Si no le ganaban a la india era para fusilarlas.
que ironia, el unico deporte que se ve masivamente en este pais, fue el que peor fracaso en estas olimpiadas, tendria que ser justo lo contrario.
---------- Mensaje unificado a las 10:44 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 10:42 ----------
el pueblo brasilero no queria hacer los juegos olimpicos, o no te enteraste?
---------- Mensaje unificado a las 10:47 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 10:44 ----------
yo no entiendo como los tenistas pueden jugar todos los dias partidos de horas, con un enorme desgaste, yo una vez jugue al tenis, y te cansa casi tanto o mas que el futbol, y a los futbolistas les cuesta horrores jugar cada tres dias, para mi es puro verso que no podes jugar un partido de fubol cada 3 o dos dias.
Pienso exactamente lo mismo. Juego al tenis desde los 9 años y el desgaste es bastante grande… A veces entreno 3 horas y quedo muerto al final del entrenamiento, lo mismo cuando juego partidos de 2/3 horas.
Tampoco entiendo como puede ser que a los futbolistas profesionales les cueste tanto jugar 2/3 partidos por semana…
Un ejemplo de un tenista profesional: Djokovic en el Abierto de Australia 2012 jugó una semifinal de 5 horas contra Murray, y en menos de 48 horas jugó 6 horas contra Nadal en la final…
Hay mucho de verso pero comparando con el tenis además del desgaste tenés el roce y el contacto que no es algo menor
Q lastima lo de Belén lpm en los 3000 mts
De hecho por ahora sin medallas en natación algo a lo que apuntaban mejorar ( las 2 de Londres ). En judo un solo oro igual que Londres pero una medalla menos en total. En gimnasia por ahora ni figuraron cuando habían logrado oro y apuntaban a meter mas en Rio. En boxeo que habían metido 3 en Londres las chances que le quedan son pocas. Terminan dependiendo de deportes colectivos que seguramente les darán 4 o 5 doradas mas como para decorar un poco la cosa.
Encima bancarse despues el famoso, tienen huevos porque se infiltran a lo Di Maria o el gordo Merquero…es inhumano a veces el tenis desde lo fisico.
---------- Mensaje unificado a las 11:08 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 11:08 ----------
Lo veo muy mudo hablando de tenis
Arrancó Grillo con un birdie en el primer hoyo de la 3ra vuelta. Gomez arranca mas tarde.
---------- Mensaje unificado a las 11:09 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 11:08 ----------
Desde que se fue el príncipe se acabó el torneo señor!
:mrgreen: Si le saca los calzones al gallego se le perdona la final perdida en Mar Del Plata.
si, pero el futbolista no esta constantemente en movimiento en un partido, tiene varios ratos donde se quedan parados o haciendo trotecito/caminando
Arrancó Gómez y metió uno arriba del par en el primer hoyo. En este momento los dos argentinos con -4 a 4 golpes de la de bronce.
Ahora arranca el Voley masculino vs Cuba
Otra vez Grillo bajo el par en el hoyo 3. -5 a 3 de las medallas.
Es dificil con Cuba?
Ahora me dicen son potencia
Eran potencia. Hoy están claramente por debajo de Argentina pero no hay que boludear.
Le están gritando ole a la India :lol: Se merecen un pijazo en cuartos contra Holanda.
En Hockey Cuartos de Final
Masculino : Argentina-España Domingo 10:00
Femenino : Argentina-Holanda Lunes 20:30
---------- Mensaje unificado a las 11:30 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 11:26 ----------
Gomez otra vez arriba del par baja a -3
Grillo mete uno arriba del par en el hoyo 4 y baja a -4
Pagan 11 los cubanos
Me mata el DT de Cuba, HAY QUE ATACALLL
Ginóbili y Velasco ponen en ridículo al futbolero argentino promedio
Opinión
El discurso autocrítico del entrenador de la Selección de vóleibol y de la estrella del básquetbol nacional, un ejemplo a tomar en otros ámbitos.
Desde que en el siglo 16 Nicolás Maquiavelo expuso en El Príncipe que en política hay que ser despiadadamente pragmático para alcanzar el éxito (haya dicho o no que “el fin justifica los medios”, frase que siempre se le atribuyó pero parece que en forma errónea), se sabe que el exitismo no es industria argentina, sino que es más antiguo y aquí llegó importado.
Sin embargo, en el deporte de este país hay un culto por el “ganar como sea”, “matar o morir”, “dejar la piel en la cancha” o que “el segundo es el primero de los perdedores”, que ubica a los argentinos entre los abanderados de los que fracasan buscando el éxito sólo detrás de las victorias.
Campeón antes de empezar a jugar, favorito sólo por el hecho de tener al mejor del mundo de tu lado sin una estructura que lo sostenga, incapaz de tolerar el festejo ajeno pero vanguardista en el momento de cargar al anfitrión en su propia casa ("Brasil, decime qué se siente…) y sólo abierto a ponderar una medalla porque, en un Juego Olímpico, es el podio o el cadalso.
Esa es la descripción del argentino promedio.
Julio Velasco se colgó 14 medallas de oro en su carrera. Ganó dos Copas del Mundo, tres Europeos, dos Asiáticos, seis Ligas Mundiales y un Panamericano. La panacea de los resultadistas, quienes sin embargo deben soportar que el propio entrenador de la Selección de vóleibol tenga la desfachatez de cuestionar las consecuencias de una victoria.
“En el ambiente había demasiada euforia, como si hubiéramos ganado algo, y lo único que hicimos fue ganar dos partidos. Le ganamos a Rusia pero es un partido, todavía no pasamos a cuartos. Si nos cambian el rol y nos ponen en el lugar de ganarles a todos, es muy complicado. Es una hazaña ganarles a estos equipos”, analizó Velasco después de perder ante Polonia.
Una declaración de principios que debe generarle náuseas a ese hincha argentino promedio que cada domingo no sólo se sube a las canciones de las barras bravas, sino que llega hasta a camuflarse detrás de ellos para disimular su propia descarga de violencia.
Y siguió Velasco con su análisis catedrático de la derrota frente a los polacos: “Nosotros perdimos lucidez, debemos preguntarnos por qué la perdimos, no era un problema motivacional. No bloqueábamos donde teníamos que hacerlo, no estábamos donde teníamos que estar. Hay que tener en claro lo que hay que hacer en cada momento”.
Tanto que se habla y escribe sobre su crisis, el fútbol argentino debería aprovechar a Velasco. Su sabiduría, su experiencia. Hay un tal Pep Guardiola que puede dar fe de lo provechoso de los consejos que le dio este platense de 64 años, que por primera vez está dirigiendo el seleccionado de su país (había sido asistente del coreano Young Wan Song en los 80) tras haberse llenado de oros como un argentino que convirtió al vóleibol de Italia en potencia. Por ello mismo, Lazio e Inter lo sumaron en su momento a su escuadra como manager para el fútbol.
“Guardiola me consultó sobre el tema de cambiar después de ganar. Me dijo ‘Vi que cambiaste luego de ganar con Italia en vóleibol’. Charlamos justamente sobre eso: cambiar luego de ganar”, contó poco tiempo atrás Velasco sobre aquella charla con Pep.
“Cambiar después de ganar” en el país de “equipo que gana no se toca”. Velasco, un desubicado.
Emanuel Ginóbili logró lo que difícilmente pueda conseguir algún argentino: cuatro anillos de campeón de la NBA, el primer jugador en ganar un título en la Euroliga y uno en el poderoso campeonato estadounidense, tránsito asegurado hacia el Salón de la Fama y mantenerse competitivo a los 39 años, tanto para San Antonio Spurs (le renovó por dos temporadas más) y en su Selección.
Además, Manu integra un grupo de deportistas que no sólo le dio cuerpo y forma al mejor equipo del deporte argentino en toda su historia, sino que además se comprometió con un proceso de cambios al ver que la dirigencia estaba vaciando la Confederación Argentina de Básquetbol (CABB), con Luis Scola como abanderado (otra vez) de un reclamo que derivó en un profundo proceso de cambios.
Una senda que en cambio los futbolistas eligieron no transitar al ver cómo se desmoronaba la Asociación del Fútbol Argentino. “Son decisiones”, diría un director técnico.
La Selección de básquetbol, que pide a gritos que deje de hablarse de la Generación Dorada porque apenas quedan las últimas llamas de aquel equipo brillante que conquistó el Oro en Atenas 2004, había empezado con dos victorias su camino olímpico en Río, ante Nigeria y Croacia. Lituania, el jueves, le estableció un freno, en un ambiente eufórico, lleno de argentinos en la Arena Carioca 1.
Los lituanos, subcampeones europeos, jugaron al básquetbol cuando se vieron en apremios ante una posible remontada argentina en el último cuarto, que llegaba más producto de la voluntad que del concepto. Justamente, este último, el valor que tuvo siempre este equipo para suplir el déficit de centímetros que históricamente sufrió frente a las grandes potencias a las que puso de rodillas. A todas.
“Defensivamente estuvimos muy bien, pero ellos fueron más lúcidos y sacaron ventaja porque jugaron siempre igual. Nosotros nos enloquecimos en nuestro afán de ganarlo con coraje. Eso pasa siempre en nuestro país: pensamos que todo se gana con huevos. No: se gana jugando bien. Y después tenés que sumarle huevos. Creímos que podíamos ganar empujando y hay que jugar bien”, aportó Manu.
“Se gana jugando bien” en el país de “hay que poner un poquito más de huevos”. Ginóbili, otro desubicado.
El fútbol es el motor emocional de los argentinos. Y para ordenar la AFA, tal vez haya que sumar la opinión de los Ginóbili, de los Velasco… Como lo hizo Guardiola, el técnico sacapuntos por excelencia.
Sucede que ambos, Velasco, Ginóbili, hablaron de lucidez, un valor carente en un país que sigue ponderando la opinión de viejas glorias, a las que da pena escuchar, en vez de rescatar el legado que dejaron en una cancha.
Generación Dorada. Desde hace algunos años, y por una decisión exclusiva del marketing, la selección de básquetbol de hombres se hace llamar El Alma. Sin embargo, mientras aún queden en el plantel jugadores de la gesta de olímpica de Atenas 2004, cuando conquistaron la medalla de oro, será popularmente conocida como la Generación Dorada. El origen del apodo es difícil de rastrear, aunque se empezó a imponer con el reiterado uso de los medios. Lo seguro es que no salió de Manu Ginóbili, Luis Scola y compañía.
Los Pumas.Es conocida la historia del nacimiento del apodo los Pumas. Todo sucedió en 1965 con la confusión de un periodista y un jugador, que sin saber inglés, dio el visto bueno. Es sabido que el animal que está en el escudo es el yaguareté, el mayor felino de América (“la verdadera fiera”, en guaraní). Pero durante una gira que el equipo argentino hizo por Sudáfrica aquel año, coronada con el histórico triunfo 11-6 ante los juniors Springboks en el Ellis Park, la revista semanal The Weekly Farmers bautizó al equipo argentino. Confundió el yaguareté con el puma. Pero antes de publicar el nombre, le preguntaron a un integrante del conjunto nacional, Agustín Silveyra, quien sin comprender inglés contestó que sí. Así se dio el origen de los Pumas.
Los Gladiadores. El nombre de la selección masculina de handball deriva del apodo de uno de los integrantes del cuerpo técnico de Dady Gallardo. Se trata de Guillermo Cazón, ex arquero de River y del conjunto nacional. En su paso como técnico por el conjunto millonario, lo apodaron “Gladiador” por su parecido (un poco forzado) con de Russel Crowe, el actor principal de la famosa película. Ese espíritu se los transmitió luego a los jugadores de la selección. “En un torneo que jugamos en Brasil, nos miramos con Dady y dijimos que realmente parecíamos gladiadores, porque íbamos contra el mundo. Estamos solos ahí adentro, nos tiran a la arena y listo”, recordó en una entrevista con Terra. El mote fue aceptado por los jugadores y la prensa. Así se impuso en el conocimiento popular.
La Garra. La selección femenina de handball adoptó este nombre a mediados de 2015, luego de armar los cimientos del equipo que conseguiría la clasificación a los Juegos Olímpicos. El apodo surgió por la iniciativa de la psicóloga del equipo, Laura Spaccarotella, que le comunicó al cuerpo técnico que debían redondear la mística ganada mediante un símbolo. Primero encontraron “Las Pibas”, que tuvo hasta un hashtag, pero fue descartado porque es justo lo que ellas tienen que dejar de ser. Hace poco más de un año, en una gira por Hungría, nació el concepto de “La Garra”, que es su máxima cualidad y hasta un reconocimiento de sus limitaciones.
Las Leonas. La historia cuenta que para los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 nació el nombre de las Leonas. La Argentina jugaba contra Holanda y debía ganar, por eso apelaron a una imagen que les terminó dando una mayor fuerza: una leona. El logo fue diseñado por Inés Arrondo: una leona lista para atacar. La propia jugadora lo contó tiempo atrás: “Para el logo nos juntamos con la cuñada de Cachito Vigil. Yo me senté a hacer unos dibujos, siempre fui la dibujante del grupo, y luego los retocamos con ella. Estaban buenos porque no es fácil dibujar a una leona, darle las características. Junté mucho material y salió la leona que no está ni sentada ni atacando, sino preparándose”.
Los Leones.Hace sólo tres años nació el nombre de los Leones. Con Las Leonas y la Generación Dorada instalados, los Pumas ya como un equipo histórico y otros comenzando a aparecer, los varones del hockey no se quisieron quedar atrás. “Los Coyotes” fue el primer nombre que se barajó, pero, tras una charla entre los referentes y Carlos Retegui, actual entrenador, quedaron en tomar el de las mujeres y hacerlo suyo.
La selección de voleibol masculina.El equipo que no quiere tener apodo. No es porque le parezca algo malo o porque renieguen de eso, sino porque ninguno de los nombres que les sugirieron a los jugadores convenció a la mayoría. Algunos de los nombres que se bajaron fueron: los Galgos, los Pillines y los Canguros. Se entiende por qué no gustaron. Hubo una opción que casi se gana la aceptación del plantel, pero que se cayó a último momento: los Chitas.
Las Panteras. “No podemos seguir siendo la selección perdedora”, se plantearon las jugadoras argentinas de voleibol, algunos años atrás, en una reunión interna. Querían tener una identidad, querían dejar su marca, ganarse el respeto de todos. Con el paso del tiempo, comenzaron a crecer en el juego, convirtiéndose en una de las mejores generaciones de la historia. Para culminar eso que se plantearon en aquel encuentro, decidieron auto-bautizarse. Así nacieron las Panteras.
La selección de fútbol. No suelen usarse apodos para las selecciones de fútbol. De todas formas, ya quedó eliminada del certamen.
HAY QUE ATACALLLLLLL