Frente de izquierda y de los trabajadores

Que???

Sí, yo tampoco entendí Mati… qué??:stuck_out_tongue:

Un giro de la situación política, tres semanas después de las elecciones

Han pasado apenas tres semanas de las elecciones nacionales: el gobierno sigue contando con el 54% de los votos y CFK asumirá el 9 ó 10 de diciembre, pero ya nada es como era entonces. Las contradicciones que se fueron acumulando durante un tiempo han dejado al ‘modelo’ sin ropas -y han desacreditado por completo las pavadas que se dijeron de él. La caja de las sorpresas la destaparon Boudou y De Vido cuando anunciaron la eliminación (“gradual”) de los subsidios, que habían sido (y continúan siendo) presupuestados en 80 mil millones de pesos para 2012. La factura, gruesa, será cargada a los trabajadores, quienes en su mayoría acaban de votar por el FpV. La loza más pesada de este fardo es el subsidio a la importación de combustible - y no solamente porque representa el 40% del monto total. Ocurre que una liberación de tarifas supondría aplicar a pleno el precio internacional (que triplica al interno en lo que tiene que ver con el gas que viene de Bolivia y es cinco o seis veces mayor cuando viene embarcado de otros orígenes), sin la posibilidad de aumentar la producción interna, debido a que no ha habido inversiones significativas en este rubro. Muchos observadores descartan, por eso, que se los elimine -con el consiguiente impacto fiscal. En resumen, el gobierno que despotrica contra el ‘ajuste’ en sus viajes, se apresta a ejecutar un ‘ajustazo’. Aunque intenten disimularlo, los sindicatos están conmovidos. La Presidenta, Binner y López Murphy han coincidido en la necesidad de poner un ‘tope’ a los aumentos de salarios.

Leña al fuego

El ‘subsidiazo’ tiene lugar cuando la inflación es del 25% anual, con mayor incidencia en los alimentos. Como ilustración, un corte inmediato de los subsidios aparejaría llevar ese porcentaje al 60%. De ahí que se plantee el ‘gradualismo’. De conjunto, se trata de una diferencia menor, porque en lugar de un golpe súbito tendríamos una curva creciente de inflación a lo largo de un tiempo políticamente muy largo. Ha sido, precisamente, el temor a esta posibilidad lo que ha retrasado tanto tiempo la eliminación de los subsidios. La beneficiaria de los subsidios ha sido la burguesía industrial, que pagó salarios menores gracias al impacto reducido de las tarifas en la canasta familiar. Después de diez años de ‘reconstrucción’ nacional y popular, el país no ha superado la ‘emergencia’ creada como consecuencia del derrumbe de 2001. La crisis de hace una década sigue presente en el sistema económico, como se expresa también en un sistema bancario que es la tercera parte del vigente hasta 2001 y en la ausencia de un flujo de créditos de largo plazo. El Estado se vale del Banco Central y de la Anses para pagar la deuda usuraria (‘desendeudamiento’), a pesar de contar con precios de exportación excepcionales. La crisis de financiamiento de la economía kirchnerista ya produjo tres crisis políticas: 1) la del ‘campo’, por las retenciones; 2) la de las AFJP, con motivo de su estatización; 3) la del uso de las reservas del Banco Central para pagar la deuda pública y privada. La cuestión de los subsidios estalla ahora, precisamente, cuando todas las fuentes de financiamiento se han agotado: las reservas del Banco Central ya no cubren el dinero en circulación y son negativas cuando se le sustraen las deudas correspondientes. A los 46 mil millones de dólares declarados, es necesario restar los 15 mil millones que corresponden a depósitos privados y los 4 mil millones de préstamos de otros bancos centrales. Los 26 mil millones que quedan como resultado son muy inferiores a la deuda del Banco Central con los bancos locales -por 160 mil millones de pesos (unos 35 mil millones de dólares). Esta crisis de financiamiento ha transformado a la salida de divisas en una ‘corrida’ contra el peso, o sea una devaluación. Toda la burguesía apoya la misma -tanto la oficialista como la opositora. Pero una devaluación encima de un retiro de subsidios y de una inflación elevada, es un coctel explosivo. Esta emergencia ha unido a unos y otros contra los aumentos salariales y contra los sindicatos.

Sobre Atenas y Buenos Aires

¿No se parece Argentina, entonces, a Italia, Grecia, Portugal o España? ¿No está bailando al ritmo de la bancarrota capitalista? Los europeos piden a gritos un financiamiento sin límites del Banco Central Europeo para lidiar con la bancarrota de sus Estados y sus bancos. Los norteamericanos la reciben de la Reserva Federal. Los K están negociando la obtención de esa financiación con el Club de París -un conjunto de Estados europeos acreedores de Argentina por la deuda estatizada por Cavallo ¡en 1982! La gravedad de la situación está revelada por la imposición de un ‘corralito’ a la compra de dólares, que está alterando -como en 2001- las importaciones y la compra-venta de inmuebles, o incluso el turismo en el exterior (que para los socios comerciales de Argentina -en especial Uruguay- equivale a una restricción a las importaciones de esos países).

Intervencionismo: capitalista y anti-capitalista

En este cuadro, es claro que las medidas intervencionistas y los ‘aprietes’ del gobierno en el mercado de cambios son episódicos o temporales; no tienen nada que ver con un cambio de las relaciones sociales que explican esta crisis; están al servicio de la especulación capitalista. El tarifazo apuntala a un sistema privatizado de servicios que exige precios internacionales y que invierte por medio de deuda, no de capital propio. Beneficia a un sistema de transportes corrupto y mafioso, que opera un sistema anárquico que se concentra cada vez más en menos manos. Sostiene un sistema petrolero que se embolsa una renta enorme (la diferencia entre costos internos y precios internacionales especulativos), que remunera a sus accionistas en el extranjero. No se puede impedir el vaciamiento de un país reforzando un sistema social de vaciadores. Las maniobras oficiales en el mercado de cambios han disparado la tasa de interés OFICIAL al 22% (lo que pagó el Banco Central por una licitación de títulos el martes pasado), con un peso-dólar casi fijo -¡la misma que paga Grecia con un euro que también oscila muy poco! El negociado para los especuladores es fabuloso, porque invierten en pesos a esa tasa usuraria y, al mismo tiempo, se protegen de una devaluación con un seguro de cambio por el plazo del depósito. El ‘intervencionismo’ que planteamos los del PO y del Frente de Izquierda se distingue del intervencionismo K en que es un intervencionismo integral y sistemático, que no apunta al rescate de las privatizadas o del capital en general, sino que coloca en manos del poder público -bajo control de los trabajadores- a los bancos, el comercio exterior y los recursos estratégicos, al servicio de una planificación económica que atienda los intereses populares en su sentido inmediato y estratégico.

Un giro político de fondo

Lo más importante, con todo, es que asistimos a un viraje de fondo de la situación política. El gobierno del 54% de los votos no puede evitar emprender un ataque a los trabajadores -incluso ya ha tomado esa decisión. Esta es la cuestión de fondo de la tentativa de suspender la personería del sindicato de los técnicos aeronáuticos y del retorno de los controladores a la órbita de las fuerzas armadas. Son los métodos de Reagan (1982) y de Rodríguez Zapatero (2010).
El choque entre la camarilla del burócrata Cirielli, por un lado, y la de La Cámpora, por el otro, es secundario. El gobierno viene empeñado en esta línea desde su ataque a los petroleros de Santa Cruz el año pasado, pero lo que hasta ahora fue parcial, ahora se perfila como un ataque sistemático. El éxito del tarifazo y de la devaluación depende de la domesticación de las paritarias y del movimiento obrero.

El Frente de Izquierda y la nueva etapa

Es necesario trasladar a los trabajadores, en especial a los activistas, el reconocimiento del cambio de la situación política y, a partir de esto, promover una intensa deliberación política. La defensa de las paritarias debe ser incondicional, sin topes y respaldada en asambleas, pero debe formar parte de una política de conjunto que oponga a la salida capitalista del gobierno una política anti-capitalista que se radique en las masas. El tarifazo responde a los intereses del capital, no a la ‘racionalidad’ económica, porque el tarifazo es la condición para recuperar el financiamiento (endeudamiento) internacional. La racionalidad debe ser determinada por medio de un control obrero de la producción, que elimine los múltiples despilfarros de la explotación capitalista. El Frente de Izquierda encara ahora un desafío de mucha mayor envergadura que el que plantearon las elecciones, porque debe ofrecer una orientación política en el marco de una crisis nacional, que sea capaz de potenciar la acción directa de los trabajadores.

Jorge Altamira

Bien, paso a paso van cayendo en la realidad.

ahora Altamira va estar en el programa de Roberto Garcia en canal 26

Encima proyectan. “Tarifa liberada” cuando De Vido dijo bien claro que no van a haber ningunos aumentos de tarifas.

Quiero vivir en la troscósfera…

Quien expropia es el Estado.

Que es lo que no te gusta Nahuelo?

Marchemos el 23 a Plaza de Mayo

Por el desprocesamiento y la libertad de los luchadores


Un conjunto de organizaciones obreras y estudiantiles, partidos de izquierda y organismos de derechos humanos marcharemos el próximo 23, de Congreso a Plaza de Mayo, para reclamar contra la criminalización de la protesta social, por el cese de las persecuciones judiciales a los luchadores y la libertad de los presos políticos.
Entre los convocantes se encuentran los delegados de la Línea 60, los ferroviarios del Sarmiento y de la agrupación Causa Ferroviaria “Mariano Ferreyra”, los delegados del Teatro Colón, los familiares del delegado petrolero Víctor Oñate, los trabajadores de la construcción del Sitraic y los trabajadores de Kraft, compañeros que se encuentran en el centro de una escalada contra la protesta social que apunta a regimentar y descabezar al movimiento obrero combativo.
Mientras el gobierno transa con la burocracia sindical la impunidad de los Moyano, los Gerardo Martínez, los Venegas y hasta de los Pedraza, acicatea la persecución penal contra el activismo y deja correr el accionar de las patotas sindicales.
Judicialización, regimentación, patotas
Un relevamiento del Espacio Memoria, Verdad y Justicia lleva contabilizados 2.700 procesos judiciales contra luchadores obreros y populares. Según la estimación de las organizaciones de derechos humanos, la cifra final superaría holgadamente los 6.000. En su mayoría, se trata de cortes de ruta o de vías, huelgas, manifestaciones callejeras y ocupaciones. Así se cumple el diktat de Aníbal Fernández acerca de “gobernar con el código penal en la mano” contra las protestas sociales.
Los procesos alcanzan también a los dirigentes políticos de la izquierda que se solidarizaron con esas luchas, como es el caso de Néstor Pitrola y Vilma Ripoll, procesados y embargados por llevar su apoyo a la huelga de los trabajadores de Kraft en el año 2009.
Estos procesos judiciales van más allá de la amenaza (una condena puede ser causal de desafuero y despido) o de la inhibición sobre los escasos bienes de un trabajador, y dan lugar a prisiones efectivas. Son los casos del delegado petrolero Víctor Oñate -preso desde hace cinco meses, luego de la rebelión de los trabajadores del norte de Santa Cruz contra la burocracia de Chaco Segovia-, del militante del Sitraic Carlos Olivera, de los jujeños Mario Tapia y Aldo Claros -chivos expiatorios de la masacre de Ledesma, a quienes la policía arrancó “confesiones” mediante torturas y amenazas- y de la activista Karina Germano.
La persecución judicial se complementa con la “tercerización de la represión”, a cargo de las patotas de la burocracia sindical que actúan amparadas en el silencio oficial.
Política de Estado
Esta ofensiva cuenta con el aval político del gobierno. Las señales más elocuentes las dieron Nilda Garré, al acusar desde la sala de conferencias de la Rosada a los compañeros de Mariano Ferreyra por los desmanes fogoneados por la burocracia en Constitución en diciembre del año pasado; Aníbal Fernández, que respaldó por todos los medios de comunicación la detención sin pruebas del Pollo Sobrero; la mismísima Presidenta de la Nación, al acusar a los tercerizados del ferrocarril Roca de “buscar un muerto” y al atacar los reclamos de los trabajadores del subte, que pelean por el reconocimiento de su sindicato independiente.
Macri, por su parte, continúa impulsando el desafuero de los delegados del Colón -sobre los cuales pide un embargo de 65 millones de pesos- y desconociendo a los paritarios legítimos de los trabajadores. Se apoya en la burocracia de Sutecba, completamente extraña a laburantes del Colón, para avanzar en el desguace y privatización del teatro.
El objetivo de esta persecución es disciplinar y regimentar al movimiento obrero, para poder descargar sobre los trabajadores las consecuencias del tarifazo en marcha, de los topes salariales, de la reducción del “gasto social” para atender el pago de la deuda externa, de la fuga de capitales, de la devaluación contra el bolsillo de los trabajadores y jubilados, del sostenimiento de las privatizaciones del menemismo.
Todos a la marcha
Son los buchones de la dictadura, los asesinos de trabajadores, los mafiosos de los medicamentos, los que deben pagar con la cárcel por sus crímenes contra la clase obrera. El 23 de noviembre, reclamaremos en Plaza de Mayo por el desprocesamiento y la libertad para los luchadores.


El Estado no expropia nada, compra todo…
Y los que deberían expropiar, y en algunos casos lo hicieron, son los TRABAJADORES.

:mrgreen::mrgreen::mrgreen: Yo te doy una definicion legal, y vos una de filosofia de borra de cafe.

Pd: Adelanto tu respuesta “Claro, normas de la burguesia, burguesas leyes de mierda”.

Lo mio será filosofia de cafe, pero vos (como muchas veces me chicaneas a mi) repetis lo que dice un librito… No podes medir todo con la vara de la ley.


El ministro de las “semiplenas pruebas” truchas

Dictaron la falta de mérito para Sobrero

El juez Yalj dictó la “falta de mérito” para el “Pollo” Sobrero. Esto significa que el juez consideró que no hay pruebas suficientes para procesarlo ni para sobreseerlo (desestimar la denuncia en su contra) y que continuará “investigando”. El otro ferroviario detenido junto a Sobrero, Leonardo Portorreal , fue sobreseído.
Aníbal Fernández había respaldado la detención de Sobrero asegurando que el juez tenía “semiplena prueba” para dictar la prisión preventiva. La “investigación” (cuyo punto de partida fue la vaga declaración de un indigente detenido desde mayo pasado) estuvo a cargo de la Policía Federal, cuya responsabilidad política recae sobre Fernández. Yalj -quien hace pocos días fue ascendido por el Senado a juez de la Cámara Federal de San Martín- no pudo dejar de observar en su fallo “la poca profundización”, “el débil celo profesional”, “las magras tareas realizadas por el personal a cargo”, en definitiva, la inconsistencia de la provocación montada para procesar a Sobrero y judicializar al cuerpo de delegados del Sarmiento, opositor a Pedraza.
Por otra parte, Fernández inició una demanda civil por “daños y perjuicios” contra Sobrero. Cuando fue excarcelado, Sobrero lo llamó “cagón” y lo acusó de estar detrás de su detención. Luego ratificó sus dichos en sede judicial, pero el “valiente” ministro faltó a la cita para evitar encontrarse cara a cara con el ferroviario. La historia pareciera darle la razón a Sobrero: Fernández también evitó dar la cara en la demanda entablada por el Partido Obrero y José María Escobar, esta vez en su contra, por imputarnos “oficialmente” y sin prueba alguna la quema de trenes del Sarmiento del año 2008.
La “falta de mérito” de Sobrero es un triunfo contra la criminalización de las luchas obreras y de sus dirigentes. Exigimos su inmediato sobreseimiento.

Nahuel, por que medios te informás habitualmente además de Prensa Obrera ?

saca info del living de susana

Leo el foro, miro noticieros, escucho radio…
Generalmente las noticias que se publican en la prensa no salen ni en el foro, ni en los noticieros, ni en la radio…


Vos segui leyendo…

No vamos a entrar en competencia de lectura porque no somos dylan y alejo. Pero yo nunca hice referencia a ese libro y vos, en el 90% de tus post (salvo el modo bot que tenes ahora), haces referencias al capitulo “burgueses y proletarios” del Manifiesto Comunista.

Lo queria leer al libro de Anibal, quizas me lo compre.

No gastes guita al pedo, no dice nada que no hayamos dicho en este foro.

Genial entonces. Porque tengo que comprarme un libro de historia economica y sale una fortuna :mrgreen:

Si hablo de burgueses y proletarios es porque soy marxista, no porque repito lo que dice el manifiesto. Si vos negas a la burguesia, al proletariado, la lucha de clases y hablas de clase baja, media y alta, es porque hablas desde una educación capitalista, repetis lo que la cultura burguesa te enseñó que era “la realidad”.


Seguro, todo lo que dice Anibal en el libro ese, lo dicen ustedes aca… jaa

Otra vez acusandome de tener una educación burguesa, fijate en el thread de la militancia que me acusaste de lo mismo. Si nos tomamos el laburo de responderte, al menos aparece.
Marxistas hay muchos y la interpretación de las clases, la lucha de clases y la conformación de las mismas es totalmente diferente. De hecho, justamente ayer presente un examen en la facu haciendo un desarrollo de la burguesia y el proletariado brasileño. A mi lo que me parece es que esa interpretación de las clases, tan determinante, se ve en el Manifiesto Comunista. Ni Gramsci, ni Hobsbawm, ni Thompson ni marxistas que intentaron reinterpretar y completar la teoria marxista, lo analizan de manera tan ortodoxa. Ni el mismo Marx lo hizo.