a su equipo y eso me llevó a querer involucrarme.
¿Desde el principio dijiste que sí?
No… estuve un año analizándolo con mi mujer y mi familia. Después de ese tiempo, me di cuenta que quiero llevar a Lomas lo mismo que Mauricio hizo en Capital.
Vos, Baldassi, Neuspiller, Mac Allister, ¿por qué tantos ex deportistas en el PRO?
Creo que todos tenemos el derecho a contribuir. Si es por los nombres, hay muchísimos que hicieron más que yo, los podrían haber buscado. Creo que es un mix. Cuando fui jugador, trataba de no hablar y hacer. Lo mismo pienso acá.
Debés ser el único que pasó de jugar con Messi a ser político…
(Risas) ¿seguro? no sé… Verón, también, aunque desde otro lado, él sigue en el fútbol.
¿Cómo fue compartir los inicios de Messi en la selección?
Cuando lo conocimos a Lionel, era muy chico, pero ya se sabía que iba a ser un superdotado y lo demostró. Me molesta escuchar gente que lo critica. Yo que vengo del fútbol y de haber jugado en Europa, me da orgullo. Tuvimos a un Maradona y a un Messi, el fútbol es ellos dos. Ganó cuatro balones de oro, tiene todos los récords de Barcelona. Hay que jugar y sobresalir ahí, eh… Para criticar están, no puede ser que tengamos un jugador tan espectacular y muchas veces no se le dé importancia.
¿Pensaste seguir vinculado al fútbol?
Esa pregunta me la hace todo el mundo (risas). Me sentí realizado con el fútbol. Creo que di todo y eso es lo mejor que me pudo haber pasado en la vida. No quiere decir que de acá a 10 años me veas dirigiendo un equipo de fútbol, eso nunca se sabe.
¿Hiciste el curso de entrenador?
No. Pero creo que un jugador profesional, sin ofender a los técnicos, todo lo sabe adentro de la cancha. Sino mirá a Milito, a quien Guardiola le pidió que diera la charla técnica. A veces no hay que ir tan a lo específico “si no sos esto, no podés hablar”
¿Seguís viendo fútbol?
Mirá, te soy sincero, veo poco
¿Por qué?
Estoy muy metido en la política y trato de dedicarle a eso la mayor cantidad de tiempo. Eso no quiere decir que, por ejemplo, no mire con mi hijo los partidos. Lo acompaño cuando puedo a la cancha de River.
¿Cómo lo ves a Almeyda en su puesto de técnico?
Te soy sincero, jamás en la vida pensé que Matias podía ser un técnico tan importante como lo está siendo. Nosotros nos encontramos muchas veces en Italia, en la selección. Hicimos una gran amistad. Nunca se me hubiese pasado por la cabeza que podía llegar a ser entrenador. Pero bueno, ahí están las cosas de la vida… Matías es un ejemplo que todo se puede.
¿Y a Marcelo Gallardo?
Me encanta que Marcelo esté en River. Fui su compañero en aquel glorioso River, lo mismo con Enzo (Francescoli), que hoy está como mánager. Me da emoción y alegría verlos ahí.
¿Qué recordas de aquella época gloriosa en River?
Me llena de orgullo haber sido parte de en ese equipo. La gente me tiene identificado más allá que haya jugado en el club 10 u 11 meses. Yo viví los mejores años. Teníamos un gran equipo, imaginate que vender un arquero ya es difícil, en esa época vendíamos tres o cuatro.
¿Qué pensaste cuando, volviste de Europa y viste al club en crisis?
Cuando me enteré la deuda que tenía River, no lo podía creer. Hubo un mal manejo. Cuando es plata de los demás, a los que están ahí no les importa. Eso tiene que terminar, tienen que rendir cuentas. Hoy por suerte las cosas cambiaron. Marcelo (Gallardo) reorganizó el grupo, me pone contento ver que se puede cambiar, también apoyados por la dirigencia.
¿Es cierto que Andrea Bocelli te dijo que estabas loco por meterte en política?
(Risas) sí, Andre sí. Es un amigo, amigo de la familia. Me dijo “tu sei pazzo’” (estás loco). Después le expliqué y me dijo “tenés vocación, le podés cambiar la vida a mucha gente que lo necesita”.