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Pablo ya no come “caviar” entonces.
Yo tuve una compañera en el colegio que vivía muy estresada con el cuento de no subir de peso, era casi anorexica y te podía preguntar 20 veces al día si estaba gorda, era una obseción, hace un año y medio se caso y hace un par de días me la encontre y debio subir por lo menos 25-30 kg y relacionando ese caso con otros, me di cuenta que varios subieron de peso después del matrimonio, porque será?
Es verdad! El baile tiene todo un juego de seducción de por medio, que va más allá de saber moverse bien y coordinar movimientos. Un hombre que baile bien, siempre va sumar puntos a favor!
El boliche es el reino de la frivolidad. Los patovicas, la música comercial, los boludos peinándose en el baño, la exaltación de lo físico (muchas veces antiestético).
Yo voy poco y asumo que hablo desde el resentimiento de ser pésimo bailando (:mrgreen:), así y todo debo admitir que cada vez que voy a un boliche el principal el impulso es, como bien se dijo antes, “comer algo”. Eso sí, Jamás llegué a salir con una mina que conocí en un boliche, y no hay cosa más loser que encarar para pedir un msn…
Y nadie está a salvo de que lo rechazen en un boliche, cosa que si te ponés a pensar no debería hacernos sentir mal en absoluto, pero bueno, no por nada Barbie y Kent se fabrican en molde…
Loco, con una mano en el corazon…nos pasa lo mismo (tambien soy bastante relleno, solo que soy alto y se disimula un cacho mas) y pensamos igual, muuuy igual…lastima que yo ando esperando mi “princesita” todavia jajaja
muchas gracias, lo mejor que he leido en un tiempo largo
Hasta una de las chicas dijo aquí que se sabe que quien va al boliche va a comer, si no lo cree vive en una nube. ¿Y a las bailantas? Ya saben las minas que transando un vago van a conseguir tragos. ¿Y en la Chaya riojana, que era un festival de folklore? Ahora invadido por adolescentes buscando el “chape chayero”. Toda la diversión nocturna tiende al “supermercado de minas”. Aquí uno solo de los varones dijo que era buen bailarín y que disfrutaba el bailar. El resto admitió que el baile es el camino duro para lo que interesa.
Che que buen post Javi, yo de pendejo iba algo seguido a los boliches de San Miguel, pero no porque me gustaban sino mas que nada para no quedar como un amargo con mis amigos y hacerles el aguante. Nunca me prendi en esa onda bolichera.
Ahora que ya pase esa etapa, en donde lamentablemente era mas aparentar que disfrutar, o lo que sea, puedo asegurar que aborrezco esos lugares mas que nada por lo que mencionas vos en tu excelente post.
Te doy las gracias, porque me senti bastante identificado, sacando la parte del “estoy un poco rellenito”